Boku no kanojo Sensei

Volumen 1

Capitulo 2: Maka-sensei vs SID

Parte 4

Eliminarlas podría ser fácil, pero atacar de una sola vez no siempre es una buena forma de hacerlo.

“Eliminarlas, dice…”

Llamarla agente sería ir muy lejos, pero seguramente podrías llamarla bruja. Y dijo que planea usar al SID para educarme… de cierta forma siento que quiero saber y a la vez no.

“Además, siendo honesta, no es una mala sensación que el chico que te gusta sea popular. Celar a mi Saigi-kun y todo eso.”

“No soy el ‘Saigi-kun’ de Sensei.”

¿Esto es sólo una forma de evitar que el SID actúe? Por favor no olvide eso. Hasta ahora, he tenido mi cabeza llena con su educación, ¿pero ahora el SID también? Esto va a ser como una patada en el trasero…

“Ah, ya sé, usaremos esto.”

“¿Qué?”

Esquivó mi respuesta a la perfección y una vez más se me acercó.

“Disculpa un poco. DI ‘Queesooo’.”

“……”

Maka-sensei me agarró del hombro y me acercó a su rostro. Sentía su suave mejilla junto a la mía. Y antes de que me diera cuenta de lo que ella estaba haciendo, sacó su smartphone y tomó una selfie nítida. Primero con la modelo de revista y ahora es la bella profesora, me pregunto si mañana será mi fin.

“… ¿Por qué está tomando una foto tan de repente?”

“Salir a una cita de yakiniku no debería ser raro para los amantes, ¿verdad? Aquí hay algo parecido a esto.”

Me mostró la pantalla de su celular. Era una foto con Maka-sensei, su cara contra la mía con una sonrisa brillante, y yo con mi boca un tanto abierta. Detrás de nosotros estaba la mesa con los platos usados encima. Así que por eso los dejó allí.

A decir verdad, no importaba como se viera, parecíamos una pareja normal que disfrutaba de un agradable yakiniku. Si le mostráramos eso a otras personas, seguro lo malinterpretarán.

“Terminó muy bien. Proseguiré y les enviaré esto a todas. ¡Adéntrate al océano llamado internet!”

“¡¿Aaahh?!”

“Y también un mensaje que diga que Saigi-kun y yo comenzamos a salir.”

“¡Que rápido!”

¡¿En serio lo envió?! ¡¿A Karen-kaichou, a Amanashi, a Kuu y hasta mi hermana menor?! ¡¿Y la escena de haber terminado de comer yakiniku con esta hermosa profesora?!

“Ya veo venir las quejas como: ‘¡¿Volverás a comer con Maka-sensei?!’.”

“Qué atrevido de tu parte, Saigi-kun.”

“No es el momento que diga eso.”

Aunque no tomó nada de alcohol, actúa como si lo hubiera hecho.

“Apagaré mi celular por si acaso. No me importa recibir mensajes en este momento porque por fin estoy de buen ánimo. ¡Yay!”

“Yay……”

Aaah, ya me estoy desesperando. Mi hermana menor, Kuu, mi compañera de clases y la presidenta del consejo estudiantil. Y pensar que ella le enviaría ese mensaje con la foto a las chicas…

“… ¡¿Ah?! ¡E-Eso me recuerda…!”

“¡¿Qué hora es?!”

De pronto dejó de moverse y corrió hacia la pared, casi la bota por el gran golpe.

¿Se encontrará bien?

“U-Uhm… Saigi-kun…?” Con un rostro de dolor, giró hacia mí. “Y-Yo no huelo a yakiniku, ¿verdad?”

“…”

Bueno, estoy seguro que estoy igual que ella, ¿De qué se sorprende?

“Ha-Había preparado algo de aromatizante, pero se me olvidó por completo… Seguramente porque estaba muy contenta… L-Lo siento.”

“N-No hay problema…”

Que ella se aferre a mí no me importa, pero ¿En serio está tan feliz, sólo por estar conmigo…?

¡¿Por qué tiene que ser tan linda y hermosa?!

“E-Eso fue muy… Je, fui descuidada. Estando contigo bajo mi guardia.”

“Si…”

No puedo decirle sobre lo linda que se ve cuando baja su guardia.

“Pero, supongo que eso es porque…”

“¿Huh? ¿Qué quiere decir?”

Comenzó a moverse con una pequeña sonrisa mientras seguía junto a la pared.

“Ya viste a mi verdadera yo. Y no me importa. Las palabras que pronunciaste esa vez— apretaron el gatillo.”

“… ¿Eh? ¿Le dije algo antes?”

Es verdad que podría ser yo el único que sabe cómo es ella. Puede que no sea el único que se cansa con respecto a las profesoras, pero si así son las cosas, en definitiva, no voy a perder contra nadie más.

“Así que en serio lo olvidaste. Bueno, yo no lo hice.”

“¿Bien…?”

¿Tengo recuerdos personales de Maka-sensei? No siento que sea así…

Me acordaría ya que es de ella que estamos hablando.

“Está bien mientras yo lo recuerdo. Y lo haré hasta que me encuentre al borde de la muerte.”

“Eso suena muy aterrador…”

Me gustaría que lo explicara, sino no podría dormir.

“Fufu…”

O eso fue lo que pensé, pero a juzgar por su sonrisa, creo que no me lo dirá. Aunque su rol en la confesión fue muy importante, me gustaría poder cambiar mis recuerdos de ese mensaje si pudiera.

Preferiblemente, me gustaría olvidar sobre todo lo que tenga que ver con el SID, pero seguramente eso no servirá de nada.

