Slime Taoshite 300-nen, Shiranai Uchi ni Level Max ni Nattemashita (NL)

Volumen 5

Capítulo 9: Volvimos a Abrir el Café

Parte 1

Cada una de nosotras fue a su posición.

Yo era la jefa, a cargo de supervisar toda la operación y dar las órdenes. Cuando las cosas se ponen así de grandes, tiene que haber en el lugar un director general, de lo contrario las cosas se complicarían.

Primero fui a la entrada de nuestra tienda y encontré a Fatla sentando a los clientes.

“¿Cómo puedo ayudarles? Muy bien, ¿cuántos son en su grupo? Tres, ya veo. Entonces por favor usen una mesa al interior del edificio. Les pedimos que terminen dentro de 90 minutos una vez que las cosas comiencen a ponerse más concurridas; espero que eso esté bien con ustedes. Muy bien entonces, por favor síganme.”

Ella lo estaba tratando como si fuera un comedor…

Pero supongo que ella no tenía más opción que lidiar con ellos de una manera impersonal. De lo contrario los números no serían manejables.

Los clientes fueron guiados adentro, donde Rosalie los estaba esperando con vasos de agua flotando en sus manos.

“Aquí está su agua. Una vez que hayan decidido que ordenar, por favor hagan sonar esta pequeña campanilla y enviaré a un miembro disponible de nuestro staff. Los fantasmas tenemos una gran audición, así que el sonido será lo suficientemente fuerte para captarlo.”

Incluso había un botón para llamar instalado. Se estaba volviendo más y más como un comedor…

A pesar de que era bien temprano en la mañana, las mesas al interior rápidamente se llenaron y los asientos en el exterior también ya se estaban llenando.

No parecía como si toda esta cantidad de clientes fuera suficiente para aliviar la línea. Aunque, los clientes no se estaban quejando, dado que esperaban que se abriera mucho más tarde.

Y en cuanto a la cocina, era un absoluto caos.

Laika y Flatorte estaban concentradas exclusivamente en cocinar. Vania estaba preparando ingredientes un poco apartada de ellas.

Las porciones que ellas usualmente hacían en casa eran tan pequeñas comparadas a lo que estaban preparando ahora.

“¡Por favor pásame las zanahorias!”

“¡Hazlo tú misma! ¡Yo también estoy ocupada con el repollo aquí! ¡Oh, dame el tocino!”

“¿Cuándo ni siquiera me vas a pasar las zanahorias? ¡Por favor sé responsable una vez siquiera!”

“¡Oooooh! ¡Es por esto que odio a los dragones rojos!”

Las dos se estaban gruñendo entre sí. Quizás fue una mala idea juntarlas…

“¡Sin importar que, lo que yo haga será mucho mejor que cualquier cosa que tú cocines, Laika!”

“¡Y tú verás que mi comida será mucho más deliciosa que la tuya!”

…Pero por otro lado, ellas habían comenzado a competir entre sí, ¿así que quizás estaba bien?

“¡Hmph! ¡Le meteré un bicho a tu comida si es que debo hacerlo!”

Me acerqué suavemente detrás de Flatorte.

“Escuché eso, Flatorte. ¿Te gustaría decir eso de nuevo?”

“U-Uh…fue una broma, Ama…Por supuesto no haría nada para dañar a nuestros clientes…Ja-ja-ja.”

Tenía razón al mantener un ojo sobre ellas.

“¡Y si ustedes dos realmente comienzan a pelear, van a estar comiendo platos llenos de vegetales muy saludables durante tres días seguidos como castigo!”

“¡No puede hacer eso! ¡Una comida sin carne es como un rio sin agua!” Laika gritó.

La carne realmente era importante para ellas…

“Entonces ustedes dos necesitan concentrarse. Los pedidos comenzaran a llegar pronto, así que prepárense.”

“Cocinar comida también es como entrenar. ¡No voy a perder!” Laika estaba rebosante de motivación. Aunque, ella no necesitaba pensar en ello como entrenamiento.

Mis hijas también estaban dando su mejor esfuerzo en su propio estilo. A decir verdad, ellas realmente estaban a toda marcha por nosotras.

“¡Repetiré su orden! ¡Dos sopas de cebolla y dos rollos de centeno con queso, a la vez que cinco slimes comestibles! ¡Gracias! ¡Por favor espere un momento!” Falfa no cometía errores, aparentemente aspirando a trabajar en una tienda de verdad algún día.

