C³ – Cube x Cursed x Curious

Volumen 14

Capítulo 3: La oscuridad conocida como el caballero; Su significado / “La espada: tiene dos caras.”

Parte 1

¿Por qué estaba ella aquí? Pensó sin comprender para sí misma.

Frente a ella había un jardín. Las hojas de los viejos árboles gigantes, la ropa colgada de los postes de la ropa, las malezas que crecían sin control, todo se balanceaba bajo la suave brisa. En un rincón había un pequeño almacén con paredes de tierra, pero aparte de eso, el jardín estaba vacío. No hay estanques con carpas, ni peldaños, ni linternas de piedra, ni lavabos. Por lo tanto, el espacio estaba inexplicablemente abierto, en un grado excesivo. Pensando en sí misma, decidió que sería mejor demoler el almacén para poder construir un anexo.

El asiento debajo de su trasero era un cojín, mientras que debajo de él descansaban las tablas del piso de madera de la terraza. Al lado del cojín había una taza de té. Detrás de ella estaba la sala de estar desocupada donde se guardaban herramientas inconcebibles conocidas como ‘televisión’ y ‘radio’. Los tiempos realmente han cambiado, pensó para sí misma.

Sí, de hecho.

¿Por qué ella estaba aquí?

“Aquí” podría interpretarse no solo como “esta casa” sino también como “esta era”.

Una espada anacrónica, ¿por qué estaba aquí en este tipo de lugar? Ella ya lo sabía hace mucho tiempo. Las guerras ya no podían volver a tener lugar. Al menos, ya no existía el tipo de batalla donde los generales y los soldados cruzaban espadas entre sí en el suelo.

Entonces, ¿por qué existir? Con su propósito abandonado, ¿por qué existir?

Este país pacífico no necesitaba armas. Esta era pacífica no necesitaba armas. Para defensa propia, un cuchillo de cocina sería suficiente. Mientras el enemigo no empuñara una espada, no había necesidad de que se la balanceara…

“Qué aburrido…”

Casualmente tomó un sorbo de té. Mirando hacia el jardín inmutable, murmuró para sí misma.

Esto no fue solo las circunstancias actuales, todo el tiempo fueron las mismas. Sintiéndose cansada de todo, por eso había venido a esta casa.

Para ser honesta, a ella no le importaba su maldición en absoluto. Después de todo, las maldiciones eran maldiciones, nada más que eso, por lo tanto, ella creía en simplemente seguir la corriente. Para ella, personalmente, esto estaba al mismo nivel que reflexionar sobre el significado de su existencia y sobre su pasado o presente.

En cualquier caso, ella quería un cambio. Incluso si no tenía nada que ver con levantar la maldición, no importaba. De hecho, si existiera alguna otra forma de matar el tiempo, no le importaría probarlo.

En ese momento, la cabeza de un niño emergió en el jardín que estaba mirando. En realidad, era solo una cabeza que había aparecido por debajo de su campo de visión.

Probablemente estaba planeando esconderse debajo de la terraza y luego acercarse en secreto para darle un susto, pero, por supuesto, llevaba tiempo sintiendo su presencia. Cuando ella le devolvió la mirada atentamente sin ninguna reacción en absoluto, él hizo una mueca ligeramente como si dijera “tsk~” Pero inmediatamente, recuperó su vigor mientras mantenía su postura con la parte superior de su cuerpo inclinada sobre la veranda.

“Hey, hey, estás tratando de eliminar tu maldición, ¿verdad? Haz tu mejor esfuerzo. ¿Hay alguna forma en que pueda ayudarte?”

Luego le dijo eso a ella. Aunque estaba bastante nervioso en su primer encuentro, ella ya había comenzado a vivir aquí unos días y este niño, Haruaki, se había acostumbrado bastante a su presencia. Había comenzado a intentar tener conversaciones con ella con ese tono familiar de voz. Dejando a un lado el hecho de si estaba satisfecha con esto o no.

“Hmph, no me puede importar menos. No está decidido si levantaré mi maldición o no.” “¿Eh~? Entonces, ¿por qué viniste aquí?”

“Debido a que Honatsu me molestó por años, alegando que prepararía un buen té para que yo lo saboreara, finalmente cedí, incapaz de soportar la molestia. Además, ese tipo finalmente llegó a arrodillarse y suplicar… Ja, se empecino conmigo, si es que no más.”

Deliberadamente terminó con una broma. “¿En serio~?” Preguntó Haruaki con la cabeza inclinada. Era cierto, hasta la parte de arrodillarse.

