Tatoeba Last Dungeon Mae no Mura no Shōnen ga Joban no Machi de Kurasu Yō na Monogatari (NL)

Volumen 1

Capítulo 4: Un Momento De Absurdo: Supongamos Que Un Niño De Karate De Cinturón Blanco Tiene La Ventaja En Una Lucha Contra Un Cinturón Negro

Parte 3

Y Marie habló como si estas obras de ficción tuvieran algo que ver con ella.

“Prefiero no hablar de eso en absoluto… pero Kunlun realmente existe. Mi maestra es el jefe allí.”

“¿Lo dices en serio?”

“Desearía no haberlo hecho… Pero ella puede vaporizar a los señores demonios con una mano, teletransportarse a donde sea… He visto de primera mano sus absurdas cantidades de poder”.

“Whew…”, Chrome respondió de forma inusual.

Marie lo miró de reojo antes de agregar una verdad aún más impactante: “Lloyd es de Kunlun. Está relacionado con mi maestra de alguna manera”.

“Uf…”

“Pasé años aprendiendo a dominar la runa desencantada, y él la usa como si no fuera nada. Él piensa que los monstruos son solo animales salvajes…¿Has oído hablar de la langosta que apareció en la ciudad? Él fue quien lo mató sin que nadie lo notara. Para colmo, dijo: ‘¡Hay más insectos en la ciudad de los que esperaba!’ Es un buen niño, pero querido Dios”.

Chrome se había quedado sin formas de reaccionar.

“Eso es todo lo que puedo decirte. Solo que… no lo uses para el mal”.

“No me atrevería. Ha sido de gran ayuda con la cocina y la limpieza”.

“Y mantenlo en secreto, por favor. Mi maestro siempre decía: Mi gente nunca debe involucrarse en los asuntos del hombre, solo con los desastres naturales o los planes de los señores demonios”.

“Lo tendré en cuenta”.

“Lo que significa que no podemos meter a Lloyd en este desastre, o ella lo arrastrará de regreso a casa”. Y ese sería el final de su sueño.

“Lo tendré en cuenta”.

“Rompe esa promesa y te convertirás en una rana… ¿Alguna vez te has convertido en una? Oh, es horrible: si no has dominado la respiración cutánea, apenas puedes respirar. Además, tu piel se seca en minutos. Después de mi primera vez, me aseguro de echar un poco de agua sobre todas las ranas por las que paso… ah-ha-ha,” terminó con una risa hueca.

“Lo tendré en cuenta aún más”. No sabía qué más decir.

“De todos modos, podría usar tu ayuda, Chrome… Pero Lloyd comenzará a preocuparse, así que será mejor que regrese”.

Ante esto, la expresión de Chrome se suavizó, luciendo como un hermano que desea la felicidad de su hermana pequeña.

Marie se dio cuenta de esto y rápidamente agregó: “¡N-No es así! ¡No te hagas una idea equivocada! ¡De todos modos, mantén esto en secreto! Eso incluye a tus dos amigos.”

“No les diré… Incluso si lo hiciera, no sé si me creerían. Pero los conozco desde hace mucho tiempo. Se puede confiar en ellos.”

Chrome miró dentro de las ventanas cálidamente iluminadas de la cafetería. Podían escuchar voces elevadas que venían desde atrás; Podía distinguir vagamente su nombre en la mezcla.

“Está bien”, dijo Marie.

“Tus amigos te están llamando. Mejor me voy a casa”.

Chrome observó a Marie hasta que desapareció en la oscuridad y luego volvió a entrar, dirigiéndose al corazón de la conmoción… Merthophan estaba enyesado, y cuando vio a Chrome, agitó un vaso.

“¿Dónde estabas, Chrome?! ¡Un soldado debe ser rápido!”

“¡Sí! ¡¿Estabas en el baño?!” Preguntó Choline.

La cafetería ya estaba cerrada por la noche. Pero cada vez que pasaba algo, los dos venían a beber aquí y se sentían como en casa.

