Tatoeba Last Dungeon Mae no Mura no Shōnen ga Joban no Machi de Kurasu Yō na Monogatari (NL)

Volumen 1

Capítulo 4: Un Momento De Absurdo: Supongamos Que Un Niño De Karate De Cinturón Blanco Tiene La Ventaja En Una Lucha Contra Un Cinturón Negro

Parte 2

Un momento después, Choline llegó corriendo, notando la conmoción.

“¡Oy! ¡¿Qué pasa?! ¡Allan, Selen, dijeron que estabas arreglando sus diferencias! ¡¿Qué diablos es eso?!” Señaló a Selen, que estaba ocupada frotando su mejilla sobre el pecho de Lloyd.

Allan llamó la atención y explicó la situación.

“—Y eso es todo. El problema está resuelto por ahora”.

“Muy bien… bueno, al menos no se convirtió en nada importante. ¿Huh Lloyd? Siento que he escuchado ese nombre antes… ¿dónde estaba…? ”

Mientras Choline buscaba sus recuerdos, Merthophan & Co. finalmente llegaron a la escena. La multitud se separó ante él.

“¿Qué es todo el alboroto?” Su seriedad desapasionada fue suficiente para silenciar a la multitud de espectadores, que en su mayoría eran estudiantes.

Choline  fue  la  primera  en  responder.

“¡Oh!  Merthophan!  Y  Riho  y…

¿Chrome? ”

Estaba claramente sorprendida por este último.

“¿Qué está pasando, Choline?”

“Uh, para resumir, Allan y Selen estaban peleando, pero este chico Lloyd los detuvo”.

“”¿Lloyd?””

En respuesta a este coro, Selen finalmente sacó su rostro de su pecho y lanzó  una  explicación  apasionada.

“¡Exactamente!  ¡Para  protegerme! ¡Para estar en mi lugar! ¡Para luchar contra este bruto de hombre!”

“… Dice que la mujer que corre por la ciudad arrancando el pelo del pecho de la gente”, se quejó Allan. Pero nadie lo escuchaba.

“¿Qué estás pensando?”, Preguntó Riho.

Merthophan gruñó.

“Riho Flavin… debes saberlo. Con todo lo que has experimentado en el campo de batalla… debes poder estimar su fuerza”.

Riho le lanzó una mirada, indicando claramente que no tenía idea de por qué estaba trayendo esto ahora.

“Si Lloyd luchara…”, continuó Merthophan,

“tendría la oportunidad de demostrar su poder… ¿No te gustaría ver eso?”

Se dio cuenta de ella. A primera vista, Lloyd parecía que ni siquiera podía lastimar a una mosca: había dudado de sus propios instintos cuando lo había visto por primera vez.

“Sí, podría soportar verlo en acción…”

Riho estaba en su mayoría por el dinero, pero la pura curiosidad ocupó su lugar esta vez.

“Si él derrota completamente a Allan… eso podría ayudar a mis terrenos para conseguir que se alistara”, murmuró Merthophan. Dio unos pasos hacia Allan.

“¿Es eso cierto? ¿Estás realmente dispuesto a luchar contra este chico Lloyd?”

Allan chasqueó los talones, saludando. Sacudió la cabeza.

“No señor. Hemos resuelto el problema en cuestión… y me considero un soldado, señor. No soñaría con poner un dedo sobre un civil inocente”.

“Toma la indirecta”.

“¿Huh?”

Mientras Allan interpretaba el papel de un soldado modelo, Merthophan lo miró seriamente… no, más como una mirada puntiaguda. Allan no tenía idea de lo que había hecho para provocar la ira del coronel, por lo que se quedó allí, boquiabierto.

“¡Eres un soldado! ¡¿Y me estás diciendo que ni siquiera puedes golpear a un simple civil?!” rugió.

La multitud jadeó horrorizada, y Choline saltó rápidamente.

“¡Espera, Merthophan! Siempre dices: ‘¡Los soldados existen para proteger a los civiles, no para dañarlos!’ Estás actuando muy extraño últimamente”.

“……”

“¿Por qué no me miras a los ojos?”

Merthophan pareció culpable por un segundo, luego se inclinó y susurró: “Choline, este Lloyd de aquí es el niño de las runas antiguas”.

“………” Con eso, Choline marchó directamente hacia el centro de la multitud.

“¿Combatientes, listos?”, Gritó ella.

Ella se había ofrecido voluntaria para ser el árbitro, preparando rápidamente la escena con un ambiente vibrante.

Mientras tanto, Allan estaba completamente perdido. Había dicho todas las cosas correctas, solo para ser gritado y arrojado a una pelea. Estaba a punto de estallar en llanto.

