Lazy Dungeon Master (NL)

Volumen 4

Capítulo 1.1: Un Día En La Vida De Niku Kuroinu

 El día de un esclavo comienza temprano. Pero un esclavo que trabaja como dakimakura se levanta cuando Keima lo hace, por lo que su día comienza bastante tarde. Como Niku no tenía ese trabajo anoche, su día, desafortunadamente, comenzó temprano.

Niku, al despertarse por la mañana, se recogió los calcetines. Esa elección fue muy importante para ella. La razón es que su maestro Keima miró sus pies más que en cualquier otro lugar. Niku realmente no entendía lo que era un fetiche de pies, pero si su amado maestro lo deseaba, no tenía problemas para usar los mismos calcetines durante tres días sin usar

{Purificación} en ellos.

… Ayer, llevaba calcetines con rayas de color azul claro que les llegaban hasta los muslos, pero hoy decidió usar unos blancos lisos. Parecía que a Keima no le gustaban especialmente los calcetines a rayas. No tenía forma de explicar por qué, pero a juzgar por la experiencia, sintió que le asignaban dakimakura con más frecuencia cuando usaba medias simples de un solo color.

“… Mmm”. Después de ponerse los calcetines, comenzó a realizar estiramientos ligeros y cosas así para aflojar su cuerpo. Para evitar arrugar su uniforme de mucama, hizo los estiramientos usando nada más que la ropa interior en la que dormía y sus calcetines. Solo después de estirarse completamente, se puso su atuendo de sirvienta, el Golem de atuendo de sirvienta que su maestro le había regalado. Ayudó a sus movimientos, permitiendo que su potencial físico se disparara hacia arriba.

… Incluso los calcetines que acababa de ponerse eran ambos golems.

“… Está bien”. Con los preparativos de la mañana completos, era hora de que ella se fuera a trabajar. Dado que la residencia principal en la que vivía estaba conectada directamente con la posada, su viaje le llevó menos de un minuto.

Su deber matutino era trabajar como camarera en la cafetería donde comían los aventureros. Ella y los otros empleados de la posada se turnaban  para hacer este trabajo por turnos. Niku no  siempre podía participar en la mañana debido a sus deberes de dakimakura, y en ese caso alguien más se hizo cargo de su turno. Ichika se había expandido sobre el sistema de turnos normales de Keima al introducir un “Turno de dormitorio caliente y humeante” (llamado por Ichika) para que Niku lo tome cuando está ocupado. Hasta ahora, solo lo había usado cuando trabajaba como dakimakura.

Por otro lado, ninguno de los otros empleados estaba descontento por tener que cubrir ocasionalmente sus turnos. Más bien, le sugirieron que dejara de trabajar en la cafetería por completo para disminuir su carga de trabajo general.

En cualquier caso, la posada ofrecía sándwiches gratis para el desayuno. Ayudó que el único otro lugar para comer en la ciudad fuera el bar, pero aun así, el sándwich era bastante popular gracias a lo bien que sabía. El secreto era usar pan blanco en lugar de pan de centeno barato.

Niku comenzó comiendo un sándwich y se puso a trabajar manejando clientes.

“Fwaaah. Buenos días, Kuro.” “Oh, buenos días”.

En general, la primera persona en despertarse y visitar la cafetería fue la recepcionista del Gremio, Cilia. La razón es que, como recepcionista del Gremio, necesitaba despertarse antes que los aventureros.

Cilia miró a su alrededor y, después de confirmar que eran los únicos allí, puso su mano sobre la cabeza de Niku y se la frotó.

“… Haaah… Esto me da la energía que necesito para sobrevivir todo el día…”

“Ya veo…” A Niku personalmente no le gustaba que alguien que no fuera Keima se acariciara la cabeza, pero toleró a Cilia porque le dio una propina. El plan de Niku era guardar los consejos y, finalmente, presentarlos a su maestro para hacerlo feliz.

Tomó las cinco puntas de cobre y le trajo a Cilia un sándwich. Como Kinue aún no estaba allí, era un trabajo simple que implicaba solo ir a la cocina para retirar un emparedado que tenía en su {Almacenamiento}. Como el tiempo se detuvo en el subespacio {Almacenamiento}, el emparedado estaba fresco como nuevo. Sin embargo, sería un problema si otros descubrieran que ella sabía {Almacenamiento}, por lo que lo usó solo después de entrar a la cocina.

