Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 1

Capitulo 5: Se Espera Que Las Acciones De Un Archidemonio Sean Audaces

Parte 5

 

 

Lanzando una mirada hacia atrás a su amigo indeseable, a quien le habían aplastado los brazos y las piernas y estaba tendido en el suelo como una oruga, Zagan se arrodilló frente a Nephy.

Arrancó los grilletes que le ataban las manos y los pies con fuerza y luego fue a quitarse el collar. La que llevaba puesta era diferente a la anterior y, por suerte, podía eliminarse por la fuerza sin trucos reales.

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Al verificar que no quedaba nada que la atara, Zagan finalmente miró la cara de Nephy. Su pelo blanco como la nieve estaba sucio de barro, y sus ojos tenían lágrimas en ellos.

“Aaah, um… ¿Te… dolió?”

“Si… definitivamente duele”.

“Lo hizo, ¿no es así…? Lo siento.” Con un golpe, Nephy golpeó su pecho. “En lugar de mí, Maestro, parecías estar… con mucho más dolor”.

“… ¿Lo estaba?”

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Lágrimas grandes cayeron de los ojos de Nephy mientras ella continuaba.

“No estoy segura de lo que te pasó, Maestro. Si dices que no me necesitas, entonces lo aceptaré, pero…” Nephy se aferró al pecho de Zagan con fuerza, y luego dijo:” No hay manera… ¡estaría bien si te hiciera daño, maestro! ”

Esa   fue   la   primera    vez   que   escuchó   a   Nephy   hablar         tan   fuerte. “¿Te… parece que estoy herido?”

“Sí.”

“Honestamente, diría que soy yo el que te causa dolor…”

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“Ese es un asunto diferente de si te estás lastimando o no, Maestro”.

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“Como pensé, te lastimé, ¿eh?”

“Por favor, no trates de cambiar de tema”, dijo Nephy, actuando muy estricta. Y, mientras todavía se aferraba a él, Nephy miró la cara de Zagan.

“Por favor, no… dejes sola, Maestro.” Lenta pero constantemente, el calor se elevó en las profundidades de su pecho.

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¿Yo…te dejé sola? Y, sin embargo, lejos de maldecirlo, eso fue lo que dijo Nephy.

La idea de abrazarla e intentar recuperarla parecía demasiado difícil después de todo este tiempo.

“Nephy…” Pero más que cualquier otra cosa, en ese momento, había algo que simplemente tenía que decirle.

Maou no Ore Volumen 1 Capitulo 5 Parte 5 Novela Ligera

 

Y justo cuando trataba de decir esas palabras…

“¡Imbécil, no actúes como si hubieses ganado sin siquiera joderme acabar conmigo!” Barbatos se puso de pie, probablemente habiendo restaurado sus destrozados brazos y piernas.

Debajo de sus pies, un círculo mágico rojo sangre se extendía.

“¡Maestro!” Nephy dejó escapar un grito, pero Zagan solo con calma le acarició la cabeza.

“No te preocupes. Nada pasará.”

“¿Qué?”

Y efectivamente, justo como dijo Zagan, nada salió del círculo mágico. No había manera de que Barbatos no invocara su hechicería. Sin embargo, a pesar de que lo había hecho, no pasó nada.

“¿Qué… pasó…?” Mientras Nephy ponía una expresión de asombro, Zagan habló.

“Antes, hablamos de una brujería definitiva que existía en teoría, ¿no?” Fue una brujería que destruyó otras brujerías al agregar un circuito en el interior de un círculo mágico. Existía en teoría, pero era imposible en la práctica.

“Para decirte la verdad, hay un método deshonesto de usarlo”. Luego pasó su dedo por el aire mientras decía eso, dibujando un círculo mágico idéntico al del suelo.

“Si es una copia exacta del círculo mágico de tu oponente, entonces puedes apilarlo en el interior. Si haces eso, entonces ocurrirá un fenómeno similar a la resonancia”.

La primera vez que Zagan usó la brujería fue cuando tenía ocho años. En ese momento, el vagante juvenil Zagan fue capturado por el Resentimiento Andras para ser un sacrificio.

Zagan ya entendió lo que significaba que un hechicero capturara a un niño como él con una identidad desconocida. Por eso memorizó la forma del círculo mágico cuando fue capturado y lo dibujó en secreto en su propio brazo. Como no tenía nada con qué escribir, Zagan incluso usaba su propia sangre.

Pensando en ello, no era más que la idea superficial de un niño. Después de todo, un aficionado que simplemente estaba imitando la forma nunca podría usar algo como la brujería. Y sin embargo, Zagan de alguna manera tuvo éxito.