Merthophan ya estaba borracho, apoyado contra la mesa con las mejillas sonrojadas de una manera que nunca haría si estuviera sobrio. Nunca se avergonzaría delante de nadie más que de sus amigos más cercanos, y Chrome hacía tiempo que se había acostumbrado.

“…Lo siento. Aquí, ten un poco de carne ahumada.”

Gruñonamente dejó caer un plato de carne frente a ellos, y Merthophan se zambulló en él como un niño emocionado, llenándose la boca. Si alguno de sus subordinados lo hubiera parecido así, definitivamente se habrían encogido.

“¡Oh! ¡El sabor! ¡No es muy bueno! Chrome, hiciste esto, ¿verdad?”

“… Sí, sí, ya lo sabes”.

Chrome lo rechazó, pero ahora era el turno de Choline.

“¡Cielos, Chrome, tu tiempo parcial es el mejor! Su comida podría servirse fácilmente en un restaurante, ¡y no parecería fuera de lugar! ”

“… Este es un restaurante, así que no está fuera de lugar”.

“¡Correcto! Me sigo olvidando, dado lo desierto que siempre ha estado este lugar”.

“… Sí, sí, ya lo sé”.

Chrome sabía que continuarían hasta altas horas de la noche una vez que estuvieran así, y se dejaría tomar unos tragos con ellos. Pero realmente no podía emborracharse ya que estaba en el reloj. Esto continuó durante una buena hora antes de que Merthophan finalmente soltara lo que siempre había querido decir.

De todos modos, encontrar a Lloyd Belladonna trabajando aquí… ¿y qué fue eso? Hubo una repentina ráfaga de viento, y luego se fue en el momento siguiente.

“… Le pregunté, y él dijo que estaba demasiado asustado para pelear y se escapó cuando se recuperó”.

Esto era una mentira, por supuesto.

Choline lo miró con recelo, y el olor a alcohol se arrastraba tras sus palabras.

“¿Lo hizo? ¿O estás escondiendo algo? No es, como, el descendiente de algún héroe legendario que de repente dudó en mostrar su verdadero poder o lo que sea, ¿verdad? ”

Muy cerca de la verdad, allí…

Los instintos de Choline podrían ser asombrosos. Chrome se frotó la frente.

“… La Princesa del Cinturón dijo: ‘¡Sir Lloyd es maravilloso y odia el derramamiento de sangre innecesario!’”, Agregó Merthophan.

“Es una pena. ¡La oportunidad perfecta para ver lo que realmente podía hacer, desperdiciado!”

Chrome saltó sobre esto, esperando que Choline olvidara su sugerencia.

“¡P-Pero, Merthophan! ¡Ese chico Allan podría haber muerto muy bien!”

“… Uh… tienes un punto allí…”

“Aun así, sé que tienes tus razones para querer un mejor personal”, continuó Chrome.

Choline tomó esto como una declaración cargada. Ella lo miró a la cara, con la cara roja.

“¿Qué? ¿Algo que no sé? ”

Merthophan tomó un trago de licor de color ámbar y luego le respondió.

“Ves, hace mucho tiempo, hubo una hambruna. Las fuerzas de Jiou terminaron robando todas las reservas de mi ciudad natal. Si nuestro ejército hubiera sido un poco más grande, podríamos haber aumentado las patrullas en la frontera… No dejaré que eso vuelva a suceder”.

“Entonces, ¿por eso estás reclutando algo con un representante? Y por qué te gusta tanto Lloyd… Ah, y por qué nos haces investigar runas, aunque solo la princesa tiene la esperanza de usarlas”.

“Necesitamos todas las ventajas en una guerra contra Jiou. Haré lo que sea necesario para ganar… lo que sea necesario”. Volcó su vaso, dejando que el contenido se vertiera en su boca. Luego dejó escapar un suspiro borracho, y una expresión de tristeza cruzó su rostro.

