Otome Game no Hametsu Flag shika nai Akuyaku Reijou ni Tensei shite shimatta… (NL)

Volumen 4

Capítulo 3: Dirigiéndose Valientemente Hacia El Enemigo

Parte 1

El sol había salido. Normalmente la mesa del desayuno estaría llena de conversaciones animadas y alegres, pero hoy un aura tensa flotaba en el aire, y todos comieron su comida en silencio.

Muy pronto, todos terminamos nuestros preparativos. Nos dirigimos a la zona señalada por el oso… el lugar que nos dijeron ayer que supuestamente albergaba a Keith. Aunque la ubicación estaba en la misma ciudad Noir, estaba algo lejos de nuestra posada. Abordamos nuestro carruaje, pero planeamos desembarcar cuando estábamos a medio camino y viajar el resto del camino a pie.

Esto era natural. Si fuéramos con un carruaje tirado por caballos, definitivamente los perpetradores nos notarían. Por alguna razón, también estábamos usando un carruaje diferente al que habíamos usado ayer; este estaba mucho más golpeado. Tal vez esto también fue para engañar a nuestros enemigos. Pero luego supe que esta no era la única razón.

“¿Cómo…? Qué horrible…” Murmuré. Fue la única respuesta en la que pude pensar mientras miraba las escenas afuera a través de la ventana del carruaje mientras este retumbaba.

Larna levantó las cejas ligeramente y se volvió hacia mí. “Esta parte de la ciudad siempre ha sido ilegal. Honestamente, lugares como este deberían haberse limpiado hace mucho tiempo. Pero, ya que está tan cerca de una nación extranjera, las influencias geográficas en su cultura son fuertes. Por más que lo intentemos, la seguridad alrededor de estas partes se ha negado obstinadamente a mejorar.”

Mirando por la pequeña ventana, vi gente vestida con ropa sucia que dormía al lado de la carretera, al lado de montañas de basura. Estas personas estaban tan sucias que eran difíciles de ver, y algunas también eran terriblemente delgadas.

“Si hubiéramos pasado por aquí con nuestro carruaje prestado por el comerciante, nos habríamos destacado demasiado. No mires demasiado afuera, Katarina. No te dejan ir una vez que tus ojos se encuentran.”

Siguiendo el consejo de Larna, aparté los ojos de la ventana. Ahora todo me parecía real… el hecho de que este era un lugar peligroso y sin ley.

Finalmente llegamos a un punto en el que el carruaje, en mal estado como estaba, todavía se destacaría demasiado. Cuando nos bajamos Larna me dio una capa de algún tipo para que me pusiera, y obedientemente me la puse. La tela estaba sucia y delgada, pero usarla era necesario para mezclarnos. La ropa que usábamos normalmente habría llamado la atención.

Y así, los cinco, todos vestidos con sucias capas con capucha, nos agrupamos y Larna nos condujo hacia nuestro destino. Me dijeron que nunca debería mirar a los ojos a ninguna de las personas que dormían en la calle, y que nunca debía dar la vuelta. Todo lo que pude hacer fue mirar fijamente al frente mientras caminaba en silencio. Fue un sentimiento sofocante.

“Ahora puedo ver el lugar.” Dijo Larna unos diez minutos después de que empezamos a caminar.

Miré hacia delante de nosotros. A lo lejos se alzaba una gran mansión que sobresalía como un pulgar dolorido alrededor de su entorno sucio.

“… ¿Ese lugar?” Era tan grande que, cuando nos acercamos, se hizo más difícil mirar todo el edificio. Realmente no se adaptaba a su entorno en absoluto. Era demasiado extravagante y demasiado silencioso.

“¿Por qué hay una mansión como esa en un lugar como este?” Murmuré, confundida por el contraste.

“Supongo que es la mansión de quien gobierna esta área. No puedo imaginar que una persona respetable estaría viviendo en un lugar como este. Echa un vistazo, la seguridad es estricta.”

