Honzuki no Gekokujō (NL)

Volumen 2: La Hija De Un Soldado II

Capítulo 14: Los Adornos para el Cabello de Freida

 

 

Salimos de la casa de Freida y comenzamos nuestro camino a casa. Ella nos había despedido con una sonrisa, así que ¿por qué sentía como si hubiera escapado por poco con vida? ¿Por qué me sentía más cansada ahora, después de comer dulces y charlar, que después de ir al bosque?

«Oh, ¿finalmente terminaste con tu discusión de negocios?»


«¿Señor Mark?»

Cuando pasamos por la tienda de Benno, Mark nos llamó. Estábamos planeando ir directamente a casa ya que Benno nos había dicho que nos reportáramos al día siguiente, pero Mark sonrió y nos indicó que entráramos en la tienda.

«El Maestro Benno los estára recibiendo, digamos, inquieto. ¿Sería posible para usted dar su informe ahora?”

«… Sí». Me dolía el estómago solo de pensar en lo loco que se iba a pasar por mí al dar un descuento en el segundo sin consultarlo, así que quería terminar con esto lo antes posible.

«Señor, ¿puedo permitir que Myne y Lutz entren?»

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«Sí, déjales entrar». Pasando la puerta abierta estaba Benno, que estaba golpeando su escritorio para apresurarnos a entrar.


«¿Cómo te fue, Myne? ¿Cómo estuvo la nieta de ese viejo?”

«Ummm, ella era una señorita muy linda».

«No lo endulces. ¿Qué pensaste de ella?”

Intenté que mi informe pareciera agradable, pero Benno negó con la cabeza y me dijo que dijera la verdad. Dejé escapar un suspiro y obedecí.

«Honestamente, ella actúa de forma tan diferente a su apariencia que aún me cuesta creerlo. Pero ella no es solo una chica que ama el dinero. Ella ha estado observando al maestro del gremio desde su nacimiento y ahora los conceptos de ganar dinero, expandir el negocio de su abuelo y capitalizar las oportunidades de lucro son algo totalmente secundario para ella. Ella tiene un talento increíble como comerciante».

«También crees que ella es increíble, ¿eh…?» Benno se rascó la cabeza y suspiró.

«Ummm, ¿cómo debería poner esto? Ella era muy linda, pero muy rara. ¿Cierto, Lutz?” Dije, resumiendo mis pensamientos. Lutz levantó una ceja y me miró, con los ojos en silencio diciendo «esa es la olla que llama negro al hervidor».

Benno sonrió significativamente y miró a Lutz.

«¿Qué hay de ti, Lutz? ¿Qué te pareció?»

«Ella trató de invitar a Myne a su tienda al igual que lo hizo el maestro del gremio. Creo que tenemos que tener cuidado con ella. Además, eh… pensé que se parecía mucho a Myne».

«¡¿Bwuuuh?! ¡¿Cómo?!” ¡Eso es simplemente… increíble! Exigí una explicación por su opinión sorprendentemente mala.

Lutz se encogió de hombros.

«Ella habló sobre el dinero de la manera en que hablas de los libros. Misma expresión y todo. Ambas están obsesionados con lo que más les gusta, y como dijiste de ella, te ves linda por fuera pero eres rara por dentro».

… Oh, eh. Supongo que me veo un poco linda ahora. No había espejos en mi casa, así que solo me vi a mí mismo en el borroso reflejo de nuestro cubo de agua. Y las únicas personas que alguna vez me felicitaron por adelantado eran extraños y mi padre dominante, así que pensé que todos estaban siendo educados.

Las personas no solo me llamaron ratona de biblioteca en el pasado, sino que me llamaron un bicho raro. Era muy consciente de eso. Realmente no me molestaba, pero no me veía linda en mi vida pasada. Parecía una friki total que vivía en una biblioteca, por lo que nunca nadie dijo que no actuaba como me veía.

Los hermanos tienden a parecerse bastante similares, así que me imaginé a Tuuli en una búsqueda de libros, actuando de forma extremadamente extraña en público, y me hice una idea de mí misma.

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«… Lo siento. Me siento un poco arrepentida ahora».

«Deberías estar sintiendo mucho de eso».