Una bebida alcohólica se instaló sobre la mesa. En un esfuerzo por salir, Choline cambió de tema.

“¡Bien! ¡Hablando de la princesa, se rumorea que la han visto en el Distrito Central! ”

“¡Ka-hack!” Tosió Chrome, que acababa de hablar con la persona en cuestión. Se las arregló para balbucear, “¿E-En serio?”

Ignorando su estado nervioso, Choline siguió adelante.

“Así que la gente habla de hacer otro gran esfuerzo para encontrarla”.

“¿De verdad? ¿Dividiendo nuestras fuerzas cuando estamos en la cima de la preparación para el festival del día de la fundación?” Merthophan se quejó, tratando de levantar la barbilla con una mano.

“No es que no se den cuenta de eso. No podemos hacer que Jiou capture a la princesa y la tenga como rehén, ¿verdad? La gente dice que estos monstruos que aparecen en la ciudad son su forma de tratar de matarla”.

“… La facción contra la guerra solo está tratando de poner a la princesa de su lado para discutir contra el rey… Perder el tiempo de todos”, murmuró Merthophan.

Choline suspiró.

“Hah… Además, hay rumores de que la princesa es la que en secreto está derribando a estos monstruos”.

” Bueno, eso es claramente solo un rumor… ”

“¡Ka-haaaack!”

El ataque de tos de Chrome fue tan fuerte esta vez que Merthophan finalmente tuvo que reconocerlo.

“¿Te estás enfermando aquí? ¿Te estás volviendo frágil en tu punto?”

“T-Tal vez…”

Chrome no tosía por ninguna enfermedad, sino porque sabía que era Lloyd quien se había encargado de los monstruos. Sin darse cuenta nunca de que estaba luchando contra monstruos, para empezar, los había matado de la misma manera que aplastaba los insectos que se cruzan en su camino. Sin embargo, eso había llevado a toda la ciudad a hablar sobre el héroe que no había buscado recompensa.

Mientras tanto, Merthophan rellenó hoscamente su taza, la tragó y continuó aclarando sus sentimientos.

“El punto es que necesitamos enfocarnos en el festival del día de la fundación y prepararnos para la guerra con Jiou. La seguridad de la princesa es baja en la lista de prioridades… A menos, por supuesto, que la Princesa María esté dispuesta a usar su conocimiento de las runas para liderar las fuerzas contra Jiou”.

“… Podría tener un problema allí, Merthophan,” Chrome frunció el ceño.

“¿Quieres que la princesa se ensucie las manos?”

Merthophan levantó la voz, pegado a sus armas. Con el alcohol prestado por sus velas, todos los rastros de su profesionalismo habitual desaparecieron por la ventana.

“¡La única razón por la que se les ha permitido a los Jiou hacer lo que quieran es porque la familia real era un gran debilucho! ¡Incluso esa hambruna, por ejemplo! ¡Se calmó porque alguna otra ciudad nos proporcionó una enorme pila de trigo! ¡Esta es una oportunidad para compensar las fallas de la familia real, y ella debería estar agradecida de tenerla! ”

“¡Retira eso, Merthophan!”

“¡Chrome! ¡También tengo algo que decirte! ¿Te responsabilizas de la desaparición de la princesa? ¿Y dejarse llevar por una cafetería? ¿Cuánto tiempo vas a seguir con esto?”

“No es asunto tuyo… He tomado mi decisión”.

“Yo… quiero que entrenes a nuestros cadetes oficiales. ¡Regresa a nosotros! ¡La guerra está cerca!”

Merthophan estaba muy nervioso, como si fuera firme en su resolución. Chrome solo lo miró.

“—Estás borracho, Merthophan”.

“Creo que es mejor que renuncies mientras estás adelante”, agregó Choline.

“Estás sobrio conmigo”… trata de no pensar en la guerra por un momento. Te lastimarás y seré yo quien termine llorando”.

