Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 2

Capitulo 1: Incluso Un Archidemonio No Debería Golpear A Un Niño

“‘Sigil del ‘Archdemon’, ¿eh?”

Zagan murmuró ese nombre para sí mismo en los archivos de su castillo, donde su colección de libros había seguido creciendo constantemente. Sí, todo allí pertenecía a Zagan. Para empezar, ya tenía una considerable colección de libros, pero ahora había montones de libros en el suelo que no cabían en las estanterías.

Hace aproximadamente un mes, Zagan heredó el legado de su predecesor, Archdemon Marchosias. Y las pilas de libros en el suelo eran solo una pequeña parte de él. Solo trajo cosas relacionadas con lo que deseaba investigar, pero incluso eso parecía ser demasiado.

Zagan, que estaba barriendo su flequillo como si estuviera cansado, estaba en la temprana edad de dieciocho años. Su largo cabello negro, que no había arreglado en absoluto, estaba atado detrás de él, y llevaba una túnica forrada con un paño rojo. Además de eso, sus ojos plateados, así como las expresiones eternamente siniestras en su rostro aumentaron aún más el sentido dominante que emitió.

Zagan era un hechicero que ostentaba el título Archdemon. Y en este momento, tenía algo que tenía que hacer.

“Realmente no puedo encontrar ninguna pista…”

Hubo un cierto “algo” llamado demonios que alguna vez existió en este mundo. No, en este momento solo se estaban escondiendo, y probablemente todavía existían en alguna parte. Justo el otro día, Zagan se encontró con uno de ellos.

No había una gran brecha entre ellos, pero aún no era un oponente que pudiera derrotar. O al menos, así debió haber sido, sin embargo, Zagan aún sobrevivió por un golpe de suerte.

Mientras extendía su mano derecha, un sigilo flotaba hacia arriba, pareciendo algo como una letra. Este fue el Sigil del Archidemonio. Y un demonio inclinó su cabeza y obedeció a su portador.

Es necesario que yo entienda la verdadera naturaleza de esta cosa, entonces. Era un poder que incluso podría repeler a un demonio. Sin embargo, era diferente de cualquier cresta de hechicería que Zagan conociera.

Sospechó que podría haber habido algún tipo de pista dentro del legado anterior de Archdemon, pero los resultados no parecían favorables.

“… Uf.” Después de moverlos toda la mañana, Zagan devolvió los libros que sacó de las estanterías a donde pertenecían. Incluso el apetito y el sueño podían ser manipulados libremente por los brujos, por lo que el concepto de fatiga esencialmente no existía.

Aun así, la fuerza de voluntad no era algo que cualquier hechicería pudiera controlar. La depresión y el agotamiento mental eran absolutamente inevitables. Y así, justo cuando Zagan dejó escapar un suspiro, pensando en tomar un pequeño descanso debido a ese hecho… de repente sintió que la puerta detrás de él se había abierto.

Nephy, ¿eh?

Era el nombre de la niña que era su discípula, sirvienta de Zagan y… a la que amaba de corazón. Ella era su única compañera de casa. Nephy era una chica elfa. En la antigüedad, su raza se llamaba las hadas de Norden, una raza cuyo rasgo característico era sus orejas puntiagudas. Y entre esos, Nephy poseía cabello blanco como la nieve, lo que significaba que ella poseía un mana especialmente fuerte.

Ese largo cabello estaba adornado con una profunda cinta carmesí, y sus pequeños rasgos faciales estaban acentuados por sus grandes ojos azules. Envuelta alrededor de su delicado cuerpo llevaba un delantal blanco y un vestido de una sola pieza, el uniforme de una criada, y también llevaba botas que tenían hechicería para reducir la fatiga, pero este era solo su atuendo habitual.

Cuando Zagan dirigió su atención al cielo a través de la ventana, vio que el sol ya había pasado su pico. Parecía que Nephy había venido a llamarlo para almorzar.

Sin embargo, dado que Zagan estaba frente a una estantería, ella probablemente se estaba quedando callada para no interponerse en su camino. Y, sin embargo, la presencia detrás de él se acercaba lenta y silenciosamente.

¿Puede que ella… esté tratando de sorprenderme? Después de que pasó un cierto incidente, Nephy terminó llamándolo Maestro Zagan en lugar de solo Maestro. Eso le hizo sentir que ahora eran más íntimos, aunque solo un poco.

