Honzuki no Gekokujō (NL)

Volumen 4: Aprendiz De Doncella En El Templo I

Capítulo 6: Comprando Ropa de Segunda Mano

 

 

Después de que había suficiente maná en mi cuerpo para moverme nuevamente, comí la sopa de pan que Mark hizo y lentamente recuperé mi fuerza.

“Myne, ¿vas a comprar ropa casual para tus sirvientes? ¿O prefieres que te los traiga?”


“¿Dónde debería comprar su ropa casual? Supongo que la tienda de segunda mano a la que va mi familia no será buena para esto, ¿verdad?”

Fue difícil para los plebeyos hacer ropa nueva dada su pobreza, y excluyendo casos anormales como yo, los niños crecieron constantemente.

Con el paso del tiempo necesitarían ropa más grande, y su ropa más pequeña se volvería insoportable. No tenía sentido almacenar ropa inútil en sus casas ya pequeñas, por lo que los plebeyos tendían a vender nuestra ropa casual a una tienda de ropa de segunda mano en el momento en que el niño más pequeño no podía usarla. El dinero ganado se gastaría para comprar ropa nueva. De esta forma, obtendrían ropa nueva a un precio más o menos reducido.

Los estándares para los nuevos conjuntos eran bajos. Si le quedaban bien, estaban bien, y la ropa de segunda mano que estaba sucia era algo normal. ¿Qué pasa si están cubiertos de parches? Tienes suerte de tener alguna decoración. ¿Qué hay del diseño? La ropa para gente pobre no tiene diseños. Todo lo que importaba era qué tan gruesa era la tela y qué tan fuertes eran. Cuando la tela se volvió demasiado irregular y suelta para ser usada, la ropa se convirtió en harapos.

«Idiota. Ni siquiera pienses en hacer que usen ropa como esa en el norte”. Mis sirvientes, que probablemente me seguirían a la Compañía Gilberta y de regreso al templo, generalmente se quedarían en la parte rica de la ciudad, el norte. No sería inteligente tenerlos caminando con ropas pobres y harapientas como las que usualmente uso.

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«Creo que te dejaré manejar todo esto, Benno. No conozco ninguna tienda de ropa elegante de segunda mano, y no sé qué ropa sería buena para los sirvientes, así que».

«Te llevaré a una tienda de segunda mano mañana si no estás enferma entonces. Tengo que ir a ver cómo va el restaurante también, así que sí. Vienes conmigo».

«Está bien». Asentí y Benno volvió sus ojos hacia Lutz.

«Lutz, ese normalmente es tu día libre, pero tú también vienes».

«Perdón por envolverte en esto, Lutz».

«No te preocupes por eso, solo estaba pensando que quería comprar algo de ropa casual a bajo precio».

Parecía que Lutz, todavía atrapado siguiéndome incluso después de que entré al templo, quería algo de ropa para no aprendices que pudiera usar. Sus días libres.

A diferencia de la ropa casual, aparentemente tenía que lavar su ropa de aprendiz cada vez que la usaba. Una apariencia limpia era necesaria para aquellos que trabajan en un negocio de clase alta. Pero, naturalmente, la ropa se daña cada vez más cuanto más la lavas. Lutz no quería dañar sus trajes de aprendiz, pero eran todo lo que tenía para caminar por el norte de la ciudad.

«Tendré que comprar nuevos trajes de aprendiz si no tengo ropa casual para usar en mis días libres, ¿sabes?», Dijo Lutz, lo que me hizo querer ropa casual propia. También solo tenía mi traje de aprendiz para caminar por el norte de la ciudad.

«Señor Benno, por favor, encuentra algo de ropa para mí también”. Nunca antes había ido a comprar mi propia ropa en este mundo. Sintiéndome emocionado por la compra de ropa que me esperaba mañana, me fui a casa con Lutz.

“Adiós Lutz. Hasta mañana”. Le dije adiós a Lutz con una sonrisa, pero él me fulminó con la mirada.

«Todavía no le he contado a tu familia lo que sucedió». Sus palabras me asustaron en el corazón, pero, naturalmente, no tenía forma de detenerlo.

«¿Por qué no te cuidas mejor, Myne?»