Esto cerró la trampa de Merthophan para siempre. Se sentó en silencio por un largo momento. Choline entrecerró los ojos hacia él.

“Si vas a vomitar, hazlo afuera”. Ella le frotó la espalda.

“… Estoy bien, Choline. Lamento haberte gritado, Chrome”.

Choline le dio un hombro para apoyarse, y desaparecieron en la noche, pareciendo lamentar todo esto. Chrome los miró mientras algo tiraba de su corazón.

En la academia, las mañanas comenzaron temprano con carreras de resistencia diseñadas para generar la resistencia necesaria. No se hicieron excepciones para magos o retaguardias: todos siguieron la misma rutina.

“Si espera proteger la vida de los demás, debe ser capaz de proteger su propia vida fortaleciéndose”.

Este fue el eslogan de Merthophan, y todos los cadetes habían salido a correr todos los días escolares desde la ceremonia de apertura.

Pero en este día, sus expresiones eran mucho menos tensas de lo habitual.

“Vaya… esa fue una buena carrera”, exclamó Riho, terminando en medio de una nube de polvo.

“Y hoy, todo lo que tenemos es salón de clases… y luego, ¡tiempo de festival! Tres días de pasear y no hacer nada”.

Fue medio día. Por eso todos aparecían de tan buen humor.

Riho se secó el sudor de la cara con la camisa. No podría importarle menos si su abdomen estuviera expuesto. A su lado, Selen estaba usando una toalla para limpiar delicadamente su frente. La diferencia en su educación fue clara como el día.

“Suspiro… incluso si no tenemos clases, seguimos trabajando en seguridad”.

“¡Pero no todo el tiempo!” Riho sonrió.

“Estamos trabajando por turnos, algunas horas patrullando, ¡el resto es tiempo libre! ¡Prácticamente son vacaciones! ”

El festival del día de la fundación estaba casi aquí. A pesar de que los cadetes trabajaban en seguridad, tendrían mucho tiempo libre en comparación con su rutina habitual de entrenamiento y clases. Junto con Riho, la mayoría de sus compañeros de clase estaban ansiosos por hacerlo.

Con el entrenamiento de la mañana fuera del camino, los estudiantes regresaron al aula. En el aula, los instructores cubrieron los eventos del festival que necesitaban seguridad, sus rutas de patrulla y turnos. Luego terminaron por el día.

“Escuchen, todos”, anunció Merthophan, sombríamente, como si estuviera listo para dar una advertencia.

“Habrá diplomáticos y líderes extranjeros visitando nuestro reino durante el festival. Y el número de turistas alcanza el pico anual. No debe permitir que ocurra ningún delito. De ninguna manera. ¿Eso se entiende?”

Su tono era tan profesional como siempre, pero había una seriedad extra en su pequeña diatriba. Las sonrisas relajadas en los rostros de los estudiantes se disolvieron instantáneamente. Cuando vio eso, asintió dos, tres veces.

“Algunos de ustedes fueron invitados personalmente por mí para llevar el examen de admisión a la academia, para prepararnos para una guerra que algún día podría llegar y para proteger esta tierra. Por supuesto, hay quienes no lo fueron, pero es mi deseo que todos ustedes se conviertan en soldados… igualmente capaces de proteger el reino. Tenga eso en cuenta en sus patrullas.”

Estaba empezando a monólogo ahora. Como si se diera cuenta de que se había dejado llevar, se detuvo para aclararse la garganta.

“Ejem… Disculpe. Mi punto es que ustedes son soldados del reino. Siéntete orgulloso de tu posición mientras realizas tus deberes. En sus escritorios, encontrará los brazaletes que usará de turno, así como los horarios y mapas del festival. Asegúrate de mirarlos”.

Merthophan no era el mismo hoy. Riho se inclinó, susurrando al oído de Selen.

“¿Algo con él?”

