Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 11

Capítulo 7: Clases De Exploradores Novatos

Parte 3

No quería ser el tipo de padre que hace promesas vacías solo para romperlas cuando llega el fin de semana.

“Oh, cierto, Lady Ravna.”

No había tenido una buena oportunidad durante la cena, pero ahora saqué una espada ancha hecha con partes de monstruos de mi Bolsa Garaje.

La espada que hice con el brazo de la mantis soldado era demasiado grande para la mayoría de la gente. Sería más adecuado para alguien como Lady Ravna.

Cambié el nombre del fabricante solo en esta, por lo que no debería causar ningún problema en el futuro.

“Un comerciante visitante me dejó esto…”

“¿Oh? ¿Una espada de parte de monstruos? ¿Le importaría si la blando un poco?”

“Adelante.”

Con mucho gusto le entregué la espada.

Por lo que pude ver por mis viajes y tiempo en la antigua capital, los nobles del Reino Shiga y sus sirvientes tendían a desagradar el equipo hecho con partes de monstruos, pero Ravna y su empleador, la Princesa Meetia, no parecían tener tales reservas.

“¡Whoa!”

“Ooh, esa dama es fuerte.”

Mientras la caballera balanceaba la gigantesca espada con facilidad, todos los niños miraban con admiración.

En un lugar como la Ciudad Laberinto, probablemente era normal admirar a los fuertes.

“Puede parecer poco refinado, pero es realmente una hoja maravillosa y bien equilibrada.” La caballera bajó la espada y la miró con los ojos de fuego de una doncella enamorada.

“En particular, realiza magia con mucha más facilidad que cualquier espada de bronce.”

¿Eh? Lo ajusté con “Manipulación Mágica” para que la magia pasara a través de ella más fácilmente, pero no creo que sea tan impresionante, ¿verdad?

Una de mis espadas mágicas hechas a mano definitivamente sería al menos un 20 por ciento más efectiva.

“No se parece a ninguna de las espadas que he probado en un arsenal de la Ciudad Laberinto. ¿La hizo un herrero famoso?”

“Me han dicho que es obra de un herrero prometedor llamado Hefesto.”

En una mesa cercana, Arisa escupió con su té después de la cena y Lulu la regañó. Debió reconocer que yo había tomado el nombre del dios griego de los herreros.

Por supuesto, no hace falta decir que este era uno de mis seudónimos.

“¿Hefesto? Seguramente un nombre que pasará a la historia.”

Vi a Arisa temblar por la risa contenida, pero simplemente la ignoré y acepté el elogio de la caballera.

“Le avisaré al comerciante la próxima vez que pase.”

Lady  Ravna  me  tendió  la  espada,  luciendo  reacia  a  separarse  de  ella,  pero  la  empujé suavemente hacia atrás.

“¿Sir Pendragon?”

“Por favor, quédesela. Me pidieron que encontrara un verdadero maestro del combate en la Ciudad Laberinto para usar esa espada.”

“¿Qué quieres decir? Estoy bastante segura de que no tengo los medios para pagar una espada tan fina.”

“No hay necesidad de pagar nada. Es para publicidad. No para usarte como valla publicitaria, pero si alguien te pregunta sobre la espada, diles que fue hecha por Hefesto. Según él, sería un pago más que suficiente.”

Esta fue la excusa que se me ocurrió de antemano para tranquilizarla.

Nunca había visto ningún tipo de vallas publicitarias en este mundo, pero parecían tener una palabra para eso, al menos.

“¿Por una espada tan espléndida? Seguramente no…”

“El comerciante me dijo que su fabricante lo consideraba un fracaso, ¿sabe? Es demasiado grande y pesada, dijo, por lo que nadie en su ciudad natal pudo usarla.”

La caballera apenas podía apartar los ojos de la espada mientras protestaba. Usé mi habilidad “Fabricación” para darle un empujón de aliento.

“Por favor, ¿no la usarás por su bien?”

“Ravna, rechazar más sería de mala educación con Sir Satou y Sir Hefesto.”

“Muy bien, Princesa.” Una palabra de su empleadora fue suficiente para finalmente poner a Ravna al límite.

“Sir Pendragon, gracias. La usaré con el mayor cuidado.”

“Si nota algo interesante mientras la usa, hágamelo saber. Se lo diré al comerciante que me la dio.”

“Ciertamente lo haré.”

Lady Ravna asintió galantemente, atándose la espada a la espalda. Tal como pensaba, le sentaba perfectamente.

“Vaya, ¿estamos fuera de lugar o qué?”

Unos días después de la fiesta de hamburguesas, mi grupo y yo fuimos al gremio de exploradores para tomar la clase de exploradores novatos. Sin embargo, como observó Arisa, estábamos increíblemente fuera de lugar.