Miré hacia donde Larna había señalado. Efectivamente, había unos pocos hombres voluminosos y musculosos colocados alrededor del lugar, manteniendo una fuerte vigilante en sus alrededores. Mientras miraba más a mí alrededor, vi que había muchos de ellos colocados alrededor de la mansión. Tenía sentido que una mansión elegante en un lugar tan lleno de crimen tuviera que tener algún tipo de seguridad, pero esto era demasiado; estaba lleno de guardias. No había forma de que pudiéramos acercarnos fácilmente.

“Anoche, sabía que no podía acercarme más sin causar una escena.” Dijo Larna, volviéndose hacia todos y luego dirigiéndose a María y a Sora.

“Pero si ustedes dos no pueden tener una buena idea de la situación desde aquí, podría causar una distracción para que puedan hacerlo. ¿Qué piensan?”

María negó con la cabeza.

“No, eso está bastante bien. Esta distancia sirve.”

“¿Entonces puedes ver algo? ¿O deberíamos…?”

“Yo lo veo. La presencia… muy parecida a la que vi ayer.”

Con la confirmación de María, el equipo se tensó colectivamente. Larna se volvió hacia Sora.

“¿Tú también lo ves, Sora?” Preguntó ella.

“Bueno… no tan bien como Lady María, no. Pero puedo sentir que allí algo está al acecho.” Aparentemente, Sora, siendo un Usuario de Magia Oscuridad, podía sentir lo que María también tenía. Así que no había dudas al respecto. Este era el lugar.

“¡Entonces Keith está allí! ¡Tenemos que salvarlo, rápido!” Dije, lista para entrar en la mansión.

Rápidamente Jeord me contuvo.

“Sería imposible correr de cabeza en una mansión tan fuertemente vigilada, Katarina. Tómate un momento para calmarte.” Dijo estrictamente. Había un toque de ira en su voz.

Supongo que tiene razón… pensé mientras me calmaba.

“… Sí. Lo siento…”

Al ver que había cambiado de opinión, Jeord asintió.

“Muy bien.” En este punto definitivamente estaba actuando como mi tutor.

“Pero sí, ahora veo que hay una alta posibilidad de que Keith este retenido en este lugar. ¿Qué haremos, lady Larna? ¿Irrumpir?”

Larna puso una mano debajo de su barbilla, sumida en sus pensamientos.

“U-Um…” María intervino, tartamudeando.

“¿Qué pasa, María? No te ves muy bien. ¿Te gustaría volver a la posada?” Larna tenía razón… María estaba pálida, incluso más pálida de lo que había estado ayer.

Pero María negó con la cabeza.

“No… estaré bien. Sin embargo, todos, realmente no quiero que entren en esa mansión…”

“¿Qué quieres decir?”

“La presencia que puedo ver… la presencia de oscuridad que emana de allí… es anormal. Lo dije ayer, pero esta es una presencia realmente temible. Es más aterradora que cualquier cosa que haya visto antes. Y ese sentimiento llena toda la mansión, como si el edificio en sí estuviera envuelto en la oscuridad… María le dio otro vistazo al edificio, solo para volver a comenzar a temblar. Pronto se abrazó a sí misma para reprimir sus temblores.

Incluso me congelé ante las palabras de María. Pero Sora se apresuró a seguir su punto. “También estoy de acuerdo con Lady María. Esa mansión no se siente nada bien. Si bien es posible que no pueda percibirlo visualmente como lo hace la dama… Siento escalofríos recorriendo mi columna vertebral. De hecho, me temo que es un lugar muy peligroso.”

Nuestro equipo se calló. Una mansión llena de Magia Oscura… Nunca había oído hablar de algo tan aterrador. La cara pálida de María y la expresión severa de Sora fueron más que suficientes para convencerme de que desconfiara de este lugar.

