Otome Game no Hametsu Flag shika nai Akuyaku Reijou ni Tensei shite shimatta… (NL)

Volumen 7

Capítulo 2: En el Interior del Castillo

Parte 1

Podía dormir más al día siguiente ya que no tenía trabajo y me desperté sintiéndome bien y renovada. El clima también era bueno… un día perfecto para salir.

Keith solía venir conmigo cada vez que iba al castillo, pero hoy estaba ocupado ayudando a mi padre con su trabajo, así que mi doncella, Anne, vino conmigo en su lugar.

“No hagas nada imprudente y asegúrate de no estar, bajo ninguna circunstancia, sola con Jeord.” Dijo Keith.

“No hagas nada anormal. No corras con la falda subida.” Prosiguió Madre. Luego, los dos le pidieron a Anne que tuviera mucho, mucho cuidado.

¿Soy sólo yo, o todavía me tratan como a una niña de 8 años a pesar de ser una respetable dama adulta de 18 años?

Independientemente de este trato, al menos me dieron permiso para ir al castillo (insistí en que quería agradecer a alguien que me devolvió algo importante que había perdido), así que prometí hacer lo que me dijeron y abordé el carruaje.

Al llegar al castillo, decidí ir a la habitación donde se había guardado mi libro. Si fuera allí, probablemente podría buscar a la persona que había encontrado mi bolso y hacerle cualquier pregunta que tuviera directamente.

También quería preguntarle a Jeord si sabía sobre la nota, pero Keith me había dicho que “el príncipe Jeord está muy ocupado con sus asuntos oficiales, así que, si quieres saludarlo, limítate a un breve adiós justo antes de volver a casa”. Por lo que tendría que esperar.

Acompañada por Anne, fui al almacén. Caminaba de manera deliberada y elegante, como me había indicado mi madre. Puedo actuar como una dama si es necesario.

La última vez que estuve en el castillo fue durante la fiesta de graduación de los príncipes gemelos. En aquel entonces, todo el lugar estaba cubierto de decoraciones festivas, pero ahora había vuelto a la normalidad.

Cuando llegué a la habitación, hablé con uno de los sirvientes que trabajaba allí y, después de decir mi nombre, pedí ver a la persona que había encontrado mi bolso. Ese sirviente se apresuró a llevarme a una mesa en la esquina de la habitación, trayendo rápidamente té y bocadillos.

No había recibido el tratamiento de ‘estás en un castillo’ en bastante tiempo, así que fui y le comenté a Anne en voz baja. “¡Cuando me tratan así, me siento como una especie de mujer noble!”

“… Mi lady, por si lo ha olvidado, es una mujer noble.” Respondió ella, asombrada.

Por supuesto que tenía razón… yo era una mujer noble que tenía gente que se encargaba de todo, desde el vestido hasta preparar la comida, para ella. Pero mamá dio órdenes a todos los sirvientes de que fueran muy estrictos conmigo, para que dijeran cosas como: “No deje migajas cuando coma.” Eso realmente no me hacía sentir como una mujer noble.

Todavía estaba pensando en eso cuando entró la persona a cargo de la habitación, un hombre de mediana edad. Me saludó con gracia y respondió a mis preguntas. Desafortunadamente, no sabía quién había encontrado mi bolso y lo había traído aquí. El misterioso benefactor lo encontró tirado en el castillo, lo llevó a esta habitación y lo dejó aquí. Todos los sirvientes estaban muy ocupados en ese momento, por lo que nadie se tomó la molestia de mirar la cara de la persona, y ahora ni siquiera podían ponerse de acuerdo sobre si era un hombre o una mujer quien lo había hecho. Me sentí decepcionada por no haber obtenido ninguna información, pero la sincera disculpa del hombre por no poder ayudar me impidió decir eso en voz alta.

“Después de que lo trajeron aquí, ¿alguien podría haberlo tocado?” Le pregunté.