«¡No llores, Tuuli!»

«¡No estoy llorando! ¡Estoy furiosa!»

Sabía que Tuuli había estado preocupada acerca de si ir al templo realmente mejoraría mi Devorador, y que estaba aterrorizada de que desapareciera repentinamente, así que sentí una fuerte culpa mientras lloraba enojada.

«Lo siento. Lo siento mucho. No dejaré que vuelva a suceder».

«… ¿Comerás de ahora en adelante?»

«¡Por supuesto!» Asentí ansiosamente y las cejas de Tuuli se arquearon un poco.

“¿Hablarás con esa persona importante sobre el maná? ¿Prometes que no lo olvidarás, incluso si puedes leer libros?»





«… Ngh…»

«¿Myne?» Tuuli me fulminó con la mirada, pero no pude hacer una promesa que sabía que no cumpliría. Estaba segura de que si me pusieran un libro frente a mí, olvidaría todas las promesas que hice.

«… Se lo diré a mi sirviente para que me lo recuerde si lo olvido. Es una persona seria, ¡estará bien!»

«Haaah. Supongo que no harás promesas que no puedas cumplir, ¿eh?” Tuuli sacudió la cabeza con exasperación, pero en serio, no tenía confianza en cumplir esa promesa. Toda mi familia estaba exasperada conmigo, pero no estaban tan enojados como antes, así que cambié el tema.

“Hey, Tuuli. Si tienes mañana libre, ¿quieres ir de compras conmigo? Mañana compraré ropa para mis sirvientes, como ropa rica para la gente en el norte de la ciudad, así que tal vez sea bueno para tus estudios». Sin mencionar que Benno sería el que escogería la ropa. Era el dueño de una tienda de ropa para nobles. Sin duda Tuuli aprendería mucho de él.

«Tenemos muchas cosas que hacer mañana, así que también tendrás que seguirnos por otros lugares, pero si estás de acuerdo con eso…»

«Está bien, suena divertido», dijo Tuuli con una amplia sonrisa. La vista de su habitual sonrisa brillante me hizo suspirar de alivio. Menos mal… Parece que ya no está enojada.

«¿Tuuli? ¿Qué, no vas a ir al bosque con nosotros?». Mientras Tuuli, Lutz y yo nos tomábamos de la mano hacia la calle principal más allá del pozo, escuchamos una voz aguda que nos llamaba desde atrás.

«Oh, Ralph».

Nos dimos la vuelta y vimos que el hermano mayor de Lutz, Ralph, había corrido detrás de nosotras, con una canasta en la espalda. Estaba vestido para ir al bosque y estaba haciendo una mueca mientras nos miraba, Lutz y a mí con nuestros uniformes de aprendiz y Tuuli con su ropa más limpia.

«¿A dónde vas?»

«Voy a aprender sobre ropa. Vas al bosque, ¿verdad?”

Tuuli solía ir al bosque en sus días libres para encontrarse con sus amigos y conversar, pero a diferencia de antes, no tenía que ir al bosque para mantener a flote el presupuesto familiar. Nuestra situación financiera fue mucho mejor gracias a que ella y yo teníamos trabajo, sin mencionar que no me enfermaba tan a menudo como antes.

En contraste, la familia de Lutz estaba compuesta por cuatro niños en crecimiento que comían mucho y, por lo tanto, dinero. Sus finanzas todavía estaban apretadas incluso con todos sus hijos trabajando.

A los aprendices no se les pagaba mucho, por lo que si no tenían cuidado de ir al bosque con regularidad, era posible que terminaran con menos comida que antes.

Era natural, entonces, que ir al bosque en sus días libres fuera algo normal para ellos, y que la familia de Lutz no creía que él fuera a la tienda en su día libre. Lutz había mencionado que preferirían que él obtuviera cosas directamente del bosque que darles más dinero de aprendiz.

En el camino a la calle principal, Tuuli caminó junto a Ralph mientras Lutz caminaba un poco detrás de ellos, luciendo incómodo.

Caminé mientras sostenía las manos con Lutz y lo vi suspirar a Ralph que ocasionalmente lo miraba.

“Adiós Ralph. ¡Buena suerte en el bosque!”

