Youjo Senki (NL)

Volumen 3

Capítulo 3: Operación Arca

Parte 3

“¡Mayor von Degurechaff! ¡Por favor, Mayor!”

Ella podía haber sido una niña pequeña, pero aun así era una maga. Habiendo reforzado su resolución, todos saltaron sobre ella a la vez. Y fue cuando su película protectora los rechazó cuando finalmente se dieron cuenta de lo extraordinariamente sincera que era cuando gritaba.

“Coronel, se lo ruego. Por favor, reconsidere esto. ¡Para el futuro del Imperio, debemos actuar ahora!”

“… Ngh. ¡Mayor von Degurechaff, necesita calmarse!”

Pero incluso el comandante de la base era un soldado imperial. Si podía ser coaccionado por un comandante estacionado debajo de él, no estaba en condiciones de estar a cargo.

“La caída de Brest es sólo cuestión de tiempo. ¡No necesitamos desgastar nuestras fuerzas sin sentido! ¡Mayor! ¡No puedo dejar que arruine el cese al fuego!”

“¡El cese al fuego aún no se ha declarado! ¡Todavía podemos salvar a nuestro ejército si actuamos ahora!”

“¡Mayor von Degurechaff! Esa flota ya ha sido derrotada. ¡Ya no constituye una amenaza para nuestro ejército!”

Con una mirada a los Policías Militares vacilantes, los empleados alzaron sus voces para disuadirla. No pensaron que pudieran convencerla con músculo, pero pensaron que, si ella era un soldado, podría ser persuadida con palabras.

O eso intentaron.

“Ahh, por favor, tiene que entender. El tiempo es el problema. ¡No hay tiempo! ¡Coronel!”

Pero a pesar de que se decía que la Mayor von Degurechaff era tal, que las palabras sensatas ni siquiera eran necesarias, hoy ella mantenía su punto tercamente. No sólo eso, insistía, abiertamente impaciente, que deberían atacar con todo lo que tenían.

Era casi como si…

 Sí, sin duda, estaba suplicando como si tuviera miedo de algo.

Qué absurdo. ¿Plata Oxidada? ¿Asustada?

 Eso no podía ser, pensaron varios de los espectadores.

Simplemente no lo entendían aún.

“¡Quieren escapar en secreto, abandonar su patria como ratas!”

… ¿Y qué hay de eso?

 La pregunta apareció en la cabeza de los empleados instintivamente, y no se equivocaban. Es cierto que los ejércitos comían mucho incluso en tiempos de paz. Como habría un estómago muerto de hambre para cada hombre, el resultado era claro. Un destino trágico esperaba a un ejército aislado de sus líneas de suministro.

Sobre todo, el colapso de un ejército sin base era sólo cuestión de tiempo.

Si uno consideraba esto, entonces las tropas reunidas en la Base Naval de Brest seguramente eran unidades para reconstruir las líneas defensivas. La mayoría de los soldados siguieron ese análisis y concluyeron que quizás deberían estar atentos a una operación de contraataque. Ajá, sería problemático si hicieran lo mismo que nosotros y amenazaran nuestras líneas de suministro al aterrizar en la retaguardia.

“¿Pero no se autodestruirían? ¡¿No es eso todo lo que sucedería?!”

¿De qué le tiene miedo? ¡Matar a un solitario ejército aislado no era tan difícil de hacer!

 Pero no era como si todos estuvieran perfectamente a gusto.

Después de todo, la joven prácticamente perdió el control de su cordura ante sus ojos y era reconocida universalmente por su excelente cerebro.

La gente la conocía como un genio del Colegio de Guerra o incluso la niña bonita del Estado Mayor o una estratega subestimada.

“¿Auto destruirse? ¡No, no lo harán! Ellos están… ¡No, están tratando de facilitar un escape para algunas de sus fuerzas! ¡No podemos dejar que eso suceda!”

El rugido estridente de su voz resonaba sorprendentemente fuerte sobre la pista de la base. Sin embargo, aún nadie podía entender qué la hacía seguir gritando así, aunque se estaba quedando sin aliento. Cualquiera que la viera sabría que estaba pidiendo algo, pero no podían entender qué era.

¿Por qué está siendo tan insistente? ¿Cómo llegó a esa conclusión?

“¡Esa teoría no tiene nada que lo respalde! Tiene más sentido considerar a las unidades como defensores de reemplazo o contraatacantes.”

“¡Si los dejamos escapar, la victoria del Imperio se verá comprometida! ¡Eventualmente colapsaremos!”

Algunas personas intentaron pensar. Pero por cruel que haya sido, ya era demasiado tarde.

La victoria del Imperio se verá comprometida. El Imperio eventualmente colapsará.

La respuesta a esos gritos era bastante diferente de lo que esperaba la persona que gritó.