«Ngh…»

Benno me vio desmoronarse con desesperación y, sonriendo, golpeó su escritorio con un dedo.

«¿Asi que? ¿Cómo fue la charla de negocios?»

«Umm, Freida va a llevar el pelo atado en dos lugares, así que haremos dos horquillas en su lugar».

«Bueno. Dos veces el beneficio «, dijo Benno como si fuera la cosa más natural del mundo, haciendo que mi corazón palpite de miedo. Tenía que decirle lo que había hecho, pero aún así, estaba aterrorizada de lo que vendría después.

«Um, bueno, yo…»

«¿Qué?»

Benno me miró con sus ojos rojo oscuro. Di un pequeño suspiro, tratando de expresar mi explicación correctamente. Después de verme tambalearme un rato, Benno cambió su mirada de mí a Lutz. Levantó la barbilla y Lutz respondió por mí.

«Freida nos dio un hilo para hacer las horquillas, así que Myne dijo que las haría por el precio de una».

«¡¿Lutz?!»

«¡¿Ella que?!»

Lutz continuó, ignorando tanto a Benno como a mis reacciones.

«Pero Freida insistió en que ella siguiera el acuerdo y pagara por ambos. Parecía que estarían peleando por eso para siempre, así que intervine y dije que venderíamos la segunda mitad del precio, que acordaron».

Benno levantó una ceja ante la explicación de Lutz y me miró.

«Myne. ¿Eres estúpida? ¿No me escuchaste? ¿Olvidaste todo lo que dije?”

«N-No. Lo recordé, por eso no le di un descuento al primero. Pero después de que acordamos que el segundo era a mitad de precio, Freida también me dijo: ‘Cuando tengas la oportunidad de ganar dinero, tómalo y gana tanto como puedas’».

«¿Realmente estás dejando que un cliente te enseñe cómo vender cosas?», Dijo Benno con un suspiro de exasperación antes de poner una mano en su frente y sacudir la cabeza. Quiero decir, pensé que era un poco embarazoso que Freida encontrara la necesidad de explicarme cómo funcionaban las empresas, pero aun así. Estafar a la gente no me sentó bien conmigo.

«Sé lo que estás diciendo, pero por favor, dame un respiro aquí. Estamos cobrando tanto por encima de su valor de mercado adecuado, que honestamente me duele el estómago».

«No sobrevivirás como comerciante si tomar dinero te hace sentir culpable. Que Dolor… Bueno, tú eres la única que pierde dinero aquí. Tú le cobraste por el segundo y eso es lo que importa. De lo contrario, se habrían extendido los rumores de que nuestra tienda ofrece una horquilla gratuita con cada compra, y tratar con esos clientes habría sido un verdadero dolor. Elige tus batallas y ten más cuidado con lo que sucederá si pierdes».

No había imaginado ni por un segundo que rumores como ese se difundirían e impactarían a nuestros clientes. Básicamente, me acababa de decir que todavía era demasiado ignorante para hacer negocios aquí, lo que me hizo caer tristemente.

«Aww. No lo pensé mucho más adelante. Lo siento «, me disculpé.

«Pero continuando, este es el hilo que Freida nos dio. Me gustaría un hilo blanco que vaya bien con él. En cuanto a su longitud, ummm…»Saqué la cinta métrica de mi bolso de mano y la estiré entre dos yemas de los dedos.

«Me gustaría una hilo que diera unos… cien de largo».

«Bien. Ve a comprar algo con Mark mañana. Mientras se encuentra en ello, compra suficientes hilos para cubrir su trabajo de invierno «, dijo Benno, quien luego nos dijo que podíamos irnos.

Lutz y yo salimos de su tienda juntos y nos fuimos a casa. Ahora sabía exactamente cómo se sentía un trabajador cansado en su camino a casa con su esposa y sus hijos. Quería ir a casa y dejar que me sanara.

«Estoy en casa.»

«Bienvenido de nuevo, Myne. ¿Cómo fue la chica con la que te encontraste hoy? ¿Ahora son amigos?” Tuuli, que estaba cocinando, me sonrió mientras removía la olla. Al ver a Tuuli – una chica linda y amable que cuidaba a los demás mientras era tanto un chef maestro (en proceso) como una belleza de costura (planeada) con un buen trabajo de costurera – emociones indescriptibles brotaban en mi pecho.

