Tatoeba Last Dungeon Mae no Mura no Shōnen ga Joban no Machi de Kurasu Yō na Monogatari (NL)

Volumen 2

Capítulo 2: Una Invitación Descarada: Suponga Que Alguien Intentó Golpearlo Con Una Línea Recogida De Una Revista Cursi

Parte 2

Mena y Phyllo se movieron para seguirlo, pero cuando lo hicieron, Phyllo se detuvo frente a Lloyd.

“… Todavía estoy esperando tu respuesta”, dijo.

“Er, ¿respuesta?”

Estaba tan cerca que él podía sentir su aliento caliente. Se había puesto rojo brillante.

“¿Quién eres tú…?” Selen no era el tipo de persona que podía dejar eso en pie. Sus ojos se clavaron en Phyllo.

Phyllo no se dio cuenta. Su mirada en blanco se centró exclusivamente en Lloyd.

“… Esperaré el tiempo que sea necesario”.

“¡Phyllo, vamos! ¡Puedes coquetear con Lloyd más tarde!”

Phyllo estrechó la mano de Lloyd  brevemente antes de permitirse  a regañadientes ser arrastrada.

“¿Bien? Lloyd, ¿qué pasó entre tú y esa mujer?”

“Uh, ni siquiera sé…”

Las cosas se estaban poniendo feas, sin fundamento, pero aun así. Mientras tanto, Riho estaba quieto, temblando.

“Uh, ¿Riho? ¿Estás bien?”

Pero Riho ni siquiera se dio cuenta de la pregunta de Choline.

“… Mierda”, dijo, mordiéndose el labio. Sus ojos se clavaron en su brazo izquierdo.

La luz que entraba por la ventana atrapó el brazo de mithril y le dio un deslumbrante brillo.

En la oficina de la facultad de la academia militar unos días después, Choline estaba mirando enojada una lista de nombres, rodeada de maestros enfocados en su propio trabajo. Si hubiera tenido un bolígrafo rojo escondido detrás de la oreja, se habría visto como un chico típico en una pista de carreras.

Naturalmente, Choline no estaba enojada con una carrera de caballos o una carrera de bicicleta, sino que luchaba con la selección para el Torneo de Hechicería Estudiantil.

El desafío de Rol solo había derramado llamas sobre los fuegos que Choline ya había acariciado. Estaba desesperada por formar un grupo que tuviera una buena presentación.

“¡¿Por qué son todos deportistas?! ¡La magia importa! Estás de acuerdo, ¿verdad, Chrome?”

Chrome asintió mecánicamente, hace mucho tiempo que había hecho las paces con esto.

“Sí, sí.”

“Suspiro… Tenía esperanzas para Riho, pero ella está totalmente en contra y Selen no irá a menos que Lloyd lo haga, pero si pongo a Lloyd ahí fuera… Hngg”.

“Sí, sí.”

Ya habían repetido esta misma conversación varias veces, por lo que su sonrisa y su asentimiento se habían convertido en puro reflejo. Chrome estaba en la zona.

Entonces la puerta de la oficina se abrió de golpe. Selen irrumpió, acechando sin palabras hacia Choline, la furia irradiando de ella tan palpablemente que los maestros se disculparon automáticamente a su paso.

“Oye, ¿qué pasa, Selen Hemein?” Chrome preguntó, sorprendido.

Sin prestarle atención, Selen se puso al nivel de Choline y espetó: “Exijo una explicación”.

“¿Er? ¿Por qué? ¿Para qué?” Choline parpadeó, totalmente confundida. La mirada de Selen se volvió aún más feroz.

¡Primero, esa mujer! ¡El salaz con la relación claramente inapropiada con Lloyd! ¡¿Cómo?! ¿Quién le dio permiso para estrechar la mano de Lloyd?

¿Cuál es su conexión? ¿A qué respuesta se refirió ella? ¡Comience con eso! ¡Dime todo lo que sabes si quieres vivir!”

“¡¿Irrumpiste en la sala de maestros para eso?!”

Las prioridades de Selen siempre fueron primero Lloyd y luego oxígeno, agua y comida.

Choline presionó sus dedos contra sus sienes.

“Oh, claro… olvidé que estás así, Selen”, dijo, dándose por vencida.

“Esa fue Phyllo Quinone, la más joven del famoso dúo mercenario de las hermanas Quinone. Es una maestra de las artes marciales pérdidas desde la antigüedad, que es el estilo fundado por Pyrid the Fierce God. Has escuchado las leyendas, ¿entiendo? ¿Sobre cómo Pyrid destrozó una montaña con su puño y talló un mar con una sola patada?”

