Youjo Senki (NL)

Volumen 4

Capítulo 3: Una Victoria Magnífica

Parte 5

 

 

Dejándolo con un “Cuento con usted”, Tanya se apresura al cuartel general de la división conjunta de la Tercera y la Trigésima Segunda División y se queda varada en shock nuevamente en el momento en que llega.

El reconocimiento aéreo muestra múltiples unidades enemigas formadas por divisiones de infantería en la aproximación. Sorprendentemente, la Federación ni siquiera se ha molestado con equipos pesados y se atreve a asaltar la ciudad con unidades ligeras.

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No obstante, el problema grave es que el lado defensor tiene sólo dos divisiones. Dos divisiones tripuladas a mitad del retiro, es decir. Teniendo en cuenta que prácticamente fueron cortados hasta que llegó el 203vo Batallón de Magos Aéreos, las circunstancias son terriblemente severas.

Por un lado, será imposible esperar que tengan la concentración de fuerza para evitar acercamientos desde todas las direcciones.

A este ritmo, estaremos defendiendo desde dentro de la ciudad. La mayoría de los civiles han evacuado, pero, aun así, será una gran molestia capear los ataques de las olas del Ejército de la Federación mientras se protegen los restos.

Además de eso, la Federación no es signataria de varios tratados internacionales. El derecho de la guerra no se aplica.

“… Entonces nuestro batallón avanza para defender la ciudad. Atraeremos al enemigo y participaremos en retrasar el combate en las afueras de Tiegenhoff.”

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Por lo tanto, al regresar a su batallón, aunque frustrada, Tanya está explicando el plan de interceptación inevitable a Weiss, Serebryakov y Grantz. Por supuesto, no es como si comprendieran la situación de su enemigo lo suficientemente bien como para hacer maniobras terriblemente complicadas.

Avanzarán y ganarán tiempo a medida que manejen las cosas. El moderno batallón de magos está asumiendo el papel de la caballería ligera tradicional… parece lo correcto.

“¿Está segura? El Estado Mayor nos instruyó para ser la vanguardia en la batalla móvil.

Si usamos nuestra energía para retrasar el combate aquí, el plan original se vendrá abajo.”


“No sólo estamos hablando de una brecha… toda la base de avance en nuestro flanco está a punto de ser tragada. No tenemos más remedio que interceptar. Creo que el Estado Mayor lo entenderá.” Por no mencionar. Tanya pone una sonrisa desafiante.

“También podemos leer esto como el enemigo enviando el resto de sus reservas. Si superamos esto, todo lo que quedará será hacer un breve trabajo del Ejercito de la Federación menos su respaldo.”

“Tiene valor, pero este plan parece demasiado intenso.”

“Whoa, whoa, Teniente Grantz. ¿Ha olvidado el frente del Rhine? Se enfrentaron solos contra un cuerpo entero, ¡olvide las divisiones! Esto no es imposible. Si vas a tratar de salir de esto diciendo que es demasiado intenso, no me molestaría enviarlo contra ellos por tu cuenta… ¿qué le parece?”

“Mayor, si pudiera, por favor, deje de meterse conmigo…”

“Demonios, Teniente Grantz. Sé un dolor de cabeza en otro lugar, no en el campo de batalla. Necesita aprender algo de ética laboral.”

Ella palmea abatido Grantz en el hombro. Gracias a él, el resto de la unidad encuentra algo de humor para reírse a pesar del hecho de que están a punto de enfrentarse al enormemente enorme Ejército de la Federación. Es bueno tener ese margen de maniobra emocional. Especialmente para un trabajo difícil, es mejor tener el grado adecuado de tensión junto con el grado adecuado de calma.


El pánico siempre causará errores.

“Muy bien, batallón. Como de costumbre, vamos a interponernos en el camino del enemigo. Aprendieron esto en la escuela… la parte de hacer agresivamente cosas que su oponente odia.”

Después de todo. Tanya sonríe antes de continuar: “Soy una buena chica, saben. Naturalmente, tomo la iniciativa de hacer lo que otros odian.”

“Ja, ja, ja, ja. Has dado en el clavo, señora.”

“¿Cierto? De acuerdo, Capitán Weiss. Esta operación empieza. Nuestros oponentes en el Ejército de la Federación son más flexibles que lo que pensamos. Ahora bien, ¿veremos qué pueden hacer?”

Los comunistas son oponentes sobresalientes.