Mientras trataba de huir, fue descubierto por Andras, y justo cuando Zagan estaba a punto de ser asesinado por un rayo… Zagan usó exactamente la misma hechicería.

Probablemente fue solo una coincidencia. Cuando se invocó exactamente la misma brujería con el más mínimo retraso entre  ellos, la brujería resonante rebotó en Andras.

Sin embargo, no fue un fenómeno tan simple como parecía. Si uno solo intentara acumular hechicería idéntica, ambos se descargarían espontáneamente o todo volvería a la persona que trató de hacerlo. En primer lugar, es probable que la invocación nunca llegue a tiempo.

Fue un milagro que ocurrió porque la misma hechicería se acumuló sobre la de un enemigo en una fracción de segundo. Y así, Zagan mató a Andras.

Lo hizo con una técnica que solo pertenecía a Zagan: el poder que hizo que esos doce Archidemons eligieran a Zagan como un amigo jurado.

Barbatos luego retrocedió.

“R-Ridículo… ¿Estás diciendo… ese es el legado de Andras?”

“¿Andras…? Ah, ahora que lo mencionas, había un tipo con ese nombre…¿Él también fue capaz de lograr tal hazaña?” Teniendo eso en cuenta,

seguro que murió muy fácilmente.

Probablemente sabiendo que este no era el caso, Barbatos se puso completamente azul en la cara.

“¡¿Qu-qué demonios eres tú, ehoou?!” Habiéndose vuelto completamente frenético, Barbatos comenzó a disparar hechicería a ciegas.

Esto estaba dentro de su barrera. El poder de Barbatos se elevó hasta sus límites máximos y, a la inversa, el poder de Zagan se deterioró notablemente.

Sin embargo, ni uno solo de los ataques de Barbatos golpeó su marca. En su  lugar,  simplemente  desaparecieron  justo  antes  de  Zagan.  Había copiado el círculo mágico de cada hechicería que invocaba Barbatos, haciendo que se produjera la “resonancia”.

Lo llevó a cabo en un instante, incluso contra algo que solo estaba presenciando por primera vez.

Si hubiera algo que describir como el talento de Zagan, entonces esto sería todo.

Nephy entonces murmuró asombrada.

“Pero… ¿por qué no pasa nada? Si el mismo conjuro se apila uno encima del otro, entonces, ¿el propio conjuro todavía no se activará…?”

“Buen punto, Nephy.” Zagan honestamente elogió a su discípula, quien vio el punto crucial de la situación.

“Solo te expliqué lo básico. Incluso un aficionado puede hacerlo con el tiempo correcto. Aun así, la brujería es algo que uno desarrolla, ¿no?”

Lo primero que aprendió Zagan fue el reflejo de la brujería a través de la resonancia. Y así, su vida como hechicero comenzó cuando trataba de averiguar si podía usar la resonancia para hacer algo más que reflexionar.

En poco tiempo, logró reducir la hechicería en la que utilizó la resonancia en su propio maná.

Después de permitir que Barbatos se volviera loco por un tiempo, Zagan se echó hacia atrás la bata y extendió los brazos. Y había varios círculos mágicos visibles en su brazo derecho.

Los círculos mágicos estaban todos en un estado activado, y el maná estaba circulando continuamente a través de ellos.

“¿Puedes verlo? Estos son círculos mágicos que han convertido la brujería que Barbatos ha estado arrojando”. En otras palabras, habían absorbido su brujería.

El uso de la hechicería en sí mismo alimentó el poder de Zagan. Incluso si un Archidemon atacara, Zagan no podría ser asesinado con hechicería. Y ese poder exacto le permitió suceder a Marchosias.

“Habiendo dicho eso, todavía no puedo convertirlo en otra cosa que no sea la brujería en la que me especializo. Es necesario que lo desarrolle hasta un punto en el que pueda aplicarlo a cualquier hechicería”. Su poder aún no estaba refinado. Por eso los archidemones  llamaron a Zagan un pigmeo.


Después de escuchar todo eso, la cara de Barbatos se retorció de miedo.

“¿Estás diciendo que… devoraste mi hechicería?” El hecho de poder encontrar una expresión de este tipo demostró que también era un brujo de primera categoría.

La brujería en la que Zagan se especializó más… fue la mejora física. Causaría resonancia en la brujería que disparaban otros hechiceros, y luego la convertía para realzar su propio cuerpo. Solo sería apropiado llamar a esa brujería devoradora.

De repente, Zagan habló como si de repente recordara algo.

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“Oh, cierto, Barbatos. Finalmente me han dado un segundo nombre”. Apretó su mano derecha en un puño, y el círculo mágico que se enroscaba alrededor de su brazo giraba mientras brillaba.

