Wortenia Senki (NL)

Volumen 6

Capítulo 2: En Busca de un Nuevo Poder

Parte 3

En el momento en que abrió sus labios, gotas de sudor fluían en su cavidad oral. El sabor de la sal en su sudor y el sabor crudo de la sangre en su boca le hizo contorsionar reflexivamente su cara con asco.

Pero también se dio cuenta de que una parte de él estaba disfrutando el sabor salado. Todo ese sudor hizo que el cuerpo de Ryoma ansiara agua. Tan bien entrenado como pudo haber estado su cuerpo, esto todavía lo estaba forzando. Pero no podía permitirse detener esto ahora. Parar ahora significaría que las hermanas tendrían que comenzar la sesión de mañana forzando una vez más el prana a su cuerpo.

Gaius… Kael… Mi cuerpo tiene el prana que les robé… Debería poder hacer esto… Debería poder mover mis chakras…!

Ryoma trató desesperadamente de mantener la imagen de todo el calor que corría por su cuerpo reuniéndose en su abdomen. Trató de obligar a sus chakras inmóviles a moverse. Los conceptos básicos de la taumaturgia residen en usar tu prana para reforzar tu propio cuerpo.

Sentir el propio prana y canalizarlo como taumaturgia marcial abrió el camino a otras formas de taumaturgia. Ya sea para que otras existencias le presten su fuerza en forma de taumaturgia verbal, o para canalizarlo en algo e imbuir poder en un objeto a través de la taumaturgia dotada.

Y eso fue porque incluso los últimos dos métodos de taumaturgia usaban su propio prana. Y mientras no pudiera controlar el prana que recorre su propio cuerpo, nunca podría esperar canalizarlo y controlarlo fuera de su cuerpo. Por esta razón, la taumaturgia marcial se consideró la base de todos los demás métodos.

La adquisición de taumaturgia marcial requirió romper tres barreras. El primero fue reconocer tu propio prana y poder manipularlo. El segundo fue manipular el prana para abrir el chakra que se dice que es la raíz de todas las funciones corporales: el chakra muladhara o el chakra raíz. Y la tercera y última barrera era poder cerrar voluntariamente el chakra muladhara después de haberlo abierto.

La taumaturgía marcial significaba esencialmente abrir el chakra dentro del cuerpo. Si uno comparara el cuerpo humano con una máquina, el chakra podría ser comparado con un motor. Un vehículo en funcionamiento, naturalmente, necesitaba tener su motor activo, pero una vez terminado, necesitaba tener sus motores apagados. De lo contrario, el motor del vehículo consumiría continuamente gasolina. Lo mismo se mantuvo cierto para la taumaturgia.

Sí, la lógica detrás de esto es bastante simple… Pero estoy luchando solo con el primer paso… Si es tan malo ahora, tengo miedo de pensar en lo que viene después… Ese pensamiento cruzó la mente de Ryoma.

La activación de su chakra hizo que su cuerpo exhibiera más potencia de la que normalmente permitía su fuerza muscular, que se volvió exponencialmente mayor dependiendo del número de chakras activos. Un total de siete chakras existieron en el cuerpo humano. La idea se desarrolló en la antigua India, donde se convirtió en parte del brahmanismo, el hinduismo, y pasó a integrarse en el budismo y el yoga.

Pero por supuesto, la gran diferencia entre esas ideas y la taumaturgía es que el dominio de esta última de hecho otorgaría una fuerza sobrehumana. Ryoma intentó activar el primero de esos chakras, el chakra muladhara, con la ayuda de las gemelas Malfist. Pero las cosas no iban tan bien como le hubiera gustado. La impaciencia y la ansiedad atormentaban el corazón de Ryoma.

Pero sus preocupaciones resultaron ser infundadas. Ryoma no pudo decir cuánto tiempo tomó, pero la ansiedad y el miedo gradualmente comenzaron a desvanecerse, y su corazón se aclaró. Era como si se volviera capaz de escuchar algo que no podía entender antes – como si los contornos de algo estuvieran saliendo a la vista. Podía sentir un cierto palpitante. Primero por su respiración, y eventualmente emanando de cada célula de su cuerpo.

Podía decir que algo – sobre su cuerpo estaba cambiando.

Puedo sentir algo… Esta no es mi sangre… Y no es algo que venga de sus manos. Hay algo caliente circulando por mi cuerpo, y no es sangre… Es esto… mi prana?

En el momento en que se dio cuenta de esto, un cambio tuvo lugar dentro de Ryoma. Algo despertó de las profundidades de su cuerpo, que fue estimulado por el prana de las hermanas Malfist.

Un intenso latido estaba arrasando su cuerpo, y Ryoma desesperadamente trató de contenerlo. La forma en que rugía se sentía como una bestia encadenada tratando de abrirse camino a través de las cadenas que la sostenían en su lugar.

Las manos de los gemelos sintieron una sensación de resistencia, como si el cuerpo de Ryoma estuviera tratando de luchar contra el prana que estaban vertiendo en él. Tan pronto como sintieron eso, las hermanas le soltaron la espalda.

