Isekai Wa Smartphone to Tomoni (NL)

Volumen 21

Capítulo 2: La Boda Real

Parte 1

“Me-Me veo un poco raro en esto, ¿no?”

“Eres la imagen de la realeza, mi señor”.

“Bastante. Te ves bastante atractivo”.

“Eres la imagen misma de aplomo, queridosssss”.

Estaba un poco avergonzado por las palabras de cortesía de Kohaku, Sango y Kokuyou. En ese momento, estaba de pie frente a un espejo, modelando mi esmoquin blanco.

Se sintió extraño, con toda honestidad. Había un boutonniere de rosas blancas en la parte superior del cuello de mi chaqueta. No pensé exactamente que el conjunto me quedaba genial, pero este era un evento único en la vida, así que opté por sonreír y soportarlo.

“Hombre… estoy muy tenso por todo esto…” “Heh. Así que incluso tú te pones ansioso, ¿eh?”

“¡Por supuesto que sí! ¡Este es un acontecimiento importante en mi vida!” Hice un puchero levemente ante el comentario casual de Luli.

Ugh… T-Tal vez podamos cancelar la ceremonia y enviar una postal que diga ‘¡Nos casamos! ¡No te preocupes por eso!’ ¿En eso…? Eso solucionaría todo esto.

… No, no puedo hacer eso. Soy el monarca de toda una nación, así que eso causaría un escándalo. Además, necesito que las chicas tengan su gran día, sé lo mucho que han estado esperando esto.

No podía huir, ni podía pedirle a nadie que se huyera conmigo.

La mayoría de las bodas en este mundo eran lujosas fiestas en las que participaban las familias de la fiesta de bodas, y no necesariamente hacían votos en un sentido religioso ni nada por el estilo. Sin embargo, escuché que algunas bodas implicaban hacer votos ante los espíritus.

Personalmente, no me importaba hacer votos ante un dios, pero en el que yo creía también era el mismo que adoraba la Teocracia Ramissh. No podía hacer públicamente ningún voto que apuntara en esa dirección, ya que eso plantearía preguntas políticas sobre la relación de Ramissh con Brunhild.

Por eso, en cambio, había planeado convocar a los Espíritus del Pilar y hacer un voto ante ellos como testigo. Sin embargo, considerando el hecho de que yo era el Rey Espíritu Celestial, se sentía un poco extraño, ya que eran mis subordinados…

Bueno lo que sea. Probablemente sea mejor no pensar demasiado en ello. Alguien llamó a mi puerta y el individuo entró. Era Laim, mi mayordomo.

“Su Alteza, el Maestro Shinnosuke está aquí para verlo”.

“Oh, por supuesto. Déjalo entrar.”

Laim asintió con la cabeza y Dios Todopoderoso entró en mi habitación. Detrás de él había algunas otras personas. Presumiblemente, eran los dioses más nuevos que habían descendido para mi boda. Dios Todopoderoso vestía un kimono con una falda hakama. Dado su atuendo habitual, le sentaba muy bien. El escudo de la familia Mochizuki adornaba su ropa, tomando la forma de un símbolo Navagraha. Dado que era mi abuelo en este mundo, tenía sentido que llevara el emblema familiar.

Después de que Laim  se inclinó y se excusó de la habitación, Dios Todopoderoso lanzó una sonrisa en mi dirección.

“Ohoho. Te ves bastante encantador. Apenas te reconozco, muchacho.” “No puedo decir que me sienta completamente cómodo en esto…”

Francamente, me preguntaba cómo me veía habitualmente, pero fue agradable recibir un pequeño elogio.

“Ahora, permítanme presentarles a los recién llegados … De derecha a izquierda … Esta es la diosa de la danza, el dios de la fuerza, el dios de la industria, el dios de los anteojos, el dios del teatro, el dios del marionetas, el dios del vagabundeo, la diosa de las flores y la diosa de las piedras preciosas. Asistirán a la boda como amigos de la familia”.

