Wortenia Senki (NL)

Volumen 3

Capítulo 3: El Asesino

Parte 4

Golpear los puntos débiles de uno era un concepto bastante fácil de verbalizar, pero ser capaz de hacerlo en medio del combate era una prueba de la brecha en la habilidad entre los dos.

A diferencia de las lesiones dirigidas a los ojos o las partes privadas vulnerables de uno, un golpe en el hombro o el diafragma requirió una gran fuerza y un ángulo preciso para exhibir los efectos deseados. Uno no podía simplemente golpear esos lugares y esperar paralizar al oponente.

El hecho de que él pudiera golpear con precisión los puntos débiles de un asesino, mientras la tomaba por sorpresa en completa oscuridad, nada menos, dijo mucho sobre sus habilidades.

“Bueno la pillé desprevenida. No se sabe cómo terminaría si estuviéramos peleando cara a cara”.

No fue un cumplido o un intento de consolar, pero el anciano se burló del comentario de Ryoma.

“Imbécil. Qué tipo de asesino pelea cara a cara?”

Sus palabras hicieron que Ryoma sonriera amargamente.

Ciertamente sonaron verdaderas.

“Sí, supongo que sí… Oh, espera. Estoy bastante preocupado por Sakuya aquí, así que permíteme”.

Dicho esto, Ryoma se acercó a su cama, tomó una manta y la colocó sobre los hombros de Sakuya.

“G-Gracias”.

“Oh, no. Esto es solo para que pueda mirar hacia ti sin desviar la mirada”.

Al escuchar las palabras de Ryoma, Sakuya se cubrió los senos con los brazos, recordando que su parte superior estaba cortada.

“Hmph. No me digas que no has conocido a una mujer antes, cachorro?”

“No es una cuestión de saber o no saber”. Ryoma respondió encogiéndose de hombros.

“Esta es simplemente la mínima cantidad de respeto que le mostraría a cualquier mujer”.

Ryoma no se consideraba a sí mismo por encima de estar interesado en las mujeres, pero no era del tipo que miraba a una mujer a la que le habían cortado la ropa. Tal vez si estuvieran solos en una habitación privada, las cosas serían diferentes, pero al ver cómo estaban rodeados de otras personas, se sentía aún más imprudente hacerlo.

Ryoma no estaba seguro de si esa consideración era necesaria en este mundo, pero no iba a salir de su camino para romper su propio código moral a menos que su vida estuviera en riesgo.

“Ahora bien… Tenemos algunas preguntas que hacernos. No te importa contestar, verdad?” Ryoma cambió de tema.

No podía seguir respondiendo las preguntas de este anciano repetidamente, después de todo. No estaba claro quién era o por qué se mostró.

“No me importa…” respondió el viejo.

“Pero creo que ya has predicho la mayoría de las respuestas. Seguirás preguntando a estas alturas del juego?”

“Las expectativas no siempre se alinean con la realidad”.

“Ya veo…” El hombre dijo pensativo.

“Eres prudente … Como debería ser un hombre al frente de un ejército. Muy bien, responderé cualquier pregunta que pueda”.

“Bien. Entonces primero, déjame confirmar algo. Eres tú y tu tribu descendientes de personas que fueron convocadas?”

“Sí, la primera generación de nuestro clan fue convocada a este mundo hace unos cinco siglos”.

El anciano respondió rápidamente la pregunta de Ryoma.

“Se dice que cierto país del continente occidental los convocó…”

“Hace cinco siglos… Espera, toda la primera generación? No se trataba solo de una persona?”.

Superado por la sorpresa por un momento, Ryoma se dio cuenta de que el anciano acababa de mencionar por casualidad el detalle más sorprendente hasta el momento.

“La aldea entera de nuestros antepasados fue convocada”.

“Toda su aldea…?”

“Sí…” El viejo asintió.