Así que, sin descuido, sin pensamientos extraños, tenemos que matarlos para no volver a molestarnos y llegar a salvo mañana a la mañana.

Estos tipos matan por su ideología. No podemos perder con idiotas que no conocen el principio del daño.

Con renovado entusiasmo, el 203vo Batallón de Magos Aéreos despega y avanza para encontrarse con las unidades de la Federación que se aproximan. En poco tiempo, aparece una unidad que parece ser la vanguardia, pero Tanya está increíblemente confundida.

“¿Qué demo…? ¿Estamos tan cerca y todavía no han enviado sus unidades aéreas de magos?”

Su refunfuño resume la razón.

Cuando recurre a su ayudante, Serebryakov, que está de guardia, recibe una sacudida de la cabeza en respuesta.

“Teniente, no hemos superado Dacia, ¿sabe?”

“Entiendo lo que quieres decir, pero Mayor… No estoy detectando nada. ¿Percibe algo?”

“No.” Responde ella, pero está tan desconcertada que la palabra carece de fuerza.

Aun así, Serebryakov, con una mirada igualmente desconcertada en su rostro, debe sentir lo mismo. Independientemente de cómo resultaría si estuvieran invadiendo las áreas traseras del enemigo, están llegando a ellos de frente con el objetivo adicional de reconocimiento-en- fuerza.

Dado que se trata de reconocimiento-en-fuerza, y el objetivo es ver cómo los maneja el enemigo, estaban preparados para luchar contra los magos aéreos de la Federación, pero esto es lo que obtienen. Incluso Tanya no imaginaba que no habría nadie para interceptarlos.

“Todavía tenemos que estar en guardia contra una emboscada, pero… ¿están tratando de atraernos? ¡Este es el Ejército de la Federación! ¿Realmente van a tomar ataques anti- superficie indefensos como Dacia y su falta de fuerzas aéreas o de magos?”

Y ellos son los que atacan. Tanya supuso que, dada su escasa artillería pesada, arrojarían todas las fuerzas aéreas y magos que tenían para compensar. Así es como normalmente lo harías, y sin el control de los cielos, esta pelea sería una masacre unilateral.

La razón por la cual Tanya decidió comprometerse y expresar su fuerza fue para descubrir la escala y la determinación de sus fuerzas. Pero esto es un desperdicio. Incluso si trataran de discernir cómo está pensando el enemigo, o si Tanya hiciera sus propios juicios, ningún contacto con los magos enemigos es potencialmente fatal para ninguno de los objetivos.

No hay forma de predecir sus tácticas.

“¡Estamos volando aquí a la intemperie! Si no estamos siendo interceptados, entonces… manténganse en guardia de emboscadas y preparen los ataques antisuperficie. Descartemos la posibilidad de que haya enemigos al acecho.”

Todo lo que podemos hacer es atacar, con cautela, pero sin vacilar.

Tanya considera varias formas de lidiar con enemigos potenciales y se prepara para responder si están presentes o no.


“¡Aquí Fairy 01 con un aviso para el batallón! ¡Preparen sus ataques antisuperficie por compañía! ¡No mantener alerta permanente sobre sus flancos! ¡Apóyense unos a otros y vigilen el aire a su alrededor!”

Esto es algo así como jugar Whack-a-Mole con doble martillo con una mano atada a la espalda. ¡Aquí vamos! Tanya grita y agita la mano que sostiene su rifle para indicarles a todos que estén listos para cargar.

“¡Asuman la formación de ataque! ¡Miembros de la compañía, síganme!”

La unidad tranquilamente reunida comienza una inmersión empinada por sus órdenes. En preparación para la parte más peligrosa: retirarse después del descenso, Tanya tiene su unidad detrás de ella, esencialmente una pared de carne. Tener al comandante al frente es genial. Tanya se ríe mientras su altitud cae en picado, y cuando alcanza un rango en blanco, donde puede ver los ojos de sus enemigos, aprovecha la oportunidad que ha estado esperando.

El fuego de retorno del ejército de tierra enemigo en pánico es limitado, por lo que es fácil para ella elegir al comandante observando a los soldados confundidos.

Los miembros de su compañía alinean sus barriles relucientes, preguntándose cuándo pueden disparar sus balas de fórmula. ¿Ahora? ¿Ahora? Y la voz de Tanya retumba como si estuviera transmitiendo un mensaje del cielo.

