Danmachi: Sword Oratoria (NL)

Volumen 10

Capítulo 1: Presagio

Parte 1

—Todavía no hemos logrado encontrar la llave…; alguien soltó en voz baja, pero resonó en la oficina terriblemente fuerte.

Las manecillas del reloj de pie marcaban la hora de la tarde en la esquina de una habitación en la casa de la Familia Loki, el Twilight Manor. Como para anunciar la próxima caída de la noche, el cielo comenzó a pasar a un débil carmesí más allá de la ventana.

Los otros en la habitación—Riveria, Gareth y Loki—respondieron al comentario de Finn en silencio. La “llave” en cuestión era un cierto objeto mágico: El Orbe de Daedalus, una joya con la capacidad de abrir las puertas del laberinto artificial, Knossos.

La Familia Loki estaba rastreando el paradero de ese orbe usando cualquier medio necesario.

—Tiona y los demás han estado buscando, pero aún no han encontrado nada aún.

—Hemos encontrado entradas a Knossos fuera de la ciudad y dentro del Calabozo. Nos estamos acercando, pero… el enemigo está escondido, como esperábamos. Después de que Bete mató a Valletta, ellos no saldrán hasta que llegue el momento.

Los restos de la fuerza subterránea de The Evils y las criaturas bajo el control de los espíritus corruptos se escondían en Knossos—esperando la oportunidad de cumplir su objetivo final de destruir a Orario. Y su objetivo no era una tontería o una ilusión, especialmente ahora que estaban usando semi-espíritus. Orario estaba en peligro, claro y presente.

Para detener al enemigo y atacar el laberinto inexpugnable, la Familia Loki necesitaba la llave de las puertas del orichalcum.

—Pensé que estaba en el camino correcto, pero… esa diosa adicta al sexo se vuelve tonta cada vez que trato de hablar con ella. No entregará ninguna maldita información; Agregó Loki con una voz impregnada de asco desde su sitio al borde de un escritorio.

Esto estaba fresco en su mente, ya que la Familia Freya acababa de aniquilar a la Familia Ishtar, que había sido conectada a los Remanentes de The Evils. Y con la información que Bete había obtenido de la exmiembro de la Familia Ishtar, Lena Tully, ellos sabían que Ishtar había tenido una llave, pero ya ella había sido enviada de donde había venido.

Loki sintió que Freya era la que tenía la “llave”, literal y figurativamente.

—… No hay tiempo.

La conversación se detuvo, seguida de un breve período de silencio.

Finn habló solemnemente. —Conflicto interno… Bueno, esa podría no ser la forma correcta de decirlo. Pero si Loki tiene razón en que la Familia Freya tiene la llave, no tenemos más remedio que sopesar todas nuestras opciones.

Los rostros de Riveria y Gareth se volvieron sombríos.

Su capitán no descartaba la posibilidad de una lucha, también conocida como

una transacción algo contundente respaldada por métodos más agresivos, si las negociaciones fracasaban.

No había que decir que la Ciudad Laberinto en sí sufriría graves daños si las dos familias en la cima de Orario adoptaran una postura hostil entre ellas. Y fue lo suficientemente difícil para los miembros de ambos grupos interactuar cuando operaban bajo los caprichos y deseos de las dos diosas patronas. Para empezar, toda esta situación resaltaba las trampas de todo el  sistema de familias dirigidas por deidades.

Finn plantó ambas manos sobre el escritorio, entrecerrando sus ojos azules, que se parecían mucho a la superficie de un lago. Él abrió la boca, listo para dar sus instrucciones.

—¡Capitán! ¡Voy a entrar!; Raúl irrumpió en la habitación sin llamar.

Él estaba terriblemente sin aliento, haciendo una mueca cuando notó que había tropezado con una conversación obviamente tensa. Las miradas de todos en la habitación se movieron hacia Raul, y él tragó saliva de forma incómoda cuando se dio cuenta de que lo había vuelto a hacer.

—¿Pasó algo, Raúl?

—Um, uh… ¡Se me ordenó mantenerte actualizado a medida que recibimos nueva información…! Aunque no tiene nada que ver con Knossos…

Está bien, solo dime, instó Finn con los ojos.

Raul se estremeció antes de mirar por la ventana el paisaje urbano. —Acabamos de recibir la noticia de que hubo un disturbio en el lado oeste de la ciudad.

***

— ¿Un monstruo humanoide…?; Aiz replicó.

—Sí, sí. Ayer apareció en el barrio occidental; Respondió Tiona con un toque dramático, extendiendo los brazos mientras caminaba junto a Aiz.