“Las celebridades de la lista D siempre se jactan de tonterías. ¿Y cuál es su relación con Lloyd…?”

“Bueno, obviamente, ese es su negocio, y no sé nada acerca de eso”.

“Claro. Le pregunté a Lloyd, pero él solo dice que no la conoce realmente, así que no llego a ninguna parte… Claramente, ella es una especie de vil súcubo que intenta doblegar a Lloyd a su voluntad con los placeres de la carne”.

La luz había vuelto a los ojos de Selen, y ella felizmente cambió de tema.

“De todos modos, ¿qué hay de Riho? ¿Sabes algo de eso? Tú y esa dama Rol eran compañeras de clase, ¿verdad? Riho no es de las que hablan de estas cosas.”

“… Realmente desearía saber algo, pero no tengo idea”.

“Entonces, ¿la razón por la que Rol quiere a Riho es…?”

“Lo siento. No tengo idea alguna. Tendrás que sacarlo de alguna manera”. Rol y Riho claramente tenían historia. Y no es agradable.

“Ella casi nunca habla sobre el pasado”, dijo Chrome.

“O su brazo de mithril”.

“Suspiro… Necesito que vuelva a ser la vieja Riho pronto”.

¡Wow, ella realmente está preocupada por Riho! los dos maestros pensaron, sonriendo. Pero estaban olvidando una cosa importante: esta era Selen.

“¡No es justo que Lloyd esté preocupado por ella y por dejarme en el polvo!

¡Es tan amable que eventualmente se excitará lo suficiente como para decir que ella puede usar su cuerpo cuando quiera animarla! Él se ofrecerá a ella, ¡y sus cuerpos hablarán un idioma que…! ¿Por qué no puedo estar en sus zapatos? ¡Oh, ahora que lo pienso, ya ha habido señales! ¡Debemos nombrar un supervisor de amor de inmediato! Disculpe.”

Parecía que ella era la que se estaba poniendo nerviosa. Habiendo entregado ese torrente de palabras de una sola vez, la supervisora de amor salió corriendo al pasillo… Con suerte, no sería arrestada.

Bueno, el protagonista de esta serie es uno para preocuparse por el mal humor de los demás como si fuera su culpa, lo que significaba que Lloyd estaba pensando en otra cosa que no fuera Riho.

En el camino a casa desde la escuela, estaba tan perdido en sus pensamientos que se topó con un pilar, dejando una marca roja en la frente (y una grieta en el pilar). Pero finalmente llegó a la tienda en el Lado Este.

“¡Estoy en casa!”

Cuando abrió la decrépita puerta, encontró a Marie tan preocupada como él. Estaba vacilando de un lado a otro, claramente perdida en cuanto a cómo proceder.

Solo tenía una cosa en mente: se había avergonzado frente a Lloyd de una manera muy poco femenina. Había hecho un trabajo tan bueno convenciéndose de que él pensaba menos en ella que no había logrado ningún trabajo en todo el día.

“Oh… Bienvenido de nuevo, Lloyd”.

Lloyd, por supuesto, ya había olvidado todas esas indignidades. O al menos, había usado su frase mágica, “¡La gente de la ciudad seguro es diferente!” para darles un giro positivo.

Así que él solo le sonrió como siempre, asumiendo que ella debe tener hambre.

“¡Eh-heh-heh, para la cena de esta noche, pensé que podría volver a trabajar algunas sobras de la cafetería de la escuela! Sólo espera y veras.”

Esta sonrisa se ganó a Marie cada vez. Una vez más segura de que no la odiaba, ella le devolvió la sonrisa. ¡Tan fácil!

“¡Suena genial! Estoy deseando que llegue.”

¿Te importaría limpiar la mesa? ¿Y hacerla?”

Su relación era muy parecida a una madre y un niño pequeño. ¡Hey ustedes dos! ¡No olvide que ella es su arrendadora y usted es su invitado!

Mirando a Lloyd en la cocina, Marie comenzó a tararear para sí misma, como si su crisis de un momento antes nunca hubiera sucedido. Desaparecidas sus preocupaciones, su mente volvía a estar en el cielo azul.

Y otro pensamiento lo cruzó.