«¡Tuuuulii!»

Cuando la abracé con fuerza, Tuuli frunció un poco las cejas y me miró a la cara.

«¿Qué pasa, Myne? ¿Ocurrió algo malo?”

«Eres un ángel, Tuuli. El sanador de mi corazón. Eres la hermana mayor más grande del mundo, pero estoy enferma e inútil. No me di cuenta hasta que Lutz me lo dijo hoy, pero soy una hermana pequeña y rara que actúa de manera muy diferente a como se ve. Lo siento, Tuuli”.

«Haaah… ¿Te acabas de dar cuenta?» Tuuli suspiró y, después de acariciar mi cabeza un par de veces, señaló hacia el dormitorio.

«Estoy cocinando en este momento, Myne. Ven a ayudar una vez que dejes tus cosas”.

«Está bien». Dejé mi bolso y comencé a ayudar a Tuuli. A pesar de que todavía me llamaban súper pequeña todo el tiempo, me había vuelto un poco más alta y ahora podía revolver la olla si me paraba en algo. Que es exactamente lo que hice mientras informaba lo que sucedió hoy a Tuuli.

«Así que, el nombre de la niña es Freida y es realmente linda, pero todo lo que le interesa es el dinero. Ella dijo que lo que más le gusta hacer es contar monedas de oro».

«¡¿Monedas de oro?! Nunca he visto uno de esas antes y ¿tiene suficientes para contar? Ella debe ser súper rica.»

Tuuli estaba más sorprendida por la cantidad de dinero que tenía Freida que por lo raro que era que le encantara contar dinero. Donde vivíamos, era normal que la gente trabajara toda su vida y nunca ganara una moneda de oro, así que podía entender qué tan grande sería el trato para ella.

“Su casa también está muy loca. Había un montón de adornos y era realmente bonito. Oh, también, Freida me dijo el nombre de lo que estoy enferma. Aparentemente se llama el devorador».

«… Nunca había oído hablar de eso antes». Tuuli inclinó la cabeza. No podía culparla por no saberlo; Parecía que casi nadie sabía cómo se llamaba.

«Es una enfermedad realmente rara. Ni siquiera Otto o Benno lo reconocieron, y Freida solo lo sabía porque ella también estaba enferma. Pero también dijo que le costó una fortuna curar. Si una chica rica como ella dice que cuesta una fortuna, bueno…»

«Nunca podremos costearlo».

Tuuli llegó a la misma conclusión que yo en un instante. No fue ni siquiera una cuestión de debate. Éramos tan pobres que ni siquiera podíamos darnos el lujo de llamar a un médico cuando me caí de fiebre por días seguidos.

«…UH, Huh. Pero ella me dijo lo que tenía que hacer para evitar que empeorara».

«¿De Verdad?»

«Ella dijo que estaré bien siempre y cuando tenga una meta en la que esté trabajando con todo lo que tengo».

«Wow. Has estado más enérgica desde que encontraste algo que te gusta, ahora que lo pienso. Siempre solías llorar y quejarte de que solo yo tenía que hacer cosas…»

Hablando de eso, muchos de los recuerdos de Myne eran de su llanto y de molestar a Tuuli mientras estaba enferma. El hecho de que Tuuli me comparara casualmente con la forma en que solía ser probablemente significaba que ella notaba cuánto había cambiado. Me puse a pensar, y Tuuli rápidamente me dio una palmada en la cabeza.

«No te sientas mal. Me alegro de que hayas estado más saludable. Entonces, ¿cómo fueron las cosas de la horquilla?”

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«Aprendí los colores favoritos de Freida y ella me dio el mismo hilo que usaba para bordar su ropa. Haré las horquillas con eso. Ah, y como ella está usando su cabello con dos coletas, necesita dos horquillas”.

«Estupendo.»

Continuamos preparando la comida y, finalmente, mamá llegó a casa, luego papá, quien había estado trabajando tanto en el turno nocturno últimamente que no lo había visto en unos días.

Mientras disfrutaba de mi primera comida con toda la familia que había tenido durante un tiempo, hablé sobre la casa del maestro del gremio. Todos escucharon con gran atención, ya que normalmente no tenían la oportunidad de ir a los hogares de personas ricas.