Había una posibilidad de que ella viniera a sorprender a Zagan como una broma. Y, por supuesto, Zagan no era un tonto que arruinaría su diversión. Ahora bien, ¿qué me va a hacer ella? Mientras ponía todo su empeño en fingir que no la notaba, permaneció allí inquieto mientras la presencia justo detrás de él extendía sus manos.

Sin embargo, había una diferencia entre la altura de Zagan y la de Nephy. Además de este hecho, debido a que estaba explorando los archivos, estaba parado en una escalera.

“Adivina quién… ¿Eh? No puedo alcanzar…” Las manos que extendió solo llegaron hasta los hombros de Zagan.

Cuando Zagan se dio la vuelta, vio la figura de una niña que estaba muy perpleja porque no podía alcanzar su rostro.

Y alrededor de su cuello llevaba un collar aburrido. Aunque ya no tenía el poder de sellar mana como lo era antes, era el precioso collar de votos entre Zagan y Nephy.

Después de un rato de su inquietud, las orejas de Nephy se volvieron de un rojo brillante hasta sus puntas puntiagudas.

“Um, ¿qué hago…?” Nephy dijo eso como si estuviera completamente perdida. Su rostro se veía tan inexpresivo como siempre, pero sus labios temblaban, y tenía lágrimas flotando en la esquina de sus ojos. Por encima de todo, las puntas de sus orejas puntiagudas temblaban como si dijeran que no podía soportar la vergüenza.

Parecía que incluso ella no podía soportar la vergüenza de la situación. No, en serio, ¿qué hago ahora? Quería abrazarla y frotar mi mejilla contra la de ella, pero el espíritu de Zagan no era tan fuerte como para poder hacerle algo tan atrevido a la chica que le gustaba.

Cuando Nephy agarró su delantal con fuerza, murmuró algo mientras dejaba que su mirada vagara.

“Um, verás… estaba pensando… tal vez podría sorprenderte, Maestro Zagan…”

“Sorpréndeme, ¿y luego qué?”

“Oh, um, no había… Pensado que hacer después”. Parecía que solo quería intentarlo.

Las orejas de Nephy se movieron repetidamente en intervalos cortos mientras ella contestaba mientras tartamudeaba, y al verla así, Zagan quería golpear su cabeza contra la pared.

¿Qué es exactamente lo que planeas hacerme siendo tan linda? Zagan tenía muchas cosas que quería decir, como: “Incluso si no haces algo así, me sorprende tu amabilidad” o “Me sorprendió tanto que quería abrazarte”, pero después de tomar una respiró hondo, logró calmarse. Y luego, se aclaró la garganta con una tos.

“Ya veo. Es hora de comer, ¿verdad Nephy? ”

“Sí. Se han completado los preparativos para el almuerzo, Maestro Zagan”. Dejaron atrás los archivos, con sus caras rojas todo el tiempo.

Esto fue un suceso cotidiano y ordinario para los dos.

***

El comedor era una sala grande con una mesa enorme que podía acomodar a veinte personas a su alrededor.

Una profunda alfombra carmesí estaba extendida en el suelo, y una extravagante araña colgaba del techo. También había una chimenea instalada a lo largo de la pared, que definitivamente habría sido puesta en uso si fuera un poco más fría.

Hasta hace apenas un mes, esta habitación estaba llena de telarañas, esqueletos y dispositivos de tortura, pero ahora estaba tan limpia que estaba más allá del reconocimiento. El cambio fue todo gracias al esfuerzo de Nephy.

“También aquí está realmente más allá del reconocimiento”. Mientras Zagan murmuraba involuntariamente esas palabras, Nephy asintió tímidamente.

“Es la habitación en la que tomas tus comidas después de todo, Maestro Zagan”.

“Ya-ya veo. Aunque, ¿no fue difícil limpiarlo todo tú misma? ”

“No… En realidad, hay muchas habitaciones a las que no he atendido hasta ahora”.

Aunque con lo desordenado que estaban, realmente no podían llamarse habitaciones.

Zagan siempre estaba dispuesto a echar una mano cuando se trataba de cargar objetos pesados, pero fundamentalmente, el mantenimiento del castillo estaba bajo la jurisdicción de Nephy. Incluso manejaba todas las comidas, así que tenía bastante trabajo diario.

Si pudiera preparar algo parecido a un familiar… No era como si la elección de contratar a alguien estuviera fuera de discusión, pero Zagan quería disfrutar de la convivencia con solo ellos dos. Y desafortunadamente, la brujería que esclavizaba algo así como un familiar estaba fuera de su ámbito de experiencia.