“Muy bien, ¡sujétenla! Mayor, ¡es suficiente!”

Como si la paciencia de todos se hubiera agotado, se dio la orden de mantenerla bajo control. Los Policías Militares y su unidad decidieron a regañadientes arrancarla del comandante, pero la resistencia de Degurechaff era inusualmente feroz. Aunque eran cinco hombres contra una niña pequeña, tomó todas sus fuerzas para alejarla.

“¡Coronel, por favor! ¡Por favor!”

Era un grito que permanecía en los oídos.

“¡¿Puedo, Mayor?!”

“¡Debemos destruirlos en la Base Naval de Brest! ¡Este enemigo es una amenaza para el Imperio! ¡Tenemos que aniquilarlo aquí y ahora! Por favor, tiene que entender… ¡tengo que cumplir con mi deber como soldado! ¡Esto no es lo que quiero, pero sé que debemos destruir la Base Naval de Brest!”

“¡Mayor, eso no sucederá!”

Aun así, él se sacudió su intento de oración hecho entre gemidos.

“… ¿Podría por favor dejarme ir?”

“¡Ríndase!”

“¡Mayor!”

“Por favor no trate de detenerme. Comandante, ya debería tener la autoridad para hacer esto.”

La lógica del comandante de la base era clara como el agua. Su acción pondría en peligro el cese al fuego. Pero la refutación de la Mayor von Degurechaff también era clara: me importa un comino.

“Por la autoridad invertida en mí por el Estado Mayor, voy a seguir adelante con una misión de reconocimiento en vigor.”

Luego, increíblemente, le dio la espalda al General gritando a todo pulmón tratando de mantenerla bajo control y corrió con determinación hacia su unidad.

Los Policías Militares se prepararon, pensando que deberían detenerla, pero la mirada en sus ojos los congeló. En días posteriores, hablarían entre ellos sobre esos ojos: “Si nos hubiésemos metido en su camino, ella nos habría ‘eliminado’…”

Con una mirada a los oficiales reunidos para una reunión de emergencia al mando, Tanya pensó para sí misma.

Mayor General de Lugo… Ese es un nombre siniestro. Incluso podría llamarlo un nombre extremadamente siniestro. Era el tipo de nombre que esperaría realizar pruebas de armas nucleares o salirse de la OTAN.

Tengo la sensación verdaderamente ominosa de que podría comenzar a declarar la República Libre o algo así. Realmente no podemos dejar que un tipo como él se escape.

En este momento tengo una completa decepción de que el comando no entienda esto. Lamentablemente, tendré que ayudarme si quiero poner fin a la guerra. Entonces, ¿cómo debemos atacar por nuestra cuenta?

Si no hago nada, no habrá ningún problema, pero eso no tiene nada que ver. Piensa en Rudel… no debería ser reprochado por atacar a un país enemigo. En otras palabras, si no voy a terminar ante un tribunal después de la guerra, entonces… este es un riesgo permisible.

Asumamos que estamos atacando. Hasta hace poco tiempo, discutí lo mejor que pude, pero ya no estoy en condiciones de recibir apoyo oficial.

Probablemente el único contacto que tengo en este momento es el submarino con el que trabajamos cuando usamos los V-1. Probablemente hayan establecido una línea de patrulla.

Pero, sinceramente, sería arriesgado intentar una recogida sobre el agua sin organizar las cosas con anticipación. Teniendo en cuenta la posibilidad de que no nos encontremos, para empezar, probablemente sea más seguro no contar con ellos.

No quiero atacar en solitario, pero parece ser la única forma. Para bien o para mal, si usamos los V-1 que tenemos, podemos atravesar Brest sin obstáculos.

Entonces, por lo menos, puedo hacer que el General de Lugo se despida del mundo.

En cierto modo, esto era como una adquisición hostil de una nueva empresa notable en alza. Necesitábamos precisar nuestras patentes y activos y eliminar cualquier amenaza futura para nuestra empresa… era lógico. Tendríamos una experiencia mucho más fácil si acabáramos con él ahora.

No soporto la idea de que la historia se burle de nosotros por nuestra vacilación irracional cuando deberíamos haber intervenido.

“¡Atención, batallón!”

“Gracias. Muy bien, tropas. Vamos a atacar la Base Naval de Brest.”

Entonces Tanya declara su objetivo en su manera habitual. Este enemigo no es diferente de cualquier otro al que deben disparar, y dado que ese es el caso, simplemente harán lo mismo de siempre. Así que se sorprende al ver las expresiones tensas de los oficiales y comprender el efecto que su anuncio tiene en ellos.

El sensato Teniente Primero Weiss y los demás oficiales parecen atónitos. Tanya se da cuenta de que lo que dijo sonó extraño.