A mamá le interesaban más los tapices y cojines decorativos, mientras que papá sentía curiosidad por los tipos de alcohol que habían alineado en la sala. Tuuli parecía interesada en el tipo de ropa que Freida llevaba y esas cosas, por lo que todas sus preguntas eran sobre las cosas que Freida poseía.

Después de que la comida, mucho más animada de lo que se esperaba, terminara, atrapé a mamá y le pedí que devolviera las agujas que usaba para el hilo.

«¿Para qué?»

«Voy a hacer nuevas horquillas. ¿Recuerdas lo que dije ayer? Freida los quiere. Fui hoy a escuchar los detalles. Quiere que use el hilo que bordó su ropa, así que lo traje a la casa conmigo».

«Por favor, muéstrame ese hilo, querida».

Mi madre, una tintorería de oficios y costurera experta, ni siquiera intentó ocultar lo interesada que estaba en el hilo. Ella recuperó las agujas y me presionó para sacar el hilo.

En el momento en que saqué el hilo de mi bolso y lo coloqué sobre la mesa de la cocina, mamá lo levantó y comenzó a mirarlo por todas partes. Tuuli también lo estaba mirando, interesada como aprendiz de costurera en qué tipo de hilo que usan en las ropas de las chicas ricas.

«Se necesita mucho, mucho tiempo para teñir algo tan profundo como el rojo».

«Lo sabía, este hilo es realmente de alta calidad».

Preparé las agujas mientras las dos jugueteaban con el hilo, cautivadas.

«Ella incluso va a comprar los adornos para el pelo a un alto precio ya que nadie más los vende. Voy a trabajar muy duro para hacer los buenos para ella».

«¿Serán como los míos?»

En el caso de Tuuli, había dado prioridad a ser económico con hilo y, por lo tanto, hice un conjunto de colores diferentes del hilo que nos quedaba, pero para Freida tenía un montón de hilo rojo. Además, la estábamos sobrecargando tanto que realmente quería hacer horquillas más refinadas que las de Tuuli. Era lo menos que podía hacer.

«Voy a hacer las flores más grandes, ya que tengo mucho hilo esta vez».

Mi plan era hacer un anillo de mini rosas alrededor de un ramo de lirios blancos. Sí, me decepcionó mi mala imaginación que pensaba en rosas cuando se trataba de jóvenes ricas. Pero aun así, las rosas lograron parecer llamativas y dignas.

Cosí el hilo de una manera que era como un cordón decorativo con ángulos rectos, para que se pareciera más a un pétalo de flores cuando se enrolla alrededor de sí mismo al final. Una vez que fue lo suficientemente largo, lo giré, cosí solo la parte inferior y luego extendí los «pétalos» lo suficiente como para que pareciera una rosa.

«¡Wow, qué lindo!» A Tuuli le gustó lo suficiente como para que empecé a trabajar en otro. Papá, que estaba bebiendo mientras nos vigilaba, llamó a mamá, que observaba con entusiasmo mis manos.

«Oye, Effa. Si estás interesado en todo esto, ¿quieres que haga otro juego de agujas?»

«¡Papá, yo también quiero un par! ¿Puedes hacer dos sets?”

El abrazo entusiasmado de mamá y la linda petición de Tuuli pusieron a papá de buen humor. Empezó a tallar la madera de inmediato. Se las arregló para terminar las agujas muy rápido, ya que tenía experiencia en hacerlas ahora.

Tuuli tomó el primer par y comenzó a coser conmigo. Su destreza aparentemente había subido de nivel gracias a su trabajo como costurera. Después de solo un poco de enseñanza, ella estaba sacando las mini rosas rápidamente. Para ser honesta, ella iba mucho más rápido que yo.

Cuando la pareja de mamá terminó, los tomó y comenzó a coser de inmediato a una velocidad monstruosa con una sonrisa en su rostro. Ella me había estado observando trabajar tan cerca que ya sabía cómo hacerlos.

«Myne, ¿quieres que haga los palos para esas horquillas?», Dijo papá con entusiasmo, sin nada más que hacer desde que había terminado las agujas de coser.