Zagan se dirigió hacia su asiento mientras se atormentaba el cerebro para encontrar una solución.

Ya había dos porciones de comida alineadas encima de la mesa. Y junto a la mesa había un carrito con una olla encima.

Reflexivamente, Zagan dejó escapar un profundo suspiro de admiración. Así que ella ha aprendido aún más recetas, ¿eh? Había varios platos aquí que él estaba viendo la primera vez.

Cuando Zagan se sentó a la mesa, Nephy comenzó a describir tranquilamente la comida.

“Para el pan, he preparado rollos de cena de trigo de centeno. El aperitivo es una ensalada con tomates y vegetales verdes sazonados con aderezo César y queso rallado”.

Los tomates eran la comida favorita de Nephy. Probablemente tenía confianza en su trabajo, ya que sus oídos triunfantes temblaban.

Por cierto, César era el nombre de un hechicero de la antigüedad. Era un hombre extraño que estaba singularmente obsesionado con su paladar en lugar de con la inmortalidad, por lo que la mayoría creía que los fundamentos de la cocina eran algo que él construyó.

A continuación, Nephy vertió la sopa en un plato vacío mientras continuaba con su explicación.

“La sopa es un consomé de avena. Para el plato principal, he preparado un salteado de cordero, así que por favor, disfrútenlos juntos “, dijo Nephy mientras alineaba el plato lleno de sopa frente a Zagan.

Un aroma fragante le hizo cosquillas en la nariz. Y luego, ella colocó el plato principal de carne también delante de él. Normalmente, esto hubiera sido todo, pero Nephy luego sacó un recipiente con hielo.

“Y finalmente, he preparado pudín para el postre”.

“¿Qué es un pudín?” Era la primera vez que Zagan escuchaba esa palabra.

“Manuela me enseñó cómo hacerlo. Es una confección hecha con huevos humeantes y crema fresca… Um, es muy dulce y sabroso para empezar “, dijo Nephy mientras sus mejillas se ponían ligeramente rojas.

Al ver esa expresión encantada de ella, incluso Zagan comenzó a sonrojarse.

“Ya veo… Aun así, lo sacaste de esa empleada, ¿eh? ¿Terminó diciéndote que hicieras algo extraño?”

Cuando Nephy asintió con calma, se llevó la mano al pecho y respondió a sus preguntas.

“Está bien. Todo lo que hizo fue hacerme usar algo de ropa un poco embarazosa”.

“¡Eso no está bien!”

“¿Eh…? Sólo se lo mostré a Manuela, ¿así que está bien? ”

“Ese no es el problema, aunque…”

La  niña  aún  tenía  que  aprender  a  sospechar  de  los  demás. Bueno, debería estar bien siempre y cuando sea esa mujer.

En el momento en que Nephy fue atrapado en una trampa, Manuela no prestó atención al peligro y lo siguió hasta la base de un hechicero enemigo. La posibilidad de que le hiciera daño a Nephy era prácticamente nula. Además, entrometerse en las relaciones personales de Nephy se habría sentido incómodo.

No pudo borrar su ansiedad, así que Zagan instó a Nephy a tomar asiento también.

“Bueno, ¿vamos a comer?”

Cuando Nephy asintió con la cabeza, se sentó junto a Zagan. Llevaba ropa como la que usaría un sirviente, pero Zagan no la consideraba como una sirvienta o esclava. Se aseguró de que siempre disfrutaran de sus comidas juntos.

Mientras comía un poco del pan recién horneado, el aroma sabroso del centeno estaba acompañado por la mantequilla aceitosa que se extendía por toda la  boca. Incluso después de  tragarlo, aún podía sentir esa sensación en su saliva.

“Haaa… Una comida casera es algo tan delicioso, ¿eh?”

“Maestro Zagan, siempre dice lo mismo, ¿no?”

Puede que lo haya estado mirando desde un costado, sin expresión como de costumbre, pero Zagan no pasó por alto el hecho de que los tiernos labios de Nephy se habían aflojado.

Había pasado un mes desde que Zagan compró a Nephy, pero cada vez que los dos comían, todavía tendrían ese intercambio.

De todos modos, mientras probaba la sopa, escuchó a Nephy. “Maestro Zagan, ¿qué ha estado investigando últimamente?”

“¿Hm…? A ver, el otro día, nos encontramos con algo llamado “demonio” durante el caso con Barbatos, ¿verdad? Estoy buscando acerca de esa cosa”.