Junto a Tiona, Tione frunció el ceño de forma molesta. El sol de la mañana entraba por una hilera de ventanas.

Después de terminar su práctica diaria de balancear su espada, Aiz se topó con las hermanas amazónicas en un pasillo estrecho de la mansión. Las dos explicaron el alboroto que había asolado a la Familia Loki el día anterior.

— ¿Y no es un monstruo de gran tamaño…?

—Aparentemente no. Según los aventureros de nivel inferior, era como una arpía o una siren. Apuesto a que no está relacionado con el incidente que ocurrió durante la Monsterphilia; Tione sacudió la cabeza.

Básicamente, Aiz preguntaba si era una flor devoradora de hombres, y Tione confirmó que este evento probablemente no estaba relacionado con los monstruos que corrían libres en las vías fluviales subterráneas de Knossos, los mismos monstruos con los que habían lidiado durante el incidente de la Monsterphilia.

Aiz ladeó la cabeza.

Era posible que los testigos hubieran identificado erróneamente a un monstruo con cabeza de bestia con un cuerpo humano, como un kobold, por ejemplo, por un humanoide. Los monstruos humanoides solo aparecían en el piso diecinueve, y era difícil imaginar que pudieran subir tantos pisos sin ser notados por los aventureros.

Y ante todo, fue un gran problema para los monstruos aparecer sobre el suelo en Orario, que estaba protegido por Babel y sus gigantescas murallas. Aparte de la Monsterphilia, sacar a las bestias del laberinto estaba estrictamente prohibido. Era de sentido común que cualquiera que fuera sorprendido rompiendo esa regla sería severamente castigado por el Gremio.

—Causó un gran alboroto ayer. Un grupo de trabajadores del gremio está investigando en este momento, aparentemente.

Según los informes, el presunto monstruo humanoide apareció en el medio de una calle donde la gente normal andaba diariamente. Si ese fuera el caso, sin duda sería una gran noticia. No había duda de que tal incidente causaría que la esquina pacífica de la calle cayera en el caos.

—… ¿Finn sabe sobre esto?; Preguntó Aiz.

—Sí. El capitán dijo que le gustaría que las personas con tiempo libre intenten reunir información sin llamar demasiado la atención. Creo que tiene algo en mente; Respondió Tione.

Finn debe haber tenido algunas ideas sobre el incidente si los aventureros de nivel inferior en la familia ya están cuchicheando sobre esto.

La aparición de monstruos humanoides… Si están suponiendo que es una arpía o una siren, entonces debe ser una especie alada…

Y el monstruo podría haberse escondido en algún lugar de la ciudad, dejando a los civiles en un estado de miedo perpetuo. Era insoportable imaginarlo.

Aiz levantó la cabeza y miró al techo, diciéndose a sí misma que dejara caer la imagen mental y se acercara a la situación como una aventurera que reside en la ciudad.

—¿Y si alguien lo encuentra?

—Bueno, las instrucciones de Finn eran “es mejor capturarlo vivo”; Dijo Tiona, tejiendo sus dedos en la parte posterior de su cabeza.

Tione terminó. —Y “elimínalo si parece que podría lastimar a alguien”.

Aiz dejó que su cabello dorado se despeinara con una brisa mientras tocaba su espada de confianza Desperate que colgaba de su cintura.

—Está bien; Ella asintió con la cabeza después de despejar su mente de todos los pensamientos.

***

—¡Una cita con Bete Loga! ¡Una cita con Bete Loooooga! ¡Oye! ¡Oye! ¿Quieres tomar mi mano?; Chilló una chica de piel morena, sonriendo de oreja a oreja mientras caminaba a su lado.

En lugar de tomar su mano, Bete le dio un codazo a Lena Tully en la sien sin decir una palabra. En este punto, él se había acostumbrado a hacer estos golpes repentinos.

— ¿¡Eh!? ¿Por qué veo estrellas? ¿Por qué estoy viendo una noche estrellada en lugar de Bete Loga?

—Compláceme y dime qué demonios estás haciendo aquí.

—¡He estado vigilando la mansión de la Familia Loki, dah! ¡Ack! ¡Más estrellas!

—Largo de aquí.

La chica amazona gritó de dolor, agarrándose el costado de la cabeza palpitante y retorciéndose en el suelo—sin preocuparse por el hecho de que su ropa interior estaba a la vista. Algunos demihumanos que pasaban le dispararon unas miradas molestas.

Bete siguió caminando enérgicamente sin siquiera mirar de reojo a la chica que dejaba escapar chillidos incomprensibles.

