Youjo Senki (NL)

Volumen 5

Capítulo 3: Operación Del Norte

Parte 2

Ella no quiere que ni siquiera un oficial superior ponga una mano sobre sus hombres.

… Ya sea en una empresa o en el ejército, la cadena de mando funciona de la misma manera.

¡Nada bueno sale de que el superior de un comandante los desautorice! Y, aun así, ahora… ¿el Estado Mayor está interviniendo mi mando?

“¡Es inaudito disolver una unidad que está preparada para ser desplegada en cualquier momento!”

“Todos sus argumentos son válidos.”

“¡Si eso es cierto, entonces…!” Ella está a punto de rogarle que lo reconsidere cuando…

“Coronel von Degurechaff, estoy seguro de que lo recuerda, pero el Kampfgruppe se formó y probó como un grupo de trabajo ad hoc, no como una unidad regular.”

“… ¿Entonces está diciendo que no debería haber invertido en ello?”

“La intención era que probara la parte de ‘formación ad hoc’. Construyo un magnífico equipo de élites, demasiado magnífico. Puedo entender que es una pena disolverlos, pero…” Continúa con seriedad.

“Un solo Kampfgruppe de élite no es lo que necesitamos. Los Kampfgruppen hacen posible muchos tipos de combate. Pero el factor crítico es el conocimiento doctrinal sobre cómo formarlos ad hoc a nivel organizacional, no la fuerza o el talento de un solo comandante.”

La lógica era sólida. Pensando en todo el Ejército Imperial, era mejor tener estándares universales que se pudiesen aplicar en todas partes en lugar de proezas individuales sobresalientes.

En lo que respectaba a los Kampfgruppen, puedo ver cómo les gustaría estar operando con muchos de ellos.

“Estoy seguro de que lo entiende. Para crear una base en la que el Estado Mayor pueda formar Kampfgruppen y confiarlos a los oficiales, necesitamos adquirir los conocimientos técnicos.”

No deberíamos hacer un engranaje insustituible. Tiene razón en que necesitamos algunas personas que sepan cómo hacer lo requerido, duplicar y emplear engranajes en una organización.

Y en el ejército, donde el desgaste es un hecho, es importante tener múltiples copias de seguridad. Lógicamente, tiene sentido.

Pero, aun así, Tanya todavía argumenta.

“¡Por favor, tenga en cuenta la situación en el este!”

Prácticamente está chillando.

Ella acaba de regresar de la línea más avanzada en el frente oriental. Para alguien consciente de lo que está sucediendo en tiempo presente, es imposible seguir alegremente la lógica.

El razonamiento que funciona en un contexto no es necesariamente sólido en otro.

“¡Esto es sólo un descanso! ¿No deberíamos reconocer el valor de tener un activo de combate bueno y capaz como un Kampfgruppe como reserva estratégica?”

“Por supuesto que consideramos usarlo como reserva estratégica. Pero el descanso es un golpe de suerte. Ahora es el momento de mirar hacia el futuro.”

“¿El futuro?”

“Nuestra tasa de deserción en el frente oriental es severa. Si seguimos perdiendo soldados a este ritmo, la capacidad de combate de nuestro ejército se reducirá a cero.”

“Nrgh.” Tanya se ha quedado sin palabras a pesar de sí misma.

Ella no puede evitar asentir… El Imperio ha estado vertiendo grandes cantidades de sangre y hierro en el este a un ritmo increíble.

No es que el ejército dejara de existir mañana.

Tampoco habrá problemas operativos la próxima semana.

Incluso el próximo mes, las fuerzas deberían poder mantener su capacidad de combate. Y con suerte, podrían sobrevivir el próximo año sin colapsar.

Pero aun así reduciría los recursos humanos finitos del Imperio. Se escurrirían como granos de arena en un reloj de arena.

… Pero a diferencia de un reloj de arena, no hay forma de dar la vuelta y empezar de nuevo.

“Pronto nos veremos obligados a hacer uso de unidades desmoronadas. Ese día puede que no sea mañana, pero se acerca. Por lo tanto, es esencial que nosotros, como organización, aprendamos la doctrina Kampfgruppen para poder reorganizar las unidades sobre la marcha, incluso si es atípico.”

Teniendo en cuenta la pesadilla de la disminución de sus recursos humanos, puedo entender por qué Operaciones saltaría a la operación Kampfgruppen como el conocimiento para reorganizar las unidades colapsadas.

