Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 10

Capítulo 2: El Más Confiable De Los Tres

Parte 5

Así que sí, terminamos esperando en la puerta sur de Donsama camino a la capital imperial. Ichika, Niku y Emmymephy fueron a algunos puestos cercanos a buscar comida. Dado que dijeron que no habían olvidado nada, me imagino que Emmymephy solo quería comer más. Por supuesto.

“Aun así, ¿Wataru tiene misiones solo para él? Seguro que es famoso”, dijo Rokuko.

“Sí, él es un héroe”.

“Se siente raro teniendo en cuenta cómo lo tratan en nuestra posada”.

“Sí, él es Wataru”, respondí, y Wataru aprovechó la oportunidad para aparecer.

“¿Escuché mi nombre justo ahora?”

“Seguro que lo hiciste. Estamos hablando de cómo la gente de afuera te trata de manera diferente a la gente de nuestro pueblo”.

“Sí, la ciudad de Goren es especial. Tendría que ser para tenerte como jefe de la ciudad “, dijo Wataru, completamente como si fuera mi culpa. Rokuko asintió de acuerdo. ¿Por qué? Que yo sea el jefe de la ciudad no debería tener nada que ver con eso… Solo soy una figura decorativa. Wozma, la recepcionista del gremio y Gozou están más involucrados en el manejo de la ciudad que yo.

“Sabes, eso me recuerda. ¿Cómo están tú y Neruneh?”

“¡Oh, súper bien! Estaba hablando con ella sobre cómo podríamos tener una cita en Tsia la próxima vez que esté libre. Rokuko, ¿podrías hacerme un favor y darle a Neruneh algunos  días de vacaciones pronto? En realidad, te pagaré directamente para darle un aumento”.

“Bien, bien… Le daré a Neruneh unas vacaciones la próxima vez que nos visite. Puedes tomarla prestada por un momento.”

“¡Gracias!”

Espera… Ya le estamos dando a Neruneh días libres cada vez que Wataru visita, para que pueda controlarla. Una cita en Tsia no debería cambiar nada… Bueno, lo que sea.

No pasó mucho tiempo antes de que viniera el comerciante que se suponía que debíamos vigilar. Tenía cuatro carros con dosel, cada uno lleno de productos. Aparentemente, el comerciante que  conducía los vagones también estaba usando {Storage}. Uh… Las ruedas no se caerán de la carga pesada, ¿verdad? No importa, no quiero pensar en esto y maldecirlo.

“Estoy listo para irme, señor Héroe. Gracias por tu servicio.”

“No hay problema, puedes contar conmigo. Ni siquiera un dragón es una amenaza conmigo.”

“Eso es muy alentador”, dijo el comerciante con una reverencia. Encantada de conocerte. Espero que sean unos buenos tres días juntos.

Atravesamos la puerta con el comerciante y partimos hacia nuestro próximo destino. Wataru predijo que seríamos atacados, pero probablemente haría un trabajo tan bueno luchando contra los atacantes que ni siquiera necesitaría la ayuda de nadie.

Íbamos camino a Corky con los cuatro vagones de nuestra carga comercial a cuestas. Continuamos por una sección extrañamente rocosa de las llanuras cuando de repente vimos un carro con una rueda rota atascada en la distancia, bloqueando el camino. Estaba a aproximadamente un kilómetro de distancia, pero en una posición tal que no había una manera fácil de pasar o desviarse a su alrededor. Además de eso, había un chico sosteniendo su brazo con una expresión preocupada.

En el momento en que vio al tipo, Gozou puso una mano sobre la empuñadura de su arma. “Keima, eso es un bandido. Prepárate para la batalla.”

“Oh, ¿lo es? Me lo imaginé un poco, pero no estaba seguro”.

“Claro que sí”, respondió Gozou mientras le rompía el cuello. Sí Es difícil no sospechar de ese tipo.

“Para empezar, un vagón atascado justo en el medio de la carretera siempre será sospechoso. Lo más cortés que debes hacer es llevar el carro a un lado de la carretera, si tienes que sacar todo lo que hay dentro. El hecho de que ese tipo ni siquiera se molestó en hacerlo a pesar de toda la ayuda muestra que es un bandido tonto”.

No conocía esa costumbre, pensé mientras Ichika desabrochaba el cierre de su cuchillo de cocina para poder sacarla cuando fuera necesario.

Mira también la falta de un caballo. Él usa contenedores que usan un vagón roto al azar que estaba sentado. La ley dice que podemos matar bandidos tirando esta basura, así que diablos, sí. Dinero fácil.”