“¡Viene una orden! ¡Dos cebollas, dos rollos, cinco slimes!”

Pude escuchar a Laika gritando “¡Con gusto!” desde la cocina.

¡Por favor no digas eso! ¡Suenas como un anciano barman que es excesivamente enérgico!

 Shalsha no era muy buena lidiando con los clientes, así que ella estaba concentrada limpiando las mesas. Pero aun así pude darme cuenta que ella deseaba hacer más.

“Eficiencia, concéntrate en la eficiencia…si pongo los platos aquí, puedo ahorrar 3 segundos en cada uno…”

Ella estaba sonando como alguien perteneciente al restaurante de una empresa…

Así que yo regresé a las mesas.

“Oh, ¿recomendaciones? ¡Yo recomiendo todo lo que tenemos para ofrecer! ¡Hemos conseguido un pollo muy delicioso, si se me permite decir, y         el sabor simplemente se esparce a través de toda la boca!”

Era difícil imaginarse a quien pertenecía esta voz dado como usualmente ella actuaba, pero se trataba de Beelzebub. Ella era una fantástica empleada que incluso cambiaba su manera de hablar cuando estaba lidiando con los clientes.

Pero también había otra chica que lo estaba llevando diez pasos muy lejos.

“¡Aquí vamos! ¡Díganlo conmigo! ¡Abracadabra, vuélvete deliciooooso~!” Pecora estaba haciendo lo que uno comúnmente vería en los café maids.

Ella incluso formó un corazón con sus manos, enviando rayos de luz deliciosa (en verdad no, solo lo inventé) hacia la comida.

“¿Oh? ¿Dónde vivo? Es bastante lejos de aquí~ Mi familia tiene algo de dinero, así que soy libre de vivir como quiera, en verdad~”

¡Tú no eres solamente rica! ¡Eres una monarca! 

Pecora lo estaba disfrutando totalmente. Supongo que el tomar un rol que normalmente no tomarías era divertido en su propio estilo.

Y entonces, humo lentamente se levantó desde un lugar afuera.

Si no lo hubiera sabido ya, habría pensado que era un incendio o incluso un incendio forestal, pero no era ninguno.

Era la cocina al exterior de Vania.

“¡Aquí vamos! ¡Comenzaré a cocinar el bistec! ¡Sí, sí!”

Una llama surgió desde una gran plancha. Ella probablemente la había traído. Por lo menos, no pertenecía a nuestra casa. Ni a ninguna otra casa común y corriente.

Vania rápidamente cortó la carne en pedazos.

“¡Aquí vamos! ¡El bistec está listo!”

Los clientes observando desde sus asientos aplaudieron.

¡Esto es como un restaurant de teppanyaki!

 Toda esta cosa era nada más que puro caos. Por lo mínimo, ya no era un café.

Pero, bueno, los clientes estaban claramente felices con lo que teníamos, así que supongo que estaba bien…

Hasta que algo más captó mi atención.

Ya casi era hora para que la primera ronda de invitados terminara sus comidas y se dirigieran a casa.

Todos los platos regresarían al unísono, ¿por lo que acaso el sector de lavado podría manejarlo…?

No era como si tuviéramos a alguien dedicada a lavar los platos. Yo tendría que hacerlo cuando llegáramos a eso.

Me apresuré en ir a la zona de lavado.

Y ahí encontré a alguien limpiando los platos con gran velocidad.

No solo eso, pero los platos limpios eran secados en un santiamén, ubicados a continuación ordenadamente en una hilera. Todos inmediatamente usables.

Teníamos a una maestra manejándolos todos por su cuenta: La ex-slime, Fighsly.

“Oh, Azusa-san, ¡maravilloso trabajo hasta ahora! ¡Sin importar cuantos cubiertos lleguen, me encargaré de todos con mi técnica para lavar platos estilo Fighsly!”

No creo que puedas simplemente añadir “estilo Fighsly” a todo.

“Fiu. Estoy bastante confiada, dado que he estado lavando platos durante tanto tiempo.”

Sus manos se movían mientras ella hablaba, sin desperdiciar movimiento alguno y los platos que ella limpió se secaban destellando como nuevos.