«Sí». Una vez que llegó a la calle principal, Ralph se dirigió hacia el sur mientras nosotros nos dirigíamos hacia el norte. Tuuli le dijo adiós con entusiasmo a Ralph mientras tomaba mi otra mano.

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Luego nos dirigimos hacia el norte por la calle principal. Tuuli estaba tan emocionada de aprender sobre la ropa que pasó todo el tiempo hablando de ellas. Lutz aprovechó la oportunidad para practicar ser un buen oyente como Mark le había enseñado.

De repente sentí los ojos en mi espalda y me di vuelta para ver a Ralph donde lo habíamos dejado, parado en el lugar y mirándonos como si tuviera algo que decir. En el momento en que hicimos contacto visual, se dio la vuelta apresuradamente y corrió hacia el sur, como si hubiera sido atrapado en medio de hacer algo.

La distancia que crecía entre nosotros mientras corría se sentía simbólica por la creciente distancia emocional entre Lutz y sus hermanos, un pensamiento que me hizo bajar los ojos con tristeza.

Cuando llegamos a la Compañía Gilberta, encontramos a Benno trabajando, ya preparado para partir en cualquier momento. Estaba dando instrucciones a Mark y varios otros empleados.

«¿Estás con Tuuli hoy? Bien. Corinna estaba hablando de cómo serás una buena costurera cuando seas grande, Tuuli».

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«¡¿De Verdad?! ¡Qué lindo!”

Benno felicitó a Tuuli con una sonrisa amistosa. Salíamos con Benno, no con Mark como siempre. Parecía que necesitaba verificar personalmente el sitio de construcción del restaurante italiano para asegurarse de que se estaba construyendo de acuerdo con las especificaciones, sin que ninguno de los materiales se cambiara por otros más baratos ni nada por el estilo.

«¿Entonces el restaurante ya se está construyendo?»

“Sí, encontré un buen lugar antes de lo que esperaba. Están en medio de la expansión de la cocina ahora mismo».

Benno había comprado un viejo restaurante del Gremio Eatery, ubicado en el norte de la ciudad. Estaba en medio de ser renovado. Una vez que el horno se colocaba en la cocina ampliada, se reemplazarían todas las baldosas y se cambiaría la decoración interior por muebles más caros, adecuados para un restaurante que vende comida lo suficientemente buena para los nobles. La idea era ser un restaurante de clase alta donde las personas algo ricas pudieran sentir que eran nobles.

«Una vez que el restaurante haya terminado, invitaré a varios comerciantes que hacen negocios con nobles y verán qué piensan del lugar».

«Oh, estás aprendiendo del Maestro del Gremio»

«¡No! Fuiste tú quien pensó la idea para ese evento de prueba de sabor, no aprendí nada del maestro del gremio».

«…Ah, está bien.»

Por lo que pude ver, no hubo problemas con la madera, los ladrillos o el hierro, ni hubo problemas con la construcción en sí. El horno aún no estaba instalado, pero una vez que lo estaba, Benno contrataría a un chef y los capacitaría antes de la apertura de la tienda.

«Me alegra que las cosas estén yendo bien», dije después de que Benno me llevó dentro del edificio en construcción, aunque eso solo lo hizo fruncir el ceño. Susurró en voz baja que solo yo podía aquí.

«No, aquí hay una montaña de problemas».

«¿Qué?»

«… Nada que debas saber. Vamos, nos vamos”, dijo, llamando a Lutz y Tuuli. Comenzamos a caminar hacia una tienda de ropa de segunda mano con profundas conexiones con la Compañía Gilberta. Tuuli vino saltando de esta manera, su trenza saltó mientras miraba alrededor de la tienda.

“¿Qué tipo de comida comen los nobles? ¡Realmente quiero probar comida noble al menos una vez!” Lutz y Tuuli caminaban detrás de Benno, así que los miré por encima del hombro mientras pensaba en recetas.

«Mmm, al menos para la comida de este restaurante, alrededor del treinta por ciento son cosas que hemos comido en casa. El cincuenta por ciento son cosas nuevas y dulces que necesitan un horno. El último veinte por ciento es algo así como las recetas modificadas de Leise, más o menos». Mi respuesta llevó a Tuuli a hacer una mueca extraña

«… Espera, ¿ese restaurante servirá tu comida rara, Myne?»

