Shin no nakama janai to Yuusha

Volumen 1

Capitulo 2: La Princesa Que No Se Unió Al Grupo De La Heroína

Parte 4

Pero desde nuestra perspectiva, el mando de una fuerza real, particularmente la guardia real más fuerte del ejército de Loggervia, incluso si fuera solo una pequeña parte de ella, sería un gran problema. Más de unas pocas veces en el pasado, nos habíamos quedado deseando y preguntándonos qué podría haber sido si tuviéramos la fuerza de tal fuerza a nuestro mando.

Tanto Rit como mi propio grupo tenían nuestras propias razones para intentar resolver las circunstancias que afligían a esta aldea.

“En ese caso, supongo que no hay nada que hacer”, dije.

No importa lo que dijera, Rit no iba a retroceder aquí. Todo lo que podíamos hacer era dejar que nos conociera mejor en el curso de la resolución de esto y durante la pelea con el ejército del señor demonio que se avecinaba.

“¿Tienes alguna conjetura sobre en qué parte del norte se esconden?” Pregunté mientras extendía un mapa. Rit suspiró y luego se sentó a mi lado y miró la tabla grande. Le entregué la bolsa de las galletas que estaba comiendo y una bolsa de agua.

“¿Qué?”

“Tú también estás con raciones limitadas, ¿verdad?”

La razón por la que estaba comiendo conservas que había traído conmigo, a pesar de estar en un pueblo, era porque estaba en guardia contra el envenenamiento. Habiendo tomado rehenes, no se sabía qué harían los aldeanos. Estábamos alojados en la  casa del jefe de la aldea, pero habíamos encontrado cicuta venenosa deshidratada en la cocina, aunque él nos había asegurado que era solo para exterminar ratas.

Incluso si decidimos pasar por alto el hecho de que estaban tratando de envenenarnos, e incluso si lo estaban haciendo por orden, eso no cambiaba que hubieran intentado el acto. Y Rit era Rizlet, la princesa real de Loggervia. Independientemente de la coacción, el mero intento sería motivo de sentencia de muerte.

Así que tanto el grupo de Rit como el nuestro habían rechazado la comida que nos ofrecieron desde el primer día, eligiendo arreglárselas con nuestras propias raciones. Por lo que pude ver, su grupo solo estaba comiendo carne salada y verduras en escabeche. Definitivamente era el tipo de cosas de las que te cansarías después de unos días.

“Si sabe mal, me voy a enojar”, dijo mientras tomaba una galleta dura y la mordía.

“Mm…”

“¿Cómo estuvo?” No me perdí que rompió a sonreír por una fracción de segundo.

“E-Estuvo bien.”

Al verla luchar por mantener las apariencias, no pude evitar sonreír. Rit estaba indignada, pero eso no le impidió extender la mano para agarrar a otro.

“¿Dónde venden estos? No son Loggervian”.

“Sí, yo los hice”.

“¿Eh? ¿Tú hiciste? ¿Las galletas?” Rit miró de un lado a otro entre mi cara y la comida, en estado de shock.

“¿Por qué?”

“Se vuelve aburrido comer raciones de sal todos los días. Un poco de cocina es un requisito fundamental para un largo viaje”.

Mordiendo la segunda galleta, Rit contempló lo que había dicho por un momento.

“Sí, tienes razón en eso”. Ella asintió con la cabeza.

“¿Ves? Puedo ser honesta”, insistió Rit, señalando lo último.

“¿En serio?” Riéndome del recuerdo, no pude evitar expresar mi firme incredulidad de que Rit hubiera sido realmente honesto allí.

La niña terminó uniéndose a la risa, tal vez por recordar cómo había sido en ese entonces.

“¿Recuerdas lo que dijiste después de que finalmente encontramos al demonio manos de tijeras escondido en la base en el norte y luchamos juntos?”

