Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 7

Prólogo: Cartas

Había una gran villa de marfil ubicada dentro de la ciudad capital del Imperio Laverio. Dentro de dicha villa había un jardín. Ahí fue donde Dungeon Core 89, también conocido como Haku Laverio, pasaba su tarde perezosa. Se sentó en una silla de marfil frente a una mesa de marfil, ambas impecables a pesar de su ubicación afuera. Había un mayordomo sirviendo té negro con un juego de té de mithril. La escena podría describirse como la de una pintura digna.

Haku tomó un sorbo de su taza de té perfectamente caliente. Un sabor maravilloso se extendió por su boca, acorde con el del té de la más alta calidad del Reino Santo. La Iglesia de Lux de ese reino fue una gran espina en su costado, pero tenían una obsesión con los artículos de lujo que valieron la pena.

… Con su sorbo completado, Haku dejó escapar un ligero suspiro.

“¿Por qué debo trabajar diariamente sin descansar? No he tenido tiempo de jugar con Rokuko durante bastante tiempo”.

“Creo que sabes la respuesta a eso”. El murmullo de Haku fue respondido inmediatamente por su ayudante de mayordomo, el Succubus Chloe.

“Sí, supongo. Ahora que el polvo se ha asentado, debo preguntarme si era necesario hacer no solo a Keima un aventurero de rango B, sino también a sus esclavos”.

Todo comenzó hace varios meses, durante la batalla de mazmorras de triple amenaza iniciada por Padre. Haku había ignorado las costumbres, la precedencia y la ley al emitir esas tarjetas de aventurero de rango B y permitir que el grupo de Keima viviera en su villa durante aproximadamente un mes. Las quejas causadas por sus acciones llevaron a una bola de nieve de problemas acumulados que se convirtieron en una avalancha de trabajo. Ahora estaba atrapada manejando su trabajo normal mientras simultáneamente limpiaba el desorden que hacía.

“Sin embargo, esos días que pasé con Rokuko fueron el cielo, por decir lo menos… Haaah…” Haku suspiró una vez más. Pero esta vez, fue un suspiro maravilloso nacido de recordar recuerdos felices.

Imagina una vida donde tu linda hermanita vivía en tu propia casa y en tu propia habitación. Durante un mes, Haku había vivido en un cielo donde podía encontrarse con Rokuko inmediatamente después de terminar su trabajo. Un paraíso de diversión sin fin, fiestas de té sin fin y juegos sin fin, todo con su querida hermana pequeña.

Solo recordarlo la llenó de tal dicha que su cuerpo se estremeció y su corazón palpitó. Solo podía sobrevivir a su estado actual de exceso de trabajo al recordar que era el resultado de pasar esos días con Rokuko.

“Por cierto, Lady Haku. Han llegado dos cartas para ti.” “Oh, me pregunto de qué nobles. Que molestia.” “Llegaron a través del [Punto Secreto de Marfil]”. “¡Dime eso primero!”

Chloe extendió dos cartas. El [Punto Secreto de Marfil] formó una conexión directa con la mazmorra de Rokuko, la [Cueva de la Avaricia], lo que significaba que las cartas eran de Rokuko o Keima. Como había dos letras esta vez, probablemente era una de cada una. Esto resultó ser exactamente el caso.

“¿Cuál leerás primero?”

“… Dejaré lo mejor para el final, lo que significa comenzar con Keima”.

Chloe le tendió un pequeño abrecartas que Haku usó para abrir la carta de Keima.

He establecido la Iglesia Beddisto. Es una religión que adora el sueño y la paz.

“Oh, la Iglesia Beddisto, ¿hm? Es bueno que haya elegido informarme de esto”. Ya había oído hablar del Beddismo a través de sus espías en Goren. El Beddismo no estaba compitiendo con la Iglesia de Marfil por seguidores, y por lo tanto no había necesidad de que lo aplastara cuando era joven. Wataru también se había unido a él, por lo que una relación amistosa tenía más sentido.

Continuando… Una persona loca llamada Leona nos atacó. Ella es una heroína y también el Dungeon Core Numero 4. De alguna manera logré alejarla.

“¡¿Qué?! ¿Leona los atacó? ¿Está bien Rokuko? Bueno, supongo que debe serlo, ya que nos envió una carta…” Leona. Una criatura nacida de la fusión de un Dungeon Core y un Héroe. Sin duda, ella era la peor enemiga de Haku.

Leona fue la fuente de innumerables dolores de cabeza para Haku. La razón es que a veces tuvo que ayudarla como Dungeon Core. De lo contrario, ella misma sería atacada, en más de un sentido. Fue un acuerdo mutuamente beneficioso la mayor parte del tiempo, pero aun así. Dolores de cabeza

Además de eso, si Haku usó armas creadas a través de la {Ultra Alchemy} de Leona para destruir otros núcleos, los puntos de oferta (¿puntos de experiencia?) Fueron a Leona en su lugar. Las armas de Leona siempre fueron Espadas Mágicas de alta calidad, y como coleccionista, a Haku le hubiera encantado comprarlas todas para ella. Si tan solo Leona no estuviera involucrada.

“… Dungeon Core 4 y un héroe. Le revelaste mucho sobre ti, Leona…” Haku, por supuesto, sabía eso de ella. Pero Leona generalmente mantuvo ocultos los detalles sobre sí misma; De hecho, Haku había jurado guardar silencio sobre ellos. El hecho de que Leona le hubiera contado tanto a Keima sobre sí misma significaba que ya no encontraba la necesidad de ocultar su identidad. Ella puede haber terminado de prepararse para algo. Hmm, pensó Haku. Necesito fortalecer mis defensas.