“Sin embargo, era un pequeño pueblo de unos veinte…”

Por lo que se les dijo, sus antepasados fueron convocados junto con los futones en los que dormían. Parecía que el flujo de tiempo entre esta Tierra y Rearth era el mismo, por lo que un ritual realizado durante la noche no estaba fuera de discusión.

“Entonces, es posible convocar pueblos enteros incluso ahora?”

Ryoma no recordaba haber escuchado sobre algo que sucediera de manera poco natural. La información viajaba rápido en su mundo, y si una aldea entera desaparecía, causaría bastante revuelo.

“No, eso es cosa del pasado. Los catalizadores necesarios para la invocación son muy pocos y más difíciles de encontrar hoy en día, por lo que incluso un país más grande solo podría administrar unas pocas convocatorias al año”.

Entonces eso significa… Que btuve la tirada más miserable de los dados…

Solo unas pocas convocatorias al año para un país grande… Ryoma no sabía cuántos países había en este mundo, pero asumió que todos juntos podrían convocar a un máximo de doscientas o trescientas personas al año. Y si bien Ryoma nunca se vio a sí mismo como particularmente afortunado, si lo que este anciano dijo era creíble, solo podía lamentarse de lo podrida que era su suerte. Después de todo, había seis mil millones de personas viviendo en su mundo, por lo que la probabilidad de ser seleccionado de todos ellos era astronómicamente pequeña.

“Ya veo … Siguiente pregunta, entonces. Por qué siguen siendo asesinos?”

Fueron convocados hace quinientos años. Eso estuvo bien. Pero si fueron convocados hace tanto tiempo, por qué seguían trabajando en esa profesión? Cómo funciona todo un clan como asesinos para empezar? Esto era algo que Ryoma quería comprobar.

“El nuestro era originalmente un clan de rappa”.

Todos, excepto Ryoma y Sakuya, miraron al viejo con aprensión. Pero siendo japonés, Ryoma sabía el significado de esa palabra, aunque era ciertamente arcaica.

Rappa, también conocida como suppa o kusa, eran individuos que practicaban cierto tipo de profesión. Tenían muchos nombres diferentes, pero uno destacaba entre los demás:

Ninja.

Sí, si se confiaba en este anciano, el clan de Sakuya era un clan de ninjas.

Oh, ya veo… creo que entiendo por qué su clan se quedó como estaba en los quinientos años desde entonces.

Efectivamente, si un ninja fuera arrojado a un mundo desgarrado con una guerra como este, no tendrían más remedio que hacer uso de sus habilidades. Vivieron cinco siglos en este mundo puliendo sus habilidades de combate.

Y como decían ser rappa, significaba que Sakuya y su clan no eran solo asesinos. Eran expertos en subterfugios, inteligencia, disturbios y servían como guardaespaldas de personas importantes.

“Hmm, entiendo… Por cierto, de qué escuela eras?”

De las escuelas ninja, los Iga y Koga eran los más famosos.

Además, la casa que controlaba Kanto durante el período de los estados en guerra, Houjou, fue atendida por el clan Fuuma, y la casa Uesugi fue servida por Nokizaru. Se decía que la escuela de Togakushi todavía permanecía en Estados Unidos.

En resumen, había bastantes escuelas, por lo que Ryoma preguntó por pura curiosidad. Sin embargo, el anciano parecía no tener interés en eso.

“No lo sé. Un rappa es un rappa. Robamos, robamos y matamos. Eso es todo al respecto. Los nombres no importan”.

El nombre de su escuela realmente no era tan relevante. Pudo haber sido necesario si uno fuera a dar a conocer su nombre en toda la tierra, pero si pretendían transmitir sus habilidades solo a su clan, realmente no había necesidad de un nombre para distinguirse de los demás.

“Conoce el nombre de la región en la que vivieron sus antepasados?”

“No sé su nombre, pero se transmite que vivieron en una montaña adyacente a un lago”.

El anciano respondió honestamente a las persistentes preguntas de Ryoma.

No tenía sentido ocultar esta información.

