Gakusen Toshi Asterisk (NL)

Volumen 6

Capítulo 5: La Bruja Venenosa, Ereshkigal

Parte 1

Ayato jadeó involuntariamente ante el nombre que dijo Julis.

“Orphelia, no me digas…”

Al mismo tiempo, una sensación que nunca había experimentado hasta ahora brotó en su pecho. Era muy similar a la inquietud y apelaba fuertemente a Ayato por algo.

“… ¿Por qué viniste?”

Esa silueta lentamente miró hacia atrás.

Llevaba el uniforme de Le Wolfe, pero aparte de que ella sólo llevara guantes largos que cubrían hasta los codos y pantis blancas; ni siquiera se puso un abrigo dentro de esta nieve. Su calmada voz era fría, como si congelara, oscura y vacía, como si resonara desde el fondo de la tierra. Su cantidad de prana era bastante abundante y se podía entender a primera vista que se extendía hasta cada rincón de su cuerpo.

Sin embargo, lo que era impresionante sobre todo, era su largo cabello blanco puro que se fundía en la nieve circundante y su par de ojos rojos como rubíes. Al igual que su voz, sus ojos, como si representaran la luna roja, que es un símbolo de mal augurio, conservaban una desolada oscuridad que causarían que uno se congelara. Y, sin embargo, su expresión estaba llena de tristeza, ya que parecía que iba a estallar en llanto en cualquier momento.

“¿Es realmente ella…?”

Ayato también había visto su figura antes en las noticias.

Orphelia Landlufen. Era la rango #1 del Instituto Negro Le Wolfe que ganó dos Lindvolus consecutivos, y fue llamada la más fuerte Strega en la historia de Asterisk junto a Helga Lindvall.

No había duda de que la chica ahora de pie frente a Ayato era la misma Ereshkigal que vio en las noticias.

“Ha sido un año desde entonces. No pensé que iría a verte en un lugar así.”

Julis, aunque con un rostro aún sombrío, continuó con voz un tanto nostálgica.

“… Aunque te advertí muchas veces que no te involucraras conmigo.”

Pero, Orphelia, aún con una expresión triste, respondió brevemente, tratando a Julis con frialdad.

Julis se mordió los labios con tristeza solo por un instante, pero inmediatamente dirigió una mirada penetrante hacia Orphelia.

“Mi asunto es el mismo que hace un año. Vuelve, Orphelia. El mundo en el que deberías estar no es allí.”

“… Basta, Julis. Sólo estoy siguiendo mi destino. No puedes darle la vuelta.”

Orphelia débilmente negó con la cabeza y claramente mostró una voluntad de rechazo.

“¡No voy a aceptarlo!”

La voz Julis parecía casi como si clamara.

“….”

Cuando Orphelia bajó la mirada, tocó su insignia de escuela con su mano.

“Mi destino está aquí ahora. Si quieres interponerte a cualquier costo…”

“¡Sí, entiendo! ¡Pero no va a ser como hace un año!”

Al mismo tiempo que Julis dijo eso, mana se arremolinó.

“¡E-Espera, Julis!”

“¡Ayato, no interfieras en esto! ¡Este es un problema entre Orphelia y yo!”

Julis gritó sin mirar hacia él.

Ayato, quien sintió una fuerte determinación en su voz, no pudo evitar detener su pie, que estaba a punto de dar un paso hacia adelante.

“¡Tu insignia de escuela, esta vez seguro la voy a destruir!”

Olas de calor se arremolinaron alrededor de Julis y chakrams ardientes se manifestaron.

“¡Florece orgullosamente, Anthurium!”

Cuando Julis agitó su brazo, casi veinte chakrams fueron disparados hacia Orphelia.

Pero, los chakrams, que componían la vanguardia cayeron en picada justo ante Orphelia y excavaron el suelo.

Los abrasadores chakrams derritieron la nieve al instante, y copos de nieve y vapor se levantaron.

Tal vez solo sea una mera cortina de humo, pero era suficiente para cortar su línea de visión incluso por un momento.

En esa oportunidad, los chakrams se separaron a izquierda y derecha y atacaron a Orphelia rodeándola.

(¡Bien…!)

Fue una combinación perfecta ya sea de rango o sincronización.

Por lo menos, debería ser suficiente como primer paso para tomar la iniciativa.

Pero…

“¡ !”

En ese momento, Ayato sintió un escalofrío recorriéndole la espalda.

Al otro lado de la pantalla blanca, un prana increíblemente poderoso se alzó.

Esa cantidad no era una broma. Ayato mismo tenía confianza en su cantidad de prana, pero ni siquiera se podía comparar al de la chica que tenía delante. Parecía estar brotando inconmensurablemente… o más bien interminablemente.