“Que lograra la formación tan rápido nos dio esperanza, y estamos agradecidos por eso. Así que lo siento, pero es hora de que el Estado Mayor ponga a prueba esos conocimientos. Regrese a comandar el 203vo Batallón de Magos Aéreos por ahora.”

“… Sí, señor.”

No hay lugar para discutir. Cuando piensa que le quitan toda la autoridad… incluso se siente desanimada.

“Dicho esto, en este momento, la única con experiencia exitosa al frente de un Kampfgruppe es usted. En un futuro no muy lejano, nos gustaría que liderara uno que formemos y recopile datos para nosotros.”

“Entendido. Lo haré lo mejor que pueda. ¿Cuándo me enviarán al Kampfgruppe formado por el Estado Mayor?”

“En realidad, no tendrá que esperar mucho.”

“¿A qué se refiere, señor?”

“El trabajo ya está en marcha. Sólo debería tomar otra semana, tal vez diez días. El objetivo es dar experiencia a los oficiales jóvenes. Y tampoco queremos que se quede sin un Kampfgruppe durante demasiado tiempo.”

La idea de que le quiten su equipo de veteranos y le asignen un equipo de prueba seleccionado por el Estado Mayor la marea. Lo entiendo porque solía trabajar en el departamento de recursos humanos: será un equipo que sea conveniente para el cuartel general pero que no toma en cuenta a las personas sobre el terreno.

“Entonces, ¿qué haremos el batallón y yo hasta entonces?”

“Me hubiera gustado darle vacaciones, pero el Imperio no está en posición de permitir que las unidades libres se queden de brazos cruzados. Tenemos trabajo para usted, Coronel.”

“¡Sí, señor!”

Aunque ella responde galantemente con los talones cruzados, su mente está sombría en proporción inversa a su voz. Esto es lo que significa que sus nervios comiencen a debilitarse.

“Muy bien. Entonces hagamos que juegue a los piratas. Puede enseñar a los piratas reales cómo librar una guerra usando munición real.”

Él le presenta un plan de operaciones y el periódico hace un leve ruido.

Sorprendentemente, nos asignan al norte, no al este, donde se desarrolla la intensa lucha. Es una misión de patrulla sobre el otoño del Mar del Norte… Si voy a hacerlo, prefiero hacerlo en verano.

“… ¿Nos uniremos a una línea de patrulla marítima?”

“Si. No hay muchos batallones de magos que puedan realizar búsquedas de largo alcance sobre el agua. Los chicos del norte vinieron a rogarnos que se los prestáramos.”

El Mar del Norte era famoso por sus bajas temperaturas. Aunque era sólo el comienzo del otoño, seguramente ya haría frío.

De todas las épocas del año para hacer vuelos de larga distancia a través de la brisa marina… Seguimos recibiendo el extremo más corto del palo.

“Nominalmente, es una inspección sobre el terreno. Bueno, le darán los detalles cuando llegue. Dicho esto, todo esto es muy repentino, me siento mal por ello. Planee salir en alrededor una semana.”

“Entendido.” Entiendo.

Incluso si ella no lo acepta, es una orden. Por lo que entonces. Ella aprieta los dientes.

Ella tiene que hacer lo que dicen.

Realiza un saludo de acuerdo con el manual, todos sus dedos perfectamente alineados. Por lo tanto, después de perder su Kampfgruppe, la Teniente Coronel Mágica Tanya von Degurechaff recibe la noticia de que será arrojada a un lugar literalmente helado.

Ella no tenía elección. No, ni siquiera le consultaron. A ella se le dijo. Era inevitable.

Tengo que sacar esto de mi mente, piensa y comienza a esperar el almuerzo gratis que le prometió el Coronel Uger.

No es que no se arrepienta de eso.

… Debo haber estado más privada de sueño de lo que pensaba. Lo que dijo el coronel Uger era cierto.

La comida fue realmente gratis.

Era la comida del comedor del ejército de la Oficina del Estado Mayor, si se puede llamar “comida” a los terrones guisados horriblemente.

“¡Ja, ja, ja, escuché la noticia! Vaya que el General von Rudersdorf hace trabajar duro a su gente.”

Sentada frente a ella, riendo con cubiertos de lujo en la mano, está su querido compañero de clase.

Simplemente no puedes … Tanya decide advertirle.