Un lago… Lago Hiwa, tal vez? Así que probablemente sean descendientes de los Koga o los Iga…

Eran pueblos ninja de los que la mayoría de la gente en el Japón moderno había oído hablar. Era lo suficientemente plausible. O podría ser el lago Suwa, en cuyo caso podrían estar relacionados con la escuela Togakushi, se dice que se originó en el cercano monte Togakushi del mismo nombre.

No puedo decir que no tenga curiosidad, pero probablemente debería dejarlo.

Después de todo, se consideraba que los ninjas databan desde el período Kamakura. Se registraron unas treinta escuelas en documentos de la época, y si se contaran algunas leyendas inciertas que surgieron a lo largo de los años, había más de setenta escuelas.

Su historia estaba envuelta en la oscuridad. Y, de hecho, la mención de ellos le hizo cosquillas al espíritu aventurero, sin mencionar el interés personal de Ryoma en la historia. Le hubiera encantado profundizar en el tema, pero ahora no era el momento.

“Muy bien… Una última pregunta, entonces”, dijo Ryoma.

“Anteriormente, respondiste mi pregunta con ‘este es el destino de nuestro clan’… Qué quisiste decir con eso?”

La respuesta a esta última pregunta fue una que no podía predecir fácilmente. Los ninjas japoneses vivían en sus tierras particulares y buscaban empleadores o trabajaban al servicio de un maestro en particular. Probablemente había muchas personas en el poder que matarían para tenerlos a sus empleados. Pero a pesar de eso, vagaron sin establecerse durante cinco siglos.

Debía haber alguna razón particular para eso. Y la pregunta de Ryoma era comprensible. Sin embargo, no consiguió que le contestaran.

“Mm. No puedo compartir esa información con un extraño”.

La cara del anciano se contorsionó significativamente.

“Ya toca las reglas de nuestro clan, ya ves”.

“Entiendo. Mis disculpas por preguntar, entonces”. Ryoma inclinó la cabeza en tono de disculpa.

“Oh… No te interesa saberlo?”.

Ryoma se rindió tan fácilmente que el viejo le preguntó con curiosidad.

“Voy a pasar. No es de mi interés entrometerme en los secretos de otras personas… Además, dicen que la curiosidad mató al gato”.

Era instinto natural que uno guardara interés en los secretos de otras personas, y cuanto más se guardaba un secreto, más se despertó la curiosidad de uno.

Pero los secretos tenían motivos para mantenerse ocultos, y lo que puede ser de poca importancia para un extraño podría significar el mundo para los involucrados.

Hacer que la gente venga después por mi vida porque sé demasiado no sería una broma…

La vida en este mundo ya valía poco como era. El punto de vista de Ryoma era que no había necesidad de arriesgarse más de lo requerido.

“Esa es la moderación para alguien tan joven… Ciertamente has captado mi interés!  Me llamo Genou. Genou Igasaki. Espero una amistad prolongada”.

“Prolongada…?” Ryoma se sorprendió por sus palabras. Esto fue demasiado repentino.

“Deja de fingir. Salvaste a Sakuya porque querías convertirla en tu rappa, no? Para ese fin, como su abuelo, te serviré junto a ella!” Genou sonrió como si acabara de hacerle un favor a Ryoma.

Tenía el ceño fruncido hasta ahora que cuando sonrió, parecía un viejo amistoso.

“Abuelo…?”, Preguntó Sakuya con miedo.

“Qué pasa, Sakuya? No me digas que no estás satisfecha con esto…? Habiendo fallado su tarea, debería estar muerta ahora mismo. Pero el Maestro Mikoshiba aquí te salvó la vida. Es preferible dejar que este te use, no?”

Genou comenzó a referirse a Ryoma como “Maestro Mikoshiba”. Un paso definitivo de cómo lo había llamado “usted” o “cachorro”. Parecía que Genou estaba decidido a servir a Ryoma.

“Ah… Bueno… Sí”.

Al darse cuenta de que Genou había tomado una decisión, Sakuya no tuvo más remedio que asentir.

“Estoy seguro de que no le importa, Verdad, Maestro Mikoshiba?”