“No creo que sea correcto entrometerse en sus asuntos privados, Riho. Más importante aún, tengo que encontrar una manera de invitar a Lloyd a ver el  festival conmigo… Primero, necesito saber su horario y luego compararlo con el nuestro… ”

Cuando Selen entró en modo acosador, Riho se estremeció.

“Caray. Creo que deberías buscar la definición de la palabra privacidad… ”

Merthophan los notó hablando.

“Riho Flavin, ahora no es el momento para charlar ociosamente. ¿O estás tratando de decirme que no has corrido lo suficiente y necesitas quemar más energía? ”

Riho hizo una mueca como si prefiriera morir antes que dar más vueltas, y rápidamente apuntó una respuesta.

“No, simplemente estaba comparando mi horario de turno con el de Selen. ¿Correcto?”

Se volvió hacia la Princesa del Cinturón, esperando que la respaldara, pero la incapacidad de Selen para captar una pista fue peor de lo que Riho había imaginado.

“Tal vez debería causar un incidente y usar el caos para atraerlo a un rincón apartad En la academia, las mañanas comenzaron temprano con carreras de resistencia diseñadas para generar la resistencia necesaria”. No se hicieron excepciones para magos o retaguardias: todos siguieron la misma rutina.

“Si espera proteger la vida de los demás, debe ser capaz de proteger su propia vida fortaleciéndose”.

Este fue el eslogan de Merthophan, y todos los cadetes habían salido a correr todos los días escolares desde la ceremonia de apertura.

Pero en este día, sus expresiones eran mucho menos tensas de lo habitual.

“Vaya… esa fue una buena carrera”, exclamó Riho, terminando en medio de una nube de polvo.

“Y hoy, todo lo que tenemos es salón de clases… y luego, ¡tiempo de festival! Tres días de mentir y no hacer nada”.

Fue medio día. Por eso todos aparecían de tan buen humor.

Riho se secó el sudor de la cara con la camisa. No podría importarle menos si su abdomen estuviera expuesto. A su lado, Selen estaba usando una toalla para limpiar delicadamente su frente. La diferencia en su educación fue clara como el día.

“Suspiro… incluso si no tenemos clases, seguimos trabajando en seguridad”.

“¡Pero no todo el tiempo!” Riho sonrió.

“Estamos trabajando por turnos, algunas horas patrullando, ¡el resto es tiempo libre! ¡Prácticamente son vacaciones! ”

El festival del día de la fundación estaba casi aquí. A pesar de que los cadetes trabajaban en seguridad, tendrían mucho tiempo libre en comparación con su rutina habitual de entrenamiento y clases. Junto con Riho, la mayoría de sus compañeros de clase estaban ansiosos por hacerlo.

Con el entrenamiento de la mañana fuera del camino, los estudiantes regresaron al aula. En el aula, los instructores cubrieron los eventos del festival que necesitaban seguridad, sus rutas de patrulla y turnos. Luego terminaron por el día.

“Escuchen, todos”, anunció Merthophan, sombríamente, como si estuviera listo para dar una advertencia.

“Habrá diplomáticos y líderes extranjeros visitando nuestro reino durante el festival. Y el número de turistas alcanza el pico anual. No debe permitir que ocurra ningún delito. De ninguna manera. ¿Eso se entiende?”

Su tono era tan profesional como siempre, pero había una seriedad extra en su pequeña diatriba. Las sonrisas relajadas en los rostros de los estudiantes se disolvieron instantáneamente. Cuando vio eso, asintió dos, tres veces.

“Algunos de ustedes fueron invitados personalmente por mí para llevar el examen de admisión a la academia, para prepararnos para una guerra que algún día podría llegar y para proteger esta tierra. Por supuesto, hay quienes no lo fueron, pero es mi deseo que todos ustedes se conviertan en soldados… igualmente capaces de proteger el reino. Tenga eso en cuenta en sus patrullas.”

Estaba empezando un monólogo ahora. Como si se diera cuenta de que se había dejado llevar, se detuvo para aclararse la garganta.