“¡A mi cuenta! ¡Manifiesten sus fórmulas explosivas! Ataque antisuperficie… ¡ahora!”

Ella calcula la fórmula con su Tipo 97 y la manifiesta en las coordenadas apropiadas.

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La suelta al momento perfecto, la fórmula vuela hacia el centro de la infantería enemiga, literalmente volando un área que apenas había estado manteniendo la disciplina.

La fórmula de Tanya destella y golpea, seguida de una cadena de fórmulas de explosión disparadas por su compañía que se derraman con la densidad modelo… incluso podría decirse por excelencia. Dadas las explosiones secundarias y la metralla voladora, no necesita pedirles a las escoltas de observación que sepan que han obtenido algunos resultados… Los enemigos son aplastados con demasiada facilidad.

Los soldados huyen aterrorizados en el suelo, al igual que los soldados dacios que rompieron filas y corrieron. Realmente me lleva de vuelta a ese juego unilateral en Dacia.

Pero. Allí, Tanya ejerce moderación y grita por la conexión inalámbrica que es hora de retirarse.

“¡Retirada! ¡Retirada!”

“08 a 01. ¡Su fuego antiaéreo es limitado! ¡Solicitando permiso para un segundo ataque!”

“¡Negado, 08! ¡No estamos aquí para aumentar nuestras ganancias! ¡Prepárense para retirarse!”

Una propuesta de su subordinado para lograr más llega volando por la red inalámbrica.

No es malo disfrutar de la alegría de patear el culo de comunistas en combate, pero el campo de batalla no fue hecho para la búsqueda de la felicidad individual.

“¡¿Mayor?!”

“¡Golpeémoslos tanto como podamos! ¡Deberíamos atacar de nuevo!”

Entiendo cómo se sienten, pero no podemos mezclar nuestro objetivo y nuestro método.

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Tanya tiene los medios para una sonrisa irónica.

Por alguna razón, los miembros del 203vo Batallón de Magos Aéreos realmente son belicistas. Una vez que ven a un enemigo, todo lo que pueden pensar es hundir sus dientes en ellos y no dejarlos ir.

“¡Fairy 01 a todas las unidades! ¡Prepárense para retirarse! ¡Nos estamos retirando! Retírense con su compañía. Una vez que nos reagrupemos, pasaremos por las líneas enemigas. ¡Hagan que la búsqueda y destrucción de las fuerzas de magos sea su máxima prioridad!”

Ella grita que no se den la vuelta mientras buscan a cualquiera que lo persiga, y cuando se reagrupan en el aire, revisa el equipo de todos.

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Aunque todos se reagruparon eficientemente, Tanya encuentra a Weiss muy concentrado en el suelo. Entonces él también piensa que deberíamos atacar a los comunistas ahora.

¿Está demasiado ansioso por pelear? ¿Maravillosamente valiente? De cualquier manera, Weiss es una persona sensata a la que le resulta difícil objetar directamente a su oficial superior. Esta es una de esas veces que un jefe tiene que intervenir y ser considerado. Bien. Tanya se encoge de hombros y discretamente lo llama.

“Vicecomandante, ¿es usted uno de los que piensa que deberíamos reabrir el fuego?”

“… ¿Puedo decirle lo que pienso, Mayor? Estas probablemente serán las únicas unidades sin cubierta de aire. Si no los golpeamos ahora, nuestras tropas sufrirán más tarde.”

Cuando Tanya le pregunta directamente a Weiss si no está satisfecho con retirarse, él le presenta su punto. Y lo que dice es correcto. No es que Tanya no haya considerado que su oponente haya dejado caer la pelota. Y es porque ella siguió el mismo tren de pensamiento que el batallón se está retirando.

“Podría ser una trampa, ¿no? Estamos hablando de comunistas. No podemos descartar la posibilidad de que mientras estamos jugando con la división a cargo de ser golpeados, envíen a los verdaderos luchadores.”

Incluso la Marina de los Estados Unidos usó barcos de piquete de radar casi como objetivos para golpizas; usarlos para la defensa de la flota era simple realidad.

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Mientras los oponentes sean comunistas, no se puede descartar la posibilidad de que usen alguna unidad aleatoria como señuelo y luego ataquen con sus fuerzas reales.

“Bien, continuemos con el procedimiento de búsqueda y destrucción. Sólo espero que vaya bien.”

Con eso, les dice a sus tropas que la sigan y se cuela en repetidos ataques contra la superficie en lo que parece ser una ruta de ataque del Ejército de la Federación.

