Isekai Wa Smartphone to Tomoni (NL)

Volumen 18

Interludio 1: Cazador De Dragones

Parte 2

“Espada Sagrada Lestiana: Sexto Trueno Rugiente.”

“¡Graaah!”

La hoja de cristal de Reinhard atravesó el cerebro del Dragón.

El Dragón Cobre-Oro cayó y su cabeza se estrelló contra el suelo con un poderoso golpe.

“Nosotros… ¿lo hicimos? ¡Lo hicimos! ¡El Dragón está muerto!”

Reinhard levantó su espada después de sacarla de la cabeza del Dragón. El pequeño grupo de caballeros Lestianos que estaba a su lado vitoreó al verlo. Algunos lloraron de alegría, otros cayeron de rodillas por el cansancio y otros saltaron alegremente.

La tradición Lestiana decía que era honorable para un caballero matar a un Dragón. Pero las oportunidades de hacerlo eran escasas y cuando se presentaban, eran extremadamente mortales.

Me preguntaba cómo se sentían después de semejante prueba. Tenían suerte de haber sobrevivido. Había unos cuantos heridos, pero ninguno estaba muerto.

Reinhard tomó una foto de sí mismo junto a la cabeza del Dragón muerto. Parecía que estaba tratando todo esto de forma bastante casual, pero podía ver que estaba contento.

Poco después Hilde y yo recibimos un mensaje de texto con la foto adjunta. Reinhard sonreía ampliamente en la foto, así que debió estar totalmente encantado. Inmediatamente le envié un mensaje de texto para felicitarlo.

“Es un poco divertido recibir un mensaje de texto de él cuando está ahí, ¿huh? ¿Qué te parece…? ¿¡Espera, Hilde!?”

Me di la vuelta y vi a Hilde llorando abiertamente ante su teléfono. Miró hacia arriba, mostrando sus lágrimas y su nariz que goteaba.

“Sniff… Mi hermano… Ahhh, mi hermano… Él… Ah… Él es tan feliz… ¡Gracias!”

Quería darle un gran abrazo, pero el llanto era un poco extremo. Si nos quedábamos en los alrededores, estaba seguro de que nos oirían.

“¡[Portal]!”

Abrí un portal y me transporté justo delante de Reinhard. Me pareció que sería mejor fingir que nos habíamos transferido desde Brunhild para felicitarlo.

“¿¡Hilde!?”

“¡Hermano!”

Hilde acurrucó su cara en el pecho de Reinhard.

“Felicitaciones… ¡Has luchado tanto!”

“…Gracias, Hilde.”

Reinhard acariciaba suavemente la cabeza de Hilde.

La chica que observaba no era una princesa caballera, sino una hermana realmente feliz por su hermano. Hilde sabía exactamente cuánto significaba esto para Reinhard, así que estaba legítimamente orgullosa de que él hubiera hecho realidad un sueño de la infancia.

“Tendrás sangre de Dragón sobre ti. Deberías retroceder un poco.”

“Tienes razón…”

Hilde finalmente se separó de su hermano. Le entregué un pañuelo y se limpió la cara. Reinhard sonrió hacia su hermana y luego se giró hacia mí.

“Gran Duque, si pudiera…”

“¿Quieres que lleve al Dragón de vuelta? No hay problema, estoy en ello. Los enviaré a todos de vuelta a la capital de Lestia al mismo tiempo.”

“Gracias.”

Puse al Dragón muerto en [Almacén] y abrí [Portal] de regreso al patio del castillo en Lestia.

Cuando regresamos, saqué al Dragón de [Almacén], teniendo cuidado de no sacar al equivocado. Y cuando lo saqué, todos los que estaban cerca empezaron a animar.

Los padres de Hilde y Reinhard salieron al patio junto con su abuelo, Galen.

“Ohoho… Lo has hecho de verdad, Reinhard.”

“Lo hice, abuelo.”

El viejo sonrió ampliamente mientras golpeaba con su bastón el cadáver del Dragón.

“Un Oro-Cobre, ¿eh? Este es un depredador de élite. Me pregunto si el Gran Duque ayudó.”

“No, sólo los traje de regreso. Las fuerzas de Lestia son las que lo mataron.”

“¿Es eso cierto? Un trabajo increíble, hijo.”

El antiguo rey le dio una palmadita en el hombro a su hijo. Se rió de corazón, haciendo que Reinhard diera un suspiro de alivio.

“Ahora bien, no era sólo yo. Gané gracias al apoyo de mis hombres.”

“Mmm. Mantén ese espíritu contigo. Hoy has crecido de verdad como un caballero.”

“¡En efecto!”

Hrmph… Es una escena conmovedora, pero nadie aquí sabe que su hermana mató a uno mucho más grande antes. Obviamente, no voy a decir nada.

Después de que se hizo el alboroto inicial, la historia de Reinhard y sus valientes hombres se hizo pública. La ciudad entera rápidamente empezó a cantar sus alabanzas al rey caballero y las calles estaban llenas de plebeyos que lo celebraban. Me sorprendió bastante la conmoción, dado que estaba tan sobrepasado en este punto que simplemente cazaba Dragones por su carne o lo que fuera.

