Ryuuou No Oshigoto! (NL)

Volumen 7

Capítulo 5: Fifth Score

Parte 6: Partidas Clasificatorias

Ahora, la carrera de verificación está en marcha.

“Pero, él ya está en jaque mate …”

“Él no puede simplemente darse por vencido. Por supuesto que no.”

Sota-kun y Kagamizu-san están hablando de un lado a otro.

Casi puedo escuchar el grito de las piezas de Ayumu cada vez que él encaja una.

“No quiero perder”. “Estoy asustado.”

“Esto no puede ser”. “Quiero promover”. “Por favor no”

Puedo decir que quiere gritar con cada movimiento.

Porque, tirar la toalla ahora, y todo por lo que ha trabajado durante el año pasado podría haber sido en vano.

Las personas que ya saben que está promoviendo podrían pensar que esta lucha desesperada es algo graciosa.

Pero, aquí y ahora, nadie se ríe de la batalla que luchan estos dos.

“… Siempre supe que Kiyotaki-sensei era especial.

¡De acuerdo! ¡Veamos la conclusión con una postura adecuada!”

Con eso, Kagamizu-san se sienta sobre sus tobillos justo en el piso de la Sala de Jugadores. Otros miembros de la Sub Liga que frecuentaban el Salón Kiyotaki estaban justo detrás de él. Aun cuando era extraño ver tantas rodillas en el piso de linóleo, nadie pensó siquiera en hacer una broma.

“¡Maestro …!”, Dijo Anedeshi con las manos juntas como si estuviera lanzando una oración.

Ella está cerrando con fuerza sus ojos color ceniza. Incluso sabiendo que el Maestro ya tiene la partida ganada no lo hace menos atemorizante de ver. Ella simplemente no puede hacerlo. Nadie sabe lo que sucederá durante el Shogi de un minuto. En serio, estos dos han estado jugando durante más de diecisiete horas seguidas …

Pero el Maestro se mantuvo fuerte. Él no cometió un error.

Movimiento 246 —— Ayumu dejó de tratar de encontrar un movimiento una vez que vio el Ryou del Maestro en 8-6.

Porque, bueno, no pudo hacer uno. “¿Un paso para el jaque mate …?” “Sí”

Anedeshi pregunta y confirmo con un asentimiento. “El Maestro ganó”

Al igual que dijo que volvería a hacer en el movimiento 156, el Maestro mató al Ou de Ayumu.

Ningún jugador dijo una palabra cuando sucedió la rendición.

Todas las cámaras montadas en el techo nos mostraban en el monitor el puño cerrado de Ayumu, que se agitaba en la parte superior de su soporte y la parte posterior de su cabeza mientras se inclinaba sobre el tablero.

“¡Kannabe perdió! ¡¡La primera marca negra en su registro de Partidas Clasificatorias!!”

“Kiyotaki es el ganador! ¡Sí, oíste bien! ¡¡Kiyotaki en realidad ganó!!”

La sala de jugadores estalla como una bomba de ruido. Reporteros y periodistas están preparando sus cámaras a la vez.

Yo —— Junto con Anedeshi nos dirigimos hacia la puerta.

“¡¡Maestro…!!”

No es que ir a la arena haga alguna diferencia. Nadie puede cambiar los resultados. Pero, no podríamos simplemente quedarnos allí.

No es lógico.

Jadeando por respirar, corremos por los pasillos como cachorros buscando desesperadamente a sus padres. Pase por el registrador de partidas que lleva el registro de la partida a la oficina en el camino. Podría haber jurado que sus ojos eran de un rojo brillante.

Anedeshi y yo llegamos a la arena y entramos.

El aire sigue siendo eléctrico y, aunque no es imposible, no puedo subir al tablero. En silencio y con cautela, encuentro un lugar apartado y me siento en los tobillos.

“…………Maestro …”

Mire hacia mi  Maestro, desgastado por la batalla, desde muy atrás del asiento inferior. Él está sentado en sus tobillos con su pecho triunfalmente expuesto mientras él fija el collar en su kimono. Kousuke Kiyotaki 9-dan.