“… Supongo que no tenemos otra opción. Si realmente es un lugar tan peligroso, no tengo planes ni estrategias que ofrecer, al menos por ahora. En cualquier caso, deberíamos poner cierta distancia entre nosotros y la mansión, y luego contactar al Ministerio.”

De acuerdo con la decisión de Larna, nuestro pequeño grupo rápidamente se distanció del horrible lugar.

Larna había mencionado ponerse en contacto con el Ministerio, pero por alguna razón, nos llevó a un edificio alto y entró. Esperamos a que regresara, esperando en silencio hasta que finalmente Jeord habló.

“Lady María… si no te angustia, me gustaría mucho saberlo. ¿Cómo fue esa presencia en la mansión diferente de lo que has visto hasta ahora…?”

“Bueno… no puedo explicarlo muy bien. Pero… si tuviera que ponerlo en palabras… era una oscuridad muy espesa y pesada.”

“¿Una espesa oscuridad?”

“Sí… La magia oscura que vi antes era casi una bruma negra sólida… una niebla. Y solo la he visto tan concentrada en la pequeña habitación donde estaba Raphael durante el Festival Escolar. Esa neblina era oscura y densa. Se sintió terrible. Pero este lugar…”

“¿Es peor, supongo?”

“Sí. La bruma negra que acabo de ver simplemente eclipsa todo lo que he visto antes. Es… incomparable. Aterrador.” Dijo María.

Sora agregó rápidamente sus observaciones.

“Yo también sentí una increíble sensación de peligro en el lugar. Algo que parecía estar diciéndome que no debería estar cerca de eso.”

“Ya veo.”

Silenciosamente escuché su intercambio. Una presencia de Magia Oscura más fuerte que cualquier cosa que hayan visto antes. Un lugar que al que sería demasiado peligroso acercarse…

No pasó mucho tiempo antes de que Larna saliera del edificio.

“Es un lugar muy peligroso, sí. He llamado a refuerzos del Ministerio.” Dijo. Había esperado esto, dado lo peligroso que resultó todo esto. Pero luego agregó: “Así que todos deberíamos volver a la posada y esperar a que vengan.

“Um, pero Lady Larna.” Espeté rápidamente. “¿Cuándo volveremos a la mansión?”

Larna parecía preocupada por mi pregunta.

“Quizás mañana o más tarde. Después de todo, tenemos que esperar a que lleguen los refuerzos.”

“… Mañana… o más tarde.” Este lugar estaba lleno de intensa Magia Oscura. Algo terrible sucedería si intentáramos abordarlo nosotros mismos. Pero… si Keith realmente estaba retenido en ese lugar…

La imagen de mi sueño flotó en mi mente. El joven se parecía a Keith. Él estaba llorando. Mientras esperábamos, le podían hacer cosas terribles a Keith. Tal vez estaba llorando en este momento, como cuando era pequeño.

“Um, Lady Larna…”

“¿Qué pasa, Katarina?”

Miré fijamente a los ojos de Larna cuando se volvió para mirarme.

“Yo… no puedo esperar.”

“Pero… eso es…” Los ojos de Larna se abrieron de sorpresa.

“Entiendo que es un lugar peligroso. Pero… Pero si en verdad Keith está allí… ¡no se sabe qué se le podrían estar haciendo en este momento! ¡Ni siquiera sabemos si Keith estará vivo mañana por la mañana!”

“…”

“Hasta entonces algo terrible podría pasarle a Keith… No puedo simplemente sentarme aquí y esperar. No me importa ir sola si eso es lo que se necesita. Por favor, déjame hacer esto.” Hablé con fuerza, de la única manera que sabía.

Larna parecía angustiada, mientras que María y Sora parecían sorprendidas. Tal vez fue porque todos sabían que no tenía ningún poder real de ningún tipo. ¡Aun así, mi querido hermano estaba en problemas! ¡En este mismo momento podría estar sufriendo! No había forma de que simplemente esperara de brazos cruzados.