Abrumador prana hasta el punto que no podía ser estimado… y muy ominoso.

Una cantidad de mana, que no podía compararse con la de cuando Julis activó su habilidad, estalló y voló el spray de nieve en un instante. El aire tembló y una feroz sensación abrumadora como si torciera y aplastara todo fue puesta en libertad.

Allí, la figura de Orphelia estaba calmadamente de pie, e innumerables brazos como de muertos que se alzaron como humo a sus pies se retorcieron. Esos visiblemente venenosos brazos marrones negruzcos se agitaron como una neblina de calor y no parecían sólidos, sino gaseosos.

Esos brazos bloquearon y atraparon todos los chakrams liberados por Julis. Los chakrams reforzaron su rotación mientras luchaban con el fin de liberarse de los brazos de alguna manera, pero las cuchillas de fuego atravesaron los brazos como a humo.

A pesar de esto, las manos como garras sujetaron firmemente los chakrams.

“Así que esa es la habilidad de Orphelia Landlufen…”

Naturalmente, Ayato también había oído de ella.

La habilidad de Ereshkigal, de quien se dice es la más fuerte, era el poder de manipular gas venenoso llamado miasma.

“… Ah, Julis. No sirve de nada. Como era de esperar, es imposible para ti.”

Inmediatamente después que Orphelia murmuró con una voz llena de dolor, los chakrams fueron fácilmente aplastados.

Allí, Ayato finalmente entendió el sentimiento de antes.

Esa fue una advertencia.

Los instintos de Ayato la juzgaron como peligrosa. Probablemente algo así.

A estas horas, recordó las palabras que Helga dijo antes.

[Ella es una existencia diferente de nosotros.]

Pensó que era metafórico, pero se equivocó. Era un hecho claro.

Ciertamente, el poder de la chica delante de él superaba claramente el reino humano. Con sólo estar frente a ella, lo entendió. Lo entendió instintivamente.

… Sin embargo.

“¡No he terminado aún!”

Julis se movió como si anticipara esto.

(¡Julis…!)

Una sensación abrumadora por la cual incluso Ayato se congeló por un instante. Ante Julis quien ejecutó un ataque a pesar de ello, Ayato se sorprendió, sin embargo, por admiración.

A juzgar por el tono de Julis, las dos parecían haber luchado antes. En otras palabras, Julis probablemente conocía el poder de Orphelia. Es por eso que, incluso después de haber mostrado un poder tan abrumador, continuó desafiando a Orphelia sin pestañear.

Pero, por lo general, sería lo contrario. No tener el corazón roto, incluso después de experimentar tanto poder abrumador era imposible a menos que se poseyera una abrumadora fuerza mental.

(O… ¿Hay algo a lo que no puede ceder hasta el punto de llegar a tanto?)

Probablemente era lo último.

“Florece orgullosamente, Girasol Ardiente, ¡Anemone Coronaria!”

Cuando Julis levantó ambas manos, una gran flor de fuego abrió sus pétalos.

Esa flor de la anémona, que emitía una luz deslumbrante iluminó el campo de nieve de mediados de invierno, como un pequeño sol. Alcanzó un calor abrasador en la medida en que incluso Ayato tuvo que tomar cierta distancia. Esta era una técnica que Ayato estaba viendo por primera vez, pero fue un movimiento bastante audaz.

“¡Toma esto, Orphelia!”

Julis bajó las manos con un grito, y la gran flor de fuego cayó hacia Orphelia.

Pero aún así Orphelia, sin cambiar su semblante, simplemente levantó su brazo derecho en silencio.

“¿Eh…?”

Al momento siguiente, Ayato dudó de sus propios ojos.

Por la acción de Orphelia, Ayato pensó que había activado algún tipo de habilidad defensiva, pero, de entre todas las cosas, Orphelia detuvo la técnica de Julis con su mano.

El guante de su mano derecha se encendió, inmediatamente se convirtió en cenizas y desapareció en el viento.

Aun así, no había ni siquiera un rastro de quemaduras en la mano derecha de Orphelia que detuvo la enorme masa de llamas.

“No puede ser… ¿Me estás diciendo que lo detuvo solo con su prana…?”

Sin duda, en teoría era posible si se invertía prana en defensa local.

Sin embargo, la defensa en prana básicamente reducía el daño en cierta medida, y era imposible de detener por completo un ataque. Al hacer algo así, el prana probablemente se agotaría de inmediato. Y si uno fuera a bloquear una técnica de esta escala, entonces con mayor razón.

Sin embargo, no se veía ninguna señal de que el prana de Orphelia se agotara en absoluto.

“Imposible…”

Julis abrió ampliamente los ojos con incredulidad.

“… Tu destino es débil… es por eso que te dije.”