“…No…”

“Creo que lo fue, y cito: ‘No está mal… pero no te hagas una idea equivocada. ¡He cambiado muy poco mi opinión sobre ti! ¡Solo un poco, así que no te hagas ilusiones!’”

Rit hundió la cara entre las manos y se tumbó sobre la mesa.

“Uggggh, solo estaba tratando de hacer mi mejor esfuerzo de muchas maneras diferentes en ese entonces, ¿de acuerdo?” Aparentemente, sacar a la luz ese recuerdo del distanciamiento en el que se recostó para ocultar su vergüenza fue mortificante porque incluso sus orejas se pusieron rojas.

El punto en el que realmente se volvió honesta fue durante la batalla decisiva con el comandante de las fuerzas del señor de los demonios en Loggervia. El enfrentamiento con el demonio Asura, Shisandan. Sin embargo, el resultado de esa batalla no fue exactamente feliz…

***

Se suponía que Rit y los aventureros de Loggervia atacarían la retaguardia del campamento enemigo.

El campamento era el del contingente que se acercaba del ejército del señor demonio. La fuerza estaba bajo el mando de Shisandan, un demonio de la misma tribu que Taraxon, el Señor Demonio. Shisandan era un demonio Asura de seis brazos.

La invasión de Shisandan consistió no solo en orcos, sino también en demonios de infantería pesada y caballeros wyvern. Tal fuerza era lo suficientemente poderosa que incluso los soldados de élite de Loggervia no podían esperar desafiarlos. Ya se habían tomado varias de las fortalezas, aldeas y asentamientos del ducado. El país iba camino de la ruina. Si no pudieran ganar la  próxima pelea,  no habría futuro para Loggervia.

El jefe de la guardia real, Gaius, el hombre que había enseñado a Rit a manejar la retaguardia, había tomado sus fuerzas para actuar como distracción. Mientras tanto, Rit, que había estado escapándose del castillo y haciéndose un nombre como aventurera, regresó al castillo que estaba a punto de caer. Con ella trabajamos para defenderlo.

Usando la fama que había ganado como Rit la heroína, logró reunir a las tropas hacia ella y pudieron sostener la puerta occidental que casi se había caído. A pesar de tales  logros, la  mayoría de  los caballeros habían rechazado el plan propuesto por la chica rubia de lanzar un ataque furtivo, considerándolo demasiado peligroso.

Solo una persona, Gaius, apoyó su plan y juró desplegar sus propias tropas para desviar la atención de sus movimientos.

Desafortunadamente, la verdad es que el verdadero Gaius ya había sido asesinado. Shisandan había usado magia para asumir su apariencia. La guardia real eran fuerzas de élite, pero como su comandante era el enemigo disfrazado, las tropas del señor demonio los tomaron desprevenidos y los masacraron apresuradamente.

Rit tenía la intención de lanzar un ataque furtivo donde el enemigo menos esperaba uno, por detrás. En cambio, su fuerza se encontró con un enemigo completamente preparado y en una posición en la que seguramente serían eliminados.

“¿Dónde está Gaius…? ¡¿Qué le hiciste al Maestro?!”

“Me lo comí, ya que necesitaba sus recuerdos, ‘mi alumna favorito'”, había dicho Shisandan con la voz del amado maestro de la princesa.

Rit rugió y saltó sobre el demonio, pero los innumerables demonios la abrumaron rápidamente y la empujaron al suelo.

“Apostaría a que si tomara tu forma, la heroína aclamado por toda la gente de esta tierra, sería aún más fácil capturar este país. ¿Qué piensas?” Shisandan, todavía con el rostro de Gaius, habló con una alegría siniestra.

Rit se encontró llorando. Una persona a la que realmente amaba estaba muerta, y ahora muchas más sufrirían por su fracaso.

En ese momento, se escuchó un silbido de algo cortando el aire. Al instante siguiente, mi espada sobresalía del hombro de Shisandan.