“Es genial”, Anedeshi murmura en voz baja para que solo yo pudiera escuchar.

Ella usó la misma voz cuando éramos niños, cuando idolatrábamos al Maestro en un kimono tanto que los dos dibujábamos imágenes de él.

“Realmente genial. Tenemos al mejor Maestro del mundo”

“………… Por supuesto …”

Vine aquí pensando que podría contenerlas, pero las lágrimas comienzan a rodar por mis mejillas.

No hay nada que los detenga una vez que salen. Las lágrimas calientes siguen llegando. Anedeshi está a mi lado, llorando igual.

Anedeshi, que casi nunca cambia su expresión facial, gime entre sollozos.

“Ginko… Yaichi, también, ¿eh?”

El Maestro nos mira sentado y llorando detrás del asiento inferior y dice en voz baja:

“Ayumu ha subido y yo estoy abajo, ¿verdad?” “Sí …………”, respondo, con la voz temblando.

Solo los jugadores  involucrados tienen derecho a preguntar sobre los resultados de la promoción y degradación.  Nadie  tiene  permitido  levantarse  y decirles por su cuenta. Eso es especialmente cierto para la degradación.

Esa regla no está en los libros en ninguna parte.

Pero es un código de conducta importante en el mundo del Shogi que debe seguirse.

Anedeshi y yo acabamos de romper esa regla… Con nuestras lágrimas manchando las esteras de tatami.

Excepto que el Maestro miro a Ayumu con una sonrisa vigorizada y lo felicita.

“¡Esas son buenas noticias! No te relajes la próxima temporada, ¿Oíste?”

“…… Gra……cias….”, Dijo Ayumu, su voz apenas llegó y se fue igual de rápido.

Pensarías que alguien que acababa de lograr la increíble hazaña de promocionar en tres temporadas consecutivas sería feliz, pero no veo ninguna felicidad en su rostro en absoluto.

Sus ojos se mueven de un lado a otro a través del tablero sin enfocarse en ningún lugar en particular, cada detalle de su pérdida se está quemando en su memoria.

En realidad, es sorprendente lo renovado que se ve el Maestro a pesar de que acaba de ser degradado.

—— ¿Cómo puede parecer que acaba de terminar de entrenar en el gimnasio en un momento como este …?

Por fin, los medios de comunicación comienzan a llegar a la sala uno tras otro.

Una vez que terminaron de fotografiar a los dos jugadores que tienen una sesión de revisión silenciosa, los destellos se disparan cada segundo, uno de los reporteros de la revista se acerca a Ayumu con el mayor respeto posible.

“Kannabe-sensei Uhm, ¿puedo pedir una entrevista sobre tu promoción en una habitación diferente…?”

“…………..”

El balanceo de Ayumu…Dejo a la arena como un fantasma. Él tiene que hacer lo imposible, dar los Comentarios Alegres justo después de una derrota. Sé que el dolor es demasiado.

Luego, una niña entro en la arena justo cuando él se fue con los periodistas.

“¿Ai? ¡Por qué esta——?”

En lugar de responderme directamente, Ai se queda sin aliento mientras arrastra a una dama a la arena detrás de ella.

Es Keika-san. “…………”

Ella entro cautelosamente con Ai tirando de su brazo y se sentó delante del Maestro.

“Oh, Keika”

Una punzada de dolor cruza la cara del Maestro por primera vez.

“Lo  siento,  no  pude  hacer  más,  incluso  cuando viniste todo este camino para animarme”

“Eso….no es……..”

Ella no podía decir otra palabra.

Era todo lo que podía hacer para mantener su llanto bajo control con un pañuelo sobre la boca. Verla así rompe la presa y los ojos del Maestro empiezan a llorar.

Acabo de darme cuenta de que solo la Familia de Shogi Kiyotaki todavía en la arena, apuesto a que la gente nos está dando espacio. Todas aquellas personas que estaban alentando a Kousuke Kiyotaki ya no están.

Con sus discípulos reunidos, el Maestro nos habla a todos con un tono amable.

“…. Todo lo que tengo en mi currículum es ser un Retador del Meijin. Eso es porque en las otras ligas estoy en blanco. Entonces, decidí retirarme cuando me degradaran a C … ”

“¡¡…… !!”