“Encantado de conocerlos a todos. Soy Mochizuki Touya. Espero que disfrute de su estancia.”

Había recibido un aviso sobre los dioses que vendrían, pero muchos de estos tipos parecían bastante raros en general. ¿De qué demonios tenía un dios de las gafas? Claro, usaba anteojos, pero como… ¿cuál era exactamente el alcance de sus poderes?

Todos iban vestidos con atuendo formal, lo cual fue un alivio. Sin embargo, parecía que los músculos abultados del dios de la fuerza estaban a punto de ondular y estallar fuera de su traje.

La diosa de la danza, la diosa de las flores, la diosa de las piedras preciosas y la abuela Tokie eran todas mujeres, pero el resto eran hombres… Aunque, el dios del teatro parecía un poco andrógino. Casi me recordaba a Kokuyou, de hecho.

Era guapo y parecía del tipo que sería popular entre las mujeres, pero también tenía una especie de acento femenino en su voz. Decidí no ser grosero y preguntarle sobre eso. Después de todo, no era asunto mío.

“Una vez que termine la boda, recorrerán el mundo a su propia discreción. Sin embargo, no te preocupes. Les he dicho que intenten no involucrarse en nada imprudente”.

Personalmente, hubiera preferido prohibirlo en lugar de pedir educadamente … Sin embargo, había escuchado que a los dioses no se les permitía bajar al reino de los mortales a menos que tuvieran mucho conocimiento sobre cómo comportarse, así que idealmente, todo saldría bien.

“Ahora bien, no queremos quedarnos más tiempo de nuestra bienvenida. Estaremos en camino. Mucha suerte, muchacho.”

“Oh sí. Gracias.”

Los otros  dioses inclinaron la cabeza y se marcharon. Sin embargo, ninguno de ellos realmente se destacó más que el dios de la fuerza o el dios del teatro.

Estaba un poco ansioso por tener cerca de veinte dioses en mi fiesta de bodas, pero habían sucedido cosas más extrañas.

Suspiré suavemente cuando Kougyoku entró volando por la ventana cercana.

“Bienvenida. ¿Cuál es la situación?”

“Por lo que he visto, sus invitados se están reuniendo con pocos incidentes”.

Hice que Kougyoku explorara el área ceremonial. Habíamos elegido celebrar una boda en el jardín y habíamos renovado parcialmente el patio con ese fin. La razón de eso era bastante simple, de verdad. La sala de audiencias de nuestro castillo no tenía espacio para acomodar a la gran cantidad de invitados.

Cesca, la ginoide terminal a cargo del jardín de Babylon, había estado trabajando incansablemente para convertir nuestro patio en el lugar perfecto para la boda. Nuestro jardinero Julio también había estado trabajando duro para cultivar la estética adecuada. Al final de todo, nuestro jardín ordinario se había transformado en un hermoso paraíso con muchas flores.

Honestamente, me sorprendió que la sirvienta pervertida pudiera hacer algo tan asombroso. Incluso si tenía sentido debido a que ella estaba a cargo del jardín de Babylon, no había inspirado mucha confianza en mí a través de su conducta. Honestamente, la sonrisa de suficiencia en su rostro todavía me cabreaba… pero definitivamente había hecho lo suficiente para ganarse mis elogios.

Todas las ginoides de Babylon también vinieron para asistir a la boda. Naturalmente, también asistieron la doctora Babylon, Elluka y Fenrir.

Shirogane y las tres sirvientas Gollems (Ruby, Saph y Emerl) habían venido de la isla Drakliff. Todos trabajaban bajo las instrucciones de Laim.

Estábamos un poco cortos en personal de servicios generales, por lo que teníamos miembros de nuestra orden de caballeros trabajando como mayordomos y sirvientas. Naturalmente, obtendrían bonificaciones por su arduo trabajo. Las tres kunoichi que trabajaban con Tsubaki también fueron sirvientas del día.