«¡Tuuli, no llames raro a mi comida! ¡Siempre te encanta comerlo!” Me desplomé, deprimida porque mi hermana llamaría rara a mi comida a pesar de amarla, y Tuuli se corrigió apresuradamente.

«¡Sabe bien! Sabe súper bien. Creo que el chef se sorprenderá mucho cuando haga una de sus recetas por primera vez. Sin embargo, ya estoy acostumbrado a ellos».

«Cualquier cosa está bien siempre que sepa bien, ¿verdad? ¿Verdad?” Lutz se encogió de hombros y aceptó, pero no dijo que mi comida no era rara. Supongo que era difícil discutir cuando los métodos de cocción eran realmente anormales aquí.

«… ¿Qué, ustedes dos han comido la cocina de Myne antes?» Dado que el restaurante estaba en construcción y todavía no había contratado a un chef, Benno era el único de nosotros que todavía no había comido mi comida. Lutz y Tuuli se miraron con expresiones conflictivas.

«Mmm, usamos las recetas de Myne, pero… ¿Sabes a qué me refiero, Lutz?»

“Sí, tenemos que hacerlo nosotros mismos. Realmente no parece que estemos comiendo la cocina de Myne».

… Ok, eso es justo. Todos los demás estaban creciendo constantemente mientras yo seguía sin crecer, por lo que había una enorme diferencia en tamaño y fuerza entre nosotros. Desde la perspectiva de alguien en la Tierra, sería como la diferencia entre un preescolar y un estudiante de primaria, o incluso un estudiante de secundaria.

Había mucha diferencia entre nuestras alturas, cuán lejos podíamos llegar, cuán fuertes éramos, etc. Había un mundo de diferencia en nuestras habilidades físicas sin importar la situación. Seguí siendo incapaz de hacer básicamente cualquier cosa, mientras se volvían cada vez más capaces de hacer cosas sin la ayuda de ningún padre.

«Yo también quiero crecer…»

Mi triste murmullo llegó a oídos de solo Benno, gracias a que él me llevaba. Pero no tenía la intención de hablar en voz alta, así que cuando me dio unas palmaditas en la espalda, dejé escapar una sorpresa.

Mi falta de crecimiento se debió a mi Devorador y no había nada que alguien pudiera hacer al respecto. Si Tuuli o Lutz escucharan mis quejas, definitivamente se pondrían tristes. Los miré para asegurarme de que no me habían escuchado y solté un suspiro de alivio después de verlos hablar sobre cuál de mis recetas era su favorita.

Tanto el restaurante como la tienda de segunda mano estaban en el norte de la ciudad, por lo que no tardó mucho en llegar a nuestro destino. Como era de esperar, la tienda de segunda mano del norte era completamente diferente de la que generalmente visitaba mi familia. El lugar al que estaba acostumbrado organizaba la ropa más o menos por tamaño a través de grandes canastas con montañas de ropa sucia gris y marrón contenidas dentro.

Esta tienda, probablemente debido a la calidad de la ropa colorida, colgaba todo menos ropa interior en perchas en forma de cruz. Como todo fue hecho por orden, lo que viste fue lo que obtuviste. Se parecía al tipo de tienda de ropa occidental que podrías encontrar en una pequeña ciudad japonesa, donde no había variaciones de tamaño o color para atuendos particulares— solo había un atuendo con el mismo tamaño y combinación de colores.

Tan pronto como entramos en la tienda, una mujer que parecía ser la dueña de la tienda abrió mucho los ojos y vino corriendo. Tenía el cabello castaño oscuro bien peinado y sus dos ojos brillaban de curiosidad.

“Dios mío, Benno. ¿Qué te trae por aquí? ¿Cuándo tuviste tantos hijos?”#

«¿De qué estás parloteando?»

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“Sé querido y juega, Benno. Acabas de llegar a mi tienda con un grupo de niños que te siguen. Puedes apostar que explotaré esto lo más fuera de proporción posible para divertirme cotilleando con las chicas”.

«Déjalo, no eres graciosa».