“Muy bien, ¡Comencemos el estrangulamiento de Saigi Makoto!”

“Presidenta, antes que lo decida ¡¿puede comenzar un juicio?!”

Esto pasó al otro día después de la cita— no, eso no fue una cita. De todas formas, me llevaron arrastrado a la oficina del consejo estudiantil.

Si—arrastrado. Estaba bajando las escaleras cuando Karen-kaichou me vio y me arrastró.

“Así que otra víctima, ¿eh?… ¡Yo también quiero que la presidenta me arrastre!”

“¿Sabes que los sermones de la presidenta son peligrosos? Podría romperte el espíritu si se pone seria. Por esa razón las personas se refieren a eso como ‘purga’.”

“¡Estaría feliz de poder reservar un curso de sus sermones!”

En lo que llegaba a la oficina, podía escuchar voces. Aunque ya saben cómo es ella, sigue siendo muy popular. Es hermosa, tiene grandes pechos y con el poder de arrastrarte.

Al llegar a la oficina del consejo estudiantil, no había nadie. La oficina era más o menos la mitad del tamaño de un aula normal. En el otro lado de la puerta, en la parte de atrás, había ventanas y en frente, la mesa de la presidenta. Frente a esa mesa había otra más larga. Me quedé de pie en un pequeño espacio en medio. Karen-kaichou se sentó en su propio escritorio y portando una postura de comandante. Además, en la segunda mesa estaban sentadas Amanashi Nui, Saigi Miharu y también Shinju Muku.

“Como ya sabrás, Saigi Makoto, mis palabras aquí son la ley. Si digo que te colgarán, te colgarán.”

“¡Presidenta! ¡Un poco más de amabilidad no estaría mal, y aún más conmigo!”

Después de mi petición, las que estaban a mi alrededor, hicieron un escándalo.

“Sai-kun, cálmate. En realidad, no vamos a colgarte.”

“Exacto, Onii-chan. Dejaremos de hacerlo para que puedas sobrevivir.”

“Sensei, si te cuelgan, te salvaré… aunque me podría tomar 2 o 3 horas…”

“…”

Desde la mesa larga las chicas me quedaban viendo.

Parece que desde el principio se conocieron… hasta se conocieron para llegar a una organización como esta…

“Bien, la niña tiene un toque de queda para que lo tengan presente, así que démonos prisa. Saigi-kun, ayer se te confesaron cuatro chicas. No tienes problemas, ¿verdad?”

“¿Qué quieren hacer?”

¿Entonces la presidente es el juez, yo soy el acusado y las otros tres son los espectadores? qué raro, ¿no debería haber alguien a cargo de mi defensa?

“Presidenta ¿Tengo derecho a guardar silencio?”

“Puedes elegir guardar silencio, sí, pero lo tomaré como una afirmación. Entonces, ¿tienes una desventaja triple por ser un siscon, un lolicon y un otaku obsesionado con las idols?”

“¡Te equivocas! ¡Estás mal!”

¡Qué miedo! ¡Si me quedo  callado, lo  malinterpretarán completamente!

“Uhm, Miharu también tiene una pregunta. ¿En serio solo tienes estos tres fetiches? ¿Qué hay del atributo de la presidenta?”

“Ni siquiera tengo tres.”

Mi linda hermanita no me vio y quedó viendo a Karen-kaichou.

Esta chica, no mencionó sobre lo de su confesión. Ni ayer ni esta mañana. Gracias a su actitud, tuve muchas esperanzas de que todas estas confesiones fueran solo un mal sueño… Oh, que optimismo…

“Soy sólo una chica bella de pelo negro y grandes pechos. A todo el mundo yo le gustaría, sin importar qué fetiches tuvieran”

“Ah, ya veo, ya veo. ¡Sí, parece que Onii-chan podría enamorarse de ti!”

¿Qué hay con ese ‘ya veo, ya veo’? ¿Me estoy perdiendo de algo? Por cierto, presidenta, aunque no mienta, nunca es bueno decir cosas así sobre usted.

“Volvamos al problema principal. Saigi Makoto, ayer, se te confesaron cuatro chicas. Y el mismo día, decidiste salir con la profesora de inglés de nuestra escuela, Fujiki Maka-sensei. Tenemos pruebas en fotos de tu cita de yakiniku.”

“…”

Parece que de verdad Maka-sensei les envió ese mensaje con una foto.

¿Qué hago?

Si lo niego, podrían comenzar otra discusión sobre las confesiones de cada una. Y eso solo sería un dolor en el trasero. Pero, si lo afirmo, podría desencadenar algo completamente diferente. Pero bueno, yo estaba con Maka-sensei en ese restaurante yakiniku es la verdad…

“Esto es algo que nosotras, el SID, no podemos pasar por alto. Como esto es muy importante para nosotras, tú que eres el acusado, no se te permite dar ninguna respuesta vaga.”

“Así que de verdad soy el acusado…”

Aunque no me parezca un juicio apropiado desde el exterior, todavía podría tener la posibilidad de no ser ejecutado… tal vez.

“O, mejor dicho, presidenta. No entiendo muy bien de qué se trata este SID. ¿Por qué, cuándo y cómo se formó exactamente?”

Al final, hasta un miembro de mi familia y un conocido mío, son miembros de esta organización.

“Saigi Makoto, si te lo digo, superaríamos el toque de queda de nuestra compañera. No pretendo ocultar nada, pero me ahorraría el problema.”

“Sai-kun, las chicas tienen sus secretos. Ya sea tu hermanita, esa niña o tu compañera de clase. Y andar preguntando por ahí, sólo te haría ver como una persona indiscreta.”

“Si así son las cosas, no me importa…”