Pero lo primero que siente es confusión. Al conocer a sus tropas amantes de la guerra, pensó que podrían estar felices, pero nunca imaginó que quedarían estupefactos. Es un poco vergonzoso.

Pensé que estaban a favor de perseguir al enemigo a cualquier lugar si eso significaba logros adicionales.

Como alguien de recursos humanos, pensé que entendía sus sentimientos, por lo que es un poco sorprendente descubrir que no. Se supone que debo administrar estas tropas, así que, si no entiendo sus esperanzas y sueños, sólo puede significar que soy una persona inepta.

… No, pensemos en esto con calma. La prisa trae perdidas. Por ahora suspenderé el juicio.

“¡¿Comandante?! Eso es…”

“Vamos a actuar bajo nuestra propia autoridad. ¿Por cuál otra razón nos tendrían reportando directamente al Estado Mayor? ¿Por qué más nos permitirían actuar de forma independiente?”

Al igual que el seguro, es mejor no usarlo, pero es precisamente para momentos como este que tenemos este comodín.

Los superiores se resienten de su autoridad porque la cadena de mando estándar a menudo está enredada, pero para Tanya, si piensa en su unidad como un equipo de proyecto, es más fácil ver cómo deberían usarse.

La razón por la que nadie más que el oficial al que informan directamente puede interferir es porque son un equipo que realiza un proyecto importante por órdenes especiales del CEO. Un equipo como ese necesita un cierto grado de autonomía. Y se espera que cualquiera que tenga autoridad para actuar lo use apropiadamente. No hay nada mejor que resolver un problema con un mínimo esfuerzo.

La medicina nos muestra que la prevención antes de enfermarse hace la vida más fácil. Y la mejor parte es que puede ahorrar en costos médicos. El desperdicio evitable debe ser eliminado.

Si puede prevenir múltiples riesgos con una sola inoculación, le corresponde hacerlo. Los humanos tienden a sobreestimar los riesgos inmediatos, pero es igualmente tonto olvidar los terribles riesgos a largo plazo.

Considerando lo bien que maneja los costos para la sociedad, la medicina preventiva es realmente maravillosa. El dolor momentáneo y ciertos tipos de riesgo no se pueden ignorar por completo, pero la obsesión por esas cosas no es el punto. Esta operación para que el General de Lugo se despida del mundo es bastante similar a la medicina preventiva. Vale la pena hacerlo incluso si conlleva algún riesgo.

Debemos evitar esta plaga que acabaría con el Imperio. Si no lo prevenimos, el costo para la sociedad, la misma sociedad que le dio a la Mayor Tanya von Degurechaff la autoridad para actuar, sería irrecuperable.

Eso debía evitarse a toda costa.

“P-Pero realmente no creo que nuestro batallón pueda atacar la Base Naval de Brest por nuestra cuenta. Y, además, los únicos que usaron el V-1 antes fueron los miembros de la compañía seleccionada. No es suficiente. Por favor, reconsidere esto.” Insta el Teniente Weiss, pero para Tanya, esto no tiene sentido derivado de un apego a las nociones preconcebidas.

Ciertamente, sería lógico que la base de Brest estuviera fuertemente defendida. Sí, veo cómo incluso un batallón de élite podría sufrir serias bajas si una unidad que los acecha les dispara de frente.

Aun así, para Tanya, incluso teniendo en cuenta todo eso, debía hacerse. Y tenían una manera de hacerlo. No había razón para no hacerlo.

“Teniente, sólo haremos un ataque relámpago. Es menos un ataque que una misión de reconocimiento-en-vigor. Estoy segura de que nuestro batallón puede manejarlo y que es un objetivo que vale la pena.”

Entonces Tanya argumenta. Si alguien puede hacerlo, nosotros podemos. Después de todo, sus defensas estaban condicionadas para mar y tierra, y, en primer lugar, sólo nos acercarnos con los V-1 y luego nos iremos después de dar un buen golpe.

Además de esos supuestos básicos, ella imaginaba que las defensas de la Base Naval de Brest están desactualizadas. No tomaron en cuenta la tecnología aérea o los magos paracaidistas.

“Además de eso, sus defensas son un anacronismo. Y sin una razón apremiante, probablemente no se apresuren a actualizarlas. Probablemente pueda suponer que están operando con viejas salvaguardas.”

La ubicación de la Base Naval de Brest la convertía en un buen puerto natural. Originalmente se convirtió en un puerto para refugiarse en una tormenta, y la topografía permitía atracar grandes barcos. Geográficamente, también tenía la distinción de ser difícil de alcanzar para un ejército terrestre. Había una razón por la que el lugar se había utilizado como base desde la antigüedad. Otro punto importante era su distancia, segura en la retaguardia, del Imperio, un enemigo potencial.