Odiaba rechazarlo, pero ese era el trabajo de Lutz. Sin él haciendo los palos para los adornos para el pelo, no tendría ninguna excusa para llevarlo a Freida conmigo. Sin mencionar que Lutz no era el tipo de persona que aceptaría dinero por no trabajar. Si no hacía los palos, terminaría sin pagar.

“Aprecio el pensamiento, pero no gracias. Ese es el trabajo de Lutz».

«Lutz esto, Lutz eso. Has estado bastante fría conmigo últimamente, Myne».

Ahí iba papá haciendo pucheros otra vez. Amaba tanto a su familia que sentía extraños celos hacia Otto, Lutz, etc. Se puso un poco molesto a veces.

Dejé escapar un suspiro y sacudí la cabeza.

“Si realmente quieres hacer algo, ¿por qué no hacer algo para mí en lugar de otros niños? Quiero una barra de pelo con un agujero en la punta para mi ceremonia de bautismo».

«Lo entiendo, Myne. No quieres que haga palos para otros niños, ¿eh? ¿Te sientes celosa?”

…Mmm no. No tengo ni idea de por qué pensarías eso. 

Papá debió haber tenido algunas extrañas ilusiones en su cabeza, mientras sonreía alegremente y comenzó a hacer que mi cabello se pegara. Como volvió a estar contento, volví a coser yo misma. Tuuli y mamá me habían tomado la delantera mientras hablaba con papá.

«Eso es suficiente flores rojas. Los que estamos haciendo ahora pueden ser los últimos».

Necesitábamos mucha de la misma flor, pero las cosas se fueron pasando mucho más rápido cuando los tres trabajamos juntos.

Mamá en particular fue muy rápida. Como era de esperar, la más lenta de nosotros era yo, el que cobraba por hacer esto.

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«¿Awww, ya hemos terminado?»

Tuuli frunció los labios con tristeza, después de haber disfrutado bastante la costura. Me encogí de hombros mientras hacía una rosa. Mi plan inicial había sido tener tres mini rosas para cada horquilla, pero ahora teníamos cuatro para cada una. Las horquillas no eran lo suficientemente grandes para más.

«No quieres desperdiciar el hilo que nos dieron, ¿verdad?»

«Oh, eso es cierto. No queremos perder un hilo bonito como este.» A pesar de su decepción, Tuuli asintió y comenzó a empacar sus agujas.

«A continuación voy a hacer un montón de pequeñas flores blancas de hilo que Benno me está comprando. Creo que será un buen hilo al igual que este hilo rojo, ya que deben ir juntos. Tendré el hilo mañana, así que espero que todos podamos trabajar juntos de nuevo».

«¡No puedo esperar!»

Tuuli me sonrió y felizmente abrazó la caja de costura contra su pecho. Hmm… Si Tuuli está en esto, tal vez debería hacer horquillas conmigo durante el invierno en lugar de canastas.

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Al día siguiente, Mark, Lutz y yo fuimos a comprar hilos juntos. Era la misma tienda que visitamos con el artesano de antes al hacer la pantalla de suketa.

El hecho de que la última vez que compramos la cuerda de alta calidad haya dejado una gran impresión en el propietario de la tienda, se levantó tan pronto como nos vio.

«Oh, si no son los clientes los que compraron hilos de rosca. ¿Necesitas más?»

«Sí, pediremos más en una fecha posterior. Hoy lo estamos visitando en busca de otro tipo de hilo», dijo Mark, recordándome que Benno estaba haciendo que el artesano hiciera la pantalla más grande en la primavera.


Mi cabeza estaba tan llena de adornos para el cabello de Freida y mi trabajo de invierno que me olvidé de prepararme para hacer papel en la primavera. … Realmente necesito un bloc de notas. No es una pizarra de piedra donde las palabras se borran, una libreta real. 

«¿Qué necesita usted hoy?»

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«Um, hilo blanco que es como este hilo rojo». Saqué el hilo de mi bolso de mano y el dueño de la tienda lo miró con dureza, luego asentí.

«Cosas bastante caras. Querrás que un hilo como este coincida». Sacó dos tipos de hilos y los colocó delante de mí. Los comparé varias veces con el hilo rojo de Freida y decidí por el que destacaba el rojo de una manera más atractiva. Luego se lo entregué al dueño de la tienda.