“‘Sorcerer Slayer’… Sí, ese parece ser mi segundo nombre”. Y luego, lanzó su puño.

Barbatos probablemente tenía algún tipo de defensa en su lugar. Sin embargo, toda su brujería había sido absorbida por Zagan. Incluso si él mejoraba su cuerpo, no había ningún hechicero por ahí que sobresaliera en la mejora física más que su oponente.

En resumen, si Zagan agitaba su puño, ningún hechicero podría detenerlo. Incluso si, por ejemplo, se enfrentara a un archidemonio.

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“Urk…” el puño de Zagan perforado en el abdomen de Barbatos. Sus órganos internos se rompieron, e incluso la sensación de aplastamiento de su columna vertebral se transmitió a Zagan.

Cuando Barbatos fue arrastrado por el viento, cayó sobre el enorme círculo mágico que se extendía por todo el pasillo. Eventualmente, se detuvo, pero solo pudo sangrar cuando comenzó a convulsionar.

Aprovechando esa oportunidad, Zagan lo persiguió a un ritmo relajado.

“E-Espera un minuto. Es… mi derrota. No puedo… luchar más. No… Mostraré mi cara… delante de ti… nunca más… lo juro. También… transferiré todo mi conocimiento… a ti”.

Zagan apretó el puño cuando Barbatos comenzó a rogar por su vida. La cantidad de círculos mágicos que se enroscaban alrededor de su brazo había disminuido en número, pero aún quedaban muchos.

La cara de Barbatos se puso pálida al ver eso. “Zagan… somos amigos… ¿verdad?”

Ese comentario desagradable hizo que Zagan inclinara la cabeza hacia un lado, confundido.

“¿El concepto de amigos… existe incluso para un hechicero?” Y luego, él levantó el puño hacia abajo.

El lecho de roca se derrumbó, y el círculo mágico dibujado a través del gran salón se derrumbó sin dejar rastro. Sin embargo, la destrucción no se detuvo solo con el piso, e incluso se extendió hasta las paredes y el techo. Esas grietas invadieron hasta la pared a la que Chastille estaba atada y desató sus cadenas.

En cuanto a Barbatos, quien tomó ese ataque con toda su fuerza, no quedaba ni un trozo de carne… o así debió haber sido.

“¿H-Huh…?” Los ojos de Barbatos se apartaron. El puño de Zagan había aterrizado directamente a un lado de su cabeza. Y en respuesta a la patética mirada de su amigo indeseable, Zagan se rio.

“Jajaja, estoy bromeando. No te enojes, hombre”.

“¿T-Tu…? ¿Qué demonios estás planeando?” Zagan se encogió de hombros ante esas palabras.

“Bueno, está bien matarte a ti y todo eso, pero entonces ya no podré beber un buen licor. No sé nada sobre cómo juzgar la calidad, después de todo”.

“¿Me estás compadeciendo…?”

“Llámalo tener el ocio para hacerlo”.

Barbatos frunció el ceño a Zagan antes de responder.

“No me jodas… si me dejas vivir, definitivamente te mataré. ¡Como el infierno me rendiré! ”

“No me importa. Siempre que pierdas, te daré un buen licor”. Barbatos abrió los ojos de par en par y finalmente se dio cuenta de lo que estaba diciendo Zagan.

“Tú… ¿Qué demonios? ¿Estás diciendo que hay algún beneficio en dejar que un enemigo viva?”

“Sí, sobre eso…” Zagan de repente dio una palmada como si hubiera olvidado algo.

“Barbatos, tuve éxito Archedemon Marchosias”.

Barbatos apretó los dientes con fuerza, como si fuera frustrante. Y, mientras lo observaba hacerlo, Zagan siguió hablando.

“¿No encuentras a un Archidemonio que no le importa una mierda las reglas y las leyes más frías?” Los doce Archidemones eran abrumadoramente poderosos y aterradores.

Y después de conocerlos, después de lograr el sueño de cada hechicero, se había dado cuenta de algo. Que sintió miedo.

No me jodas ¿Cómo había entendido mal todo tan mal? ¿No se volvió más fuerte porque quería vivir? ¿No buscaba la fuerza porque odiaba ser victimizado? Si tuviera que ceder a la fuerza de otro, eso sería lo mismo que traicionarse a sí mismo.

Como era tan patético, incluso terminé lastimando a Nephy. Zagan no era el tipo para seguir siendo un mal perdedor. Por eso él declaró audazmente su intención…

“Me conduciré como yo quiera. Si quiero dejar que Nephy viva bajo la luz del día, entonces simplemente tengo que dominar todo bajo esa luz misma”. Y una vez más, miró a Barbatos.