“Pero aun así, ¿ella se infiltró en su iglesia como una monja Beddisto? Como siempre, me resulta difícil entender lo que sucede en la cabeza de Leona”. ¿Qué ventajas tenía que se disfrazara de monja? ¿Hubo alguna? De todos modos, no valía la pena pensar en eso. Probablemente solo estaba jugando bromas crueles como siempre lo hacía.

“¿Qué piensas, Chloe? ¿Sabes por qué ella haría eso?”

“Me preocupa más su afirmación de que él defendió el Caos. Ella es inconfundiblemente un dios, ¿y él sobrevivió a su ataque?”

“Bueno bueno. Keima me derrotó, ¿recuerdas? Esto no debería ser sorprendente.”

“… Eso es cierto”. Haku había desafiado una vez a Keima a una batalla de mazmorra y perdió. Ella era a la vez Dungeon Core e Ivory Goddess que había obtenido la verdadera divinidad a través del culto a los aventureros. En resumen, ser un dios Leona no significaba que Keima necesariamente perdería ante ella. “Gracia divina. Si la suerte lo tiene, me encantaría matar a la mierda absoluta de Leona algún día… Haaah,” suspiró Haku, habiendo dicho lo mismo durante unos quinientos años seguidos. Todavía había sido una joven y débil Dungeon Core cuando conoció a Leona. Eran enemigos tan feroces como te puedas imaginar.

De todos modos, eso fue todo lo que contenía la carta comercial de Keima. Ella agradeció que él mantuviera sus informes simples y al grano, aunque había bastantes cosas que él no había mencionado que sus espías tenían.

“Creo que me animaré leyendo la carta de Rokuko. Ajaja, me pregunto de qué se trata.” Haku abrió la carta de Rokuko. A diferencia de la carta de Keima, su estado de ánimo aumentó con anticipación. Naturalmente. Era una carta de su amada hermana pequeña.

¿Cómo están las cosas, Haku? No has venido a visitarme en mucho tiempo, te extraño.

“¡Oh, yo también te extraño…! Chloe, ¿tengo tiempo para tomarme la mañana libre?”

“De ninguna manera. ¿Necesitas que te explique por qué?”

“Un simple no hubiera sido suficiente”. Ella continuó leyendo la carta.

Estoy pasando el tiempo trabajando como monja en la Iglesia Beddisto que Keima pensó.

“… Hmm, parece que la dulce y pequeña Rokuko se ha convertido en una monja”. Rokuko, una monja. Relajarse en la iglesia, hacer oraciones simples… y usar trajes de monja. Una monja espléndida de Beddismo… Qué espectacular.

“………”

“No va a suceder”.

“No creo haber dicho nada todavía”, respondió Haku con aridez.

“Está escrito  en su  rostro que está considerando  unirse  a la Iglesia Beddisto. Eso enviaría a toda la Iglesia de Marfil al pánico, así que por favor, hazlo con una simple amistad.”

“Oh, está bien”. Haku dejó de unirse a la iglesia en la severa advertencia de Chloe. Sin embargo, al pensar en eso, Haku sería el único dios en cualquiera de las iglesias. Como monja, Rokuko tendría que mostrarle la lealtad más piadosa. Eso no sería tan malo.

“Bueno, suficiente de eso. Veamos qué sigue”. Continuó leyendo la carta mientras tomaba té de su taza de té de mitril.

Además, podría hacer un bebé con Keima. ¡Te mostraré a nuestro bebé si sucede!

…¡Crack!

El mana salió del cuerpo de Haku, rompiendo la taza de té de mitril casi indestructible.

“¿Um? ¿Qué… se supone que significa…?” Haku se echó sobre la carta con ojos tan grandes como platillos, pero Rokuko no había escrito nada más. Volvió a consultar la carta de Keima y confirmó que no mencionaba nada sobre niños.

“Chloe, ¿significa esto lo que creo que significa?”

“Sí, mi señora. Solo puedo concluir que significa que su relación finalmente ha alcanzado ese nivel”.

¡Smash! La taza de té se rompió en pedazos, derramando té sobre la mano de Haku y sobre la mesa blanca.

“… Hasta cierto punto, sí, lo había aceptado como el Maestro de mazmorras de Rokuko. Incluso había llegado a respetarlo un poco durante el año pasado más o menos. ¡Sin embargo! ¡SIN EMBARGO!” Ella golpeó su puño contra la mesa. Entonces, ella se levantó abruptamente.

“Está decidido. Enviaré un asesino. ¡Lo mataremos antes de que haga un bebé con Rokuko! ¡Chloe!”

“¡Sí, mi señora! Sera hecho.”

Por fin, Haku estaba enviando un asesino para matar a Keima. La decisión le había dado una sonrisa brillante y renovada.

“Ajajaja, oh Keima… ¿Podrás derrotar a mi asesino…?”

Al final, ¿Keima podría sobrevivir…?

“Ahora bien, apurémonos y seleccionemos al asesino”.

“¿Puedo pedirte que termines tu papeleo primero?”

“… supongo que debo hacerlo”.

Chloe había señalado una gran pila de papeleo. El asesino tendría que ser enviado después de que lo atendieran.

Al final, ¿Keima podrá sobrevivir…?