Eventualmente, los aventureros que se estaban quedando en la posada llegaron. La mayoría de ellos no estaban demasiado preocupados por el monstruo amenazante. Pensaron que estarían bien y al menos podrían escapar, pero Niku sabía que cualquiera de ellos moriría en un instante si Rin realmente luchaba contra ellos. Desafortunadamente para esos aventureros, Niku no se preocupaba lo suficiente por los extraños para advertirles de esto.

Después de limpiar los restos de sus desayunos, Niku comenzó su propio entrenamiento diario. Cuando entrenaba con habilidades mágicas o practicaba golems al mando, primero entraba a la mazmorra, pero generalmente practicaba dentro de la ciudad o en un campo cerca de la posada. Ella tuvo muchas batallas simuladas con Ichika en particular. La intención oculta allí era mostrarle a la gente del pueblo su entrenamiento e intimidarlos sabiendo que Keima tenía una fuerza tan poderosa como la de ella. Aunque recientemente la intensidad de su entrenamiento se había disparado, ya que quería vengarse de ese lobo negro.

Ella sacó el cuchillo de la mano de Ichika y presionó la suya contra su garganta. Sus dos cuchillos eran cuchillos de madera que Keima hizo en diez segundos.

“… Vaya niña. No sé si puedo seguir contigo mucho más tiempo, amigo.”

“¿Lo crees así?” Ichika también llevaba un Mameluco de traje de sirvienta. Como Ichika ya tenía la fuerza de un experimentado aventurero de rango C además de eso, tenía una gran ventaja sobre Niku. Y de hecho, Ichika había sido más fuerte que Niku cuando comenzaron a entrenar juntas. Pero después de dos meses, eran iguales, y ahora, Niku era más fuerte.

La diferencia entre ellos era cuán efectivamente podían usar la asistencia del golem. Ichika había desarrollado su propio estilo de lucha a lo largo de los años y, por lo tanto, la asistencia del golem era básicamente un impulso de poder para sus músculos. Pero el entrenamiento de Niku había comenzado desde cero con golems. Ella sabía cómo usar los golems para luchar mejor y más rápido. Como resultado, podría usar los sentidos del golem para bloquear los ataques de los puntos ciegos e incluso esquivar flechas después de verlos disparar, ambas cosas que ningún luchador normal podría hacer.

Normalmente, realizar maniobras tan ridículas con un Golem usable dañaría el cuerpo del usuario, pero la piel de bestia era especialmente dura y tenía poderes regenerativos latentes perfectos para lidiar con el estrés corporal. Así nació un pequeño guerrero capaz de acrobacias más allá de la comprensión o habilidad humana.

“Eres más fuerte que yo sin la ayuda de un golem, Ichika”.

“Por ahora, hombre. Por ahora.” Ichika sabía que Niku pronto sería más fuerte que ella incluso sin la ayuda de un golem. Niku tenía talento. Desarrollar ese talento fue una forma de entretenimiento para Ichika. Sería una mentira decir que no tenía envidia, pero aun así, le gustaba ver a Niku fortalecerse. ¿Por qué? Como Niku era más fuerte, mejor sería capaz de proteger a Keima, y eso significaba que podría comer una tonelada de comida sabrosa durante mucho más tiempo.

Niku continuó su entrenamiento hasta la hora del almuerzo al mediodía, después de lo cual volvió a trabajar como camarera en la cafetería. La posada había comenzado recientemente a ofrecer almuerzos, a pedido de quienes se alojaban en la posada y de la gente del pueblo. A Kinue le sirvió como una buena práctica mejorar su cocina, y la gente del pueblo pudo comer una cantidad bastante grande de alimentos a bajo precio. Cualquier resto podría colocarse en {Almacenamiento} y usarse al día siguiente, por lo que Kinue no tuvo que contenerse en absoluto.

Una vez que los clientes disminuyeron, Niku comió su propio almuerzo. Hoy tenía onigiri relleno de filete de mayonesa. Le había pedido a Kinue que los hiciera especialmente para ella, y recientemente se había convertido en una de sus comidas favoritas. Le gustaba especialmente usar su mayonesa hecha a mano por su maestro.

El arroz y la carne fueron particularmente bien juntos.

Después de lamer el último arroz, Niku se dirigió a la recepción. Trabajó como recepcionista durante toda la tarde. Dicho esto, no había mucho trabajo real que tuviera que hacer. Ponga algo de dinero en el golem de caja de hucha, entregue el cambio, los boletos de comida, las llaves de la habitación, etc. a los aventureros, y eso fue todo. Niku podía hacer cálculos mentales simples por sí misma, pero dejó los cálculos al golem ya que nunca cometió errores. Además, fue más fácil de esa manera. Keima lo había llamado un Golem de registro, e incluso Niku sabía lo ridículamente importante que era, tecnológicamente hablando.