“Cómo se siente?” preguntó Sara, su voz estaba llena de preocupación.

“Sí… puedo sentirlo… es como si hubiera un… animal furioso dentro de mí… Ugh!” Respondió Ryoma con cautela.

Ahora mismo, el chakra muladhara, localizado en el perineo de Ryoma, fue sacudido en acción por el estímulo del prana de las hermanas Malfist. Ryoma sentía como si, si no mantenía su ingenio sobre él, podría muy bien saltar sobre las hermanas como un animal sediento de sangre. Los instintos de Ryoma lo estimulaban. Un impulso para herir a otros. Para devastar a otros. Para matar a otros.

Necesidad. Instinto. Impulso.

La lujuria burbujeó desde el fondo de su corazón. Esta bestia del deseo normalmente estaba encadenada, sacudiéndose y agitándose en un intento de desgarrar las ataduras del sentido común. Esto fue lo que el yoga describió como un despertar de la kundalini. Una explosión que se dice que se asemeja al despertar y desenrollar la serpiente de la creación.

Cálmate, respira hondo… Así… Poco a poco…

Pero el cuerpo de Ryoma ignoró su voluntad, y se activaba por sí mismo. Sus músculos palpitaban y sus latidos se aceleraban. La sensación de su piel se hizo mucho más aguda, y se sentía como cada célula de su cuerpo se hubiera acelerado.

Las hermanas Malfist asintieron la una a la otra sin palabras y dejaron la tienda. No había nada que pudieran hacer incluso si se quedaran allí.

***

“Entonces, cómo se ve el chico? Sólo vine a reportar que hemos terminado con los pequeños.” Lione llamó a las gemelas, que hacían guardia en la tienda de Ryoma, después de terminar el entrenamiento con los niños.

El entrenamiento de hoy concluyó con una simple explicación de la taumaturgía y con los mercenarios vertiendo un poco de prana en cada uno de los niños. Ahora volvían a sus clases. Lione había concluido su parte del trabajo para ese día, pero Ryoma – a quien ella debía reportar – todavía estaba en medio de su propio entrenamiento.

“Lione… el Maestro Ryoma todavía está adentro…” Las hermanas dijeron simplemente esto y sacudieron la cabeza.

Al ver esto, Lione se asomó a la tienda y asintió con la cabeza.

“Está tardando un poco, no?… ha estado haciéndolo desde la mañana, verdad?”

Ya eran las tres de la tarde.

“Sí… ya hace cinco horas.” Sara afirmó, a lo que los ojos de Lione se abrieron con sorpresa.

“Ya que ustedes dos están afuera, eso significa su chakra…”

“Todavía está abierto, sí”. Laura asintió, con su mirada llena de ansiedad.

La expresión de Lione se endureció. Ella estaba preocupada por lo mismo.

“Cinco horas, eh… el chico absorbió un montón de prana de toda la gente que mató… supongo que tiene sentido… que podría ser peligroso… Por eso estaba en contra, en realidad…”

La expresión de Laura contorsionó con sus palabras. Tanto Ryoma como los niños estaban pasando por el mismo proceso para aprender taumaturgia, pero las condiciones de inicio de Ryoma eran radicalmente diferentes. Al menos en términos de la cantidad total de prana que habían absorbido, los niños no tenían experiencia en tomar las vidas de otros y sólo tomaron la cantidad necesaria para que sus cuerpos sobrevivieran. Puede que haya habido algunas diferencias individuales, pero la mayoría de los niños sólo llegaron a eso.

Pero Ryoma, por el contrario, era demasiado diferente en ese sentido. Mató a Gaius Valkland y Kael Iruna, hombres capaces de taumaturgia, así como a innumerables monstruos. Como resultado, la gran cantidad de prana que reside en el cuerpo de Ryoma era casi el doble de la cantidad normal.

Normalmente, tener más prana sería algo bueno, pero cuando se trataba de dominar la taumaturgia marcial en realidad se convirtió en una desventaja. Se hizo más difícil controlar el chakra de uno. Era como si Ryoma fuera a aprender a conducir, pero su auto de entrenamiento fue modificado para tener el rendimiento de un auto de carrera. Era el mismo automóvil y el método de conducción no difería mucho, pero tratar de conducirlo no se podía comparar con un automóvil de entrenamiento.

Por supuesto, todo esto era imposible. Ningún principiante comienza con una tarea que solo un estudiante avanzado podría abordar, y ningún maestro aprobaría dejar que su estudiante haga eso. De la misma manera que, independientemente del mundo en el que se encuentre, nadie dejaría un vehículo que cueste una fortuna en manos de un aficionado.

Pero cuando se trataba de dominar la taumaturgia, había una pequeña probabilidad de que esto sucediera. Un aprendiz sin control sobre su chakra podría verse obligado a conquistar la gran cantidad de prana que reside en su cuerpo.