¡Bien, mi tonta maestra, la abuela loli Alka, no puede venir aquí con tanta frecuencia! ¿Que podría ser mejor? ¡Esta podría ser mi mejor oportunidad!

Disparo a qué, ¿exactamente? Aun así, con los otros líderes de la aldea furiosos con Alka por incumplimiento del deber, ella definitivamente no podía presentarse a menudo hasta que se terminara la cosecha. Tenía que ser la jefa menos autorizada del mundo…

El estado emocional de Marie había sido similar a tus nervios cuando los policías acechan, a pesar de que eres totalmente inocente. Alka podía mirarla desde la distancia, teletransportarse aquí y colocar todo tipo de maldiciones sobre Marie con el poder de las runas. Y come gratis. Sí, ella era más como un bandido que un policía, de verdad…

Pero ahora Marie fue liberada de eso, así que… ¡era seguro para ella y Lloyd tener un pequeño contacto físico! Tal vez ella podría escabullirse y tomar un bocado de la comida y ser regañada por ello.

“Oh, cierto, Marie”, dijo, sacándola de su ensueño.

“Podría usar tu ayuda con algo”.

“¡Gweh!” Ella dejó escapar un graznido extraño, y él se echó a reír.

“¡Nada tan sorprendente!” dijo, revolviendo la olla, la tapa en una mano. Él la miró por encima del hombro.

“Es algo en lo que podría usar otra perspectiva”.

“¡Oh, por supuesto! ¡Adelante! ¡Lo pondré sobre mí!” Marie golpeó su pecho dramáticamente, y Lloyd se relajó un poco.

“Bueno… un amigo mío tiene un problema y claramente está realmente deprimido por eso. Estoy tratando de descubrir cómo puedo animarla”.

La boca de Marie se cerró de golpe. Entonces un pensamiento cruzó por su mente.

Espera, ¿podría referirse a mí?

Ciertamente había estado deprimida, preocupada de que la odiara. ¿Tal vez esta era una forma indirecta de consolarla? Marie pensó que sería mejor comprobarlo.

“¿Hmm? ¿Una chica que conoces?”

“Oh, sí. Por eso no estoy seguro de qué hacer”.

“………………… ¡Foom!”

“Er… ¿qué?”

Este fue el sonido de sus delirios explotando. Para Marie, acababa de confirmar sus sospechas, y ahora estaba convencida de que estaba tratando de animarla. Las endorfinas prácticamente se escapaban de ella.

“¡Eres un buen chico!” ella chilló, inexplicablemente adquiriendo un acento occidental.

Ella tosió, tratando de cubrir el resbalón, se quitó la sonrisa de los labios y luego fingió que no lo había descubierto todo.

“Hmm, bueno, supongo que podrías ir a lo seguro e invitarla a una comida”.

“¿De verdad?”

“Sí, ya sabes, construir la conexión entre ustedes, conocerse mejor… una especie de cita, de verdad”.

“¡¿Una cita?!” Lloyd instantáneamente se puso rojo brillante, ¡lo cual fue adorable! Marie estaba gritando por dentro.

“Pero, ¿quién sería feliz si un debilucho nada especial la invitara a salir?”

“¿De qué estás hablando? ¡Por supuesto que estaría encantada! ¡Sé un poco agresivo! ¡Toma su mano y tira de ella! ¡Quiero decir, a todas las chicas les gusta eso!”

Era agresiva de una manera que solo puedes ser cuando hablas de ti.

“¿Ellas les gusta? Bueno está bien. ¡Me alegro de haberte preguntado!, ¡Gracias!”

Lloyd inclinó la cabeza,  y Marie también lo hizo, agradecida de que estuviera pensando en ella (en sus delirios).

“¡De ningún modo!”

“¡Entonces supongo que le pediré a Riho una cita mañana!”

“… ¿Quéeeee?”

Atrapada a medio arco, la cabeza de Marie sola se levantó, mirando a Lloyd. Esto fue desconcertante de ver.

Pero Lloyd ya había vuelto a la olla que estaba revolviendo. Olía a guiso. Uno cremoso.

“Uh, Lloyd… ¿puedo preguntar…?”

“¡Oh, estoy haciendo estofado!”

“Er, no, no se trata de eso…”

“¡Y un poco de té helado con él!”

“S-sí, pero… eh…”

Sacó el té helado de la nevera y lo vertió en un par de vasos.

“Me alegro de haber preguntado”, dijo, sonriendo para sí mismo.