“¿Conoce las palabras secreto militar, Coronel Uger?”

“Ese es un muy buen punto.” Él ríe. “Pero no tiene que preocuparse.” Aparta la vista de lo no comestible que el comedor del Estado Mayor servía como almuerzo y se encoge de

hombros inocentemente. “Disolver la unidad y reasignarlos a ustedes recae en el Cuerpo de Intendencia. En otras palabras…”

Se lleva el tenedor a la boca, frunce el ceño un momento, recoge el agua y se lava lo que sea que probo para seguir hablando. No es de buena educación tener cosas en la boca, así que bebió el agua por el bien de la conversación… Por supuesto, así era como manejábamos la tarea de extraer nutrientes de alimentos con sabor desagradable.

Me veo en la obligación de comentar que las ofrendas del salón de banquetes de la Oficina del Estado Mayor tienen un sabor tan horrible como siempre. Es como si la calidad de la comida se sacrificara y se convirtiera en la inversa de la calidad del plato.

“Para revelar el secreto, estoy a cargo. Entonces, naturalmente, discutir con usted sobre su asignación es parte de mi responsabilidad.”

“Qué bueno tener un amigo cercano en el caso.” Está agradecida pero también un poco cautelosa, ya que es diferente a lo habitual.

“Estaba segura de que era el Coronel von Lergen.”

Comen mientras hablan. De esa manera, pueden distraerse de la supuesta “comida” que les brinda el comedor del que el Estado Mayor está tan orgulloso.

Hablando estrictamente del sabor, la comida en la línea más avanzada es un poco… no, bastante mejor. Este es un momento en el que se alegra de ser una oficial mágica provista de una dieta alta en calorías.

El chocolate y las galletas que obtienen como extras saben bastante bien. Si fueran de la misma calidad que la comida del salón de banquetes, sería difícil evitar perder la voluntad de luchar.

“¿Quién sabe? Probablemente sea conveniente. No es que necesitemos saberlo. Aun así, una misión de búsqueda y destrucción sobre las aguas a las que le habían asignado seguro le traerá recuerdos.”

Sus ojos expresan algo parecido a una sonrisa, pero no está sonriendo.

Oh, ya veo.

 Si me está diciendo indirectamente que no pregunte qué está tramando el Coronel von Lergen, entonces… ¿de qué se trata esto?

“Pero… con seguridad es una molestia. Como la unidad libre que se envía, no podemos evitar estar desconcertados. ¿Una operación basada en una inspección in situ de barcos civiles…?”

“Bien, ¿qué pasa si accidentalmente los hunden? Después de todo, tienen antecedentes. Nosotros en el Cuerpo de Intendencia estaremos preocupados por la salud digestiva de nuestros colegas en legal.”

Siento que me han golpeado donde más me duele. Y Tanya no puede evitar hacer una mueca. Eso fue un accidente, pero sí… puedo ver cómo se consideraría “antecedentes”.

“¿Y en el Mar del Norte…? El comercio incursionando allí debe ser políticamente problemático.”

“¿Así que estamos siendo considerados con las personas que residen en algún otro continente o lo que sea?”

Sólo hay una nacionalidad de barco que navega por el Mar del Norte que requeriría una inspección in situ. Sólo serían barcos de los Estados Unidos.

Cuando lo piensas, no hay razón para que un barco civil atraviese aguas tan peligrosas.

No, no debería haber ninguna razón en absoluto, y, aun así, extrañamente… los marineros retirados de la Armada de los Estados Unidos aparentemente están encontrando nuevas posiciones en barcos civiles en el Mar del Norte.

“Es ridículo, pero, por otro lado, no puedo decir que no debamos seguir adelante. ¿Me equivoco, Coronel von Degurechaff?”

Así que todo lo que Tanya puede hacer es responder con una sonrisa irónica.

“No, creo que tiene razón. Todo tiene sentido.”

El Estado Mayor y el Comando del Ejército, que quieren evitar que el Ejército de la Federación se vuelva más fuerte, ha llevado al Comando de la Marina a esta extraña relación

—donde en realidad tienen diferentes ideas, pero están trabajando juntos— con el pretexto de dejar que finalmente se atribuyan el mérito de algo. Entonces el Ministerio de Relaciones Exteriores debe haber intervenido para solicitar alguna consideración política. Tienen razón, pero son los que están en el campo los que lo pasan mal.