“Quisiera cien cortes de este hilo, y cien cortes de ese hilo verde. Además, me gustaría un montón de hilos en muchos colores diferentes, el tipo de hilo más barato que tenga. Doscientas cortes de cada color, por favor.”

Necesitaba proporcionar dos pedidos de suministros diferentes, uno para el hilo de Freida y otro para mi trabajo de invierno. Con este fin, siempre llevaba mi pedido de suministros en mi bolso de mano – tarjetas de madera para escribir, cinta métrica, tinta y un bolígrafo hecho de madera tallada. Después de indicar mis pedidos, comencé a rascarlos en las tarjetas allí mismas.

El hilo barato parecía menos vibrante, pero si estuviéramos cobrando dos cobres grandes por ellos, no podríamos ser exigentes con nuestra cadena. La gente en este mundo generalmente no usaba horquillas durante su vida diaria, lo que significaba que serían escondidos para ocasiones especiales. Nadie compraría las horquillas si no tuvieran un precio adecuado; tenían que ser lo suficientemente baratos para justificar la compra de un solo evento. El maestro del gremio, que pagó seis platas pequeñas por dos horquillas, era simplemente anormal y no podía ser usado como una línea de base, incluso si era para su nieta.

«Necesitaré algo de tiempo para preparar la cadena de trabajo manual. ¿Quieres que lo lleve todo a la tienda una vez que termine? »

«Sí. Por favor, hazlo.»

Metí solo el costoso hilo que estaba usando para el adorno para el cabello de Freida en mi bolso y salí de la tienda. La tienda de hilos estaba cerca de mi casa, así que nos separamos de Mark y nos fuimos a casa sin él. En el camino le informé a Lutz que terminé de usar el hilo rojo anoche, lo que hizo que sus ojos se abultaran.

«¿Qué? ¿Ya estás terminando las flores? ¿No dijiste que te tomarías tu tiempo porque el bautismo está a un mes?»

«Creo que terminaré mañana o pasado mañana. Mamá y Tuuli comenzaron a ayudar y son mucho más rápidos que yo. Terminaron en ningún momento. Hubiera tardado mucho más si solo fuera yo”.

Mi plan inicial consistía en ir al bosque y al almacén con la frecuencia suficiente para que solo tuviera tiempo para hacer las horquillas desde la cena hasta la hora de acostarme, lo que me habría llevado de siete a diez días para terminar. No había esperado en mis sueños más salvajes que se me acabaran las cosas en un solo día.

«Bien. Terminaré las piezas de la horquilla pronto».

«Mhm, gracias. Mi papá quería unirse a nosotros y hacerlos, pero…»

«¿De verdad…?» Lutz suspiró ante la idea de que su trabajo había sido tomado.

«… Al principio, pensé que sería muy malo para mi familia hacer todo el trabajo por nosotros, pero después de pensarlo, me di cuenta de que realmente no sería nada malo. Después de todo, los comerciantes se dedican a vender cosas que otras personas hacen. Benno está obteniendo una ganancia de la tarifa de manejo que obtiene al vender nuestras cosas a pesar de que no ayuda a hacerlas, ¿verdad?»

«Huh. Buen punto.”

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Lutz me miró con una expresión de comprensión que se lavaba en su rostro. No tenía que hacer el trabajo para que le pagaran. Los comerciantes se ganaban la vida haciendo dinero moviendo productos de un lugar a otro. Seguíamos pensando en el nivel de los artesanos, no de los comerciantes.

«Esta vez le dijimos a Benno y al maestro del gremio que lo haríamos juntos, y no quiero cambiar nuestra historia, pero creo que debemos estudiar más a fondo cómo funcionan los comerciantes».

«Sí.»

Cuando llegué a casa con el hilo, Tuuli y mamá hicieron mi trabajo por mí, como se esperaba. En el tiempo que me tomó hacer una sola flor blanca, Tuuli hizo dos y mamá hizo cuatro. Terminaron en ningún momento. Intenté hacer algunas hojas con el hilo verde, pero terminaron haciendo todas ellas antes de que pudiera. No importa la situación, siempre terminé siendo inútil.

… En conclusión: Justo como pensaba, convertirse en una belleza de costura estaba fuera de lugar para mí. Hice la llamada correcta al trabajar para convertirme en un aprendiz de comerciante.

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