Niku se puso de pie cuando Ichika dijo eso. Parecía que todos estaban listos para partir.

“La cuestión es que estamos tomando prestado este carro”. No puedo dar la vuelta raspando la cresta de la familia de un noble. Digo que nos detengamos aquí y caminemos el resto del camino… ¿Quién quiere quedarse y proteger el carruaje?

“Uhhh, soy voluntario. El equipo Bacchus puede ir a cazar bandidos.”

“Bien entonces. El grupo de Keima se quedará aquí, entonces. Funciona para mí. ¿Has oído todo eso, Wataru?”

“Yuuup. Estaba escuchando”, respondió Wataru desde donde  estaba sentado con el vagón mercante detrás.

“Hagamos esto, entonces”.

“¡Rokuko, todos, mantente a salvo!” dijo Roppe.

“Seguiré y lanzaré {Air Barricade} para que las flechas no sean un problema, pero… Cuida de la princesa Mephy por mí”.

Detuvimos nuestro carro a unos cuatrocientos metros de los bandidos para que Gozou, Roppe y Wataru pudieran bajarse. Luego se dirigieron a los bandidos mientras ocultaban sus armas, gritando en voz alta para preguntar si algo andaba mal. No estoy seguro de qué tan bien irá este ataque sorpresa con el martillo de batalla de Gozou asomando por detrás de su espalda de esa manera.

De todos modos, mi trabajo era mirarlos casualmente desde lejos sin hacer nada, que era exactamente lo que pretendía hacer. Pero cuando intenté acostarme, Ichika desenvainó su cuchilla.

“¿Usted también está entusiasmado con esta batalla, Maestro?”

“¿Huh? ¿De qué estás hablando, Ichika? Nos quedaremos con los carros, no peleando”.

“Bruh, creo que te has equivocado de idea. Nuestro trabajo es proteger a los carros, caballos y conductores de los idiotas que se esconden detrás de las rocas que nos rodean. Es nuestro momento de brillar. ¿Verdad, Niku?”

“Si. Brillaré, para el Maestro”.

“Esto podría ser un poco difícil ya que hay cuatro vagones y dos bebés aquí para proteger. Tengo que decir, Maestro, quedé muy sorprendida cuando ofreció hacer el trabajo duro usted mismo.” Uh.

Vi a Niku desenvainar su daga y agacharse en una posición lista para la batalla, pero antes de que pudiera preguntar si eso era realmente cierto, el escuadrón de Wataru comenzó su ataque. Las flechas se lanzaron inmediatamente hacia nuestro vagón desde el costado y se hicieron a un lado gracias a la {Air Barricade} de Wataru.

“…Correcto. Así que quedarse atrás es el trabajo duro”.

“Wow, esas flechas se dirigían directamente al cuello del conductor. Tienen un verdadero arquero de su lado, mis amigos. Veamos si no podemos cortar ese arco por la mitad”.

“¡Puede contar con nosotros para recibir apoyo!” “Yo digo, ¡dispara a través de los ojos!”

Rokuko y Emmymephy estaban preparando ballestas que estaban escondiendo, ¿en algún lugar? Siéntense, ustedes dos.

Los bandidos salían de su escondite ahora que sabían que las flechas no funcionarían. Uno, dos, tres… Bueno, hay más de diez. No piensen que los tres podemos detenerlos a todos a la vez. No es que eso sea un problema para mí.

“Uh, oh, estamos un poco cortos de manos aquí. ¿Cuál es el plan, maestro?”

“Simple. Si no tenemos suficiente ayuda, solo tenemos que convocar más”. Invocar ayuda fue mi especialidad. Hmm… {Crear Golem} destrozaría el suelo y tendría que esconder las piedras mágicas, así que no, gracias. Solo usaré {Summon Gargoyle} aquí.

“… {Summon Gargoyle}, {Summon Gargoyle}, {Summon Gargoyle}… De acuerdo, esto es molesto. Sal de diez en diez, {10 Summon Gargoyle}”. Acorté el hechizo después de enfadarme, e inmediatamente nuestro carro estaba rodeado de círculos mágicos de los que comenzaron a aparecer las gárgolas. Si Emmymephy preguntara, solo diría que fue un hechizo de invocación avanzado que aprendí en alguna parte.

“¡Protege los carros, gárgolas!” El comerciante y los conductores estaban sorprendidos por la repentina aparición de monstruos, pero entendieron por mi grito y su posición alrededor del carro que las Gárgolas eran amigos. Pero mi grito también alertó a los bandidos de mi presencia.