“¡¿Faltaba algo en su bolso?!” Respondió, poniéndose pálido.

Por supuesto, no podía simplemente decirle que había una nota que hablaba de un juego otome, así que se me ocurrió una excusa poco entusiasta y no relacionada.

“No, es sólo que pensar que cualquiera podría haberlo tocado es un poco… bueno…”

El hombre, aliviado, explicó que en general sólo los sirvientes tenían acceso a este almacén, pero, considerando que a veces todos estaban tan ocupados que tenían que dejar el lugar desatendido, no podía decir con 100% de certeza que nadie había tenido acceso a él.

Además, sólo uno de los sirvientes, una mujer, había abierto la bolsa para comprobar su contenido. Casualmente le pregunté a esa mujer si había mirado dentro del libro, pero ella dijo que no, ya que no le interesaba mucho la lectura y no le interesaban los libros.

Esto me dejó con dos posibilidades en cuanto a quién había puesto la nota dentro de mi libro: o la persona que había traído el bolso aquí, o alguien que se había colado en la sala de almacenamiento mientras los criados estaban fuera.

Salí de la habitación, convencido de que no tenía más información útil para mí. Planeaba preguntarle a Jeord si me encontraba con él, pero eso no parecía probable.

Ni él ni Sophia sabían que este mundo estaba dentro de un juego. Si lo hicieran, sabrían lo que significan las “rutas” y los “finales” de los que a veces hablaba, y no se verían tan extrañados. Y definitivamente lo habrían mencionado en los 10 años que nos conocíamos.

Entonces, era razonable pensar que la nota había sido puesta allí por alguien más que había entrado en el castillo, o más específicamente en la sala de almacenamiento.

Pero, ¿quién? Si esta persona sabía sobre el juego, ¿era otra persona reencarnada en este mundo desde Japón?

Mientras caminaba junto a Anne, pensando detenidamente en la información que había recopilado hasta ahora, Pochi salió de mi sombra de repente y comenzó a huir moviendo la cola.

Esto es como aquella vez en la fiesta…

 Sabía que un Familiar Oscuro como Pochi no ensuciaría los pisos del castillo ni nada, pero aun así no podía dejarlo correr por su cuenta. ¡Tengo que hacer algo!

Me olvidé de la advertencia de mamá, me subí el vestido y comencé a correr detrás de Pochi tan rápido como pude.

“¡Mi lady! ¡Espere!” Escuché a Anne gritar detrás de mí, pero estaba demasiado ocupada corriendo detrás de mi perro para preocuparme por ella.

Siguiéndolo, terminé en un pasillo oscuro. Era extraño que el pasillo estuviera tan oscuro, ya que todavía era tarde. Miré hacia atrás y no se veía a Anne por ningún lado. Me van a regañar una vez que vuelva, ¿no?

De todos modos, había visto este pasillo en alguna parte. Recogí a Pochi, que finalmente se había calmado, y miré a mi alrededor.

¡Oh, cierto, este es el mismo lugar al que se escapó durante la fiesta!

 El pasillo también se veía muy oscuro en ese entonces, pero no lo había pensado mucho, ya que era de noche.

Tal vez hay muchos árboles plantados alrededor de las ventanas o algo así.

 También vi que, aunque todavía era bastante temprano en el día, las antorchas ya estaban encendidas. Recordé que, durante la fiesta, vi a una mujer en este pasillo que me dijo que no se me permitía ir más lejos.

Entrecerré los ojos para ver a través de la oscuridad y distinguí el contorno de una puerta.

¿Había una habitación al final del pasillo? ¿Qué tipo de habitación podría haber en el castillo al que la gente no pudiera entrar?

Con curiosidad, comencé a avanzar.

“Oh, ¿una invitada? Eso es bastante inusual.” Dijo la voz fría de una mujer detrás de mí.

Me di la vuelta y vi a una anciana, seguida por varios sirvientes, caminando elegantemente hacia mí.