“Ciertamente. Escucha con atención, quizás aún no puedas entenderlo, pero a todos los hombres les encantan los bustos grandes. Tu madre, la esposa de Honatsu, seguramente encajaba en esa categoría.”

Haruaki volvió a inclinar la cabeza y respondió: “¿En serio~? No me acuerdo.” Según Honatsu, su esposa se había divorciado de él inmediatamente después de dar a luz a Haruaki. La veracidad de las palabras de Honatsu era incierta, pero suponiendo que fuera verdad, entonces, de hecho, Haruaki no recordaría el rostro o la figura de su madre.

“Cuando crezcas, también saltarás sobre mi pecho obsesivamente. ¿O tal vez quieras intentarlo ahora?”

“N-No, está bien…”

Como adulto, era tímido. Al ver eso, sonrió y colocó su taza de té a un lado.

“En cualquier caso, preocupada o no, no estoy considerando la maldición. Sería demasiado molesto hacer algo expresamente para levantar la maldición. Que la naturaleza siga su curso.”

“Pero papá dijo que es mejor levantar las maldiciones.” “¿Qué son las maldiciones, mocoso, sabes?”

Ella sonrió a propósito mientras escudriñaba la cara de Haruaki. Una excelente oportunidad, pensó.

“Mi maldición: un deseo de ver sangre fresca. Se aplica tanto a mi dueño como a mí misma. Ya sea un santo o un caballero de mente noble, nadie puede escapar de este impulso una vez que me recoge. ¿No te lo dijo Honatsu? Antes de venir a este lugar, solía residir en cierto hogar acaudalado.”

“¿Hogar acaudalado?”

“En otras palabras, la casa de un hombre rico. La residencia era varias veces más grande que esta casa. Jarrones caros y pergaminos decoraban todo el lugar. Sin embargo, cuando desperté, prácticamente todas las decoraciones estaban manchadas de sangre fresca. Presumiblemente porque un había pasado mucho tiempo desde la última vez que estuve desenvainada, la maldición se había acumulado demasiado.”

“…”

“Esposa, hija, hijo, padres, sirvientes, así como un repartidor que visitó por casualidad. Una masacre. Cuando el impulso disminuyó, probablemente mi portador recuperó la cordura de golpe. Justo cuando estaba a punto de explicarle todo a mi dueño, él ya me había levantado y perforado su propia garganta. Luego sucedieron muchas cosas. Reflexionando sobre lo que debía hacer, cuando otras personas llamaron a la policía me llevaron y me encerraron en un espacio oscuro. Entonces apareció Honatsu. A partir de ahí no necesito contar el resto.”

El asunto de Honatsu arrodillándose ya se había mencionado. En ese momento, estaba pensando, qué hombre tan extraño.

“¿Lo entiendes? Esta soy yo, mi maldición. Asesinar al despertar, dormir una vez cansada, y luego despertar para volver a asesinar. Es lo que he hecho repetidamente desde los días de los Estados en Guerra…”

Ella entrecerró los ojos y bajó la voz, liberando una atmósfera pesada y asesina. Así habló. Un humano cobarde, aferrado a la vida con avidez, probablemente se volvería incontinente con eso.

Pensó: sería mejor que fuera incontinente, mejor sentir miedo. Desde su perspectiva, este niño era simplemente un animalito molesto que no dejaba de merodear en su campo de visión. Sin embargo…

“Lo sé, papá me lo dijo. Además, ya he visto muchas cosas.”

Frente a la bestia salvaje, ese pequeño animal sonrió inocentemente.

Bastante seguro. Era lo mismo que cuando ella lo había amenazado por primera vez. ¿Por qué… por qué no tenía miedo?

“Además, he oído que poseo el tipo de constitución que neutraliza los efectos de las maldiciones a través de ‘poseer’ el objeto. Así que no tienes que preocuparte.”

Honatsu se lo había dicho. Incluso ahora, todavía estaba parcialmente poco convencida, pero escuchar a Haruaki declararlo con tanta firmeza, tal vez, después de todo, podría ser cierto.

Comparado con este asunto… Comparado con este tipo de asunto…

Realmente dudaba que este mocoso antes de ella realmente entendiera con exactitud qué eran las maldiciones. Tampoco comprendió lo aterradoras, impactantes y feas que eran las maldiciones. O sus peligros.