Los vimos a los dos — obviamente amigos cercanos — en duelo con palabras, con los ojos muy abiertos, hasta que Benno interrumpió a la mujer y dijo lo que tenía que hacer.

«Estoy aquí para comprarles algo de ropa. Mientras lo hacemos, mi aprendiz allí puede aprender un poco sobre cómo funciona la ropa».

“¿Tu aprendiz? Espera, ¿por qué vas a hacer que Lutz también aprenda?”

“Vamos, Myne. Un aprendiz en mi tienda tiene que saber cómo elegir buena ropa, eso ni siquiera es una pregunta», dijo Benno, haciendo que Lutz se estremeciera. Él y Tuuli, habiendo crecido en un ambiente donde la fuerza de la ropa importaba más que cualquier otra cosa, nunca habían desarrollado una habilidad especial para identificar ropa de calidad. Benno tenía la intención de arreglar eso.

“Myne, la ropa por aquí debería ser lo suficientemente buena para tus sirvientes. Sus diseños están en el lado más nuevo y sus mangas cortas deberían ser buenas para el trabajo”.

“Fuera de la ropa en esta sección, creo que el verde oscuro o el marrón se verían mejor en él. ¿Qué piensas? Es una persona seria, muy centrada, así que creo que su ropa debe coincidir con el color de sus ojos y cabello».

«… Sí, me suena bien. Sin embargo, no puedo decir nada sobre los otros dos, no los he visto. Deberías estar bien si sigues el mismo tipo de proceso de pensamiento. Solo elige lo que quieras».

«Okaaay». Benno me dejó en el suelo, así que comencé a buscar en la ropa del tamaño de un niño trajes que se vieran bien en Gil o Delia. Dijo que podía elegir lo que quisiera, pero como solo había tantos conjuntos del mismo tamaño, mis opciones eran bastante limitadas. Naturalmente, elegí mis selecciones bastante rápido. Todo lo que quedaba era comparar la ropa con Lutz y asegurarse de que la ropa nueva fuera del tamaño correcto.

… Haaaah. Realmente desearía que hubiera más ropa aquí. Mis sueños de pasar un día divertido comprando ropa se arruinaron y mi entusiasmo se desplomó de inmediato. Solo ahora supe en qué exceso había vivido en la Tierra. La ropa me había rodeado a cada paso. En ese momento tenía poco interés en la moda, pero en el momento en que la ropa se desvaneció, me encontré deseándola. Que molesto.

«Lutz, Lutz, ¿tienes un segundo?»

«¿Qué pasa, Myne?»

«Gil es como, exactamente la misma altura que tú, así que quiero ver si esta camisa te queda bien». Extendí los tres conjuntos y los sostuve contra Lutz. Todos parecían ser del tamaño correcto. Una vez hecho esto, le ofrecí uno de los trajes a Lutz.

“De todas estas prendas, creo que te queda mejor, Lutz. Este es probablemente el mejor para Gil, tal vez…» Al comparar la ropa potencial de Gil, Benno dejó escapar un suspiro.

«Myne, ¿dónde aprendiste a elegir la ropa?»

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«¿Dónde…? Um, nunca he estudiado ropa en ningún lado». Había leído varios libros sobre coordinación de colores y todo tipo de revistas sobre vestimenta, pero nunca estudié nada de eso, por así decirlo. A lo sumo, el tema de la ropa surgió en la escuela a veces.

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«Supongo que es una pérdida de tiempo cuestionar algo sobre ti, ¿eh?»

«UH, Huh. Será mejor para todos si no lo piensas. Lutz, probémoslo después”. Levanté un vestido que estaba comprando para Delia y Lutz sacudió la cabeza con fuerza. Se cruzó de brazos en forma de X para protegerse del lindo vestido rojo.

“¡Pídele eso a Tuuli, vamos! No quiero».

“Pero Tuuli es aún más grande que tú. Delia es más pequeña. Tienes que ser tú». A Lutz no le gustó, pero sostuve la ropa de Delia contra su espalda para revisarla. Pero como dije, Tuuli y yo no éramos del tamaño de Deli. Tenía que ser él, no había forma de evitarlo.