Todos aguantan la respiración, tratando de encontrar las palabras adecuadas para cambiar de opinión.

Pero el Maestro levanta la mano para cortarnos.

“Durante mis días estancados yendo a ninguna parte y cayendo, pensé mucho en mi razón para estar cerca. Estoy demasiado lejos de la colina para volver a retar al Meijin, ¿cuál es el punto de jugar a Shogi en absoluto? Hablando objetivamente, regresar a A de C no es realista… Lo que significa que irme como un Retador del Meijin debería ser el camino correcto”

Juegas Shogi para ganar.

Y, los profesionales tienen el deber de ganar partidas. Como alguien que se ha hecho un nombre por sí mismos al ganar, deben dejar de ser profesionales cuando sienten que no pueden.

La lógica del Maestro tiene sentido.

“Pero —— Tengo otra razón para seguir adelante” Entonces, el Maestro lo explica todo.

La razón por la que estaba tan calmado justo después de jugar la partida que decidió que sería la última en librarse de su propia miseria.

“Todos ustedes”

¿Todos……nosotros?

“Porque tú dices que vigilarme es lo que te hizo quién eres ahora. Todo para mantenerme en el camino correcto. Me di cuenta de lo valioso que es eso…Seguro  que  me  tomó  el  tiempo  suficiente,

¿eh?”

Mire de nuevo a mi Maestro mientras él sonríe a sus discípulos.

La pierna derecha de su pantalón hakuma está arrugada justo encima de la rodilla.

Se golpeó tan fuerte con su abanico para mantenerse enfocado que está en mal estado.

El tablero y las piezas que se encuentran frente a él muestran el desgaste que se produce al morir a causa de un duelo, solo que los soportes de las piezas están en perfectas condiciones.

Todos trazan el camino del Maestro.

Las huellas que Anedeshi y yo hemos intentado seguir.

El mismo camino que Ai y Keika-san están tratando de tomar en este momento. Estoy seguro de que Ai Yashajin siente lo mismo, aunque ella no esté aquí para decirlo.

El deseo de fortalecerse, incluso si eso significa ser terco y embarrarse en el proceso.

“El camino todavía está en marcha. La única diferencia es que ahora seré yo quien te persiga”

Mirando con cariño a sus discípulos que naturalmente se acercaron a él en la arena, el Maestro dijo alto y claro:

“Lo que significa que todavía tengo mucho camino que seguir. No me retirare”

“¡Maestro!” “¡Padre…!”

Anedeshi y yo decimos con alegría, pero Keika-san parece no tener palabras.

Ai se levanta de un salto y grita “¡Abuelo-sensei!” Y corre para darle un abrazo.

Dándole una suave palmadita en la cabeza, el Maestro dice:

“Zaou-sensei lo dijo, no hay nada más aburrido que jugar Shogi sin cuidarse de quién gana”

Sonando seguro de sí mismo, declaro el Maestro.

“En este momento, el Shogi es más divertido de lo que ha sido toda mi vida. No puedo tirar eso”

Luego me miro con Ai en sus brazos y dice.

“Podríamos estar chocando la próxima temporada en C-1, Yaichi”

“…. Las reglas impiden que los discípulos jueguen con sus Maestro en Partidas Clasificatorias debajo de la División B-2, Maestro…” Dije, riendo entre mocos y lágrimas.

“¿En serio?”

El Maestro sonríe.

“Entonces será mejor que vuelva a B-1 lo antes posible. ¡Diablos, bien podría volver a A mientras estoy en ello! ¡Con Ginko en el ascenso, desafiemos a todos los Meijin en el playoff como familia! Sera una fiesta, ¿no te parece?”

“… Voy a agradecerte de verdad esta vez”. Me reí, limpiando más mocos y lágrimas.

Luego, coloco esa gran mano de él sobre mi cabeza y me revuelve el pelo como lo hizo en el día en que

nos  conocimos  y  se  ríe  desde  el  fondo  de  su corazón.

“¡Por supuesto! ¡Yo seré el que te pague de vuelta!”