“¡Estas son convocaciones! ¡Mata a los invocadores y todos los monstruos desaparecerán! Están en la carreta principal, ¡tráiganlos! ”

Parece que saben cómo lidiar con los monstruos convocados. No estoy seguro si eso es de conocimiento común, o si estos son solo algunos bandidos inteligentes.

“Déjamelos a mí, Maestro”.

“Yo también tengo esto, muchachos”.

Tenía algunos aliados confiables. Niku e Ichika se pararon frente al carro para impedir que los bandidos lo alcanzaran.

“¡Mujer! Parece una esclava sexual bastante limpia. ¡Vamos a tomarlos!” “No sucederá, amigos. Mi castidad le pertenece al Maestro.”

“¡Hyah!”

Las dos comenzaron a cortar casualmente a los bandidos. Mierda, Niku va directo a por sus gargantas… Ni un segundo de vacilación, incluso para los humanos. Qué loli aterradora. Se ve igual que cuando caza conejos, Dios mío.

“¡E-Estas dos son fuertes!”

“Escudos de carne, ¡consíguelos! ¡Aplástalos con números!” rugió uno de ellos, y los escudos de carne en cuestión… esclavos con collares pululaban alrededor de Niku e Ichika mientras custodiaban el carro.

“¡Oye, déjame ayudarte también! ¡Silbido!” Rokuko lanzó una flecha… que destrozó la cabeza de una gárgola. Wowee, fuego amigo. Siéntate de una puta vez.

“Qué tiro tan horrible. Mira y aprende, Rokuko”, dijo Emmymephy antes de lanzar una flecha propia y, para sorpresa de nadie, disparar a la cabeza a una Gárgola. ¿Cuántas veces tengo que decirlo?

“¡Nobles mujeres! ¡Se venderán por buen dinero! ¡Atrápenlas vivas, no las lastimen!”

“No importa si todos los esclavos mueren, ¡podemos obtener más!”

Oh hombre, ahora los bandidos nos persiguen aún más duro. Pero no iba a dejar que llegaran a ninguna parte.

“Toma un poco más de {Summon Gargoyle}”. Después de todo, podría convocar a todo un ejército de gárgolas. Mientras pudiéramos detenerlos el tiempo suficiente…

“¡Tch! ¡Estos esclavos son pedazos de basura! Escu—”

“Está bien, eso es suficiente. No esperes ningún apoyo, ya hemos terminado con el resto de tus amigos”.

Wataru regresó y derrotó al líder del bandido. Jaque mate. Eso fue bastante rápido. Dios mío, Wataru, nunca dudé por un segundo.

Con la batalla terminada, comenzamos a atar a los bandidos. Y por nosotros quiero decir Ichika y el equipo Bacchus. Aparentemente podríamos venderlos como esclavos convictos y ganar algo de dinero. En los establecimientos adecuados, ganarías cinco platas por cada hombre con extremidades completas, e incluso en ciudades posadas más pequeñas se te garantizarían tres platas… Hombre, los esclavos convictos son baratos. Pero mi lema es “quien no malgasta, no pasa necesidades”. No hay daño en obtener dinero extra cuando sea posible.

“Buen trabajo, Maestro”.

“Lo mismo para ti, Niku. Al final solo tienes que cortar algunas gargantas, ¿eh? Bien hecho.”

“Eso fue gracias a ti, Maestro. Si no hubiera ninguna gárgola, habría tenido que cortarles la cabeza”.

Sí, eso lo hubiera hecho. ¿Y soy solo yo, o Niku es un poco violenta? No es que no aprecie lo confiable que es una loli sanguinaria, por supuesto.

“Esa fue una fuerza de elección a través de los números, hombre. ¿Pero estás seguro de que deberías haberles mostrado a todos tus Gárgolas?” preguntó Ichika.

“No es un problema. Realmente, mostrar algo de lo que puedo hacer ahora será conveniente para respaldarme en el futuro”.

“No puedo discutir con eso. Los monstruos convocados son bastante convenientes para hacer mandados y ser señuelos y esas cosas. Lo único es que tú, un poco convocado un poco más de lo que la mayoría de la gente puede… Muy bien, voy a ser real. Invocaste muuuuucho más de lo que la mayoría de la gente puede.”

Sí, supuse que cuando los bandidos dijeron ‘invocadores’ hace un segundo.

“Yo digo, es malo para interponerme en el camino. Nunca debería haber usado un arma con la que no tengo experiencia.”

“Está bien”, dijo Rokuko. “Puedes practicar para la próxima vez… suspiro. Yo también quería matar al menos a uno de ellos”.