“¿Es algo difícil?”

“Seguro. Incluso con el legado de Marchosias, no he podido localizar ninguna información que llegue al meollo del asunto. Sin embargo, dudo que un archidemonio que vivió mil años nunca los haya investigado. O tal vez, precisamente porque se acercó al núcleo del asunto, pudo haberlo ocultado.

Puede ser una buena idea volver a examinar el castillo de Marchosias, entonces.

Junto con el Sigil del archidemonio, Zagan heredó el legado de Marchosias. Eso no incluía solo sus activos, sino también su castillo y material de investigación.

Sin embargo, Zagan sabía que tendría que profundizar para encontrar secretos reales dentro de ellos.

Mientras reflexionaba sobre tales pensamientos, Zagan bajó su mirada hacia su mano derecha. Sin embargo, siento que… he visto una cresta similar en algún lugar… También relativamente reciente. Mientras agitaba los sesos, Zagan inclinó la cabeza hacia un lado.

“Qué raro de tu parte pedir una cosa así, Nephy. ¿Estás interesada?”

“No, es solo que has estado poniendo cara de cansancio últimamente, por lo que he estado en mi mente…”

Zagan sintió su propia cara. Intentó parecer lo mismo de siempre, pero parecía que había fallado. Espera, ¿es por eso que ella trató de sorprenderme antes?

Parecía que Nephy estaba tratando de animar a Zagan a su manera. Ese simple acto de bondad hizo arder el corazón de Zagan, pero dejó escapar un resoplido con un ‘hmph’.

“Todavía era el Archidemon anterior. Sería aburrido si todo cayera directamente en mi regazo de inmediato. Ver lo lejos que puedo seguir adelante es la parte divertida”.

“Sí.”

Él estaba mostrando una demostración de valor sin sentido en un tono demasiado fuerte, pero Nephy simplemente respondió como si ella entendiera todo eso bien.

¿Por qué es  que en estos momentos no puedo decir “gracias”…? Y mientras pensaba en tales pensamientos, su último plato se había quedado vacío, y Nephy alineó el postre frente a él.

“Por favor adelante.”

“Mmm…”

El pudín que sacó Nephy tenía algo de naturaleza gelatinosa que se agitaba.  Y  había  una  salsa  de  caramelo  negro  echada  sobre  ella.

¿Qué tipo de comida es esta…? Zagan solo había comido carne y leche secas, que solo se parecían vagamente a las comidas, hasta que conoció a Nephy, por lo que el pudín era un objeto completamente inidentificable para él.

Por su textura, se parecía a un huevo cocido, pero su cuerpo entero se movía juguetonamente a causa de un simple movimiento de la mesa. También parecía inestable hasta el punto en que pensó que picarlo con una cuchara haría que todo se derrumbara. Ella dijo que estaba cocida al vapor, pero Zagan no pudo distinguir si era realmente comida cocida al vapor o cruda.

Aunque no sabía cómo debía manejarlo, Nephy señaló una cuchara pequeña.

“Por favor, disfrútalo usando esa cuchara de allí”.

“… Lo tengo.” Preparándose, Zagan trató de sacar la cúspide del pudín con la cuchara.

Con prácticamente ninguna resistencia en absoluto, un poco de color marrón claro ahora se colocó en su cuchara. Tenía la sensación de que solo se derrumbaría si lo manejaba con rudeza, así que se lo llevó a la boca con cuidado y de manera constante. Y entonces…

“Oh, es dulce”.

“¡Sí!” Nephy asintió como si se sintiera aliviada.

El mundo es inmenso. ¿Realmente ha existido un sabor tan dulce y delicioso todo este tiempo?

La esquina de sus ojos se calentó. Zagan levantó su mirada hacia arriba cuando las lágrimas comenzaron a brotar en sus ojos.

Al mismo tiempo, pensó en una cosa más que tenía que aprender. Y, en ese preciso momento… la barrera que protege el castillo se rompió.

***

“… ¿Hm? Parece que tenemos un invitado “, murmuró Zagan despreocupadamente.

Zagan había colocado una barrera alrededor de todo su dominio, y su castillo estaba en el centro de todo. Olvídate de acercarte, una persona normal ni siquiera podría percibir la existencia del propio castillo. E incluso cuando uno lo atravesó, tuvieron que enfrentarse a numerosas trampas que Zagan había conjurado, sin embargo, el intruso incluso las había roto y había avanzado.