Esto es lo que es lograr un gran éxito, y contra enjambres virtuales de enemigos.

El batallón percibe nuevas divisiones terrestres enemigas siete veces, pero nunca se encuentran con las fuerzas aéreas o de magos enemigas.

El plan era buscar y destruir, atraer al enemigo como una trampa de luz violenta, pero, aunque llueven castigos en el suelo, el enemigo nunca aparece.

Al informar tanto a las Divisiones Tercera y Trigésima Segunda escondidas en Tiegenhoff, Tanya descubre lo que parece un nuevo lote de fuerzas terrestres. ¿Aún hay más? Prácticamente ha perdido la paciencia por ahora.

“¿Más tropas frescas? ¿Qué estás pensando en este momento, idiotas de la Federación? ¿Van a exponer todos estos recursos de combate como objetivos para ataques anti-superficie? No lo entiendo.”

Si a la Federación realmente no le importa perder ocho divisiones, entonces me pregunto sobre el alcance de sus fuerzas de reserva. ¿Cuántas hay, incluso en este distrito que estamos cubriendo?

No. Allí, Tanya cambia de marcha y pone su cuerpo exhausto en forma para otro golpe antisuperficie.

Como si fuera su intención todo el tiempo, lleva a cabo un ataque en la octava división del día para continuar buscando magos.

Los resultados son los mismos.

Y el 203vo Batallón de Magos Aéreos debe haberse acostumbrado a la intercepción antiaérea de la Federación. Navegan durante unos minutos al borde del alcance de los cañones, y cuando las tropas de la Federación comienzan a disparar en pánico, los magos observan con calma sus objetivos.

¿Es así como hacen las cosas?

Si bien exhiben un autocontrol inesperado al no disparar a ciegas cuando los magos están fuera de su alcance, tienden a disparar todo lo que tienen en el momento en que apenas entramos. Si recuerdas este tipo de peculiaridades sobre los ejércitos enemigos, son sorprendentemente útiles. Haciendo una nota mental, Tanya asiente con la cabeza ante el informe agotado de Serebryakov de que el batallón se ha reagrupado y no falta nadie.

“Buen trabajo, Teniente Serebryakov. Sin pérdidas, pero ¿qué tal la fatiga?”

“… Mayor, estamos bastante cansados.” Serebryakov casi nunca se queja, pero ahora admite que está exhausta.

Supongo que es ese momento. Tanya se ve obligada a aceptar que incluso su batallón tiene límites cuando se trata de su capacidad para mantener un combate tenaz.

Como están realizando una reconocimiento-en-fuerza, llevan armas y municiones bajo el supuesto de que habrá combate. Y es una unidad aérea de magos. Con sus orbes de cómputo, tienen varias opciones de ataque anti-superficie, ni siquiera tienen que usar viñetas de fórmula. Ella ha estado persuadiendo los límites aún más a medida que continúan luchando, pero… sus subordinados realmente se están acercando a niveles peligrosos de agotamiento, por no hablar de quedarse sin munición.

“¿Cuál era esa división justo ahora?”

“Como era de esperar, era una nueva, no una de los siete que ya habíamos alcanzado… Supongo que deberíamos tomarnos en serio el reconocimiento de la flota aérea.”

“¿Entonces estas son ocho divisiones?”

Hablando con Serebryakov y enfrentando la verdad de que la estimación de ocho divisiones no puede bajar, Tanya, siendo Tanya, todavía tiene que murmurar: “Sin embargo, no lo entiendo. Me pregunto dónde están sus fuerzas aéreas. La pregunta me está dando dolor de cabeza.”

“… Disculpe, Mayor, pero si no han salido después de haberlos atacado tanto, tal vez… Tal vez… ¿no hay ninguna aquí?”

El comentario de Serebryakov deja a Tanya aturdida por un momento. ¿El Ejército de la Federación no tiene fuerzas aéreas de magos?

Ella se ríe como si fuera imposible. “Pero Teniente Serebryakov, eso no puede ser cierto. Ellos son los que fueron a la ofensiva.”

“Y además…” Continúa explicando Tanya. A diferencia del Ejército de Dacia premoderno, el Ejército de la Federación puede ser comunista, pero la Federación aun así se las arregla para contar como una gran potencia. Independientemente de la calidad, emplea fuerzas aéreas, y ha habido informes de varias unidades de que eran bastante resistentes.