Me mordí el labio, esperando en silencio su respuesta. Fue entonces cuando alguien a mi lado habló.

“Lady Larna, por favor considérelo.”

“¿Eh…? ¿Príncipe Jeord?” Mis ojos se abrieron con sorpresa cuando me volví hacia él. Después de todo, ¿no estaba absolutamente en contra de exponerme a ningún tipo  de peligro? Ni en un millón de años hubiera pensado que aprobaría mi propuesta. Con la boca abierta, miré fijamente a Jeord, quien en respuesta solo me dio una sonrisa incómoda.

Jeord se volvió hacia Larna.

“No solo sería Katarina. Yo también estaría con ella. Por favor, danos permiso, Lady Larna.”

“… ¿Hablas en serio, Príncipe Jeord?”

Jeord respondió a la todavía sorprendida Larna con una expresión seria y un asentimiento.

“Por supuesto.” Luego me miró. “Ya ves, una vez que Katarina ha decidido resolver algo, no hay forma de detenerla. Incluso si te negaras, ella seguramente intentaría entrar por su cuenta.”

Jeord dio en el clavo. Su precisión me sorprendió un poco.

“Ugh…” Tenía razón,  sin embargo. Eso era exactamente lo que tenía en mente. Me habría escapado por mi cuenta incluso si Larna se hubiera negado.

En respuesta Jeord me lanzó una sonrisa más reservada.

“Entiendo tus pensamientos relativamente bien, Katarina.”

“Hmm…” Durante un tiempo, Larna permaneció en silencio, sumida en sus pensamientos. Y luego finalmente dijo: “Supongo que un rescate rápido sería mejor, dado lo peligrosa que es la situación… pero no sería suficiente para ustedes dos ir por su cuenta.” Pero a juzgar por su expresión, ella parecía darse cuenta de que no tenía muchas opciones en el asunto. “De acuerdo. A la luz de su resolución, supongo que deberíamos irrumpir.”

“¡Gracias, Lady Larna!” Literalmente salté de alegría.

“Pero no podemos ir de inmediato. Después de todo, no es que parezca que el lugar daría la bienvenida a los visitantes. Primero tenemos que inspeccionar el sitio e identificar posibles puntos de entrada.” Larna se volvió hacia el joven que todo este tiempo había estado observando en silencio.

“Sora, ¿podrías lograrlo?”

Ante las palabras de Larna los bordes de los labios de Sora se curvaron.

“Oh, pero por supuesto. Ahora que hemos decidido un curso de acción, haré todo lo que esté en mi poder.”

Con eso, Sora se dispuso a explorar la mansión y sus locales. Pensé que ir solo sería peligroso, pero él me dijo que prefería trabajar solo. “Estoy acostumbrado a cosas como esta, así que déjamelo a mí.” Dijo mientras me mostraba una sonrisa traviesa, casi bulliciosa, y se puso en marcha.

Por todo lo que escuché, Sora vivió una vida como el protagonista de una película de espías. Supuse que era mejor dejarlo hacer lo suyo. Es un tipo útil que conviene tener como aliado…

Cuando Sora se fue, el resto de nuestro grupo regresó a un lugar a cierta distancia, esperando su regreso.

“U-Um. ¿Príncipe Jeord?” “¿Qué pasa, Katarina?”

Bajé la cabeza.

“Gracias por lo que dijiste hace un momento. Por… estar de acuerdo con lo que dije.”

“Jaja. Te entiendo muy bien, Katarina, una vez que tienes esa expresión sobre ti, eres casi imparable.” Respondió Jeord con una sonrisa suave.

“… ¿‘Esa expresión’?” ¿De qué está hablando?

 “Esa cara que haces cuando es momento de resolver algo.”

“… Huh.” No entendí lo que quería decir. ¿Quizás mis expresiones son fáciles de leer?

Ante mi aparente confusión Jeord simplemente sonrió.