Eso es… bastante impresionante…

Zagan no pudo decir cuánto de eso Nephy entendió mientras inclinaba su cabeza hacia un lado como un pequeño pájaro cantor.

“¿Vamos a salir a su encuentro?”

“…No, está bien. Estamos en medio de una comida, así que pueden esperar. Déjalos ser”.

Fue capaz de devolver una respuesta tan pausada porque no fue la primera vez que lo hizo. Además, este fue el otro problema que Zagan tuvo que poner en orden de inmediato.

Ya que soy Archdemon, los “invitados” vienen a visitar casi todos los días. Zagan tenía dieciocho años, pero esa era la marca de un simple novicio para hechiceros que habían vivido durante varios cientos de años.

Y, sin embargo, había sido coronado Archdemon, por lo que las personas después de su vida eran una moneda de diez centavos por docena. No era como si se enfrentara a múltiples oponentes al día, pero al menos uno parecía aparecer cada dos días más o menos.

Los intrusos eran principalmente hechiceros y caballeros angelicales que entendieron mal el alcance de sus propios poderes.

… Por cierto, los primeros intrusos que vinieron desde su coronación fueron los tres Caballeros Angélicos de la iglesia que malinterpretaron no solo el poder que poseían sino también la identidad de su enemigo.

Antes, no le prestaba atención a las meras chispas que caían sobre él. Sin embargo, su vida había cambiado.

Ahora mismo tenía a Nephy. Era la primera chica  que Zagan había anhelado, y la que le había enseñado el verdadero significado de la felicidad.

Incluso las chispas de esa chusma podrían quemar a Nephy, así que tuvo que contenerlas.

Esos malditos idiotas deben ser erradicados… Este fue también el primer paso para dejar que Nephy viviera bajo la luz del sol.

Si Zagan pudiera demostrar que no valía la pena desafiarlo, entonces los tontos que se atreverían a poner su mano sobre Nephy también desaparecerían. Para ese propósito, tuvo que tomar a quienes lo desafiaron mientras hacía suposiciones incorrectas, y hacer que sufrieran de manera lenta pero constante hasta que el miedo y la desesperación quedaran grabados en su ser antes de expulsarlos.

Un cadáver fue incapaz de difundir la palabra de miedo, después de todo. Eso era lo que tenía que hacer, pero Zagan simplemente se sentó junto a Nephy y saboreó el pudín.

Las trampas los harán sufrir sin que Nephy tenga que ver nada.

Zagan prefería no comportarse cruelmente frente a Nephy. Esta chica compasiva se lamentaría incluso por la muerte de semejante chusma, y él sabía que también podría asustarla.

Siento que no sería capaz de recuperarme si me odiara después de verme cometer actos horribles.

Por eso Zagan no abandonó su asiento, eligiendo disfrutar de su almuerzo con ella.

Pero… esta vez podrían alcanzarnos… El intruso actual derribó su barrera por completo. Dada la situación, era posible que marcharan a través del resto de sus defensas y llegaran a su castillo.

Mientras pensaba en su próximo movimiento, Zagan movió su cuchara con cuidado, como si protegiera el pudín de que solo había tomado un bocado hasta el momento. Un plato tan fino no era uno que pudiera faltar al respeto devorándolo a toda prisa. El intruso se acercaba, pero Zagan saboreaba con entusiasmo el pudín un bocado tras otro.

“Mm. Ya veo… está delicioso”.

“Me siento honrada. Pero… ¿está realmente bien? Um, sobre el invitado, quiero decir…” Probablemente preocupado por el intruso, Nephy estaba hablando mientras se movía.

“En cualquier caso, es lo mismo que siempre. Es su culpa por venir mientras estamos en medio de comer. Olvídalo.”

“Haaa…” Nephy no habló más al respecto, y dejó escapar un largo suspiro en su lugar.

Después de eso, ella arrancó un pedazo de pan y comenzó a masticarlo. Ella era una comilona lenta, aunque eso podría haber sido debido a su boca pequeña. Incluso cuando Zagan la miró y deseó que ella comiera más rápido debido al peligro que se avecinaba, en secreto disfrutaba observándola.

Y luego, casi cuando estaban a mitad de comer… la puerta del castillo se rompió junto con un rugido explosivo.

“… Qué invitado tan impaciente”.

Parecía que habían superado todas las trampas y barreras que Zagan había preparado. El intruso parecía haber comprendido la posición de Zagan y Nephy por su presencia, y se dirigía directamente hacia el comedor.