Descansar fue un paso importante para fortalecerse. (Hasta el día de hoy, se arrepintió de haber entrenado tanto que se derrumbó y puso una carga sobre su maestro). Entonces, mientras esperaba en el escritorio a los clientes, se puso un golem que tenía el encantamiento {Crear Golem} grabado en su oído y lo escuchó en bucle. Escuchar la voz de su amo llenó el corazón de Niku de calidez e hizo que las luchas del día se derritieran. Que ahora pudiera escucharlo a voluntad gracias a este golem fue un milagro para ella y reforzó su creencia de que Keima era un genio.

Por otro lado, el golem fue hecho para parecerse a una concha marina de Pavella. Si alguien le preguntaba qué estaba haciendo, ella podría responder que estaba escuchando los sonidos del océano.

Cuando un visitante se retiraba, ella les quitó la llave y la puso en el Registro Golem. El palo del llavero también era un golem, y devolvió cada llave dentro de la caja a su ubicación original. A veces lo miraba para asegurarse de que no movía las llaves al lugar equivocado, pero hasta ahora, eso nunca había sucedido.

“Heya, niña pequeña. Queremos alquilar una habitación.”

“Son cincuenta monedas de cobre por noche. Ofrecemos bocadillos gratis en la mañana. Otras comidas cuestan más”. Algunos visitantes nuevos y primerizos llegaron a la posada. Fue un grupo de tres hombres aventureros.

“¿Cincuenta cobres? ¿Y la comida cuesta extra? Eso es muy caro, ¿qué tal si lo haces un poco más barato? ”

“No.”

“Vamos, no seas así. ¿Por favor?” “Si no te vas a quedar, vete”.

“¡¿Qué?! ¡Esta es la única posada aquí! ¡Dame un  descanso, estoy desesperado aquí! ¿Vas a rechazar al viejo Slay?” Niku levantó la vista y no vio desesperación en sus ojos. Solo arrogancia. A partir de eso, ella determinó que él no sería un cliente que paga y se puso a trabajar arrancando el tacaño, presionando un botón en la parte inferior del escritorio. Inmediatamente, apareció un Golem de Arcilla, empuñando una gran espada de entrenamiento de madera y usando un brazalete adornado con la cresta del Gremio de Aventureros.

“¿Huh? ¿Qué diablos es esto, un Golem de Arcilla? Incluso tiene un arma, ahora eso es divertido”. El tacaño, sorprendentemente, pateó el Golem de Arcilla y lo derribó. Parecía que tenía mala vista o era solo un idiota. Cilia, la recepcionista, le había dado oficialmente ese brazalete a la posada… más bien, Cilia, la jefa de la sucursal, a cambio de un precio de habitación más bajo. Como resultado, el Golem de Arcilla era técnicamente un empleado oficial del Gremio de Aventureros. La mayoría de los aventureros entendieron la importancia de eso y se callaron, pero el tacaño realmente había atacado al golem.

Básicamente, en el momento en que hizo eso, se convirtió en un criminal tonto que desafió al Gremio de Aventureros … en otras palabras, un enemigo que Niku tenía todo el derecho de derribar.

“Nnn”. Niku saltó sobre la recepción, agarró las piernas del tacaño y, usando la ayuda del golem, lo arrojó a la puerta. Golpeó a los otros miembros de su grupo en el aire y todos salieron juntos de la posada. Los tres parpadearon sorprendidos, incapaces de comprender cómo una chica tan pequeña como Niku había logrado eso.

Niku desenvainó su Cuchillo Golem de acero y caminó casualmente fuera de la posada.

“¡Maldita seas! ¡Rittin, Dogi! ¡Rodéadla! ¡La enfrentaremos juntos! ”. Los tres se enojaron tanto que básicamente comenzaron a actuar como bandidos. Había más de unas pocas personas estúpidas como ellos trabajando como aventureros. Pero incluso con eso dicho, su estupidez era algo especial. Probablemente fueron matones que se convirtieron en aventureros para obtener una forma de identificación para obtener un préstamo, luego desperdiciaron todo el dinero prestado en nada y finalmente llegaron a una mazmorra para principiantes recientemente descubierta después de escuchar que podían ganar algo de dinero rápido allí.

Técnicamente, incluso los F-Ranks podrían ingresar a la [Cueva de la avaricia] debido a su limitado estado de rango C, pero era dudoso si incluso cumplían los requisitos para eso. Dado que el líder reconoció al Golem de Arcilla, era posible que hubieran hecho un montón de trabajos más pequeños para sobrevivir por un tiempo y terminaron como E-Ranks antes de que la deuda llegara a ser demasiado.