“Es por eso que no te mataré. Porque decidí no hacerlo. Si no te gusta, entonces me obliga a obedecerte con tu propia fuerza”.

Agotado, Barbatos estiró las extremidades. Admitió que había perdido no solo en términos de poder, sino también en términos de espíritu. En el sentido más verdadero, fue su pérdida.


“Qué asno arrogante”.

“Ahí le has dado. Sin arrogancia, ¿cómo voy a sobrevivir como un Archidemonio?” Y así como Zagan respondió… el círculo mágico que se extendió por el pasillo, que debería haberse hecho pedazos, comenzó a brillar débilmente.

“… Oye, ¿todavía quieres seguir, Barbatos?” Como era de esperar, Zagan estaba haciendo una mueca exasperada, pero Barbatos negó con la cabeza.

“N-No, eso es todo para mí”.

Zagan miró hacia donde plantó su puño. Era el centro del círculo mágico. La hechicería de Zagan fue una que resonó con otras hechicerías, por lo que puede haber interferido inconscientemente con el círculo mágico.

¿Qué es esto? ¿Se está acumulando una extraña cantidad de maná? Era un poder que incluso Zagan no podía absorber. No estaba mal por mucho, pero superaba el límite máximo permisible de un humano.

“… ¿Qué demonios planeabas hacer aquí?” La cara de Barbatos sufrió un espasmo.

“Debería haber… convocado a un demonio real”. Se decía que las crestas utilizadas por los hechiceros, y quizás incluso las que usaba la iglesia, eran cartas dejadas atrás por dioses y demonios de la antigüedad.

¿Puede un demonio real… realmente ser convocado?

Ese era el abismo de la brujería, del cual el joven Zagan no sabía nada. Y así, Zagan dejó escapar un grito, claramente en pánico.

“¡Nephy, corre! ¡Manuela, y el resto de ustedes también!” Sin embargo, incluso Zagan sabía que era una solicitud irrazonable. Después de todo, la cueva estaba temblando hasta el punto de poder ceder en cualquier momento.

Ya estaba cubierto de fisuras por el ataque de Zagan, y ahora estaba el poder de este círculo mágico por encima de eso. El techo comenzó a colapsarse, por lo que incluso el acto de ponerse de pie se había vuelto difícil.

“Ugh, ¿qué está pasando?” Aun así, Chastille se arrastró hasta llegar a Nephy, y se inclinó sobre ella como para protegerla. Al final, ella era un caballero angelical. Incluso con sus alas, no había manera de que Manuela pudiera volar en un lugar tan confinado, por lo que no podía moverse.

No hay más remedio que  enfrentarlo de frente, ¿eh?  No sabía qué aparecería, pero su única opción era derribarlos.

Momentos después, apareció desde el centro del círculo mágico, y Zagan se dio cuenta de inmediato de su propia arrogancia.

Quizás porque el círculo mágico estaba incompleto, o tal vez porque se activó por coincidencia, era solo una “sombra” que no poseía una forma distinta. Sin embargo, todavía sentía miedo al ver la sombra.

Es inútil. Un humano no puede hacer nada por algo como esto. La mera vista de eso lo hizo ahogarse con la respiración.

En sus ojos, incluso encontrarse con los doce Archidemons no era tan intimidante.

Nephy palideció y temblaba. Chastille fue incapaz de soportarlo y perdió el conocimiento. Y Manuela se estaba cubriendo la cara mientras se encogía de hombros.

¡Esto es… un demonio…! Se le dio el segundo nombre ‘Sorcerer Slayer’, pero ¿el monstruo que estaba delante de él incluso empuñaba hechicería? E incluso si fuera brujería, ¿el poder de Zagan podría contrarrestarla?

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Probablemente era imposible. Después de todo, no importa el poder que uno obtenga, el hombre no puede convertirse en dios.

Y así, justo cuando se preparaba para morir… El monstruo… de repente cayó de rodillas, casi  como si… se estuviera inclinando ante Zagan. Entonces, pronunció algunas palabras bastante impactantes.

“Oh, mi rey. Pídeme lo que quieras”. El monstruo que superó el intelecto humano… por alguna razón obedeció a Zagan.

Mientras trataba de enderezar sus pensamientos, notó que un glifo había aparecido en su propio puño. Fue el Sigil de Archdemon que heredó… y el monstruo se estaba inclinando ante él.

¿Qué demonios… acabo de obtener? El asiento de Archdemon tenía demasiado poder para ser considerado un mero título.

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