“Haaa…” Podía arreglar la puerta fácilmente con brujería incluso si estaba rota, pero no pudo evitar que el polvo se acumulara en su comida. Cuando Zagan agitó su dedo por el aire, la puerta del comedor se abrió sola. Y luego, un miembro de las razas místicas con una máscara apareció ante ellos.

La máscara tenía la forma de algo como una serpiente, y daba la impresión de un traje nativo de algún lugar. Una túnica de color negro azabache cubría todo su cuerpo, y una capucha se llevaba hasta los ojos, por lo que no estaba claro qué raza eran en realidad. Desde los dobladillos de la túnica, pudo vislumbrar brazos y piernas cubiertos por una armadura balada.

El intruso no parecía pensar que serían recibidos, y simplemente estaba allí parado como si vacilara.

Claro que es alto, ¿eh?

La altura de Zagan era promedio para un hombre adulto, pero el intruso misterioso era una cabeza más alta que eso.

Eventualmente, el intruso murmuró como si hubiera reunido su resolución.

“Entonces, ¿eres… Archidemon Zagan?” El intruso hizo esa pregunta con una voz que era bastante difícil de escuchar.

“Deberías nombrarte antes de pedir el nombre de otro… Sin embargo, recuerdo haber visto tu figura antes. Te llamas ‘Apparition Valefor’ o algo así, ¿verdad?”

Una figura tan extraña no era una que simplemente olvidaría. Y si recordaba bien, era uno de los hechiceros que asistían a la oscura subasta donde se reunió con Nephy. Su amigo indeseable Barbatos le había dicho que este era uno de los candidatos de Archdemon en ese momento. En ese entonces, los ignoró arbitrariamente, pero parecía que ahora era imposible.

Al cabo de un rato, Valefor sacó su dedo acorazado.

“Archidemon Zagan, te derrotaré y luego… tomaré tu maldito poder como mío”. Esas palabras tan honestas y torpes no se adaptaban a un hechicero.

Sin embargo, Zagan ni siquiera miró a Valefor, y simplemente habló como para grabar el miedo en ellos.

“Estamos en medio de una comida ahora mismo. Espera allí un rato”.

“Ugh…” Valefor retrocedió cuando Zagan dio su orden con tan extraordinario vigor.

Mientras obedecía, Zagan agarró la cuchara pequeña en su mano y recogió un poco de pudín.

Quiero saborear el pudín que Nephy hizo para mí, hasta el último bocado. Puede haber sonado como si Zagan se estuviera burlando de él, pero él estaba muy serio. Además, también estaba el hecho de que Zagan estaba irritado por la interrupción de su comida. Y debido a esa sola frase, que parecía llena hasta los topes con la dignidad de un Archidemonio, Valefor cayó de rodillas como si no pudiera soportarlo más.

Nephy le susurró a Zagan en un estado un tanto tenso. “Maestro Zagan, si gusta, entonces puedo darle uno nuevo”.

“Me gustaría eso, pero dejar mi cuchara aquí es un asunto completamente diferente”. Y con esa respuesta, se escuchó el sonido de Valefor apretando los dientes.

“¡No… te burles… de mí…!” El intruso levantó el brazo mientras gritaban, y la luz de la brujería se derramó.

Valefor entendió que Zagan era un archidemonio y todavía vino a desafiarlo. Por lo tanto, la brujería que desataron era probablemente la mejor que tenían. Y sin embargo, no pasó absolutamente nada.

“Uh…”

Desde el otro lado de la máscara,  Zagan pudo sentir una presencia repentinamente sacudida.

“Si vas a invadir el dominio de otro hechicero, al menos debes investigar a tu oponente. Mi segundo nombre es Sorcerer Slayer, ¿entendido? La brujería no funciona en mí”.

Zagan “comió” la hechicería de los demás. Si estaba dentro de su propio dominio, entonces no importaba dónde estuviera, podía suprimir la brujería. No importaba lo sobresaliente que fuera un hechicero, este misterioso intruso era, mientras fueran hechiceros, no tenían ninguna posibilidad de victoria.

Mientras recogía el pudín con su cuchara, Zagan dejó escapar un suspiro y le informó de los hechos. Quería saborear el pudín hasta el final. Y así, él esperaba que ellos solo entendieran la brecha de poder entre ellos y se fueran.

Si un hechicero con un segundo nombre se fuera sin poder hacer nada, eso en sí mismo daría a conocer mi poder.

Por el momento, tampoco era como si hubiera perdido de vista su objetivo de terminar el pudín.