“Ejem… Disculpe. Mi punto es que ustedes son soldados del reino. Siéntete orgulloso de tu posición mientras realizas tus deberes. En sus escritorios, encontrará los brazaletes que usará de turno, así como los horarios y mapas del festival. Asegúrate de mirarlos”.

Merthophan no era el mismo hoy. Riho se inclinó, susurrando al oído de Selen.

“¿Algo con él?”

“No creo que sea correcto entrometerse en sus asuntos privados, Riho. Más importante aún, tengo que encontrar una manera de invitar a Lloyd a ver el  festival conmigo… Primero, necesito saber su horario y luego compararlo con el nuestro… ”

Cuando Selen entró en modo acosador, Riho se estremeció.

“Caray. Creo que deberías buscar la definición de la palabra privacidad… ”

Merthophan los notó hablando.

“Riho Flavin, ahora no es el momento para charlar ociosamente. ¿O estás tratando de decirme que no has corrido lo suficiente y necesitas quemar más energía? ”

Riho hizo una mueca como si prefiriera morir antes que dar más vueltas, y rápidamente apuntó una respuesta.

“No, simplemente estaba comparando mi horario de turno con el de Selen. ¿Correcto?”

Se volvió hacia la Princesa del Cinturón, esperando que la respaldara, pero la incapacidad de Selen para captar una pista fue peor de lo que Riho había imaginado.

“Tal vez debería causar un incidente y usar el caos para atraerlo a un rincón apartado…”

“¿Estás tramando algo, allí?”, Preguntó Merthophan, levantando una ceja. Riho se agarró la cabeza y dejó escapar un chillido silencioso.

“Dame un respiro, señorita Selen… Incluso usted debe saber cuándo el coronel Merthophan está de mal humor”.

Riho se dejó caer contra su escritorio, completamente exhausta, mientras le enviaba dagas a Selen con los ojos entrecerrados.

Mientras tanto, Selen estaba en un mundo propio.

“¡Oh no, señor Lloyd!,¡No debemos! ”

Lo había perdido, seguro.

“… Siempre eres así. Fui un idiota.”

Selen no le prestó atención a Riho en absoluto.

“Oh, señor Lloyd… ¿Olvidó que almorzamos hace una hora?”

“Espere. No me digas que has imaginado tan lejos en el futuro que ya está senil en tus delirios”.

“¡No es una ilusión! ¡Es una proyección! ¡Si simulo escenarios potenciales, estaré mejor equipado para manejarlos! ”

Este enfoque parecía más adecuado para el fútbol que el amor, pero ella permaneció ajena a la tarjeta de penalización invocada por su propia existencia.

“¡En ese caso, debiste haber proyectado la consecuencia de hacer enojar hoy al apacible señor Merthophan! Hombre, me pregunto por qué ha estado tan enojado… ”

“Eso debería ser obvio”, interrumpió Allan.

“¿En serio no lo sabes?”

“… Escuchas, ¿eh? Qué gran pasatiempo. Tú y yo nos llevaremos muy bien, Allan.”

“Oh, no me arrastres a tu nivel, mercenario cavador de oro…¿Y?,¿Realmente no lo sabes? ”

Su arrogancia estaba empezando a ponerla nerviosa, por lo que ella se burló, “Asumo que nos harás el honor de contarnos”.

“La búsqueda de la princesa desaparecida no va bien. ¡Con el festival del día de la fundación casi aquí, obviamente quiere encontrarla lo antes posible! Por eso está de tan mal humor. Él tiene que encontrarla, ¡pase lo que pase! ”

“… Amigo, estás tan fuera de lugar”.

Merthophan no había hecho un gran trabajo al ocultar lo poco centrado que estaba en la búsqueda de la princesa. Riho no lo había olvidado.

“Vaya, no tengo tiempo para perder el chat con gente como tú. Tengo que ir a la ciudad”.