La pregunta de Genou hizo que Ryoma se hundiera en sus pensamientos. Es cierto que tenía la intención de ayudarla si era japonesa, y consideró poner en práctica sus habilidades como asesina, pero la conversación se salió de control con la repentina aparición de Genou.

Qué demonios está pasando aquí?

Esto fue un regalo del cielo desde la perspectiva de Ryoma. Aparte de Sara y Laura, él estaba en una alianza conveniente en el mejor de los casos con todos los demás. Lione y Boltz eran mercenarios en los que podía confiar a nivel personal, pero no se sabía cuándo los caballeros podrían traicionarlo.

Solo obedecieron las órdenes de Ryoma porque la princesa Lupis lo había reconocido como comandante. Si la princesa Lupis decidiera abandonar a Ryoma, los caballeros ignorarían inmediatamente sus órdenes.

En ese sentido, tener camaradas capaces de su lado era algo por lo que estaba agradecido. Excepto …

Esto va demasiado rápido… Estos dos aparecieron para matarme. Pero… Vale la pena usarlos. Si realmente puedo ponerlos de mi lado, sería realmente conveniente… La única pregunta es, qué sacan de pedirme esto? Pero si realmente están pensando en servirme…

Ryoma fijó su mirada en Genou. Necesitaba urgentemente peones útiles.

Realmente necesito personas que puedan manejar la inteligencia… Pero, cómo puedo confirmar si la información que me brindan es verdadera…? No… supongo que eso depende de mi criterio…

“Bien”, concluyó Ryoma.

Al final del día, confiar en alguien siempre requiere tomar una apuesta.

“En ese caso, yo y mi nieta, Sakuya, entrará a su servicio a partir de hoy, Maestro Mikoshiba… No, milord.

Genou instó a Sakuya a inclinar la cabeza hacia Ryoma.

“Abuelo! Qué estabas pensando?!” Sakuya finalmente dejó escapar sus frustraciones acumuladas, arremetiendo contra Genou.

Estaban en un bosque a poca distancia del foso, y Sakuya y Genou eran los únicos en la vecindad. El único testigo de su intercambio fue la luna flotando en el cielo nocturno.

“Por qué estás tan nerviosa, niña?”

La voz tranquila de Genou solo sirvió para irritar aún más a Sakuya.

“Qué, preguntas…? En serio pretendes servir a ese hombre?!”

“Estás insatisfecha?” Genou despreció casualmente el estallido de Sakuya.

“Cómo no estaría?! Para empezar, cómo aceptaría simplemente perder mi tarea original y servir a mi objetivo de asesinato?”.

Las quejas salieron de los labios de Sakuya una tras otra.

“Qué estabas haciendo allí? Yo era la indicada para este trabajo, por qué me seguías?”.

Tenía solo dieciocho años, pero aún se la consideraba muy capaz entre los miembros más jóvenes del clan. Ella no era una persona que dejara que se le subiera a la cabeza, pero se enorgullecía de sus habilidades de asesino.

Pero no solo falló en su tarea, sino que también fue capturada.

Eso era irritante en sí mismo, pero el hecho de que su abuelo, uno de los ancianos del clan, apareciera lo hacía aún más humillante.

Como uno de los ancianos, Genou no era uno para el servicio activo, por lo que el hecho que estaba allí, significaba que los ancianos dudaban de las habilidades de Sakuya. Sakuya pensó que sus habilidades eran reconocidas, lo que solo la hizo sentir más humillada.

Para colmo, su abuelo había decidido unilateralmente que servirían a Ryoma Mikoshiba. Cualquier expectativa de que no se enojaría sería exagerada.

Pero en su ira, Sakuya había olvidado que a pesar de su conexión de sangre, había una gran brecha en el estatus social entre ella y Genou. Algún día podría heredar su posición como anciano, pero en este momento, no era más que una ninja de clase baja experta. Ella debe haber estado bastante agitada por arrojar tantas quejas a un anciano venerado.