Sin embargo, Valefor alzó su voz en alabanza.

“Ya veo. Aunque estés podrido, sigues siendo un Archidemonio, ¿eh?” El misterioso intruso transformo los brazos al gritar esa línea. La armadura de acero se convirtió en escamas endurecidas, y las puntas de sus dedos se convirtieron en clavos en forma de estaca.

Zagan podía sentir suficiente poder de esos gruesos brazos y garras para pulverizar piedra sin depender de la brujería.

Esto… no es brujería, ¿verdad…? El flujo de poder correspondiente a un círculo mágico no ocurrió. Y tampoco era como si hubiera sido reemplazado por un hechizo o un encantamiento, ya que no había cambios en el flujo de mana en sí.

En este mundo, existían muchas razas que poseían sabiduría aparte de los humanos. Como los therianthropes que poseían garras y colmillos, o el ave que poseía alas.

Debido a que las garras y los colmillos de tales razas no eran brujería, no podían ser detenidos por un arreglo que sellaba la brujería. Eso significaría que la transformación de los brazos de Valefor también se incluiría en esa categoría. Y entre las razas místicas, lo reconoció como el brazo de un dragón.

Los dragones eran, como los elfos, seres legendarios de los que se habla en leyendas. Eran una raza que rechazaba el contacto con el mundo y, además, poseía sabiduría y hechicería más allá del reino de los humanos. Incluso se dijo que se enorgullecían de un maná que superaba a los elfos. A medida que crecían, eran una existencia que podía tomar el nombre de dioses y demonios y alinearse junto a ellos.

Sin embargo, a pesar de ser un dragón, este es bastante impotente, ¿eh?

¿Es esto algo así como un hechicero que ganó el poder de un dragón? En cualquier caso, parecía que poseían poder desconectado de la estructura de la brujería, lo que probablemente era el motivo por el cual el misterioso intruso desafió a un archidemonio en primer lugar.

Valefor saltó al comedor y luego se abalanzó con las garras de un dragón.

“Te dije que estamos en medio de la comida. Serviré como tú oponente más tarde, así que ¿no puedes esperar un poco? ”

Sin embargo, las garras fueron detenidas por una sola mano. La cuchara que estaba agarrando previamente estaba ahora en su boca, y su mano izquierda protegía el pudín como si fuera precioso.

Zagan se dio cuenta de que Valefor estaba abriendo mucho los ojos dentro de esa máscara en el giro absurdo de los acontecimientos. Pero aun así, el intruso no paró.

“¡Ridiculizándome… a mí!” La boca de la máscara se abrió con un chasquido, y la luz de maná comenzó a converger  en  el  área. Había una leyenda bien conocida de que los dragones quemaban maná dentro de sus cuerpos para disparar un soplo de luz.

Parecía que Valefor estaba tratando de realizar tal hazaña, y Zagan no poseía ninguna técnica para sellarla.

Cuando su rostro se puso rígido al darse cuenta, Zagan  grito. Maldito tonto… ¡Te lo advertí!

“Echaras polvo en la comida como esta, ¡así que solo para ya!”

Se sentía como si hubiera mezclado su postura pública y sus sentimientos brutalmente honestos, pero Zagan soltó las garras y golpeó su palma contra la máscara para cerrar la boca con fuerza.

El maná del aliento se dispersó. La palma de Zagan fue forzada a retroceder, pero el shock ocurrió justo debajo del cerebro y lo sacudió, por lo que el gran cuerpo del intruso fue lanzado al aire.

Nephy se cubrió la cara con un sobresalto, y cuando  abrió los  ojos tímidamente, vio al intruso caer al suelo con un ruido sordo.

Los transfigurados brazos y piernas de dragón volvieron a su forma de armadura, y una fisura corrió por la máscara con un grito y una grieta.

Parecía que habían perdido el conocimiento.

Asegurándose de que el obstáculo hubiera sido silenciado, Zagan soltó un resoplido con un “hmph”.

También me he suavizado, ¿eh?

Si fuera el viejo él, el intruso ya se habría convertido en carne picada. Pero ahora se estaba frenando y deteniéndose solo para noquearlos, lo que hubiera sido impensable hace un mes.

El cambio en él se debió a la alegría de vivir con Nephy. Y como si mordiera lo milagrosa que era su felicidad, murmuró Zagan.

“Puede ser mejor… fortalecer un  poco más la barrera.  De ahora en adelante, los intrusos como este probablemente solo se multiplicarán”.