“¿Ha leído los informes de combate de la flota aérea desplegada en el este? ¡Dicen que actualmente están luchando por la superioridad aérea con las fuerzas aéreas de la Federación, incluidas las unidades de magos!”

“Sí, Mayor. Pero eso significa que el Ejército de la Federación debería comprender la importancia de la superioridad aérea.”

Es verdad. Tanya asiente. Aunque la guerra va a su favor, ella escucha que las batallas aéreas son difíciles. Después de todo, muchos de los magos imperiales están estacionados en puntos importantes del oeste, y tienen un concurso de miradas con la Mancomunidad. No es que haya tan pocos en el este, pero… tener que lidiar con todo el Ejército de la Federación de frente es intenso.

“Nos han dejado solos todo este tiempo… quiero decir, traté de pensar en varias perspectivas que la Federación podría tener, pero no puedo encontrar ninguna razón para esto además de la ausencia de fuerzas.”

“… Eso tiene sentido, pero… No, tiene razón.”

En ese caso, creo que leí mal la situación. Tanya lamenta tener expectativas tan generosas. En lugar de preocuparnos por la búsqueda, deberíamos haber concentrado nuestros esfuerzos en los ataques contra la superficie.

Su retrospectiva es veinte-veinte, pero le molesta que haya perdido esa oportunidad.

Incluso si reiniciaran los ataques ahora, su unidad está totalmente desgastada, y esa es una descripción optimista. Si ella los presiona demasiado, no podrían exhibir todas sus capacidades incluso si fuese posible reiniciar.

El cálculo lógico de los pros y los contras de Tanya rechaza rotundamente empujar a las élites sin sentido, como el 203vo Batallón de Magos Aéreos, a una masa de enemigos como un sacrificio sin sentido. Es una pena terrible, pero necesitan descanso y suministros.

“Nos retiraremos… Pida a Tiegenhoff para descansar y suministros. Dejaremos el trabajo de atacar a las fuerzas terrestres a otra unidad de magos. Oh.” Continúa Tanya.

“Dígale al Mayor Hofen del 213vo Batallón de Magos que rechazamos su oferta de invitarnos a beber.”

Serebryakov, haciendo una mueca, y Grantz, decepcionado, reconocen las órdenes.

Grantz parece realmente gustarle el beber. Eso no está bien, reflexiona Tanya. El consumo excesivo de alcohol es inmoral, y aunque es una cuestión de preferencia personal, Tanya está a punto de decirle que tal vez debería prestar un poco más de atención a su salud cuando se sorprende.

¿Estaba a punto de interferir con las libertades personales de alguien?

… ¿Y por dudosas razones morales?

***

 

 

29 DE MARZO, 1926 DEL AÑO UNIFICADO, OFICINA DE ESTADO MAYOR DEL EJÉRCITO IMPERIAL

Casi al mismo tiempo, la Mayor Tanya von Degurechaff estaba teniendo un conflicto interno sobre su estado mental y devolviendo su unidad a Tiegenhoff… El Teniente General von Rudersdorf fue sacado de la cama con la noticia de que las fuerzas de la Federación se acercaban a Tiegenhoff. El siguiente informe, que el 203vo Batallón de Magos Aéreos había interceptado y se había salido con la suya, lo hizo sonreír.

Los magos dieron una paliza a ocho divisiones enemigas. Con sólo las dos divisiones escondidas en Tiegenhoff, la ciudad podría haber caído… pero aparentemente, al final, Degurechaff había empleado la defensa móvil por excelencia.

Había ido tan lejos como para enviar un informe disculpándose por actuar para atraer a los magos enemigos y darse cuenta demasiado tarde de que no había ninguno, pero… eso era sólo que ella era una perfeccionista. Rudersdorf incluso se rio ante la extraña disculpa.

Ella se había enfrentado a un ejército masivo, los molestó tanto que tendrían problemas para avanzar y demostró la ausencia de las fuerzas de magos enemigas. Como resultado, las numerosas reservas disponibles del Ejército de la Federación se estaban reteniendo.

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“¡Espléndido! ¡Magnífico!”

Estaba seguro, entonces, de que saldrían victoriosos.

Hemos ganado.

Sólo había una cosa que hacer ahora.

Enviar un torrente de soldados, todos los hombres que el Imperio pudiese movilizar, para golpear los agotados puntos débiles enervados del Ejército de la Federación.

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