—Ella sí que anda muy enamorada de ti…

—Ya basta. Guarda esa mierda para ti; Le espetó Bete a Anakity, la gata mirándolo con exasperación.

Aunque ambos eran personas animales, este emparejamiento fue extremadamente inusual, incluso para los estándares de la Familia Loki.

— ¿¡Qué!? ¡Sepárense, ustedes dos! ¡Sepaaaaaaaaaaaaarens!; Lena se puso de pie de un salto y se lanzó entre los dos, separándolos con las manos. —¡Dame un respiiiiiiro! ¡Ugh! ¡La Familia Loki tiene demasiadas chicas ardientes y bellas! ¡Bete va a ser seducido! ¡Estoy tan preocupada!

—¿Se te zafó un tornillo?

—No te preocupes. Prefiero a cualquiera menos a él.

Los dos se adelantaron, ignorando por completo a Lena y dejándola sola en su camino. Con un gran jadeo, ella corrió tras ellos.

—¿Es aquí donde apareció el monstruo?

—Sí, parece que sí.

Ellos se dirigían a la sección noroeste de la ciudad y ahora se encontraban en un callejón estrecho entre muchos. No era una carretera principal de ninguna manera.

Siguiendo las instrucciones de Gareth, Bete y Anakity, elegidos por la simple razón de que podían seguir su aroma con sus narices, estaban rastreando al monstruo humanoide.

El avistamiento más reciente del monstruo fue la noche anterior. El Gremio había concluido su investigación, pero eso no significaba que no hubiera más pistas o huellas.

—¿A quién le importa ese monstruo? No es que tenga algo que ver con la llave.

—No lo sabes. Tenemos que recopilar tanta información como sea posible. ¿Me equivoco?; Anakity reprendió a Bete ligeramente.

—¡Ah! Lo que realmente estás diciendo es que no podemos hacer nada más.

…¿Hmm? ¿Qué es esto? ¡Sus bromas hacen que parezcan socios en el crimen que no se llevan bien pero que claramente han pasado años juntos …! Pero, en serio, ¿esta gata es mi rival…? ¿Qué pasa aquiiiiii?

Bete estaba obviamente de mal humor porque parecía que se habían quedado sin opciones, y él seguía desquitándose con los demás. Anakity estaba ocupada tratando de aplacarlo. Pero Lena malinterpretó todo su intercambio, y esto la llenó de inquietud por su relación. Su solución fue aferrarse a él más agresivamente.

Alejando los avances de Lena con una mano, Bete se detuvo frente a un callejón lateral.

—Desapareció aquí. Una chica elfo se llevó al monstruo mientras los lugareños le arrojaban piedras.

—¿Una mocosa elfo?

—Al principio, el monstruo llevaba una túnica para ocultar su cuerpo, pero luego la gente dice que extendió sus alas mientras atacaba a un niño.

—Algo no cuadra…; Bete frunció el ceño cuando Anakity le dio un resumen rápido.

Los dos comenzaron a oler e inmediatamente percibieron un olor sospechoso—la presencia de algo inhumano. No había sido detectado por los humanos en el Gremio y otros aventureros, pero no podía pasar por alto las narices de las personas animales, cuyos sentidos se habían agudizado al subir de nivel repetidamente.

Ellos cambiaron de ubicación, dejando el camino para seguir el olor por una calle secundaria con poca luz.

—Tch. Usaron un maldito objeto para cubrir sus huellas.

—Parece que…

—¿Huh? ¿Qué? No hay forma de que un monstruo pueda usar objetos… Con esto y nuestra última conversación, ¿no significa eso que alguien lo está protegiendo?

—¿Cómo demonios se supone que lo sepa?; Respondió Bete a Lena, cuya cabeza salió de detrás de él con sorpresa.

Él se movía por instinto, dirigiéndose al séptimo distrito de la ciudad después de reunir la explicación de Anakity y la corazonada que él tenía.

—… Huh. ¿Qué pasa con esta vieja iglesia decrépita?

Pasaron junto a los restos de un edificio convertido en montaña de escombros que parecía haber sido destruido por magia. Apenas podían distinguir una capilla desierta de las ruinas desmoronadas de lo que solía ser un edificio de piedra adecuado.

—… Oh, sí, creo que escuché un rumor sobre una familia que usa una capilla como su hogar.

—¿Cuál?

—Hmmmm… ¡Oh, no sirve de nada! ¡No puedo recordar su nombre, a pesar de que mi cerebro está lleno de materia gris…!

—Vete al infierno; Escupió Bete, escaneando los escombros cuando Lena se cruzó de brazos y gimió mientras se sacudía el cerebro.

Una estatua rota de una diosa rodó a sus pies.