El sentido común de esta Tierra era esperar a que el chakra comenzara a funcionar normalmente. Así fue como la mayoría de los mercenarios de origen plebeyo aprendieron taumaturgia. Pero Lione y los demás advirtieron a Ryoma con anticipación que esto podría suceder, y Ryoma decidió ignorar esas advertencias y aprender a la fuerza la taumaturgia.

No confiaba demasiado en su talento, y no era que no creyera en las palabras de Lione. Pero estaba presionado por el tiempo. No podía decir si su chakra se abriría naturalmente cuando se dirigieran a la península de Wortenia.

“Supongo que no tiene sentido decir que ahora, sin embargo… Ustedes dos deben descansar, también. Ustedes tuvieron que usar un montón de prana para abrir su chakra, verdad? Mantendré un ojo en el niño, así que consigan algo para comer.” Lione dijo por consideración a su salud, dirigiendo una mirada amable a las gemelas.

“Apreciamos tu consideración, pero… debes estar cansada también, Lione.” Laura dijo.

“Laura tiene razón. Tuviste que verter tu prana en algunos de los niños, verdad?”

Lione se echó a reír ante la sugerencia de las hermanas.

“Pequeñas idiotas. En serio… compartir prana entre diez o veinte niños no va a cambiar mucho para mí. Y sólo les dimos un poco de sabor hoy. A diferencia del niño aquí, no se necesita mucho para llenar sus cuerpos con prana.”

Lione realmente no estaba muy fatigada. Ella tenía aproximadamente la misma capacidad que cualquiera de los gemelas, también. Esto solo significaba que el prana de Ryoma era mucho más grande que el de los niños.

“Está bien! Ustedes dos des-”

Justo cuando Lione estaba a punto de implorar a las gemelas Malfist que descansaran de nuevo, el sonido de algo que se derrumbaba resonó desde dentro de la tienda. Las tres palidecieron de una vez y entraron apresuradamente en la tienda.

“””Maestro Ryoma”””

“Chico!”

Lione levantó a Ryoma, que estaba boca abajo en el suelo, y puso una mano contra su boca para comprobar que aún respiraba.

“Está bien. Solo está inconsciente. Lo juro, le dije que era imprudente… Laura, prepara un lugar para que se acueste. Sara, ve a buscarle un poco de agua!”

El pulso de Ryoma también parecía estar en orden. Parecía que habían escapado del peor escenario posible. Concluyendo que se desmayó por síntomas de deshidratación ligera y fatiga, Lione rápidamente dio instrucciones a las hermanas.

“””Entendido! De inmediato!”””

A pesar de estar bastante cansadas, las hermanas siguieron rápidamente las instrucciones de Lione.

“Maldita sea, chico… te dije que no hicieras esto…” susurró Lione, sonriendo amargamente después de concluir que su vida no estaba en riesgo.

Lione sabía muy bien que tenían poco tiempo que perder, pero incluso si Ryoma solo no podía usar taumaturgia, todos a su alrededor podrían haberlo cubierto de todos modos. Eso era aún más crucial porque él era el jefe de la Casa Mikoshiba – en términos de ajedrez, él era el rey. Y el rey no está destinado a luchar en las líneas del frente. Ryoma honestamente no tenía ninguna razón real para insistir en aprender taumaturgia.

Pero a pesar de su tono sarcástico, Lione estaba realmente feliz por dentro. A pesar de ser el jefe de la casa, Ryoma insistió en adquirir una taumaturgia. Era una prueba de que quería vivir mientras permanecía al mismo nivel que sus camaradas. Una muestra de su disposición a ensuciarse las manos con sangre.

Ella solo conoció a Ryoma hace no mucho tiempo, pero entendió su personalidad lo suficientemente bien. Y aún así, ver a Ryoma inconsciente le dio una nueva apreciación de la resolución del joven.

Chico… me alegro de haberme quedado contigo… si eres tú… podrías ser capaz de cambiar nuestro destino…

El destino de un mercenario estaba a la vista. Serían traicionados por un empleador o perderían la vida en un campo de batalla. Y si ninguno de los dos sucediera, acumularían suficientes lesiones para morir eventualmente.

Cualquiera que sea el final que conocieran, su futuro seguramente sería sombrío. No hubo un solo mercenario que se lavó las manos del karma de este negocio sangriento y pasó sus años dorados en paz. Solo los mercenarios más afortunados tuvieron la suerte de que sus hazañas fueran inmortalizadas por los trovadores.

Y por eso los mercenarios nunca temieron a la muerte. Un hombre que temía a la muerte no era apto para el negocio. Pero lo que más odiaban era la idea de tener una muerte sin sentido y olvidada. Si la muerte era inevitable, entonces eligieron morir con un propósito. Y en ese momento, Lione confirmó una vez más que había encontrado un propósito para vivir, luchar y morir.

Si eres tú… Si es por tu bien…

Envolvió sus manos alrededor del cuerpo flácido de Ryoma y suavemente cepilló sus dedos a través de su cabello. Como una madre acunando a su amado hijo.