De repente, alguien llamó a la puerta. Era Laim de nuevo.

“Es hora, Su Alteza.”

“…Si. Creo que lo es.”

Empecé a exagerarme dándome palmadas en las mejillas un par de veces para motivarme. Entonces, comencé a entrar en pánico porque no quería salir con marcas rojas en mi cara, ya que eso habría iniciado un montón de rumores.

Respiré hondo, inhalando y exhalando. Una vez que me tranquilicé, seguí a Laim.

¿Estoy caminando bien? ¡¿Voy a estar bien?!

“Mi señor… Está balanceando su pierna derecha y su brazo derecho al mismo tiempo con bastante rigidez”.

“Ah…” Hice una pequeña pausa ante las palabras de Kohaku. Ni siquiera había notado mi propia conducta nerviosa, lo cual no era una buena señal.

“Estoy más preocupado de lo que pensaba…”

“No se preocupe, señor. El rey de Belfast estaba tan nervioso antes de su boda que siguió bebiendo agua justo antes de que comenzara la ceremonia”.

“¿De verdad?”

“En efecto. Estuvo tan desesperado por usar el baño durante la ceremonia que ni siquiera puede recordar los discursos de celebración que se dieron”.

Me divirtió más que Laim recordara esos detalles, pero dado que una vez trabajó al servicio de Belfast, eso parecía razonable. Además, honestamente, fue un poco tranquilizador saber que no era el único monarca en el mundo que tenía nerviosismo antes de la boda.

“El rey de Belfast solía contar esta historia a otros de manera bastante abierta. Dijo que demasiada tensión y estrés nunca darían buenos resultados. La forma de proceder es con los hombros relajados y un paso tranquilo”.

Tranquilo, ¿eh…? Supongo que mi principal temor aquí es lo diferente que estoy actuando. Tal vez debería tomarme las cosas con calma y ser más auténticamente yo. Sí… Eso suena bien.

“¿Estás bien ahora?”

“Si. Siento haberte preocupado”.

“No hay necesidad de disculparse. De hecho, debería agradecerle por complacer la charla de un anciano”, dijo Laim, sonrió y continuó. Ciertamente me sentí un poco mejor. Probablemente las cosas iban a estar bien… Probablemente, al menos…

Finalmente, llegamos a la puerta del patio con la cubierta del lugar. Nikola y Norue, subcomandantes de la orden de los caballeros, estaban a ambos lados de la puerta. No estaban vestidos con su armadura habitual. En cambio, usaban un atuendo formal que era mucho más adecuado para la ocasión.

Más allá de la puerta, pude escuchar música comenzando, sonando a través de los parlantes de Babylon. No teníamos una orquesta personal, así que esta era nuestra mejor alternativa.

La música era, por supuesto, la clásica marcha nupcial de Mendelssohn. Algunas personas preferían el Coro nupcial de Wagner, pero yo no estaba entre ellos. La fanfarria de la trompeta realmente creó el ambiente, y los sonidos rítmicos tranquilizaron mi corazón.

Además, la composición de Wagner fue originalmente de una ópera trágica llamada “Lohengrin”. La de Mendelssohn se basó en “El sueño de una noche de verano” de Shakespeare, que tenía un tono considerablemente más claro… No es que estuviera completamente libre de confusión, claro.

De cualquier manera, quería que mi boda fuera una historia que terminara felizmente.

Justo cuando la fanfarria alcanzó su punto máximo, Nikola y Norue abrieron la gran puerta ante mí. Los invitados estaban todos alineados a lo largo del pasillo, vitoreando y aplaudiendo. Las bodas reales eran tradicionalmente asuntos tranquilos y sombríos en este mundo, pero decidimos que queríamos romper esa tradición y hacerla divertida para todos nuestros asistentes.