“Eso está bastante jodido, Rokuko. Quiero decir, siempre has estado un poco psicópata cuando se trata de matar gente, pero, eh… ”

“… No, como, quería ver si conseguiría DP por matar gente fuera de mi territorio. No solo quería matar por diversión, ¿de acuerdo?” Rokuko me susurró al oído en voz baja, para que Emmymephy no escuchara.

Oh eso tiene sentido. Tengo un poco de curiosidad por eso también. No hay daño en aprender sobre las formas de obtener DP fuera de la mazmorra. Veamos si las muertes de Niku nos dieron algo… No. Cifras. Oh, bueno, se destacaría si matamos al azar a los bandidos en este punto. Podemos experimentar más más tarde.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por Wataru caminando.

“Buen trabajo”, dijo. “¿Se escapó algún bandido?”

“Los sujetamos a todos con gárgolas. ¿Deberíamos haber dejado ir a algunos de ellos?”

“No, está bien. Parece que todos son tipos honestos”.

Indirectamente pregunté si deberíamos haber dejado ir a algunos para poder seguirlos hasta su escondite, y Wataru indirectamente respondió que no importaba, ya que algunas amenazas eran suficientes para hacer que derramasen los frijoles de todos modos. Sí, ni siquiera los héroes tienen piedad aquí.

“Pero ya sabes, Keima, estoy impresionado. No muchas personas pueden convocar y controlar tantas Gárgolas a la vez. Básicamente eres un ejército de un solo hombre”.

“Hay un truco para ello. Solo tienes que dar una orden simple y dejar que descubran el resto”.

“Aun así, incluso con eso en mente, seguramente había muchos de ellos. Para las gárgolas… Un invocador normal podría hacer tres en el mejor de los casos, mientras que un mago de la corte tendría dificultades para obtener hasta dos dígitos”.

… Sí, y acabo de convocar a veinte en el acto. Tal vez fui demasiado lejos allí… Uhhhh, bueno, déjame hacer desaparecer a los que no están haciendo nada. Vete, vete, vete. Buen trabajo.

Además, fui con Wataru a la base de operaciones de los bandidos. Pensé que podrían estar acampando en un calabozo, pero era solo un viejo pueblo abandonado. Aparentemente, era bastante raro que los bandidos conquistaran una mazmorra y la convirtieran en su hogar.

Ah, y Wataru limpió a los rezagados sin mucho esfuerzo. Justo lo que esperaría de… sí, ya tienes la idea.

***

De todos modos, vendimos a los bandidos en una ciudad en el camino. Nuestras billeteras estaban llenas de dinero extra. Sin embargo, estaban regordetes en primer lugar, por lo que básicamente obtuvimos dinero gratis para hacer lo que quisiéramos.

… Quiero decir, se sintió como si nos hubieran estafado, pero ninguno de nosotros quería seguir viajando con ellos. Reducir la velocidad de nuestros carros para mantener el ritmo de su caminata fue bastante miserable.

Pero lo que es más importante, estábamos de camino a la siguiente ciudad.

“Entonces, Gozou. ¿Qué tipo de lugar es este Corky?”

“Se llama la ciudad de herrería. Vamos a quedarnos allí un poco más, ya que yo y Kantara nacimos allí”.

“Interesante. Claro que parece que muchos enanos vivirían en una ciudad de herrería.”

“Sí, mucha gente lo llama Ciudad Enana. Sin embargo, nuestra ciudad natal es más profunda en las montañas”.

Magnifico. Ahí es donde están la familia de Gozou y Kantara. No me importaría quedarme allí y dormir durante una semana, honestamente.

“Aquí también hay bares de Lotsa. Aunque solo tienen frijoles y papas como bocadillos. Ojalá tuviera algo de comida frita y papas fritas aquí”.

“¿Hay algún chef que pueda manejar la fritura de alimentos?”

“Alégrate uno o dos, si buscas por toda la ciudad en busca de ellos… O realmente, un chef como ese sería el tema de conversación de la ciudad. No sabía esto hasta hace poco, pero freír los alimentos es algo que solo los chefs reales pueden hacer”.

Cierto. Freír alimentos era en realidad algo para lo que se obtuvo una licencia después de estudiar las enseñanzas de Ishidaka, el dios de la comida. No se te daría una licencia si no pudieras freír los alimentos a fuego libre. Probablemente no querían extender la práctica demasiado, ya que era muy fácil iniciar incendios con ella. Tenías que usar una tonelada de aceite caro solo para practicar, lo cual era suficiente para evitar que la mayoría de las personas aprendieran. También lo hizo la falta de autoaprendizaje. El resultado final fue que se convirtió en una técnica secreta para la Iglesia de los Alimentos.

