Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 14

Capítulo 7: Antes De La Batalla A Muerte

Parte 4

En cambio, una espada salió volando detrás de Christina, con el objetivo de perforar su espalda.

“…” Christina y Flora estaban congeladas por el miedo a los ataques que aparentemente venían de la nada. Lucius claramente los estaba apuntando como los obstáculos.

“Ngh…”

Christina, Flora, Christina, Christina, Flora, Flora, Christina, Flora. Los ataques se produjeron de forma irregular pero continua. Finalmente, Rio no pudo bloquear un ataque dirigido a Christina y se interpuso para tomar el ataque.

Christina no pudo ver a Rio moverse a su velocidad ultrarrápida, pero sus movimientos vigorosos hicieron que su sangre fluyera contra su mejilla. Salió de su aturdimiento cuando se secó la mejilla para ver la sangre de Rio. Esa fue la gota que colmó el vaso para ella.

“… ¡S-Sir Amakawa! ¡Está bien! ¡Déjanos! ¡Serás derrotado a este ritmo!

¡Detén esto ya!” Incapaz de seguir mirando, Christina le suplicó a Rio con una mirada angustiada.

“…” Pero Rio no respondió, y tampoco detuvo sus movimientos para cubrirlos a los dos. Agudizando sus sentidos, predijo con calma hacia dónde se deformarían el cuerpo y la espada de Lucius y se movió para bloquearlos.

Cristina…

Apoyado en su hermana, el veneno apenas había hecho posible que Flora permaneciera consciente, pero la llamada dolorida de su hermana la había alcanzado. Eso fue suficiente para que su pecho sintiera que iba a estallar.

“Por favor para, te lo ruego, por favor…”

Estaba tan cerca, pero su voz no podía alcanzarlo. La voz dolorida de Christina se apagó débilmente. Su corazón estaba realmente a punto de romperse.

Entretanto—

Concentrado. Elimina todos los residuos al límite.

Rio no se había rendido en lo más mínimo. De hecho, en el transcurso de los ataques que tuvo que desviar desde todos los ángulos, fue agudizando gradualmente su mente hasta que hubo maximizado la eficiencia de sus movimientos y memorizado el patrón de ataque de Lucius.

Habrá una oportunidad de contraatacar. Por ahora, solo tengo que seguir evadiendo los ataques y reunir la esencia mágica para esa oportunidad. Y para eso, tengo que imaginarlo. Mi técnica más poderosa…

La lógica era simple. Las artes espirituales eran una técnica que implicaba el uso de energía vital del canto y energía natural de maná para alterar el mundo a voluntad. Si dos lanzadores de arte espiritual intentaran activar dos artes diferentes en la misma posición exacta, siempre que las dos artes no fueran lo suficientemente similares como para fusionarse, el fenómeno más fuerte abrumaría al fenómeno más débil.

En otras palabras, el que tuviera una mayor influencia sobre el fenómeno se activaría en su forma completa. Esto se vio afectado por la naturaleza del arte, la escala del arte y la habilidad del lanzador. Si la fuerza de las dos artes rivalizara entre sí, las dos artes chocarían entre sí al activarse, pero cuando hubiera una diferencia significativa en la fuerza de los lanzadores, el arte del oponente podría anularse por completo.

Por lo tanto, si Lucius se teletransportaba a su alrededor activando su fenómeno de alteración del espacio, Rio simplemente tenía que llenar el área con un arte lo suficientemente poderoso como para abrumar eso. Una vez que lo hiciera, Lucius ya no podría atacar a Christina y Flora.

Sin embargo, moverse por el espacio fue un fenómeno que tuvo una influencia extremadamente poderosa; No se necesitaría cualquier arte antiguo para obstruir esa activación. Tendría que crear un fenómeno a una escala lo suficientemente grande como para llenar toda el área con maná. Por eso tenía que imaginarlo, un arte más grande que cualquier cosa que hubiera activado antes.

Tuvo una visión. La habilidad que un oponente anterior usó antes, o más bien, la habilidad de esa arma. Recrearía eso con artes espirituales.

Más poder, mayor calidad… Rio mantuvo desesperadamente sus defensas mientras esperaba el momento en que pudiera contrarrestar esta situación desesperada.

***

Pasó un minuto muy, muy largo.

“…”

Flora estaba tan pálida como una sábana debido a su cuerpo envenenado y fiebre alta, pero lo mismo se aplicaba a Christina también. Ella habría hecho todo lo posible para ayudar, pero sabía que hacer el movimiento equivocado podría resultar en obstaculizar a Rio.