Les mostré a las chicas un video de una chica caminando por el pasillo, y todas dijeron que querían hacer eso. Aparentemente, también existía una práctica similar en este mundo. La práctica involucró al novio caminando con su madre y la novia caminando con su padre. Era similar al método que conocía, pero también un poco diferente.

Mientras salía con Kohaku y las otras invocaciones, una lluvia repentina de flores de cerezo danzantes comenzó a caer. Continuó mientras me dirigía hacia el altar, que era modesto, pero adornado con muchas flores hermosas. Cesca lo había engalanado con los más hermosos que jamás había cultivado.

Me detuve al lado de la pequeña escalera que conducía al altar. Ese era el lugar donde esperaba a mis novias.

Finalmente, la puerta se abrió, revelando a tres personas. Dos mujeres, un hombre. El hombre, que estaba en el medio, era Joseph. Completamente libre de su miedo traumático, sonrió ampliamente mientras caminaba del brazo de sus sobrinas, Elze y Linze.

“¡Oh! ¡Mira!”

“¡Dios mío, son hermosas!”

Nuestros invitados murmuraron asombrados mientras las chicas continuaban su marcha.

Había visto sus vestidos antes, pero no los había visto usándolos. Tenían un estilo de línea princesa, floreciendo suavemente hacia afuera desde la cintura hasta el dobladillo.

A pesar de sus personalidades contrastantes, ambas se veían igualmente hermosas. Recordé el día en que las conocí en Reflet como ayer… En ese momento, nunca hubiera esperado casarme con ellas.

Elze tenía una personalidad dura y ambiciosa… pero secretamente era bastante gentil y amable. Tenía la costumbre de mantener sus ansiedades reprimidas en su interior, pero siempre estaba ahí para los demás. Por eso quería estar allí para apoyarla.

Linze, por otro lado, parecía bastante mansa de un vistazo. Sin embargo, en realidad era una de las personas más fuertes que conocía. Su corazón era una fuente de bondad y estaba dedicada a una falta. Ella nunca dejaba de sorprenderme con las cosas que hacía, así que quería ver hasta dónde podía llegar.

Joseph caminaba lentamente, cuidando de no pisar sus vestidos. Parecía un poco nervioso, pero estaba a pasos agigantados más allá de su anterior falta de compostura. Elze y Linze también parecían bastante nerviosas, pero sus velos bloqueaban una visión clara de sus expresiones.

Poco a poco se dirigieron hacia el altar. Y una vez que me alcanzaron, Joseph inclinó la cabeza.

“Por favor, trátelas con cuidado”. “Las haré felices, lo prometo”.

Incliné mi cabeza hacia Joseph, quien probablemente estaba demasiado nervioso para mirarme a los ojos, antes de tomar la mano de Elze y llevarla al altar.

De la misma manera, llevé a Linze de la mano antes de tomar mi posición en la base de las escaleras.

Joseph se trasladó a su asiento y las puertas se abrieron una vez más. Esta vez fueron Yae y su padre, Jubei. Avanzaron por el pasillo como lo hicieron Elze y Linze.

Yae llevaba un vestido de novia, lo que casi parecía extraño dada su herencia japonesa. Su padre, sin embargo, llevaba una hakama. Eso equilibró la imagen.

El orden en el que aparecieron las chicas coincidía con el orden en que las conocí. Después de conocer a Elze y Linze, me encontré con Yae en una de mis salidas. En ese entonces, me sorprendió su manejo de la espada, ya que despachó a un grupo de malos con facilidad.

A veces parecía un poco tonta, pero era verdaderamente hábil y seria. La familia nunca estaba lejos de su mente y su corazón tierno me había ayudado en tiempos difíciles. La sonrisa de Yae podría calmar a todos en los alrededores.

Cuando Yae apareció ante mí, tomé su mano. Su padre me miró a los ojos. “Mi hija está a su cuidado, ahora”.

“Gracias. Prometo cuidar de ella”.

Jubei hizo una reverencia y guie a Yae hasta el altar para que se pusiera de pie con las otras dos chicas.