“Muy bien, Lutz. Comienza buscando colores que se vean bien en Myne. Mira ese verde y ese verde. Ambos son verdes, pero no del mismo tipo de verde. ¿Cuál se vería mejor en Myne?” Al igual que había estado poniendo ropa contra él, Lutz comenzó a poner ropa contra mí. Tanto él como Tuuli nos miraron entre la ropa y yo con expresiones serias, luego señalaron con firmeza el mismo atuendo.

«¡Éste!»

«Verdad. Ese se ve mejor con la piel de Myne. ¿Pero qué hay de estos dos?»

La conferencia de Benno sobre colores primarios, colores secundarios, colores complementarios, colores análogos, saturación, etc. comenzó mientras presionaba la ropa contra mí para que sirviera de ejemplo.

Me pareció fascinante que la suma de conocimiento, acumulada a través de años de experiencia, posiblemente podría compilarse en un libro bastante similar al libro de coordinación de colores que había leído en el pasado. Contemplé el tema en profundidad como atuendo tras atuendo contra mí.

«Una vez que haya descubierto qué colores se verán bien en el cliente, comenzará a trabajar en el diseño. La ropa más que cualquier otra cosa es un signo del estado y la posición de uno. Nada más que problemas vendrá por usar la ropa de una clase social más alta que la tuya. El ejemplo más cercano para ustedes dos será el traje de bautizo de Myne».

«Aww…»

«Esta vez, estamos recogiendo ropa que Myne usará al entrar y salir del templo. Sus mangas serán importantes, entonces, como alguien que tiene sirvientes”. Eso me recordó que Benno llevaba un atuendo con mangas excepcionalmente grandes cuando fue al templo. Las mangas eran tan largas que parecía que iban a interferir sin importar lo que él estuviera haciendo.

«Las mangas grandes indican que los sirvientes trabajarán para usted y que, por lo tanto, no tiene que preocuparse de que su ropa se ensucie o interfiera. Aquellos que realmente hagan el trabajo necesitarán mangas más apretadas».

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«Espera, ¿pero las mangas del señor Mark no eran demasiado largas también? No tenían la mitad del largo que el tuyo, pero aún así».

“Ese era un atuendo especial para reunirse con un noble. Sabíamos que sus sirvientes manejarían el trabajo y Mark no estaría haciendo mucho. Por otro lado, si un noble viniera a visitarme, Mark necesitaría satisfacer sus necesidades en un atuendo con mangas cortas. No es que un noble viniera directamente a nuestra tienda”, explicó Benno. Asentí distraídamente, no muy interesada, pero Tuuli y Lutz escuchaban con ojos brillantes.

«Bien. Con todo eso en mente, elige un atuendo para Myne. ¿Quién va a elegir el mejor atuendo, Lutz o Tuuli?” Los dos se miraron el uno al otro, luego caminaron por la tienda, escogiendo ropa. Benno se rió con diversión ante ellos.

“Bien pensado, trayendo a Tuuli, Myne. Las personas crecen mucho más rápido si tienen a alguien con quien competir».

«Tuuli está aprendiendo mucho de esto también, así que está bien para mí». Mientras los veía a los dos tratando fervientemente de elegir la mejor ropa y dominar lo que les habían enseñado, traté de preguntarle a Benno más sobre la sociedad noble, pero él solo sacudió la cabeza.

“Tú y yo estamos en diferentes situaciones. Todo lo que sé es desde la perspectiva de un comerciante que hace negocios con comerciantes. Necesitas saber cómo actúan los nobles entre los nobles, y Fran es la mejor persona para preguntar sobre eso. Has preguntas precisas sobre cualquier cosa que se le ocurra, tal como lo hace Lutz. Si no dice nada, nadie sabrá que no está entendiendo algo», dijo Benno. Yo asentí a cambio, justo cuando los dos rivales venían corriendo de esta manera con la ropa en la mano.

«¿Cuál te gusta más, Myne?»

«¿Bwuh…? Ummm…» Asustada por la forma en que Lutz y Tuuli venían a mí, miré nerviosamente la ropa que habían elegido. Tuuli había elegido un lindo vestido rosa, mientras que Lutz había elegido un lindo vestido azul.