Tan pronto como Orphelia indiferentemente frunció el ceño y apretó su brazo derecho, la gran flor de fuego explotó y se desvaneció como niebla.

Por otra parte, miasma surgió alrededor de Orphelia y formó un enorme brazo que absorbió los innumerables brazos que estaban retorciéndose hasta el momento y se elevó hacia el cielo.

“… Vuelve al polvo.”

Cuando Orphelia murmuró, el brazo marrón negruzco atravesó velozmente el campo de nieve como una serpiente arrastrándose en el suelo y atrapó a Julis.

“¡Kuaaaaaaaaaaaaaaaaaah!”

Julis soltó un grito de dolor, pero el brazo que la agarró la elevó hasta unos diez metros de altura y luego la arrojó sin piedad contra el suelo.

“¡Julis!”

Aunque Ayato salió corriendo y cogió su cuerpo en el último segundo, voló unos diez metros en el campo de nieve con Julis debido al fuerte impacto.

“Julis, ¿¡Estás bien!?”

Ayato inmediatamente se levantó y alzó a Julis en sus brazos.

“Ugh…”

Julis parecía ya haber perdido la conciencia.

En un vistazo más de cerca, rastros de corrosión por ser agarrada permanecían en su uniforme y también su tez era terriblemente mala.

(Este es el miasma de Ereshkigal…)

Los rumores decían que su venenosidad debilitaría a otros simplemente tocándolos, pero parecía ser verdad sin ninguna exageración.

“… ¿Eres Amagiri Ayato?”

Como si hubiera notado a Ayato por primera vez, Orphelia lo miró con ojos fríos, ni siquiera mostrando una onza de interés en él.

“Ya está decidido, ¿verdad? Es cierto que fue Julis quien te desafió de repente, pero continuar sería…”

Antes de que Ayato terminara la frase, miasma surgió alrededor de Orphelia… no, de su cuerpo. Ella perdió su guante (porque un guante ya había sido quemado por Julis) y se podía ver que miasma surgía, mientras se balanceaba de su blanca piel expuesta.

“Es triste, pero incluso yo no puedo detener un destino que ya ha comenzado a moverse… si no quieres verte involucrado también, deberías irte.”

“Lo siento, pero no puedo hacer eso.”

Mientras sujetaba a Julis, Ayato activó a Ser-Versta.

“…Es una lástima.”

Tan pronto como Orphelia dijo eso con una expresión triste, los innumerables brazos formados por miasma atacaron a Ayato y Julis.

“Estilo Dragón Brillante Amagiri, Técnica de Espada Intermedia, Arrow Clearing Crow.”

Sin embargo, todos fueron cortados antes de llegar a Ayato y Julis, y desaparecieron en el vacío.

Solo un poco, las cejas de Orphelia temblaron.

“Ah, esa es Ser-Versta…”

El miasma de Orphelia probablemente no podía ser tocado con un arma ordinaria, pero si era este Ogre Lux que quemaba todas las cosas, entonces era otra historia.

Si Orphelia fuera a retirarse con esto, entonces no habría ningún problema.

Pero en caso de que no fuera así, podría verse forzado a un combate.

(Sinceramente, no me siento capaz de ganar en absoluto.)

Mientras sujetaba a Julis en su mano izquierda y blandía a Ser-versta en la derecha, tomó distancia gradualmente.

Afortunadamente, Orphelia no mostró signos de movimiento, ni actitud para hacer algo.

En el momento en que Ayato comenzó a tener un pensamiento tan ingenuo como ‘A este ritmo, podría tener éxito en escapar’…

“¿Eh…?”

Los pies de ayato se debilitaron de repente.

Su mano que sostenía a Ser-Versta tembló y empezó a ahogarse como si algo estuviera atascado en su garganta.

“¿¡No me digas que…!?”

“…”

Cuando Ayato exploró los alrededores con el estado de ‘cognición’, el flujo del aire era claramente antinatural.

Probablemente, Orphelia ya había esparcido miasma alrededor.

“Jajaja… diría que es algo así como gas venenoso insípido, inodoro, incoloro y transparente… es realmente una locura.”

Sólo su risa seca aún podía salir, pero si Orphelia podía manipular el miasma a voluntad, hacer por lo menos esto no sería extraño.

“… Lo siento. Pero, pronto te sentirás tranquilo.”

Los brazos de miasma se alzaron con el fin de aplastar a Ayato y Julis.

Él aún podía mover su cuerpo a duras penas, pero a este ritmo, sería sólo cuestión de tiempo antes de que fuera atrapado.

Aun así, no podía rendirse. Agarró firmemente a Ser-versta de nuevo, y de alguna manera esperó una apertura.

En ese momento.

“¿Puedes esperar un poco, señorita?”

Una alegre, y fuera de lugar, voz resonó en el campo de nieve.