Pero al menos en este momento, su yo actual era capaz de matar humanos con sus propias manos, en lugar de una existencia vaga e intangible como una maldición. Una verdadera amenaza. Debería entender ese punto. ¿Pero por qué no tenía miedo? ¿Por qué seguía sonriendo?

Este niño relajado llamado Yachi Haruaki. ¿Qué pasando por su mente?

Ella fue golpeada por un sentimiento inexplicable. Este sentimiento se parecía a la inquietud, el miedo y la agitación.

“Oh, claro, sé que tu nombre es Muramasa, pero luego será problemático si se deja como esta. Suena como un apellido, así que supongo que puedes usarlo como tal. Entonces hay que pensar en un nombre. ¿Has pensado en uno? Si no, pensemos en uno juntos. Sí~. ¿Qué tipo de nombre sería bueno…?”

Mientras ella estaba en silencio, Haruaki comenzó la siguiente conversación por su cuenta, murmurando para sí. Los nombres no tenían ninguna consecuencia.

De repente, una pregunta entró en su mente. No sobre él sino sobre ella misma.

En ese momento, ella estaba considerando a este chico como su dueño temporal, porque Honatsu la había molestado sin parar, diciéndole que esto evitaría que su maldición se activara, por lo que ella de mala gana hizo lo que se le sugirió. Todavía se sentía desinteresada en esta propuesta. Algo que encontró sospechoso también permaneció profundamente arraigado en el fondo de su corazón.

Suponiendo que lo que dijeron el padre y el hijo fuera cierto. Su maldición era un “deseo de ver sangre fresca”. Si Haruaki siendo su dueño pudiera neutralizar los efectos de la maldición, entonces Haruaki no sería atormentado por ese deseo.

Sin embargo, sin embargo…

Ese deseo que albergaba de “querer ver sangre fresca”, ¿exactamente a dónde fue?

En cierto sentido, esto también era una especie de maldición. Un rasgo marcado en su cuerpo.

Si bien es propiedad del chico para el cual la maldición no se activaría, ¿cuál podría ser el resultado final? ¿Se borró también su propio deseo? O fue…

“¿Qué tipo de nombre te gustaría~? ¿Uno con clase? ¿O uno genial? Hey, pensemos juntos. No quieres un nombre extraño, ¿verdad?”

“… No me podría importar menos…”

Repitiendo las palabras que había dicho quién sabía cuántas veces hoy, olvidó deliberadamente todos los pensamientos en su mente.

Un jardín tranquilo. Una ligera brisa acariciaba la terraza. La voz de un niño, ruidosa pero no hasta el punto de perforar sus tímpanos. Mientras se abstuviera de escuchar el contenido, sonaba como campanas de viento.

Exhalando, tomó la taza de té a su lado y se la llevó a los labios. Aunque estaba completamente tibio, tal vez se ajustaba al paisaje suave que actualmente tenía ante sus ojos.

No hay forma de evitarlo. Las cosas suaves estaban aquí para quedarse.

Por lo tanto, probablemente quedarse más tiempo en este país estaba bien; experimentó un sentimiento similar a la resignación surgiendo ambiguamente en su corazón. Lo que la enfureció fue que el resultado final resultó exactamente igual a la invitación de Honatsu.

Mientras tomaba té, murmuró suavemente:

“…Hay que ver, termine bebiendo té barato hasta el punto de la adicción.”

***

“¡Haruaki!”

“Yachi, ¿estás bien?”

“Haru, ¿sientes dolor en alguna parte?” “Hmm… ¿Eh…?”

De repente Haruaki se sentó para encontrarse en su propia habitación. Al lado del futón estaban Fear, Kirika y Kuroe, todas mirándolo con caras preocupadas. Por un instante, no tuvo idea de lo que estaba pasando.

“Uh, ¿por qué todas están…? ¿Qué me pasó…?” “… ¿N-No te acuerdas?”

La  voz  de  Fear  sonaba  bastante  preocupada.  ¿Qué  pasó?  Haruaki  hizo  girar  su  mente adormilada a toda velocidad.

“… Oh.”

Finalmente, lo recordó. Recordó todo lo que había sucedido hasta ahora. Luego se echó a reír a carcajadas.

“¿Ah, sí…? Jaja. Oh cielos, en serio, ¿qué pasa con Konoha? Ella me dio un puñetazo. Qué terrible y fue doloroso. Jajajaja… ¿¡Urgh!?”