Para ser claros, Kinue ya tenía su licencia gracias a Wozma. Un inspector había venido de Pavella para hacerle una prueba, que había pasado.

“… Bueno, echemos un vistazo. Tal vez apareció una pareja mientras yo no estaba. No tengo dónde gastar este dinero si no hay comida frita”, dijo Gozou. Parecía que tenía la intención de usar todo el dinero que obtuvo de los bandidos en los bares.

“¿Tienes algún recuerdo para tu familia?” Pregunté, y Roppe respondió.

“Tengo un par de buenas botellas de vino de la mazmorra de Goren, y eso debería ser suficiente. Wataru los tiene para mí”.

“¡Oooh! Buen pensamiento, Roppe”.

“Sheesh. Hacer este tipo de cosas no es mi estilo, ya sabes”, dijo Roppe encogiéndose de hombros.

“… Te ves un poco rudo y ruidoso, Roppe, pero eres sorprendentemente sensible con estas cosas. Creo que es una señal de que serás una buena esposa, en realidad”, dijo Rokuko.

“¡¿Guh?! ¡N-No te burles de mí, Rokuko!”

“No te estoy tomando el pelo. Quiero aprender de tu ejemplo, de verdad.

¿Verdad, Mephy?”

“De hecho, yo digo. Confirmaré que serás una espléndida esposa, Roppe.”

“¡Para! ¡Su respaldo es tan pesado que me aplastará, princesa Mephy!”

Esas tres seguramente se han convertido en amigas muy rápido. Huh ¿Es Rokuko realmente un extrovertido total? Terminó siendo amiga de Emmymephy antes de que me diera cuenta, así que… Realmente sucedió en un abrir y cerrar de ojos. O más bien, el parpadeo prolongado, como en, mientras estaba dormido.

De todos modos, llegamos hasta las puertas de Corky. Parecía que la mayoría de las grandes ciudades del Imperio se construyeron prácticamente de la misma manera. Corky también estaba rodeado de grandes muros de piedra. Quién sabía si ese era el estándar imperial en Laverio, o si era conveniente hacerlo con la tecnología de la época. Otra posibilidad era que hubiera algún tipo de magia que pudiera crear paredes como estas en un instante.

Gracias en parte a nuestra búsqueda de guardia, pasamos por las puertas en poco tiempo. La búsqueda se consideró terminada en ese momento, ya que tuvieron que investigar la carga del comerciante. Wataru obtuvo su firma y su pago antes de ponerse al día con nosotros.

“Heya. Ha pasado un tiempo, Wataru.”

“¡En serio, ¿Keima?! ¡No puedo creer que me hayas hecho quedarme en el carro del comerciante todo el camino hasta aquí! ¡Eso fue malo!”

“Me estaba asegurando de que no fallaras en la misión  que hiciste. Deberías agradecerme, de verdad.”

“Hmph. Pues está bien. Pasé la mayor parte del tiempo alardeando de cuánto más fuerte eres que yo. Los rumores sobre el Ultimo Aventurero Keima que ni siquiera los Héroes pueden vencer deberían extenderse mientras hablamos”.

“Acabas de hacerte enemigo de por vida”.

“Jaja, solo estoy bromeando. Sé que no te gusta ese tipo de cosas. Seguí adelante y mantuve en secreto los detalles de nuestra búsqueda.”

“Espero que lo hayas hecho. De todos modos, vamos al gremio”.

Condujimos nuestro carro en dirección al Gremio de Aventureros. Podíamos escuchar los sonidos de herrería en todo momento mientras conducíamos por la calle principal. Parecía exactamente como esperarías que sonara una ciudad enana.

Por cierto, desde la perspectiva humana, todas las mujeres enanas eran lolis. Los enanos podían decir cuántos años tenían de un vistazo, pero para nosotros todos eran lolis legales. Y aunque algunos podrían estar en desacuerdo, me alegré de que fueran el tipo de mujer enana que no tenía barba ni bigote.

Además, a pesar de ser mediodía, la ciudad estaba llena de enanos bebiendo en los puestos y fiestas de aventureros tintineando tazas juntas. Ciertamente había muchos enanos, pero había muchos humanos, elfos, bestias y otras razas bebiendo y pasando un buen rato. Esto era básicamente el paraíso para cualquier bebedor.

Oh, ¿esa persona extra grande es un gigante? Estupendo, pensé que era solo una persona alta. Esa persona alada debe ser aviar. No son del todo una piel de bestia tipo pájaro. Sé de ellos gracias a Maiodora.