Los estudiantes que nos rodeaban eran todos niños de escuela media con ropa de segunda mano y equipo casero.

Había algunos hombres bestia mezclados entre los humanos, como tigres y aquellos con cabezas de serpiente.

“¡D-Disculpen! ¿Son ustedes los profesores?”

Una joven entró desde el campo de práctica del gremio y nos miró tímidamente. Estaba equipada con una cota de malla, una maza de acero e incluso un broquel.

Según mi AR, era hija de un caballero hereditario que servía al señor feudal de un territorio vecino.

Ella estaba mirando hacia Nana y Liza, pero respondí en su lugar.

“No, somos estudiantes como tú.”

“O-Oh, lo siento. Soy Gina, hija de Sir Darrel el…”

“¡Hey señor! ¿Qué estás haciendo aquí?”

“Es bueno verte de nuevo, señor. ¿También eres profesor?”

La Señorita Gina fue interrumpida por Alas Amorosas: un par de exploradoras que habíamos rescatado de un ataque de monstruos en el laberinto.

Claramente, eran nuestros maestros del día.

“Oye, ¿ya están todos aquí?”

Un hombre barbudo parecido a un oso con una espada de madera se acercó.

“¿Sir Dozon? ¿Hoy hay maestros adicionales?”

“No, creo que no somos nadie más que ustedes dos y yo.” Los tres profesores parecían conocerse.

El explorador, el Señor Dozon, era un plebeyo, a pesar del uso de “sir” de Alas Amorosas.

“¿Está aquí como alumno de la clase de exploradores novatos, Sir Noble?”

“Sí, es cierto.”

“¿Qué? ¡Pero ya es un experto, señor!”

“¿Seguro que esto no es un error?”

La pareja Alas Amorosas exclamó sorprendida, así que les mostré la carta que había recibido del gremio.

Aparte de este malentendido inicial, la clase transcurrió sin problemas.

“… De todos modos, si empiezan por cazar monstruos patatas y frijoles, nunca pasarán hambre, niños.”

Los novatos escucharon atentamente la conferencia de Dozon.

“Sin embargo, por alguna razón, simplemente cazar papas y frijoles todo el tiempo no te hará más fuerte.”

Explicó que era casi imposible subir de nivel derrotando a esos monstruos, incluso para un explorador nuevo y de bajo nivel.

“Así que formen grupos de tres o más, y si ven ratas o polillas de laberinto mientras cazan los frijoles y las papas, asegúrense de perseguir a esos tipos primero.”

Estos últimos no valían mucho más que sus núcleos de monstruos, pero valían la pena buscarlos para subir de nivel.

Por el rabillo del ojo, vi a Tama y Pochi asintiendo vigorosamente.

Saben que nada de esto se aplica a sus niveles, ¿verdad?

 “¿Qué pasa con la canola enredada que aparece en esas secciones?”

“Ahhh, los puestos de laberinto manju a veces te comprarán esos, pero por lo general no les sirven de mucho. Y son más duros que las patatas y los frijoles, así que evitaría luchar contra ellos sí puedo.”

Dozon respondió a la pregunta del novato con desdén.

“¿Canola? ¿No podrías sacarle aceite?” Preguntó Arisa.

“¿Hunh? Si necesitas aceite, todo lo que tienes que hacer es cazar goblins y llevarlos a un carnicero, ¿no?”

Dozon miró a Arisa como si hubiera dicho algo totalmente ridículo.

Dado que la fabricación de aceite de origen vegetal requería cierto procesamiento y solventes, probablemente fue más fácil obtenerlo de los lodos de aceite.

Aun así, me encantaría tener en mis manos aceite vegetal, así que decidí verificar más tarde si tenía alguna receta.

“De todas formas…”

Dozon volvió a su punto principal.

“Cuando caces ratas y polillas, es posible que vean goblins u hormigas del laberinto, pero no los toquen hasta que tengan el equipo adecuado. Las hormigas del laberinto son particularmente duras. Sin las armas adecuadas, incluso sus maestros, nosotros, podrían tener problemas con ellas.”

Dozon hizo un gesto a Alas Amorosas, que se rieron secamente.

“¡Sí, claro! ¡Podríamos vencer a un goblin sin problema!” Un estudiante particularmente audaz le gritó a Dozon.

“En el mejor de los casos, tal vez. Pero hay fuertes que viajan en grupos cerca de donde viven los frijoles y las papas. Si alguna vez te metes en eso, lanza una bomba de humo o una bomba de destello y corre.”

Golpeando al niño bocón en la cabeza, Dozon se volvió para advertir a los demás.