“Riho ha estado tan triste últimamente… y no nos dirá por qué. Mientras tanto, Selen se mordió las uñas y pronunció maldiciones por lo bajo… ”

“……………”

Marie se desinfló. Claramente había llegado a conclusiones y luego cavó su propia tumba empujándolo a una cita.

“¿Estás bien, Marie? … Yikes… ”

Marie había comenzado a morderse las uñas, lamentando su propia insipidez, y claramente no estaba de humor para conversar.

“¿Morderse las uñas es una nueva tendencia?” Lloyd murmuró para sí mismo mientras comenzaba a servir el estofado.

“Lloyd… ¿qué pasó mientras estaba en el hospital?” Era al día siguiente, en clase.

En el momento en que Allan entró en la habitación, se dirigió directamente hacia Lloyd. En la clase anterior, había sido llevado al hospital en estado crítico, destruido más allá de lo que podía manejar la magia curativa. Los médicos dijeron que fue un milagro que hubiera sobrevivido.

Una gota de sudor rodó por su rostro grosero, envuelto en vendas, con los ojos centrados en…

“……………”

… Riho, luciendo extremadamente gruñón. Pero no cualquier viejo mal humor; De vez en cuando, su rostro se inclinaba, lamento escrito en él. Se necesitaría mucho coraje para hablar con alguien en este estado.

Al principio, los compañeros de clase habían asumido que solo estaba teniendo un mal día, pero después de varios días malos seguidos, todos la estaban evitando como la peste.

“Ninguno de nosotros sabe por qué, tampoco… Me encantaría ayudar, pero…” Lloyd estaba perdido.

Esto hizo que su mentoreado, nombrado por sí mismo, resoplara con fuerza y golpeara su pecho.

“Bueno, ¡para eso estoy aquí! ¡Considérame a tu servicio! ¡Veré si puedo resolver esto por ti!”

Pero otra chica intervino para detenerlo.

“¡Aguanta ahí mismo, bruto insensible!”

Selen apareció, de pie contra Lloyd.

“¡No soy ninguna de esas cosas!” Allan protestó.

“¡Qué pronto te olvidas! ¿Recuerdas cómo me llamaste la Princesa del Cinturón Maldito y me acusaste de acosar a Lloyd? Gracias a ti, eso me hizo interrogarme por la policía.”

“Eso tiene que ver todo Jack con delicadeza, señora. Estabas literalmente involucrado en un comportamiento criminal.”

El razonable regreso de Allan rodó de ella como el agua de la espalda de un pato. Con total confianza, Selen se volvió hacia Lloyd, hablando apasionadamente.

“¿Ves, Lloyd? ¡Déjame esto a mí! ¡Animaré a Riho! Y una vez que veas mi éxito… mwa-ha-ha… ”

“Uh, está bien… ¡No entiendo por qué te estás riendo, pero vale la pena intentarlo!”

Con esta promesa asegurada, Selen se dio la vuelta y se dirigió directamente a Riho, completamente segura de sí misma.

“… ¿Qué, Selen?”

“¡Je, je, je! ¡Riho, pareces deprimida!”

“… ¿Lo notaste? Entonces vete.”

Riho no ofreció pistas de ningún tipo, pero Selen no fue derrotado tan fácilmente. Sacó una fotografía de su bolsillo y la sostuvo frente a Riho.

“¡Esto requiere medidas de emergencia! Te concederé el privilegio de ver lo mejor de mi stock secreto de fotos de Lloyd. Me rompe el corazón compartir esto, por lo que es mejor que trabajen”.

Incluso desde la distancia, las imágenes tenían imágenes de algo del color de la piel. De hecho, parecían demasiado carnosos… Y sirvieron como prueba definitiva de su fisgoneo.

“……………………………………” Hmph.

Hubo un silencio muy largo, y luego Riho se dio la vuelta.

“Bien, se acabó el tiempo, Selen”. Allan la agarró por el cuello y la arrastró hacia Lloyd.

“¡Objeción! ¡Le echó un vistazo muy largo! ¡Riho! ¡Al menos deberías agradecerme! ¡Oye! ¡Déjala ir, Allan!”

El hombre con el gran hacha depositó a Selen junto a Lloyd, que solo parecía ansioso. Allan les dirigió a ambos una sonrisa confiada.

“¡Supongo que soy el próximo!”

“Ciertamente pareces seguro de ti mismo. Sin embargo, dudo que entiendas lo primero acerca de cómo piensan las mujeres”, dijo Selen, enderezando su cuello.