“Hah… Hah…”

Durante una breve pausa en los ataques de Lucius, pudo ver la rara vista de Rio jadeando con dificultad para respirar. Su resistencia se había agotado al recibir los ataques de Lucius y estaba sangrando abiertamente, que era algo que no podía recuperar. Teniendo en cuenta la escala del arte que estaba a punto de activar, solo podía asignar la cantidad mínima de esencia para curarse a sí mismo. Entretanto—

Tch, está aguantando más de lo que pensaba. Mis ataques incluso están empezando a fallar.

Lucius estaba impaciente.

Rio tenía la desventaja de tener que proteger dos pesos muertos. Lucius debería haber tenido la ventaja, pero no pudo lograr una victoria; en cuanto a rendimiento, definitivamente fue él quien perdió, por lo que no fue una sorpresa que se sintiera impaciente.

“Terminemos con esto ya”, dijo Rio después de recuperar el aliento.

Luchar en una intensa batalla herido mientras reunía la mayor esencia que había tenido en su vida fue una tarea difícil incluso para Rio,  quien finalmente había terminado sus preparativos.

“¿Eh? ¿Hablas dormido ahora? Yo soy el que gana aquí”, espetó Lucius.

“No dejaré que las cosas sigan su camino por más tiempo. No dejaré que te lleves nada. Nunca más…” Rio miró a Lucius con una mirada penetrante. A pesar de que los alrededores estaban completamente secos, Rio manifestó una tremenda cantidad de agua en un instante. El agua lo rodeó por completo a él ya las princesas, luego se hinchó rápidamente para intentar tragar a Lucius también.

“Qué…” Lucius casi se congeló por un momento, pero rápidamente miró hacia arriba y se teletransportó al cielo.

Ese bastardo sacó una tonelada de agua en un instante.

Lucius miró la escena desde arriba. La cantidad de agua que Rio había creado era lo suficientemente grande como para tragar todo el pueblo cercano. Sin embargo, la enorme masa de agua no se rompió en absoluto, manteniendo su forma de gota elástica.

¿Qué diablos está pasando…?

Lucius vertió esencia en su espada y lanzó un corte de oscuridad en la masa de agua. Sin embargo, el golpe simplemente rebotó en la superficie del agua, no pudo abrir un agujero. Además de eso, el agua que rebotó en la superficie regresó a la masa. Fue solo un desperdicio de esencia mágica.

“Tch… no puedo ver lo que está pasando dentro. No puedo teletransportarme así… ¿Qué está tratando de tirar ese bastardo?” Lucius miró con odio la masa de agua que Rio había creado. Mientras tanto, dentro del agua, Rio había creado una cúpula de aire de varios metros de radio a su alrededor.

¿Q-Qué… es esto…?

Christina miró alrededor del interior de la cúpula.

360 grados. No importa dónde mirara, solo era agua, agua y más agua. Había tanta agua que no podía ver fuera de la burbuja. El agua estaba teñida de esencia y brillaba, iluminando el interior de la cúpula.

Bonita…

Christina se olvidó de la realidad por un momento, así de maravilloso era el paisaje.

“Voy a contraatacar manipulando esta agua. Estarás a salvo mientras no te muevas de aquí. Por favor, espera a que termine esta batalla”, le dijo Rio.

“C-Claro…”

¿Creaste esto? ¿Qué está pasando exactamente ahora mismo? Tales preguntas llenaron su cabeza, pero Christina no las dijo en voz alta. Ella no sintió la necesidad de hacerlo. La situación había excedido durante mucho tiempo lo que ella era capaz de comprender.

“Entonces me iré ahora”, dijo Rio.

La pared de agua que los rodeaba comenzó a ondular, retorcerse y girar para cambiar de forma, separándose en un total de dieciséis burbujas de agua.

Cada una de esas burbujas de agua cambió de forma aún más. Ocho de ellos se convirtieron en largos dragones que volaban libremente en el aire, mientras que los ocho restantes quedaron fijos en el suelo, tomando la forma de colas de dragón para proteger a Christina y Flora.

Ocho cabezas de dragón y ocho colas de dragón. Todos se movieron como si fueran un ser gigantesco, y Christina sintió una sensación de déjà vu cuando los miró.

“Es ese del Sir Hiroaki… ¿Yamata no Orochi?”