La respiración de Haruaki se ahogó por un segundo. Primero Fear hizo una expresión de sorpresa, luego su rostro se oscureció cuando agarró el cuello de Haruaki y tiró de él hacia ella. Lo suficientemente cerca como para sentir la respiración del otro, ella dijo:

“Mocoso descarado, entiendo cómo te sientes, pero vamos, enfrenta la realidad.”

Los ojos de Fear contenían seriedad, ira, inquietud y miedo. Al mismo tiempo, de forma desesperada estaba reprimiendo estas emociones.

Con Fear todavía agarrando su cuello, Haruaki escuchó un sonido de inhalación y se giró para mirar la fuente. Kirika tenía una expresión solemne, en todo caso, su rostro estaba lívido de miedo, y ella le dijo:

“Yachi, Fear-kun y Kuroe-kun ya me han contado lo que sucedió después de mi muerte. Voy a ser sincera contigo… Solo estás vivo por casualidad. Aparte de eso no hay otra posibilidad. Konoha no está infiltrándose en el campamento enemigo fingiendo pérdida de memoria por ciertas consideraciones. Esa tampoco es la razón por la que ella usó un puño contra ti en lugar de apuñalarte con tu mano.”

Encima de los muslos de Kirika mientras estaba sentada formalmente en seiza, se podía ver sus puños apretados con fuerza.

“Con la misma probabilidad de recibir un puñetazo, realmente podría haberte matado en el acto. Si estaba dispuesta a escuchar mi súplica, desde su perspectiva, realmente no era más que la diferencia entre dar un paso adelante con el pie derecho o su pie izquierdo. Simplemente un capricho, un momento de fantasía, nada más que pura casualidad…”

Kirika también acercó su rostro a Haruaki. En las esquinas de sus ojos algo brillante se podía ver débilmente.

Haruaki estaba aturdido. El mundo tembló por un tiempo mientras las dislocaciones en su sentido de la realidad se realinearon.

La situación actual, así como la suya.

La realidad que se esforzaba en negar, finalmente la acepto.

“Ficchi y Kiririn tienen razón. Entiendo que estás muy conmocionado, pero no podemos avanzar a menos que enfrentes la realidad tal como es. Si mueres mientras sueñas despierto… bueno, significaría que nunca tuviste la intención de actuar.”

Haruaki giró lentamente la cabeza y miró las caras de las tres chicas, luego exhaló con fuerza.

“Tienes razón. Lo siento, y gracias a todas. Fear, representante de clase, Kuroe.”

Bajó la cabeza y transmitió el mensaje de “Ahora estoy bien”. Las tres chicas irradiaron alivio.

Haciendo una sonrisa irónica completamente diferente de la sonrisa de escapismo que tenía, Haruaki le dio unas palmaditas al brazo de Fear ya que todavía estaba agarrando su cuello.

Instantáneamente Fear hizo un sonido: “Muu” y puso mala cara. “¡Hmph!”

Luego, como si ocultara su vergüenza, empujó a Haruaki hacia su futón.

-Ya era de noche.

Sosteniendo un paquete de galletas de arroz en una mano, Fear se sentó en la terraza. La razón por la que eligió ese lugar fue, por supuesto, porque Haruaki ya estaba sentada allí totalmente distraído después de despertarse.

Mientras masticaba la primera galleta de arroz que había sacado, miró de reojo a Haruaki. Sacó una segunda galleta de arroz y se la tendió.

“¿Quieres una? Si es solo una, no es que no pueda compartir contigo.”

“El sol debe estar saliendo del oeste. Pero me temo que tendré que pasar. Porque todavía me duele el estómago.”

Haruaki respondió mientras se tocaba el vientre. “¿En serio?” Fear metió la segunda pieza en su boca. Tan sabrosa.

“No comas demasiado, es casi la hora de cenar.”

“Hoy no almorcé, así que tendré que compensar con galletas de arroz.”

Teniendo en cuenta sus heridas, era mejor quedarse quietos por hoy. Tanto Haruaki como Fear habían recibido esas órdenes. Por lo tanto, Kirika y Kuroe estaban preparando la cena en la cocina.

En este momento los dos estaban solos.

Estaba sentada en la misma terraza que él, mirando el mismo jardín que él, comiendo galletas de arroz.

El calor de Haruaki junto a ella casi parecía transmitirse a través del piso de la terraza. Ella ya podía admitirlo: se sentía muy cómoda. Permaneciendo al lado de Haruaki, silencioso como estaba, se sentía inexplicablemente cómoda. Muy feliz. Ella quería que esto continuara para siempre.

(Pero…)

Algo no era exactamente igual.