Lo había derrotado con facilidad, pero Valefor no era un hechicero débil. Zagan sabía que probablemente no habría tenido una victoria garantizada si luchara contra él un mes antes.

La razón por la que podía ganar tan fácilmente ahora era simple, de verdad. Zagan se había vuelto mucho más fuerte. Además del Sigil del archidemonio, había conseguido el legado de Marchosias. En general, la brujería se hizo más fuerte en proporción al conocimiento acumulado.

Como tal, después de convertirse en Archidemonio, Zagan acumuló rápidamente su poder.

Nephy dejó su asiento, algo pálida, mientras Zagan soltaba un suspiro. Dejando la comida como estaba, corrió hacia el intruso.

“Escúchame, Nephy, solo déjalo ser. Es probable que no se despierte hasta que hallamos terminado nuestra comida”.

“No, este niño… puede ser…” Cuando Nephy dijo eso y levantó al intruso en sus brazos, sus miembros se cayeron con un sonido metálico.

“¿Eh?” La vista hizo que incluso Zagan perdiera color en su cara.

¿Espera que? No, todo lo que hice fue golpearlo, ¿verdad? No les arranqué los brazos y las piernas, ¿verdad? A pesar de que juró no masacrar a nadie frente a Nephy, parecía que ya había roto su promesa.

Y mientras que Zagan se sacudió, Nephy murmuró “Como pensé…” y le quitó la máscara rota.

“Maestro Zagan, ella todavía es una niña”.

La cara de un niño pequeño estaba debajo de la máscara. Además, era una niña. Tenía el pelo verde claro como los brotes de la primavera. Como sus ojos estaban cerrados, él no podía ver su color, pero sí notó que ella tenía pestañas largas. Sus labios eran de un rosa vivo, y tal vez porque estaba envuelta en una túnica voluminosa, sus mejillas estaban enrojecidas.

Los brazos y piernas acorazados eran solo para mostrar, una especie de papel maché, por así decirlo. Parecía que la armadura hueca estaba siendo manipulada por algún tipo de brujería.

Y entonces, Zagan finalmente entendió exactamente lo que había hecho. Podría ser… ¿Acabo de atacar a un niño y la dejé fuera de combate? ¿Por qué un niño poseía el poder de un dragón mientras pretendía ser un hechicero? En primer lugar, ¿fue realmente está la Aparición de Valefor? Una inundación de tales preguntas brotó dentro de Zagan.

Parecía que este no era el momento para que Zagan estuviera complacido con el hecho de que no la había matado. Como si ocultara su pérdida de compostura, Zagan abrió la boca para hablar.

“Hmph… N-N-No te asustes, Nephy. Si usted está preocupada, entonces está bien darle ayuda. Bueno, veamos, creo que debería haber alguna medicina para el resfriado. Además, ella no está muerta, ¿verdad? Ella está viva sí. Por el momento, ¿la llevaremos a una habitación con una cama?”

“Por favor, cálmese, Maestro Zagan. La medicina para el resfriado no se puede usar para tratar a los heridos”. Nephy habló como si amonestara a Zagan, quien no había logrado ocultar una sola partícula de su malestar.

Luego, ella puso su mano en la frente de la niña antes de asentir.

“Está bien. Parece que ella solo ha perdido el conocimiento. Ella también parece ilesa también”.

“¿E-Es eso realmente cierto? Estás diciendo la verdad, ¿verdad? Ella no está muerta, ¿verdad?”

“Sí.”

Después de escuchar eso, Zagan dejó escapar un suspiro de alivio con una mano contra su pecho. Nephy lo miró mientras lo hacía, como si sus acciones fueran inesperadas.

“¿Qu-qué pasa?”

“No es nada, Maestro Zagan… Eres tan amable como pensé”.

“¿Eh…?”

Mientras Zagan la miraba con asombro, Nephy sostenía a Valefor en sus brazos. Aunque solo era una niña pequeña, a Nephy le parecía difícil levantarla con sus delgados brazos.

Y así, a pesar de que todavía estaba desconcertado, Zagan hizo un gesto para que lo dejara llevar al niño en su lugar.

“¿Está bien?”

“Sí.”

“En serio, qué intruso molesto”. Incluso mientras se quejaba de una queja, a Zagan le aterrorizaba la idea de haber matado a un niño frente a Nephy. Sin embargo, como para desterrar tales temores, Nephy se acurrucó contra su costado.

La intrusión del pequeño dragón marcó el primer cambio de muchos en la vida cotidiana que compartieron.