Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 13

Capítulo 6: Al Estrato Medio del Laberinto

Parte 5

Como habíamos derrotado a todos los monstruos de la zona, pasamos a nuestra tradicional búsqueda del tesoro.

“Se está haciendo bastante tarde. Una vez que terminemos de buscar tesoros, colocaremos una pizarra de sellos en la siguiente área y regresaremos a las aguas termales del laberinto.”

Instalé un edificio tipo posada de estilo japonés junto a las aguas termales para que pudiéramos pasar la noche allí.

Estábamos usando solo una pequeña porción de la posada por nuestra cuenta, así que una vez que termináramos de subir de nivel en el Estrato Medio, tal vez podría cederla a la Compañía Echigoya como una instalación de recreación.

Mientras buscábamos cofres del tesoro, les pregunté a todas que querían para cenar.

“Pochi, creo que veo algo en ese acantilado.”

“Roger, sir.”

Arisa estaba apuntando a un acantilado de unos veinte metros de altura.

Seguramente se lo había pedido a Pochi en lugar de a Tama por la dificultad del saliente y las rocas musgosas que lo hacían difícil de escalar.

Pochi usó la misma técnica que un doble salto para apoyarse en el aire y escabullirse por el acantilado.

Esta técnica se llamaba “Caminata Aérea”, una habilidad que había adquirido recientemente y que era una versión menor de mi habilidad “Carrera Aérea”. En su caso, podría hacer tres o cuatro puntos de apoyo seguidos.

“¡Hay un cofre del tesoro, sir!”

Pochi sonrió y saludó desde lo alto del acantilado.

Subí para unirme a ella con “Carrera Aérea” y traje al resto del grupo usando Mano Mágica.

El cofre del tesoro estaba escondido entre las rocas en la parte superior del acantilado, en un lugar que sería fácil pasar por alto.

“Buen trabajo, Pochi.”

“Je-je, sir.”

Le di unas palmaditas en la cabeza a Pochi y su cola se movió de un lado a otro. Después de unos minutos de esto, abrimos el cofre del tesoro para ver qué había dentro.

“¿Katanaaa?”

“Una espada samurái, sir.”

Había una katana de estilo japonés de una mano dentro del cofre.

“¿Una espada japonesa normal?”

“Es técnicamente una espada mágica de aleación de mithril. La inscripción dice… ¿‘Van Helsing’? Entonces, ¿tal vez no sea del laberinto?”

Le conté a Arisa los resultados de mi investigación. Según mi AR, se había creado hace bastante tiempo.

La hoja en sí no tenía ningún circuito mágico especial, solo una runa para hacerla más afilada, pero la vaina tenía un circuito mágico fijo para protegerse de los efectos del envejecimiento.

“¿Mmm? ¡Así que una katana real no hace ¡SHING! cuando lo sostienes?”

“¿No es solo un efecto de sonido anticuado?”

“Aw, hombre. Sin embargo, me gustaría que hiciese SHING.” No podría discutir con eso.

Si hiciera una espada al estilo japonés, tal vez podría agregar un circuito para producir efectos de sonido.

“Arisa, por favor déjeme tomar prestada la katana, sir.”

“Por supuesto.”

Arisa volvió a poner la espada en su vaina y se la entregó a Pochi.

“Muerte de un solo golpe, sir.”

Pochi desenvainó la espada dramáticamente, luego la enfundó de nuevo. Probablemente había aprendido esto en el entrenamiento del Sr. Kajiro, o los elfos.

“¿También Tamaaaaaa?”

Pochi le pasó la espada a Tama, quien se la ató a la espalda y saltó como un ninja.

“¿Te gustan los ninjas, Tama?”

“¡Aye!”

Ahora que lo pienso, la aprendiz e interés amoroso de Kajiro, la señorita Ayaume, le había enseñado a Tama cómo usar armas arrojadizas estilo ninja como shuriken y kunai.

“Tama, los ninjas pueden comenzar como pequeños ladrones, ¡pero se vuelven realmente geniales cuando suben de nivel!”

“¿Cómo asíííííí?”

“Bueno, podrías aprender jutsu de sustitución, o jutsu de clon de sombras, o ser como…”

Arisa empezó a hacer una referencia a algún viejo juego de rol occidental, pero la interrumpí con un golpe en la nuca.

Lo último que Tama necesitaba saber era sobre ninjas desnudos. ¿Y si intentaba imitar eso?

“Además, los ninjas reales no son realmente adecuados para el combate cuerpo a cuerpo, ¿verdad?”

Estaban mejor preparados para esconderse detrás de las líneas enemigas, reunir información, asesinatos, etc.

“Supongo que no. Pero los ninjas ficticios son mucho más divertidos.”

“¿Cómo asíííííí?”

“Yo también quiero saber, sir.”

Bueno, supongo que no tiene sentido tratar de ser históricamente exacto en un mundo paralelo de fantasía.

Arisa continuó explicándoles sobre los ninjas a las dos, luego de repente se detuvo y se dio la vuelta.

“Oh, hola, Amo. ¿Hiciste esa espada de látigo o la hoz y la cadena de las que hablamos antes?”

¿Las armas poco prácticas que habíamos discutido cuando Arisa me estaba ayudando a inventar mi disfraz de Kuro?

Hablar de armas ninja debió recordárselo.

“Si, más o menos.”

La hoz y la cadena estaban hechas de acero normal, pero usé las técnicas de creación que empleé con los kunai y shuriken de Tama para hacer la espada látigo para que pudiera realizar todo tipo de movimientos complicados.

“¡Vaya, no puedo creer que los hayas hecho!”

Cuando saqué las armas de Almacenamiento, Arisa exclamó sorprendida.

Mientras estaba en eso, mostré el modo de ejercicio que había agregado a la espada látigo solo por diversión.

“Ooooh, es genial ver armas inventadas ante tus ojos.”

“¡Quiero probarrrrr!”

“Yo también, sir.”

Advirtiéndoles que tuvieran cuidado, les entregué la hoz, la cadena y la espada látigo.

Efectivamente, Pochi se enredó en la hoz y la cadena en poco tiempo, pero Tama era bastante buena con la espada látigo.

“Creo que soy mejor samurái que ninja, sir.”

“¡Entonces  la  brillante  Arisa  también  te  enseñará  todo  sobre  los  verdaderos  samuráis japoneses!”

Pochi estaba haciendo un pequeño puchero, así que Arisa empezó a contar historias sobre samuráis ficticios.

“No te dejes llevar.” Le advertí a la ligera, luego fui a ayudar a las otras chicas a explorar.

“Hay un juego de té en este cofre del tesoro.”

“Tiene un aspecto muy inusual, ¿no?”

“Me gusta lo redondo y lindo que es.”

Había veinte juegos de tazas y platos de porcelana blanca, junto con cucharas a juego. El juego incluso incluía una bonita y elegante tetera. Sin embargo, ninguna pieza del juego tenía funciones como herramientas mágicas.

El estuche que contenía el conjunto tenía una inscripción en el idioma antiguo, por lo que debe haber sido traído al laberinto hace mucho tiempo, no producido aquí.

“Amo, he localizado una taza larva en este material de color marrón claro, le informo.”

“Eso es una jarra de leche.”

Las cosas de color marrón claro alrededor del cofre del tesoro parecían escoria de hojas de té.

Encontramos otros dos cofres, pero ninguno contenía nada particularmente interesante, solo monedas de oro y joyas.