“… Las ratas grises son más inteligentes que ustedes tres”. “¡¿Qué fue eso?! ¡Joderla!”

Además, las ratas grises que se presentaron en las carreras de ratas sabían que estaban brindando entretenimiento y, por lo tanto, intencionalmente hicieron que las carreras fueran más emocionantes para los espectadores. Incluso recientemente celebraron una reunión entre ellos, una señal de cuán anormalmente inteligentes se habían vuelto. Niku acababa de soltar un murmullo sobre eso después de que le vino a la mente, pero para el tacaño, se sintió como si lo estuviera incitando.

Los dos lacayos vinieron hacia ella desde los costados, pero balancearon sus palos tan lentamente que Niku casi bostezó mientras los separaba. Luego se agachó e hizo un barrido de pierna para tirarlos a los tres al suelo. Se cayeron justo en frente de la sucursal del Gremio de Aventureros.

“Y una bonificación”. Mientras lo hacía, agarró el tacaño frente a ella y lo arrojó de nuevo, justo contra la puerta del Gremio. Inmediatamente se arrepintió de esa decisión, ya que podría haber alguien justo detrás de la puerta, y un esclavo que causa problemas a los demás simplemente pone una carga sobre su amo.

En cualquier caso, ella ingresó al Gremio. Dentro estaba la recepcionista y cuatro aventureros que se alojaban en la posada. El tacaño estaba en el suelo.

Niku hizo una leve reverencia. “… ¿Golpeó a alguien?”

“Oh, para nada. No te preocupes, Kuro”.

“Nnn. Eso es bueno. Es más estúpido que el alborotador habitual. Pateó al golem con el brazalete. Te dejaré el resto.” Niku lo dejó así y regresó a la posada, confiando el trato del tacaño al Gremio. En el mejor de los casos recibiría una advertencia firme y en el peor de los casos sería expulsado del gremio. La posibilidad de que se le prohibiera la entrada a la [Cueva de la avaricia] era una posibilidad probable. Pero de cualquier manera, no tenía nada que ver con Niku y a ella no le importaba.

Niku volvió a sentarse detrás del escritorio y escuchó la voz de su amo.

… De vez en cuando, un aventurero tonto trataría de intimidar o amenazar a Niku después de ver que era una niña Beastkin. Debieron haber pensado que podían quedarse gratis haciendo que la recepcionista los marcara como pagados cuando no lo habían hecho. Ichika probablemente podría haberlos sacudido con más elegancia, pero Niku manejó las cosas lo mejor que pudo. Terminó su turno en la recepción sin otros problemas.

Llegó la noche y se dirigió a la cafetería, reflexionando sobre el buen descanso que había tenido hoy como recepcionista. Trabajar como camarera le obligaba a memorizar los rostros y las órdenes de los clientes, por lo que en realidad era un buen ejercicio para su cerebro.

De repente, Keima entró en la cafetería con un boleto de comida D-Rank. Niku corrió con extrema velocidad a la cafetería, recibió una comida de rango D de Kinue y se la llevó directamente a Keima.

“Maestro.”

“¿Oh, Kuro? Trabajando duro como siempre, ya veo. Buen trabajo, buen trabajo”. Keima agitó el cabello de Niku. Ella le dio una pequeña sonrisa. Bueno… En su cabeza, ella sonreía de oreja a oreja, pero los músculos de su cara no eran muy buenos en su trabajo. A cambio, su cola se sacudió en el aire, meneando felizmente. Si ella tenía una queja, era que él no la llamaba Niku ya que otros aventureros estaban cerca.

Ella notó que sus ojos miraban brevemente sus pies. A decir verdad, quería quitarse los zapatos y exponerle los pies, pero él le había dicho que no lo hiciera. Entonces, ella mantuvo sus deseos adentro. Su maestro no prefería expresar su amor por los pies frente a extraños.

“… Ven a mi habitación esta noche”.

“¡Ah! ¡Sí! ”Niku trotó de regreso a la cocina y le dijo a Kinue que tenía el deber de almohada, quien asintió a cambio. Así la pondrían en un turno de dormitorio caliente y humeante por la mañana.

Terminó sus deberes de camarera de buen humor y comenzó a limpiar su cuerpo para prepararse para sus deberes de almohada. Era importante que se concentrara solo en limpiar la suciedad visible y tal en su cuerpo, nada más. También necesitaba mantener sus calcetines puestos.