“Suena como si estuvieras obsesionado con encontrar a esta princesa. Todo lo que hablas sobre promoción: eres tan buscador de oro como yo”.

“Pero mis ambiciones no están impulsadas por el dinero. De todos modos, voy a terminar todo esto, así que ¿por qué no intentas actuar como una niña por una vez y hablar sobre toda la comida del festival que te mueres por comer o alguna mierda?” Allan se enderezó el cuello y se volvió hacia salir.

“Claro”, gritó Riho después de él.

“Solo asegúrate de que no termines siendo engullido por algún monstruo”.

“……… ¡Ngh!” Allan se estremeció pero eligió seguir caminando.

“¿Que…? Él también está actuando un poco raro”.

“¡Supongo que será mejor que empecemos a buscar a la princesa!”, Anunció Selen, poniéndose de pie.

Riho la detuvo.

“Creo que es mejor idear un mejor plan para encontrar al autor intelectual que buscar a ciegas. ¿Algunas ideas?”

“No te preocupes. Esta vez, prometo no arrancar ningún pelo.”

“Sí, creo que es un requisito previo tácito… pero de cualquier manera, no es un plan”.

Riho se estremeció ante su compañero en la racha violenta del crimen. En cualquier caso normal, ella se habría librado de inmediato de alguien como Selen, pero fue una figura clave en sus planes para montar los faldones de Lloyd. Era importante quedarse allí, ser respetuoso y mantener la conversación. Como cualquier trabajo de servicio.

“Entiendo a dónde vas… Pero no sabemos la disposición de la tierra aquí. Correr por todas partes no nos dará ninguna buena información. Quiero decir, nuestros mayores ya han estado buscando durante años”.

“Eso es cierto… sería una pérdida de tiempo para nosotros correr sin pistas reales”, acordó Selen.

“Entonces… he oído hablar de una bruja llamada Marie que se ocupa de todo tipo de información. Una vez que estemos listos, creo que valdría la pena verla mañana. Ciertamente me gustaría encontrar a la princesa y frotarla con la cara tonta de Allan”.

“Eso suena bien. Por favor, llévame contigo.” Selen estaba a bordo.

Riho hizo un anillo con dos dedos, una señal con la mano pidiendo dinero, mientras mostraba sus dientes.

“¡Bueno! A cambio, pagas por la información”.

No hay rastro de culpa. Selen tuvo que reír.

“Inteligente”, se rio entre dientes.

“Un verdadero buscador de oro, ruidoso y orgulloso”.

Era una tarde cálida en el Lado Este, un distrito conocido principalmente por su vulgaridad y obscenidades. Pero a esta hora, todavía era relativamente pacífico y tranquilo.

De hecho, las carreteras principales eran tan bulliciosas como el lado norte. Además de los caminos de mala muerte, el área era relativamente segura, pero entre las cosas alarmantes para la venta, los poderosos enfrentamientos de los promotores y la práctica de cobrar por muestras “gratuitas”… bueno, era fácil ser estafado.

“… Este lugar está más ocupado de lo que esperaba… aunque algunas de estas tiendas parecen realmente sospechosas”, comentó Selen.

Las calles estaban llenas de todo, desde adivinos hasta excedentes del ejército, manjares misteriosos y productos extraños. La Bruja del Lado Este tenía una tienda general rodeada de ese tipo de cosas en un antiguo edificio en la cima de una colina. Con un cartel apenas visible y botes de medicamentos esparcidos con contenido desconocido, no parecía ser una tienda en absoluto.

“No parece que este lugar haya estado abierto…”, agregó Selen.

“Me sorprende que descubrieran que venden información”.

“Me acabo de enterar. Estaba asomando la cabeza por aquí y por allá, y un viejo conocido me dio una idea de… Voy a estar trabajando en este reino por un tiempo, así que es importante conocer gente, señora”.

“Hmm… Supongo que haces tú trabajo de base, a pesar de que los mercenarios no se vean bien”.