De hecho, era muy similar a la especialidad de Hiroaki; de hecho, estaba en un nivel más alto en comparación con ese.

Era lo suficientemente majestuoso como para ser su forma final.

Rio usó artes espirituales del viento para volar fuera del círculo de colas. Después de haber ascendido a cierto nivel, miró a Lucius desde arriba de las ocho cabezas de los dragones de agua.

“Ha… ¡Hahaha! ¡Has dejado a las hermanas reales completamente indefensas!” Lucius, que había estado abrumado por el espectáculo hasta ese momento, sonrió e intentó deformar su cuerpo al lado de Christina y Flora, pero—

“¡¿No puedo teletransportarme…?!”

¡Eso no puede ser! Lucius trató de deformar la hoja de su espada dentro de las colas para atacar a Christina, pero tampoco pudo teletransportar la hoja de la espada.

¿Qué demonios está pasando…?

Lucius cambió a otra posición. El lugar al que se mudó también estaba en el cielo, pero otro dragón lo estaba esperando donde apareció.

¡E-Ese bastardo! ¡Está prediciendo completamente adónde me moveré!

Como para probar eso, otro dragón de agua se acercó a Lucius para atacar.

Cada una de las ocho cabezas de los dragones tenía más de diez metros de largo y volaba libremente por todo el cielo, atacando a Lucius de inmediato sin importar a dónde se dirigiera. Incluso se movieron para apoyarse mutuamente; no, era Rio quien los estaba controlando para hacerlo. La velocidad a la que se movían tampoco era motivo de risa.

“¡No te metas conmigo!”

A pesar de que podía teletransportarse, no había ningún lugar para correr en los cielos. Rio soltaría un dragón de agua dondequiera que se deformara, lo que lo obligaría a usar su teletransporte de corta distancia sucesivamente. A este ritmo, tendría las manos ocupadas con solo evadir los ataques. Sus posiciones se invirtieron completamente con respecto a antes.

Mi nuevo cuerpo ha aumentado la cantidad de veces que puedo teletransportarme, pero usarlo tantas veces seguidas es malo. Si tan solo hubiera tomado a esas dos princesas en el suelo como rehenes… ¡Mierda!

Lucius trató de comprender la situación haciendo otro intento de atacar a Christina y Flora desde arriba, pero aún no pudo teletransportarse.

¡Entonces tendré que teletransportarme a tu lado, Rio!

Pensando que el taumaturgo no manipularía un ataque hacia sí mismo, Lucius trató de teletransportarse junto a Rio. Sin embargo—

“… ¡¿No puedo teletransportarme?! ¡Guh!”

Por alguna razón, tampoco pudo trasladarse a Río. Entonces, presa del pánico, uno de los dragones de agua de Rio logró golpear a Lucius. Fue como chocar con una gigantesca bola de hierro. El cuerpo de Lucius fue volado a una velocidad increíble, estrellándose contra el suelo.

“D-De ninguna manera…” Al ver a los otros dragones de agua acercándose, rápidamente intentó otra deformación, esta vez con éxito.

Qu-Qué…

Su cuerpo debería haber sido mejorado, sin embargo, necesitaba todo en él para mantenerse de pie. Aparentemente, el ataque en ese momento había sido especialmente efectivo, ya que le temblaban las piernas.

No puedo teletransportarme al lado del bastardo. No puedo teletransportarme junto a los hermanos reales. ¡¿Encontró una manera de sellar mis habilidades?!

Lucius no podía alcanzar los  cielos sin teletransportarse, por lo que acercarse a Río se hizo exponencialmente más difícil al no poder deformarse.

“Entonces, ¿qué tal si apunto a las princesas, entonces?”

Lucius fortaleció el grado de mejora de su cuerpo y corrió hacia Christina y Flora dentro de las colas de dragón con piernas inestables. Si no podía deformarse, simplemente tendría que correr; no tenía intención de rendirse. Sin embargo, las colas de un metro de largo se ondularon como látigos, barriendo el área que Lucius estaba tratando de cruzar. El suelo estaba completamente volcado, casi como si hubiera ocurrido un desastre natural.

“¡M-Mierda!” Lucius apenas logró evadir el ataque teletransportándose hacia arriba. Temeroso de que se produjera otro ataque de inmediato, intentó teletransportarse sucesivamente para huir, pero—

…¿Qué?

Su teletransportación no se activó, porque el propio Rio descendía rápidamente hacia Lucius.