¿Qué está pasando? ¿Por qué los coroneles quieren que pelee? Buscó desesperadamente cualquier tipo de explicación.

Y llegó a su conclusión: … ¡gh! ¡Oh! ¡Duh! Saben que soy de la casa de Lidocaína, conocida por sus hazañas militaristas; ¡Han oído hablar de mis victorias en torneos! ¡Quieren ver lo que puedo hacer!

(¿Su optimismo no te hace llorar?)

Allan se dio la vuelta para mirar a Lloyd y se inclinó disculpándose.

“Lo siento, chico. ¿Te importaría ir en mi contra?”

“¿Huh? ¿Y-Yo? Pero no soy tan fuerte “, tartamudeó Lloyd.

Allan inclinó la cabeza aún más abajo.

“Por favor… tengo planes, y necesito demostrarme a mí mismo. ¿Podrías concederme esta oportunidad?”

“U-uh… pero… está bien, entonces”.

“¡Oh! ¡Gracias, joven deportista!”

Y así, comenzó una batalla a pesar de que nadie en la multitud tenía la menor idea de por qué. El soldado y el medio tiempo estaban siendo francamente deferentes, exclamando “¡Gracias!” Y “¡En absoluto!”. Estaban a punto de comenzar un combate que nadie pidió ni realmente le importó.

Sin embargo, Merthophan era uno de los hombres más poderosos del ejército, y Choline, la experta en magia residente, y ambos miraban a la pareja como si temieran pestañear. Todo esto estaba creando un estado de ánimo muy extraño en la escena de la batalla.

¿Tener un hombre tan poderoso como el coronel exige verme pelear? ¡No puedo desperdiciar esta oportunidad! ¡Tengo que mostrarle lo que puedo hacer!

Allan se estaba encendiendo, pero los dos coroneles murmuraban para sí mismos.

“… Date prisa”. Murmura.

“¡Muéstrame estas runas!” Murmura.

Todos buscaban claramente cosas muy diferentes. Pero Allan no se dio cuenta de esto, dio unos pasos hacia adelante y blandió su hacha.

“Mi nombre es Allan Toin Lidocaine. El hijo mayor de la casa de lidocaína muy condecorada…”

Comenzó a pronunciar un discurso que nadie quería escuchar, aunque fue un error divertido para cualquiera que supiera lo que estaba sucediendo.

Una vez que su presentación finalmente llegó a su fin, llegó el momento de una pelea. Fue entonces cuando Allan notó que Lloyd estaba desarmado.

“Um, listo cuando tú lo estés”, anunció Lloyd.

“Espera un segundo. Estás desarmado”.

“Uh, sí”.

“Hmm… bueno, apenas puedo luchar contra un hombre desarmado. Que alguien le traiga un…”

Choline le lanzó una mirada fulminante.

“¡Toma la indirecta!”

“Uh…”

Otro duro rechazo. Este fue igualmente inexplicable. Allan comenzó a llorar.

“… No necesita armas cuando tiene runas…”, murmuró Choline por lo bajo.

Pero Allan no tenía forma de saber lo que buscaba y seguía confundido de principio a fin.

Mientras tanto, en las afueras de los espectadores, Riho se había deslizado junto a Merthophan.

“Uh, Merthophan”, susurró.

“¿Qué?”

“Allan… podría ser gravemente asesinado aquí”.

“No, lo dudo. Puede que no lo parezca, pero ha ganado varios torneos: es un luchador habilidoso. También tiene fama de poder recibir un golpe”.

Chrome intervino.

“No solo eso, señorita, sino que Choline es una experta en magia… particularmente en hechizos de recuperación. Ella puede curar fácilmente algunas heridas menores”.

“¿En serio? …Me resulta difícil de creer.”

En el centro de la multitud, el experto en cuestión gritaba: “¡Lucha ahora o ambos verán sangre!”

Realmente parecía que estaba al otro lado de la ecuación de la lesión.

“… ¿Estás seguro?”

“… Sí, nos ha salvado a mí y a Merthophan”, explicó Chrome, fingiendo que no había escuchado a Choline en absoluto.

“Mm, mientras no muera instantáneamente, estará bien”, insistió Merthophan.

“… Sí, realmente no debería ser un problema siempre y cuando Allan no reciba un golpe directo en la cara sin vigilancia”.

“Bueno, esperemos que no veamos su rostro convertirse en puré de tomate”.

Justo cuando todos los que estaban viendo estaban en la misma página, Allan tuvo una gran idea.