Este es el tipo de situación en la que tienes que contener un suspiro. Mala comida, conversación deprimente. Y encima de eso, la molesta situación en el campo y el contexto político.

Demonios. Entonces, justo cuando Tanya está bebiendo su pseudo-café ersatz…

“… Sólo estoy hablando conmigo mismo, pero…” El Coronel Uger habla de repente una vez que el camarero los deja. “La operación del Mar del Norte para la que se está desplegando su unidad es posible gracias a la agencia de inteligencia conjunta de los Comandos del Ejército y la Marina.”

Tanya ladea la cabeza muy a su pesar.

La mala relación entre la División de Inteligencia Militar del Estado Mayor y el departamento de inteligencia conjunto de los comandos del ejército y la marina es legendario. Siempre chocan en cuestiones de jerarquía vertical, asignación presupuestaria y autoridad. Había escuchado que necesitaban trabajar en la integración, pero…

Aparentemente, esta Gran Cruz de Hierro de Alas Blancas traerá problemas, tal como pensaba.

“La disolución del Kampfgruppe ya estaba decidida. Pero escuché que los altos mandos querían ponerle en la unidad de instructores haciendo investigación de habilidades de combate.”

… Entonces, ¿una vida extremadamente razonable y absolutamente pacífica en la retaguardia me fue robada una vez más? ¿De nuevo?

“Fue una intervención rápida que resultó en el cambio hacia el norte. La inteligencia se está moviendo muy rápido en esto. Bueno, no es de extrañar. Están en una posición mucho más delicada que los chicos de la División de Inteligencia Militar.”

… Se habían equivocado en las luchas con la Alianza Entente, la República y Dacia.

Después de ignorar las advertencias algo contundentes del Estado Mayor, el ejército y la armada deben tener como objetivo recuperar su poder incluso si eso significa arriesgar su honor.

“Es por eso que están tan ansiosos por derribar algo grande.”

“¿Y qué es eso?”

“… No lo sé. No parece que estén planeando operaciones importantes.”

Si el Cuerpo de Intendencia no lo sabe… entonces no pueden mover tantas tropas. Sería difícil utilizar un gran ejército sin acumular suministros de antemano con el apoyo del Cuerpo de Intendencia.

“En cuyo caso… sólo estoy hablando conmigo mismo, pero… algo huele a problemas.” Entonces eso es lo que huele mal.

Nosotros, el 203vo Batallón de Magos Aéreos, somos intrínsecamente bastante fáciles de usar. Somos uno de los pocos comandos con una potencia de fuego sobresaliente que se puede implementar sin poner demasiado estrés en la red logística.

Debemos ser extremadamente convenientes. La agencia de inteligencia debe tener envidia.

“Lo tendré en cuenta, aunque realmente no espero que Inteligencia recopile información precisa.”

“¿Cómo podría? Esos tipos necesitan ayuda.” Con ese comentario y una sonrisa irónica, el tono de voz del Coronel Uger cambia. Oh, ya veo, entonces ese es el final de esa conversación.

“… Hablando de necesitar ayuda, lo primero en la lista debería ser este comedor, ¿no es así?”

“Estoy totalmente de acuerdo, Coronel von Degurechaff. El Estado Mayor definitivamente necesita algunos oficiales de inteligencia superiores y algunos cocineros con sentido del gusto.”

Ella está de acuerdo, pero también nota que él está reteniendo la conversación debido a la proximidad del camarero, por lo que arregla su cuchillo y tenedor y mansamente finge ignorancia.

Una vez que sus platos están limpios y Tanya está disfrutando de su té después de la comida, Uger se dirige a ella, como si acabara de recordar algo, de una manera profesional. “Ahora bien, tengo un regalo para usted. Hice que el Coronel von Lergen organizara una fiesta de despedida para su Kampfgruppe en el club de oficiales. Así que espero que beba.”

“Así que había una razón para sufrir esta comida.”

“Jajaja. Estoy tomando una página del libro del General von Zettour. Cada vez que tiene la oportunidad, invita a la gente de fuera a esta comida.”

“El mundo va a empezar a denunciar a los oficiales del Cuerpo de Intendencia sobre sus malos hábitos.”

“Oh, arriesgamos nuestras vidas para que ustedes en el frente sepan lo duro que estamos trabajando. Muy bien, le veré de nuevo alguna vez.”

“Sí, hasta luego.”