“¡Espera, Gideon! ¡Es demasiado pronto!”

Podía escuchar a Ares quejarse. Habrían pasado otros veinte segundos antes de que mis camaradas terminaran de llegar a sus posiciones rodeando al enemigo. Como era el más rápido del grupo, me adelanté para comprobar la situación por mí mismo. Incapaz de sentarme y mirar, salté a la refriega antes de que todos los demás tuvieran tiempo de prepararse.

Durante los siguientes momentos, las cosas fueron un caos. Sabía que las monstruosas fuerzas del señor de los demonios intentarían proteger a Shisandan. Sin la ayuda del grupo, matar al demonio iba a ser difícil, pero…

“¡No hay forma de que abandone a Rit! ¡Ella es uno de nosotros!” Grité mientras cortaba a los demonios que la retenían.

Mi espada había sido la espada de confianza de un caballero fantasma que protegía una tumba subterránea. Era un arma preciada que se decía que provocaba un rayo cuando se balanceaba. La espada desenvainada de Thunderwaker brilló bajo el sol de la tarde, y los demonios retrocedieron aterrorizados, como niños acobardados ante un relámpago plateado que cruje el cielo.

Seguimos a Rit después de descubrir la verdad sobre Gaius en el último segundo.

“Gideon…”

“¡No llores, Rit! Si eres uno de nosotros, entonces enfréntate al enemigo con tus espadas desenvainadas, ¡no con lágrimas!”

“¡C-Cierto!” Rit se secó las lágrimas con una manga embarrada y reemplazó su mirada espantosa con la determinación de un guerrero. La niña recogió su espada que había caído al suelo.

“Ruti y los demás no tardarán más de un minuto en abrirse paso desde afuera. Hasta entonces, tenemos que detener al demonio Asura y evitar que escape. ¿Puedes hacer eso?”

“¡Yo puedo!”

“¡Entonces hagámoslo!” Cargamos contra Shisandan, cuyo falso rostro humano tenía una expresión confusa.

“¡¿La Heroína?!” Shisandan gritó al ver a Ruti correr hacia nosotros.

Mi hermana aún no nos había alcanzado, pero la mera presencia de la destreza marcial de la Heroína fue suficiente para desafilar la espada de Shisandan. Rit y yo luchamos espalda con espalda, gritando gritos de batalla a los innumerables demonios que nos atacaban desde todas direcciones mientras blandíamos nuestras espadas.

Cuando te encuentras con un amigo cercano por primera vez en mucho tiempo, el día parece volar. La lluvia había cesado mucho antes de que nos diéramos cuenta, y el sol se estaba acercando bastante al horizonte. Pronto llegaría el momento de que el cielo se volviera rojo y la ciudad se envolviera en la oscuridad del atardecer. Pero aun así, nos sentamos a la mesa, recordando los viejos tiempos.

Finalmente hubo un momento en el que ambos guardamos silencio. En ese momento, los ojos de Rit vacilaron brevemente antes de que finalmente hablara.

“Hey, Red”.

“¿Qué, Rit?”

La joven me estaba mirando directamente a los ojos.

“¿Puedo trabajar aquí también?”

“¿Eh?” No pude detener la exclamación estupefacta. Definitivamente no esperaba eso.

“El Boticario de Red & Rit suena muy bien, ¿no te parece?”

“E-Espera un minuto. Eres uno de los dos únicos aventureros de rango B en Zoltan”.

“Me jubilaré”.

“¡Espera, espera, espera!”

¿Escuchó lo que estaba diciendo? ¿Quiere trabajar en una tienda sin clientes desde el mediodía hasta la noche?

“Como puedes ver, acabo de abrir una tienda, y no es exactamente próspera. Realmente no tengo el flujo de caja para contratar personal”.

“Pero cuando salgas a recoger más hierbas medicinales, ¿quién cuidará la tienda por ti? ¿No es un desperdicio cerrar la tienda mientras estás fuera?”