“¡Correcto! ¡Tengo que darte algún tipo de ventaja! ”

“¿L-Lo harás?” Lloyd parecía confundido.

“Sí. ¡No puede ser que esta pelea sea demasiado unilateral! ¡Yo… te dejaré dar el primer golpe! ¡Adelante, golpéame en la cara tan fuerte como puedas! ¡Resistente es mi segundo nombre!”

“Uh, o-ok… haré lo que pueda”.

“¡Ese es el espíritu! ¡No te detengas! ¡Vamos!”

“… Merthophan?”

“… Él ya fue”.

“¡Hey!” Rugió Chrome.

“¿Por qué estás ahí parado? ¡Los detendré! ¡O nunca podrás volver a comer tomates! ”

Ante esto, los dos oficiales volvieron a la realidad, saltando hacia adelante para detener la ejecución pública. Mientras corrían hacia la escena de la batalla, el puño de Lloyd se balanceaba hacia el lado de la cara de Allan a toda potencia.

“¡Aquí va!”

“””¡No te vayas (a conocer a tu creador)!!”””

Fue el momento antes de que el tomate maduro estuviera a punto de explotar en pedazos… una ráfaga de viento brotó de los pies de Allan.

“¿Eh?”

“Er… ¿qué?”

“¡Eek!”

“¡Oy!”

El viento levantó el polvo, la basura y las faldas, cegando a todos los que se apiñaban alrededor de la pelea.

Por fin, el viento se calmó. Riho y Selen se frotaron los ojos y observaron la escena frente a ellos.

“¿Él se fue?”

No había señal de Lloyd en absoluto. Miraron a su alrededor, aturdidos y confundidos.

“¡Auuuughhh! ¿Quién lanzó ese hechizo de viento? ¡Se   salvó   de convertirse en desecho!”

Choline había estado justo en el medio del vendaval, y desafortunadamente había desabrochado el gancho de su falda lápiz, derribándola directamente al suelo. El resultado fue indigno. (Le ahorraré los detalles, pero creo que es suficiente decir que “fue” de color beige).

“¿Choline? ¿Qué fue eso? ¿Un ataque enemigo?”

“El hechizo no era tan poderoso… Solo tú magia de viento cotidiana. Pero Merthophan… ¿lo viste?”

“¿Adónde fue Lloyd Belladonna? No.”

Choline se había vuelto a poner rápidamente la falda y parecía más irritada por la inconsciente respuesta de Merthophan.

“¡Eso no! ¡Debajo de mi falda! … Si hubiera sabido que esto sucedería, habría elegido mi favorito, no el paquete de tres descuentos”.

La última línea estaba en voz baja, y Merthophan no pudo distinguir una palabra.

Intentó seguir adelante, usando la peor fraseología posible.

“¡A nadie le importa eso! Lo que importa aquí…”

Hubo un chasquido audible cuando las venas palpitaron en la frente de Choline, y ella gruñó: “… Hey. Elige tus palabras sabiamente, cara de piedra. Te aconsejo que lo endulces: insinúa que querías verlos e insiste abatidamente que perdiste tu oportunidad”.

“Eso es bastante difícil, Choline. Adónde fue ese chico es mucho más importante…”

“No. ¡Este punto debe ser conducido a casa! Debes entender cómo la mente de una mujer…”

“¡P-Para! ¡Choline! ¡Evalúa la situación!”

Al otro lado de la multitud, Chrome había visto todo menos bragas. En los vientos arremolinados, él no había visto beige, sino una chica con ropa negra bruja con un sombrero puntiagudo… Y su perfil parecía terriblemente familiar…

“¿La princesa…? ¿Era esa la princesa?” Se abrió paso entre la multitud, apresurándose tras la figura en retirada.

“¡Hey, Chrome! Chr… Chrome! ¡Vuelve! ¡Ayuda! ¡Augh!”

La agonía de Merthophan hizo eco en sus oídos, pero Chrome no les prestó atención.

En el tejado de un edificio militar lejos del camino principal, Marie estaba agitada, Lloyd agarrado bajo un brazo.

“Hah… esa estuvo cerca…”

Marie se había escabullido en el Distrito Central, arriesgándose a exponerse, para detectar algo de información y tropezó con la escena de una ejecución pública. El sudor se filtraba por cada poro de su cuerpo ahora que se permitía sentirse aliviada.

En cuanto a Lloyd…

“Ya veo… ¡intervino para evitar que me golpeara hasta la pulpa!”

… estaba equivocado una vez más. Pero había hablado tan suavemente que Marie no lo escuchó.

Bajó a Lloyd y asumió su mejor expresión de regaño, como si fuera su hermana mayor.