“¿Qué…?”

La punta de una espada atravesó el torso de Lucius como un meteoro, tirándolo al suelo.

“…” Rio apuñaló su espada en el suelo, justo a través del cuerpo de Lucius. Miró la expresión de asombro de Lucius sin soltar su espada. La espada definitivamente había atravesado el corazón de Lucius.

“Guh… Ha… Ngh… Nnngh…”

Lucius tosió violentamente, expulsando el aire y la sangre de sus pulmones. Ese fue el momento en que finalmente se dio cuenta de que el ataque de Rio lo había golpeado.

“Se acabó este tiempo…” Rio agarró la empuñadura de su espada con ambas manos y la giró. Para acabar con él, destruyó por completo el corazón de Lucius.

La luz en los ojos de Lucius se desvaneció rápidamente.

“H-Heh… ¿Así que lo terminaste tú mismo? Esos dragones de agua deben haber sido un señuelo. Maldita sea… dejé… que mi guardia… bajara… ”

Mirando a Rio a través de su visión borrosa, Lucius se rio entre dientes. Al contrario del odio que llenaba su cabeza y pecho, estaba sonriendo. Lo único que apenas mantenía vivo a Lucius en este  momento era su mejoramiento físico. Esta vez, Reiss no estaba aquí para salvarlo. Seguramente moriría esta vez.

Por alguna razón, ese pensamiento hizo que la risa surgiera dentro de él.

“No lo entiendo en absoluto… Por qué harías eso por esas princesas… Beltrum no es nada especial. Ha sido poseído por Reiss, una plaga ambulante de un hombre. Ese reino no durará mucho… Gahaha… hah”.

Lucius exprimió lo último de su energía para hablar con Rio. La sangre brotó de sus labios.

“Yo soy el que no lo entiende…” ¿Por qué tuvieron que matar a su madre?

¿Por qué tuvo que matar a su padre? Tuvo que pasar once años atado a su venganza por eso.

Rio miró a Lucius en su lecho de muerte y fortaleció su agarre alrededor de su espada. Las llamas de la venganza ardían intensamente dentro de él.

Al mismo tiempo, recordó los entrañables recuerdos de su madre, Ayame.

La felicidad que había perdido. Los días que nunca podría volver. El afecto que nunca volvería a sentir, todo se lo llevó este hombre.

Por eso Rio no sintió lástima mientras veía a Lucius al borde de la muerte. No lo perdonaría. Nunca miraría atrás. Mientras estuviera vivo, viviría solo con el propósito de matar a este hombre. Eso fue todo.

Sí, por eso— “…”

Silenciosamente, Rio hundió su espada más profundamente en el corazón de Lucius.

“…”

Lucius se quedó completamente en silencio. Su vida había terminado.

Él está muerto.

Sin pestañear, Rio miró su rostro. Lo había matado. Con sus propias manos.

Este fue el destino final de su venganza, pero no había sentido de logro aquí.

No había buscado venganza por una sensación de logro.

En todo caso, sintió una sensación de pérdida y una oscuridad que se desbordó. Pero esta era de hecho la conclusión que Rio deseaba, lo que había querido desde el principio.

No se arrepintió.

“…Se acabó.”

Rio activó sus artes espirituales a través de su espada y encendió el cuerpo de Lucius. El cuerpo instantáneamente estalló en llamas, y Rio sacó su espada del corazón de Lucius y dio varios pasos hacia atrás. Las llamas ardieron a un calor intensamente alto, convirtiendo a Lucius en cenizas en cuestión de momentos.

Once años desde que mataron a su madre. Once años de vivir por venganza.

Tardó mucho en llegar, pero finalmente se acabó.

No había pensado en qué hacer más allá de esto, había vivido con la intención de dedicarlo todo a ello.

No había necesidad de un futuro, pensó.

Pero ahora, Rio tenía un lugar al que regresar. Había pensado que todos lo odiarían si supieran la verdad, pero ese no fue el caso.

Por eso—

“Tiempo de ir a casa.”

Rio se giró y comenzó a caminar. Había gente esperando el regreso de alguien como él y él quería volver con ellos. Y así volvería.

Rio miró a los dragones de agua en el cielo y los dispersó en la niebla, luego hizo lo mismo con las colas en el suelo. La niebla creó un arco iris brillante que cubrió el área. Caminando a través de ese arco, se dirigió hacia las formas andrajosas de Christina y Flora.