Pero esa suposición de “seguro en retaguardia” traía consigo una propuesta interesante. En  una  carrera  armamentista  donde  cada momento contaba, no había muchos recursos disponibles para equipar áreas además de las líneas del frente. Entonces, ¿se daría prioridad a un lugar considerado seguro como Brest? Era una pregunta muy interesante.

Pero, ¿qué pasaba si el enemigo contaba con el uso de las defensas y el poder de fuego de la flota? No parecería extraño esperar que las defensas de la Base Naval de Brest no fuesen mucho de qué hablar.

Después de todo, en comparación con el estado del fuego defensivo al final de la Segunda Guerra Mundial, estas medidas antiaéreas eran como cerbatanas. Definitivamente podríamos limitar nuestra cantidad de desgaste mientras no alargáramos el ataque. Además, el Ejército Republicano no tenía mucha experiencia.

La Flota Imperial y Republicana se habían estado mirando el principio de “flota en ser” durante siglos. Es decir, ambos estaban ocultos. Por supuesto, barcos individuales habían participado en batallas aquí y allá, pero podíamos suponer que a nivel de flota no tenían mucha experiencia en la lucha contra las fuerzas aéreas o de magos. Bueno, no era de extrañar, dado que la mayoría de las unidades de magos de ambos lados se enfrentaron entre sí en la batalla de desgaste en el frente del Rhine.

E incluso si el grupo incluía tropas que vivieron su bautismo en el infierno de las líneas del Rhine, de todos modos, la mayoría de ellos eran reservas. Las unidades sin experiencia no podrían seguir el ritmo de las élites. La diferencia entre tener una pequeña experiencia de combate en primera línea y ninguna era enorme.

“Y estoy en contacto con un submarino aliado cerca de la base.”

Confirmé que un submarino aliado patrullaba el área, incluso si lo máximo que podíamos esperar era alertar en lugar de evitar el escape por completo.

Aun así, si pudiésemos conseguir un aventón, podíamos atacar más de una vez y hacer nuestra escapada bajo el agua. Tendré más que agradecimiento por tener opciones adicionales. Y mientras el comando submarino no interfiera, será posible atacar simultáneamente con torpedos.

“Dado todo eso, he determinado que el mejor curso de acción es atacar directamente la Base Naval de Brest con V-1 y luego abordar el submarino y volver a atacar. En otras palabras, los atacaremos con los V-1 como ya lo hicimos una vez. Tengo la seguridad de que ustedes pueden volverlo a lograr.”

Era una repetición de una operación pasada. Como estábamos actuando por nuestra cuenta, no podíamos obtener apoyo para redactar una nueva, por lo que no había forma de evitarlo. Para tener el plan más seguro, Tanya hacía referencia a la operación más fácil en la que había estado involucrada.

Por supuesto, ella no quería usar los V-1, pero la invención del ingeniero jefe Schugel jugó un papel crítico en su operación anterior.

Tanya cree que destruir un barco era más que factible con el poder destructivo de esas ojivas.

Además, al usarlos, no tendríamos ningún problema con la intercepción del enemigo ni con ningún aliado que intentara detenernos. Si los tanques llenos de combustible obtenían un impacto directo en el barco, podíamos esperar resultados a la par con los misiles anti-buque. Incluso un acorazado no quedaría indemne.

Y con todo un batallón aumentado atacando, eso equivaldría a cuarenta y ocho misiles. Eso debería ser suficiente para hacer un daño severo. Por supuesto, no teníamos mucha experiencia en operarlos. Incluso si todo iba bien, deberíamos estar preparados para una baja tasa de golpes directos.

Pero los V-1 deberían dar la posibilidad de varios impactos. Tal vez pudiésemos estimar que la mitad serían impactos directos. Veinticuatro impactos no parecían irrazonables considerando que el objetivo era un barco anclado.

Y veinticuatro misiles eran más que suficientes para conseguir resultados. Y si además de eso los magos atacaban, no tengo dudas de que conseguiremos que nuestro enemigo jurado, el Mayor General de Lugo, sea promovido a General Supremo en muy poco tiempo. Incluso le daremos un barco de guerra por lápida.

No, “sin duda” no era la forma correcta de decirlo. Definitivamente ejecutaríamos este plan. Sí, en lugar de dejar que se convierta en mariscal, le presentaremos una doble promoción y una lápida gigante en forma de acorazado.

“Mayor, tengo una pregunta.”

En respuesta, sus subordinados parecían escépticos. Ella lo sabía, pero si no podía lograr que lo entendieran completamente, el plan podría fallar. Ella asintió con benevolencia, con completa cautela, pero sin culpa en su conciencia. “Adelante. ¿Qué pasa?”

“Mayor, ¿dónde vamos a conseguir los V-1?”

No esperaba una pregunta técnica.

Ella perdió el ritmo, pero cree que está bien y responde de manera casual: “El Arsenal Técnico tiene algunos aquí. Los usaremos.”