“¿En qué estabas pensando, Lloyd? ¡Eso podría haber sido fatal!”

¡Por el otro chico! Pero antes de que ella pudiera aclarar, Lloyd bajó la cabeza y se disculpó rápidamente.

“¡Lo siento mucho! ¡Muchas gracias por salvarme! ¡Te debo mi vida! ¡Haré lo que sea para compensarlo! ”

Luego la miró con ojos brillantes. El acto del perro cachorro de Lloyd y los malentendidos enteramente sobre la marca fueron suficientes para que Marie abandonara la idea de enojarse. Le había levantado un dedo y, sin saber qué hacer con ella, se conformó con tocarle la frente.

“Pero siempre eres tan inseguro,  así que tengo que admitir  que me sorprendió verte pelear… ¿Qué pasó?”

“Um, solo… ¿siguiendo la corriente? No sabía lo que realmente podía lograr allí, pero… ¿preguntó amablemente? ”

Esa es la razón más vaga que he escuchado, pensó Marie, exasperada.

“Bien entonces.  Cuando no  está seguro de lo  que puede hacer, es importante dar ese paso adelante. Mm”.

Eso es lo suficientemente concluyente. Y Lloyd lo tomó como profundo.

“E-Eso es cierto… ¡Intentaré seguir dando esos pasos!”

Su sonrisa era demasiado pura, y Marie se sonrojó a pesar de sí misma.

“¡Sin embargo, no puedes aceptar cualquier cosa de todas formas! O la gente mala podría detenerte… Las mujeres como yo, por ejemplo.”

“¿Huh? ¡Pero eres súper amable! ”

“………. Geez”.

Él podría ser el que tirara de ella. Con las mejillas sonrojadas en respuesta a su elogio genuino, ella lo abrazó, quizás demasiado cerca intencionalmente, y saltó del techo con él.

Su hechizo de viento suavizó su aterrizaje en el callejón. Ella miró a su alrededor.

“Bien, nadie aquí”.

“¿Mm? ¿Sería malo si lo hubiera?”

“¡N-No! No importa, solo olvida que dije algo.”

En un espacio desierto entre edificios, en un camino con poca luz, Alka probablemente gritaría: “¡Creo que esta es la oportunidad perfecta!”

¡No, no, ese no soy yo! Solo porque dijo que haría cualquier cosa… ¿o era una invitación? ¿Una señal de dios? ¡No, cálmate! ¡Eres una princesa! ¡No puedes actuar como una niña tonta…!

Cuando Marie intentó sacudirse sus fantasías, un hombre grande apareció detrás de ella, sin aliento.

“Um… ¡Tú allí!”

“¡N-No! ¡No estoy haciendo nada malo! “, Gritó, obviamente sospechosa… pero luego reconoció su rostro e inmediatamente se recuperó.

“¿Chrome…?”

Ese marco cuadrado y su mandíbula afilada aparecieron en la oscuridad… con un delantal que no le quedaba nada: la antigua guardia real de Marie y confidente de confianza, Chrome Molybdenum.

Cuando Lloyd se dio cuenta de este recién llegado, corrió hacia él e inclinó la cabeza.

“¡Jefe! ¡L-Lo siento! ¡Pasaron muchas cosas mientras sacaba la basura!”

“Uh… ¿jefe?”, Preguntó ella.

Chrome había estado mirando a Marie, atónito al encontrar a la princesa desaparecida por fin. Cuando escuchó a Lloyd, hizo todo lo posible para sacudirse la confusión, aclarándose la garganta mientras se calmaba.

“Ejem… está bien, Lloyd. Más importante… Lady Maria.”

Lloyd parpadeó.

“¿Huh? No, erm, jefe. Esta es Marie Ella es la bruja que me ha estado ayudando”.

“¿Mm? ¿Marie? ¿Ayudarte?”

Esto no los llevaba a ninguna parte. Marie arrugó el cabello de Lloyd entre sus dedos.

“Puedes explicar eso más tarde, Lloyd. ¿No se supone que debes estar en el trabajo? ”

“Correcto. No hay nadie cuidando en la tienda “, agregó Chrome.

“¡Oh no! ¡Volveré enseguida!” Lloyd gritó y desapareció con el viento.

Chrome y Marie lo vieron irse. Entonces llegó el momento de aprovechar su encuentro casual.

“Es bueno verte de nuevo, Chrome. Han pasado… ¿qué, cinco años? ”

“¿Así de largo? Me siento aliviado de verte a salvo. Yo, Chrome Molibdeno, he estado muy preocupado por tu ausencia.” Él se arrodilló ante ella.