“Cualquiera que no tenga bombas de destello, levante la mano.”

Fuimos los únicos que levantamos la mano en respuesta a la declaración de Dozon.

Después de sermonearnos un rato sobre cómo un explorador debe estar siempre preparado, Dozon nos dio una muestra de bomba de humo y bomba de destello.

Nos informó que se vendieron en la tienda del gremio del oeste, así que decidí comprar un montón antes de que nos dirigiéramos al laberinto.

“¡Escuchen, muchachos! Para nosotros, exploradores, nuestros cuerpos son nuestras herramientas. ¡Si se lastiman, todo habrá terminado!”

Tama y Pochi inclinaron la cabeza inquisitivamente ante esto.

“¿Qué pasa con las pocionesssssss?”

“No obtendrán ninguna ganancia si usan algo tan caro.” Respondió Dozon.

“¿De verdad, sir?”

“Tama. Pochi.”

Liza hizo un gesto de cerrarse los labios a Tama y Pochi, que las dos rápidamente reflejaron y cerraron la boca.

“Las únicas personas que pueden permitirse el lujo de usar pociones con regularidad son los grupos nobles o los exploradores de insignias granates.”

¿De verdad? No pensé que fueran tan caras… 

Estaba un poco confundido, pero para entonces, el tema ya había pasado de pociones a acampar durante la noche.

“Puede que sea un poco temprano para que prueben esto, pero si van a pasar la noche en el laberinto, asegúrense de llevar comida el doble del tiempo que planean quedarse. Y también contraten portadores de equipaje. El agua es muy pesada.”

Bien, supongo que no todos tienen piedras de agua o bolsas de pozo.

“Señor, ya se ha quedado en el laberinto, ¿verdad? ¿Cuánto tiempo?”

“Sí, unos siete días.”

“¡¿Siete días?! ¡¿Con esas niñas?! Eso es una locura.” El Sr. Dozon pareció sorprendido.

Teníamos una base allí con el estilo de una casa de vacaciones, así que estuvo bien para nosotros, pero supongo que normalmente sería difícil dormir en el suelo húmedo noche tras noche.

“No sigan su ejemplo, niños. La mayoría de las personas se quedan solo tres o cuatro días. Algunos vigías se esconden en las áreas de mantis o escarabajos durante casi medio mes, pero tienen tropas para llevarles suministros, así que eso es diferente. Si intentan hacer lo mismo, terminarán muerto.”

¿Medio mes en el laberinto sin ducharse ni nada? Solo al pensar en eso me picaba la cabeza.

Todavía estaba temblando por eso cuando terminó la conferencia y pasamos a las lecciones prácticas.

Dozon y la pareja Alas Amorosas se separaron y les enseñaron a los novatos algunos movimientos básicos.

“Oye, Sir Dozon, ¿puedes usar ‘Hoja Hechizada’?”

“¡Sí claro! Si pudiera hacer cosas así, no estaría perdiendo el tiempo como explorador.” Dozon se burló de la pregunta del novato curioso.

Ante eso, Pochi y Tama se miraron.

Afortunadamente, el gesto de cerrar los labios de antes parecía haber funcionado, así que no dijeron nada descuidado.

“Las únicas personas que siguen siendo exploradoras a pesar de que pueden usar ‘Hoja Hechizada’ son raros como Jelil y Zarigon.”

“¿Entonces Zakorin también puede usar ‘Hoja Hechizada’? Eso es sorprendente…” Murmuró Arisa con rudeza.

A juzgar por la forma en que mis compañeros lo habían adquirido, imaginé que “Hoja Hechizada” era principalmente una habilidad poco común porque las armas que podían conducir bien la magia no estaban ampliamente disponibles.

Si la práctica de armas como las espadas mágicas de madera se hiciera popular, la cantidad de usuarios de “Hoja Hechizada” probablemente aumentaría.

“¿Estás seguro? Esta es mucha gente, incluso para un noble.”

“Si, está bien.”

Una vez que terminó la lección, invité a los profesores y estudiantes novatos a un bar cerca del gremio.

Todo pagado por mí, por supuesto.

No fue como una fiesta para beber después del trabajo, pero había aprendido mucha información útil y el conocimiento común de los exploradores del Sr. Dozon y los demás, incluso los novatos, así que quería agradecerles invitándolos a comida y bebida.

“¡Vaya, nunca antes habíamos comido en un lugar como este!”

“Oye, deja de mirar así. ¡Pensarán que somos unos paletos de campo!”

“¡Bueno, nosotros somos paletos! ¿Cuál es el problema?”

Muchos de los novatos parecían ansiosos, pero no era un bar de clase alta.