“Un poco si quieres vivir libre… Podrías aprender de nosotros, Selen. Lo mismo para esos soldados. Cuantos menos enemigos hagas, más personas podrían echarte una mano. Considera las consecuencias. Un pequeño consejo amistoso de mi parte para ti.”

Ante esto, Selen envolvió sus dedos con fuerza alrededor del cinturón maldito en su cintura.

“… Nunca antes había pensado en las consecuencias”.

Había una nota sombría en su voz.

“Uh, lo siento”. Riho lo decía en serio.

“Espera. ¿Todavía tienes esa cosa alrededor? ¿Estás seguro de que lo quieres contigo?”

“Sí… Esta es la preciosa cadena roja del destino que me une a Lloyd… Además, me salvó la vida el otro día”.

“… Esa es definitivamente la cuerda roja más horrible. Como que esa cosa realmente tiene un aura siniestra…”

Riho estaba a punto de entrar, sintiendo que Selen estaba a punto de lanzarse a otra diatriba sobre el amor, pero…

“Parece que están cerrados”.

De hecho, debajo del cartel de la tienda discreta había un anuncio aún más discreto: CERRADO.

“Pero sale vapor por esa ventana… Alguien tiene que estar aquí, al menos”.

Y quienquiera que fuera debe estar cocinando. Había un olor salado flotando en el aire.

“… Vinimos todo este camino, y estamos presionados por el tiempo. Veamos si al menos podemos hablar con ella “, sugirió Selen e inmediatamente dio unos breves golpes en la puerta.

En respuesta, escucharon pasos golpeando hacia ellos.

Las bisagras crujieron cuando la puerta se abrió, y una cara sorprendentemente familiar apareció frente a ellas.

“¡Lo siento! Marie está fuera, así que estamos cerrados por el día… espera… ”

“” ¡¿Eh?! “”

De pie en la puerta de la tienda de brujas estaba Lloyd, parpadeando hacia ellos. Selen y Riho estaban igualmente sin palabras.

“¡Entren! Tomen asiento.”

Antes de que las mentes de las chicas tuvieran la oportunidad de comenzar a trabajar de nuevo, Lloyd las hizo pasar adentro. Rápidamente limpió dos sillas en una mesa cubierta de libros viejos y se dirigió a la cocina para poner una tetera en la estufa.

Riho logró recuperarse primero y respiró hondo.

“Seguro que no esperaba que vivieras en una tienda de brujas, Lloyd… Dios, señora Selen. Sé que es tu novio y todo eso, ¡pero deberías decirme estas cosas! Somos amigos, después de todo. No lo voy a robar ni a comer… ¡Y vaya! Este tipo de sorpresas son malas para el corazón”.

Pero cuando Riho se volvió enojado para mirarla…

“… ¡No en mis sueños más salvajes! ¿Lloyd y una bruja? ¡No en mis sueños más salvajes! ¡Viviendo juntos! ¡No en mi…!”

La expresión de Selen traicionó a quién le había afectado más el corazón. Y no solo el corazón. Era como si su mundo hubiera terminado, o como si hubiera ido a drenar sus fideos de yakisoba y los hubiera arrojado accidentalmente al fregadero.

“………”

Riho estaba empezando a tener dudas sobre su lectura sobre la situación, y su fracaso para confirmarlo. A pesar de todo lo que Selen habló sobre el destino y una conexión fatídica entre ellos, ella realmente no parecía saber nada sobre Lloyd.

“Uh, Selen…”, comenzó Riho, temerosa incluso de preguntar.

“Solo para estar segura… ¿no sabías que Lloyd estaba aquí?”

“—Erp.” La respuesta de Selen fue más que un chillido.

“Er, ¿es verdad que tú y Lloyd son uno?”

“-¡Por supuesto! ¡Es mutuo! ¡Destino! ¡Al igual que nuestros destinos han sido enredados por la cadena roja del destino y luego soldados a un pilar de soporte adicional!”