“¡Oh, Chrome! No te arrodilles. No puedo permitir que nadie nos vea… Tengo que mantener mi identidad en secreto”.

“¿Tu identidad? ¿Pero por qué…? Ya veo, eso explica las gafas falsas.”

“Es una larga historia… ¿Podemos vernos de nuevo pronto? Te contare entonces”.

“Entendido. Te veré esta noche detrás de la cafetería.” Con una reverencia, se despidió.

Marie lo observó irse, respirando hondo para recuperar la cabeza en el juego.

Encontrar a Chrome fue un feliz accidente… todo gracias a Lloyd, nuevamente. Esto debería ser un gran paso adelante.

Miró a través de los huecos en los edificios mohosos, concentrándose en el castillo que se cernía sobre la ciudad. Sus ojos se entrecerraron.

La conferencia internacional de liderazgo en el festival del día de la fundación… ese es mi Día D. Tengo que encontrar al culpable y liberar a mi padre antes de eso…

Frente al castillo, apretó las manos cicatrizadas…. ¡al usar esta runa desencantar!

El campus de la academia militar estaba oscuro y tranquilo después del anochecer. Algunas luces llevadas por los patrulleros se balancearon antes de desaparecer en los edificios.

Pero la cafetería permaneció abierta con sus ventanas brillantes. El sonido de voces silenciosas vino desde atrás, donde dos sombras hablaban en voz baja.

Una silueta era Chrome, su marco cuadrado metido torpemente en un delantal, y la otra era Marie, la bruja del Lado Este / la supuesta princesa desaparecida, Maria.

“Ya veo… alguien está controlando al rey, pero logró enviarte lejos antes de perder el control total de sus pensamientos… Eso debe haber sido duro para ti”.

Marie había terminado de contar su historia desde el momento del incidente hasta el día de hoy (con un montón de críticas sobre Alka en el medio). Chrome asintió gravemente.

“Sí… y hasta que conozcamos la mente maestra detrás de todo esto, no puedo arriesgarme a tomar ninguna acción directa. Podría irrumpir en el castillo y liberar a mi padre, pero en el momento en que bajemos la guardia, ambos volveremos a estar bajo su control”.

Mirando hacia el castillo iluminado por la luna, Chrome explicó cómo había sido reducido a administrar una cafetería.

“Después de su desaparición, el comportamiento de Su Majestad cambió dramáticamente. Comenzó a respaldar a los halcones de guerra, avivando las llamas de la batalla… y se mostró cada vez menos en público.”

“Eso es lo que todos en la ciudad me han estado diciendo. Los rumores son ciertos”.

“Pensé que algo estaba pasando. Es por eso que asumí la responsabilidad personal de perderte, utilizándolo como una excusa para retirarme y acostarme mientras dirijo esta cafetería, buscando a la princesa desaparecida y la razón detrás de la transformación de Su Majestad”.

“Y como ambos estábamos ocultando nuestras verdaderas identidades, ninguno de nosotros pudo encontrar al otro…”

“Afortunadamente, Lloyd nos reunió”.

Su nombre los devolvió a la escena del intento de asesinato.

“¡Eso me recuerda! ¿Por qué no detuviste a Lloyd, Chrome? ¡Un segundo después, y nunca más habría podido comer tomates refrigerados o estofado de carne de órgano! ”

Para los oídos de Chrome, esto sonaba como comida de pub, pero lo dejó pasar sin comentarios, inclinando la cabeza en tono de disculpa.

“No tengo excusa. Una parte de mí quería ver la verdadera naturaleza de su fuerza… ”

“Y ver que eso habría resultado en la muerte de ese hombre… Aunque supongo que puedo entender de dónde vienes, como una curiosidad mórbida”.

“¿Quién es él de todos modos? ¿Por qué está él contigo?” Marie miró a la oscuridad.

“¿Has oído las leyendas de Kunlun?”

“Uh… ¿Las viejas historias? ¿Dónde los héroes de antaño fundaron una ciudad lejos del resto del mundo? ¿Dónde viven en paz?”

Estos cuentos eran sobre los descendientes de héroes legendarios, eruditos y generales que salvaron al mundo de los desastres y los posibles señores demonios. Según la leyenda, se congregaron en una ciudad llamada Kunlun. Pero estas historias estaban llenas de tonterías: montañas que fluían con almas humanas, espadas legendarias y armaduras multigeneracionales que podían protegerte de cualquier ataque de monstruos, una aldea rodeada de treants, un río lleno de pirañas asesinas. Chrome nunca había creído una palabra de eso.