Bueno, en cualquier caso, Reinhard podría llamarse a sí mismo un verdadero Cazador de Dragones ahora. Ayudé un poco molestando al Dragón, pero quien lo derrotó eran ellos.

“¡El rey y sus hombres han matado a una bestia asquerosa!”

“¡Salve al Cazador de Dragones!”

“¡Todos saluden al rey!”

Hilde y su hermano se pararon junto a las puertas mientras la gente del pueblo aplaudía. “¿Quieres obtener tu título de Cazadora de Dragones del gremio?” Susurré.

El Dragón muerto todavía estaba en mi [Almacén]. Con eso y mi propio testimonio, estaba seguro de que obtendría el título. En retrospectiva, debería haber grabado un video.

“…No es necesario. Estoy feliz de tener ese recuerdo contigo Touya. Me alegra que hayamos podido ver a mi hermano matar a un Dragón y que haya podido hacerlo con seguridad y brillantez.”

“Oh, ya veo…”

Era igual que ella. Hilde era esa clase de persona, de principio a fin. No le importaba en absoluto el título; sólo quería asegurarse de que el segundo Dragón no le hiciera pasar un mal rato a su hermano. Lo había hecho de nuevo, dándolo todo por el bien de otro. Su naturaleza desinteresada era una de las cosas que más me gustaban de ella.

“Deberíamos hacer algo del Dragón que mataste para conmemorar tu victoria, de todas formas. ¿Tal vez una armadura o un escudo?”

“En realidad, quiero rellenar y colgar su cabeza como decoración para mi dormitorio.”

“¿En serio?”

…¿Colgándola como un trofeo de caza? Bueno, supongo que está bien.

“Claro… pero habrá espacio?”

“Debería estar bien. No tengo mucho en mi habitación.”

Cada una de mis prometidas tenía su propio dormitorio y eran bastante grandes. Cada una estaba decorada de forma diferente y todas tenían su propio encanto.

La habitación de Linze tenía juguetes de peluche y equipos de costura por todas partes, mientras que la habitación de Yae tenía alfombras de tatami y tenía una estética más Eashenense.

La habitación de Hilde tenía espadas y piezas de armadura en las esquinas, pero en general ocupaba muy poco espacio. Era probable que hubiera espacio en las paredes para un trofeo de caza. Probablemente estaría bien.

Personalmente, si me despertaba en medio de la habitación y veía una cabeza de Dragón en la pared, probablemente empezaría a enloquecer.

“Bueno, eso debería estar bien…”

“Gracias.”

Estaba un poco confundido por su gusto estético, pero era su decisión después de todo.

***

“¡Oooh! ¡E-Es increíble! ¡Es como si estuviera realmente vivo!”

Sue miró asombrada a la cabeza del Dragón montado en la pared. Honestamente, se sentía como si un verdadero Dragón estuviera asomando su cabeza en la habitación…

La doctora Babylon nos ayudó a rellenar la cabeza, pero aun así se sentía un poco fuera de lugar.

“A… Ahaha… Ciertamente se siente su presencia, ¿eh?”

“S-sí, si que la tiene…”

Yumina y Linze la miraron incómodamente. Las dos parecían compartir mis sentimientos al respecto, pero bastantes de las chicas estaban entusiasmadas.

“¡Ooh! ¡Es realmente impresionante, lo es! ¡Me gustaría tener uno también, de verdad!”

“Sí, estoy un poco celosa… pero una cabeza de dragón no encajaría en mi habitación, creo.”

Yae y Elze miraron a la cabeza con impresionantes sonrisas en sus caras. Tenía la sensación de que las dos apoyaban plenamente la nueva decoración de Hilde.

La habitación de Elze tenía muchas cosas sorprendentemente bonitas, así que una cabeza de Dragón rellena no favorecería la estética. Definitivamente tampoco encajaría con la sensación de Eashen de la habitación de Yae.

“¡Touya-dono! ¡Deseo cazar un Dragón también, lo deseo!”

“¡Sí, yo también quiero hacerlo!”

Yae y Elze se giraron hacia mí. No le vi el sentido… Ya tenían el título de Asesinas de Dragones de todos modos.

“¡Realmente quiero hacerlo, de verdad! Me gustaría cazar un trofeo adecuado, ¡lo quiero!”

“¡Si! ¡Podríamos decorar la entrada del castillo!”

No estaba muy seguro de ese plan, ya que probablemente asustaríamos a los invitados que vinieran.

“…Hay como un cementerio entero de dragones muertos en mi [Almacén], saben…Podemos usarlos si les preocupa tanto…”

“¡No puede ser! ¡Eso no sirve para nada!”

“¡En efecto! Quiero que sea el fruto de mi propia fuerza, ¡lo quiero!” Estaba acorralado.

Aaagh, a este paso, voy a tener que salir a cazar dragones de nuevo… ¿Por qué se llegó a esto?

A pesar de mi exasperado suspiro, Hilde se acercó a mí y simplemente sonrió.

KJun: Revisado y corregido.