“Ugh. Bueno, eso es cierto, pero quiero decir, ¿qué clientes?”

“Eso es porque acabas de empezar. Obtendrá más con el tiempo. ¿Por qué no me enseñas los alrededores?” No dispuesta a esperar una respuesta, Rit se puso de pie y caminó alrededor.

“¿Hmm?”

“Un mostrador y una vitrina a cada lado. Uh huh. Muy claro.”

“Porque solo tengo los tipos estándar de hierbas y medicinas en exhibición. Los que tienen cantidades más limitadas o que necesitan un manejo o almacenamiento especial se guardan en el almacén, o están creciendo en el patio trasero”.

“Aquí hay mucho espacio para trabajar. Con tanto espacio, podría tener un asistente que te ayude”.

“No tengo planes de contratar a nadie por un tiempo, pero probablemente trabajemos bastante bien juntos”.

“Y luego una cocina, un baño, un dormitorio y la sala de estar en la que estábamos charlando antes. Tienes una pequeña tienda bonita”.

“Lo sé, ¿verdad?”

Rit comenzó a asentir mientras murmuraba algo para sí misma. Escuchando más de cerca, sonó como una especie de cálculo.

“Teniendo en cuenta la situación económica de Zoltan y tu habilidad, probablemente esté viendo alrededor de ciento ochenta sueldos al mes después de los gastos, el mantenimiento y los impuestos”.

“¡¿Qué?! … ¿Eso es todo?”

Podría ganar alrededor de cien recolectando hierbas durante dos días y vendiéndolas al Gremio de Aventureros, pero ¿hacer lo mismo para mi propia tienda solo me reportaría 180 al mes?

“¿De verdad? Yo mismo hago la recolección, así que no tengo que pagar por las materias primas”.

“Las hierbas medicinales no son el tipo de cosas que tienen tasas de consumo particularmente altas. A diferencia del gremio, que vende al por mayor a boticarios, usted vende a clientes y médicos. Te llevará tiempo vender lo que recolectas. Probablemente podría arreglárselas con una sola excursión al mes”.

“Gngh”.

¿Eso fue todo lo que pude vender? Pero las hierbas medicinales se pueden utilizar de muchas formas.

“En primer lugar, es posible que lo hayas olvidado, ya que te convertiste en caballero tan pronto y luego fuiste parte del grupo de la Heroína, pero los gastos de una persona promedio son solo alrededor de treinta sueldos al mes”.

“Sí, lo sabía, pero…”

“Un boticario normal que ganara ciento cincuenta sueldos al mes estaría prosperando. Ese ciento ochenta se basa en la suposición de que las personas cercanas te conocerán y que podrás hacer crecer tu negocio”.

Las hierbas que me compró el Gremio de Aventureros se vendieron a boticarios y comerciantes ambulantes a un precio más alto. Pensé que podría ganar más dinero vendiéndolos directamente, pero pensándolo bien, la razón por la que el Gremio de Aventureros siempre podía vender en cualquier momento era por lo buenas que eran sus conexiones con el mercado. Incluso si una tienda independiente tuviera una reserva de medicamentos, llevaría tiempo deshacerse de ellos. Había estado pensando que podría hacer que las cosas funcionen si podía vender lo que había reunido y hecho en mi propia tienda, aunque eso podría haber sido un poco ingenuo.

“Pero sí, treinta payril es suficiente para vivir”.

Como dijo Rit, me había convertido en un caballero a una edad temprana y tuve una serie bastante sólida de ascensos hasta el segundo al mando de los Caballeros de Bahamut. En ese entonces, mis gastos de manutención rondaban los tres mil sueldos al mes. Era un estilo de vida al estilo de un aristócrata. El lugar donde vivía era una residencia en los terrenos del palacio, e incluso tenía una sirvienta para ayudarme con las necesidades diarias.