“El atuendo de Tuuli es más lindo y sería mejor para caminar afuera, pero el atuendo de Lutz es más formal y sería mejor para entrar al templo. Ésta es una decisión difícil.»

«Intenta usarlos», sugirió Benno, así que llevé los trajes a un vestuario con el dueño de la tienda. Primero me cambió a la ropa de Tuuli, luego me paró frente a una pieza de metal bien pulida con forma de espejo.

«… Wooow». Era la primera vez que veía mi propia cara. Mi piel era menos «blanca y delicada, parecida a los huevos más puros» y más asquerosa con una palidez enfermiza. Mi cabello lacio y azul oscuro resaltaba contra mi piel y hacía que su palidez sobresaliera más, aunque probablemente en el buen sentido. Mis ojos amarillos redondos eran visibles en el espejo como trozos de oro, y se abrieron de par en par por la sorpresa. Mi nariz y labios bien formados se parecían a los de mamá, pero aparte de la forma de mis ojos, no me parecía mucho a Tuuli.

Si uno me miraba con la generosidad dada a los niños, entonces, desde la perspectiva de la Tierra, yo era sin ninguna queja una niña linda. Pero no estaba segura de cómo los de este mundo verían solo mi apariencia.

Lutz me llamó linda, así que me imaginé que nuestros mundos compartían un sentido general de estética corporal. Sintiéndome un poco en conflicto, salí de la habitación para mostrar el atuendo.

«¡Wow! ¡Myne, eres tan linda! Se te ve perfecto».

Tuuli me prodigó elogios mientras estaba allí con el atuendo que escogió, pero Lutz no parecía tan convencido. Aunque a juzgar por la expresión frustrada en su rostro, el atuendo me convenía lo suficiente como para que le fuera difícil criticarlo mucho. Benno agitó su mano con una sonrisa no impresionada, como para decirme que me cambiara a la otra.

«¡Lo sabía, este te queda mucho mejor!»

Cuando regresé con el atuendo de Lutz, inmediatamente me felicitó con una sonrisa brillante en su rostro. Tuuli frunció los labios y dijo que su atuendo se veía mejor en mí, lo que comenzó una discusión entre ellos. Miré a Benno en busca de ayuda cuando la discusión se intensificó, solo para verlo mirando alrededor de la tienda mientras se acariciaba la barbilla.

“Te viste en el espejo, ¿verdad? ¿Qué ropa crees que te queda mejor aquí?”

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«Bueno… Teniendo en cuenta para qué los necesitaré, ¿quizás estos tres?» Primero escogí una blusa blanca. Tenía mangas largas, además de adornos de encaje a lo largo de las mangas y el cuello. Parecía lo mejor aquí para usar con los nobles. Luego escogí una falda azul que sería perfecta para cuando fuera al templo. Tenía bordado de flores, pero eso estaría oculto una vez que me pusiera la túnica de doncella del santuario. Finalmente, elegí un chaleco rojo estilo corpiño con encaje y bordados de flores.

“Con estos tres formando un atuendo, puedo reemplazar o cambiar partes individuales para cambiar cómo se siente el atuendo en su conjunto. Creo que puedo usarlos junto con mi uniforme de aprendiz para maximizar mis opciones. ¿Cómo suena eso?” Miré hacia arriba y vi a Benno sonriendo mientras miraba a Lutz y Tuuli. Ambos estaban atónitos, mirando la ropa que había elegido con expresiones de sorpresa.

«Lutz. Tuuli Aquí hay más que solo vestidos. Hay que abandonar la idea de que las niñas solo usan vestidos”.

En general, las niñas pobres solo usaban vestidos. Se necesitaría un paño extra para hacer una blusa y una falda en lugar de un solo vestido. Aunque a veces las chicas usaban capas para luchar contra el frío, nunca usaban pantalones para la moda ni nada por el estilo. No tenían blusas con encaje por las mangas ni cuellos removibles. Simplemente no existían.

«Estudien mucho antes de venir aquí otra vez». Los dos se habían desplomado tristemente, pero después de escuchar eso, levantaron la cabeza y, por alguna razón, me miraron, sus ojos ardían con la determinación y el entusiasmo de una recién nacida rivalidad.

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