Niku se quitó el traje de sirvienta, se limpió ligeramente el cuerpo con agua caliente del onsen y se puso el pijama… un vestido cosido de tela suave. Generalmente dormía en ropa interior cuando estaba sola, pero se aseguró de usar el vestido cuando trabajaba como dakimakura. Quizás debido a su antiguo estilo de vida, se sentía incómoda durmiendo con mucha ropa en su cuerpo, pero ese no era el caso cuando estaba en la cama con su maestro.

… Además, Ichika le había dicho que era mejor no ser tan indecente.

Con todo eso hecho, se dirigió a la habitación de su amo. Después de hacer una parada en el baño, eso es. Su amo se fue a la cama temprano y se despertó tarde. Necesitaba prepararse de tal manera que no mojara la cama por la noche ni tuviera que levantarse temprano para aliviarse.

Después de terminar allí, Niku estaba completamente lista. Se acercó a la habitación de su amo y respiró hondo frente a la puerta. Su corazón siempre latía muy rápido.

Llamó y entró por la puerta. Su maestro ya siempre se acurrucó dentro de su manta. Cada día, tenía que manejar la mazmorra y la posada, estudiar golems, cocinar y magia, y además de eso, tenía sus deberes como jefe de la ciudad. Cualquiera podía ser camarera, recepcionista o aventurero, pero solo su maestro podía hacer todo lo que él hacía. Estaba ocupado todos los días. Niku pensó que era increíble por eso. Increíble e increíblemente genial.

“Nzzz, ¿estás aquí…? Zzz… ”

“¡Sí!” Niku se quitó los zapatos. La habitación de su amo era de estilo japonés, por lo que era importante que se quitara los zapatos antes de entrar. En realidad no. Era importante que se quitara los zapatos y lo mostrara. Ella quería que él viera los frutos de su trabajo sudoroso.

…¡Si! ¡Estaba mirando  sus pies a  través de  las  mantas! Niku había pervertido algo las esperanzas en su corazón, al rezar para que al mostrar su atractivo, su maestro finalmente la tratara como una “niku” apropiada y se acercara sexualmente a ella. (Keima simplemente asumió que su cola se movía porque estaba de buen humor al azar. Él no sabía cuáles eran sus verdaderos deseos. O tal vez, lo sabía y simplemente los estaba ignorando).

Lentamente se quitó los calcetines hasta la rodilla para prepararse para dormir. Por otro lado, su plan era dejar “accidentalmente” sus calcetines en la habitación de Keima. Ichika le había aconsejado que lo hiciera, ya que eso lo haría muy feliz, por lo que Niku naturalmente hizo un punto para hacerlo.

… A decir verdad, ella quería quitarse la ropa interior y “olvidarla” también (para dejar más de su aroma en su habitación), pero desafortunadamente, todavía no había encontrado una buena oportunidad para hacerlo. Había pensado en no usar la ropa interior y meterse a escondidas, pero su maestro le había dicho que siempre usara algo.

Niku reemplazó la gruesa cubierta de futón por una más liviana, apagó las luces y se deslizó dentro del futón. Luego hizo que el Maestro la apretara. Su calor se sentía bien.

… Al ajustar su posición en el futón, se aseguró de frotar su cuerpo contra el de él para marcarlo con su aroma. El hecho de que su vestido se doblara durante ese proceso fue completamente incidental. Ella no lo hizo a propósito para poder sentir a su maestro sin una capa de tela en el camino. Sí. Fue solo un simple accidente.

A Niku le encantaba el aroma que olía a amo mientras le frotaba el cuerpo. Necesitaba mantenerse despierta el mayor tiempo posible para disfrutarlo más.

La respiración de Keima se estabilizó y por eso supo que su maestro se había quedado dormido. Al final, una vez más no había caído en sus tentaciones. A pesar de lo mucho que lo había frotado con los pies para tratar de seducirlo, estaba durmiendo con una expresión pacífica en su rostro.

Niku frotó suavemente su cuerpo contra el suyo, cuidando de no despertarlo, e incluso le dio mordiscos de amor. Morder el amor era una muestra muy común de afecto entre las bestias. El collar de esclavos no reaccionó a ellos, por lo que no hubo ningún problema.

Después de tomarse su tiempo y amor mordiéndolo a su gusto, Niku decidió irse a dormir. Ella trabajaría duro por el bien de su amo nuevamente después de despertarse. ¡Y mañana seguro, ella conseguiría que él tuviera sexo con ella! O al menos, eso es lo que rezó mientras se dormía.