“La verdad es que, Katarina… cuando gritaste que de inmediato irías a rescatar a Keith, ya sabía que dirías eso. Después de todo, simplemente eres ese tipo de persona.”

“¿?”

“Si hay alguien que lo necesita, alguien que pide ayuda… simplemente corres directamente hacia esa persona, incluso si estás mal equipada para manejar esa tarea.”

¿Quiere decir que soy impulsiva? ¿Qué salto al anzuelo con demasiada facilidad? Me retiré un poco, sintiendo que me estaban dando un regaño.

“Ah, no estoy enojado contigo, Katarina.” Dijo, todavía sonriendo débilmente.

“Me gusta mucho esa parte de ti. Por ejemplo… si yo fuera el prisionero en cuestión, en lugar de Keith, todavía te apresurarías a salvarme de la misma manera, ¿no?”

Todavía no entendía lo que estaba tratando de decir, pero tenía una respuesta inmediata a su pregunta.

“Claro que sí. No lo dudes.” Asentí con convicción.

A juzgar por su sonrisa, Jeord parecía satisfecho con mi respuesta.

“Ah, Katarina. Realmente me gusta eso de ti.” Dijo mientras me daba palmaditas en la cabeza.

Por alguna razón, me encontré sonrojada, y mi corazón comenzó a latir un poco más rápido.

“Jaja… espero que te hayas preparado, Katarina. Una vez que todo esto termine…” Se detuvo y no continuó, en cambio solo sonrió vagamente.

***

“Así que realmente vinieron… como esperaba.”

“¿Dijiste algo, Sarah?” Le pregunté. Sarah había estado mirando por la ventana y murmurando algo que no pude oír.

Ella solo sonrió de esa manera encantadora y respondió: “Oh, no es nada.”

“¿Segura?”

Me llamo Thomas Coleman. Había pasado un mes desde que conocí a esta mujer llamada Sarah. Al principio pensé que era sombría, pero ahora sentía que era la única que me entendía. Confió en ella por completo.

Se suponía que era el heredero de la familia Coleman. Hubiera sido vizconde. Debería haberme criado como el tipo de especial que soy, como el heredero que nací para ser. Pero eso me lo robó mi hermano menor. Incluso me echaron de la casa.

Eso fue algo completamente increíble. En primer lugar, no hice nada malo. La razón por la que no me fue bien en la escuela fue porque mis tutores eran inútiles. Y todos mis sirvientes seguían renunciando, porque ellos también eran inútiles. La gente a mi alrededor no era buena. No hice nada malo.

Mi propio padre me miró en estado de shock y dijo: “¿Cómo las cosas llegaron a esto?” Me miró con desprecio. ¡Vamos! Era humillante ser visto así por ese hombre. Ese mujeriego.

Y luego estaba mi hermano menor, que comenzó a seguir a ese hombre. Me miró de la misma manera, a pesar de que debería haberme seguido. “¿Por qué no piensas en las cosas que has hecho?” Decía.

Tuve mala suerte. Todo fue mala suerte. Es toda una lástima haber tenido un padre y un hermano así. Es porque estaba rodeado de estos imbéciles que no pude alcanzar mi verdadero potencial.

Como no tenía suerte, simplemente me aferre a la que pude conseguir. Nunca hice otra cosa que golpear a algunos de esos sirvientes idiotas. Antes de darme cuenta, lo perdí todo y fui expulsado de la casa.

Cuando me echaron me dieron algo de dinero, pero eso pronto se agotó. Todo lo que pude hacer fue lamentar mi patética existencia debido al pésimo hogar que tuve. Fue entonces cuando pensé que iría a la ciudad y tomaría algo de alcohol… cuando lo vi.

Nunca lo había visto desde que había dejado la casa de mi familia hace tantos años. Sin embargo, por lo que decían los rumores, un duque lo acogió y vivía en grande con la élite de la sociedad. Cuando escuché eso, estaba enojado. ¿Qué estaba haciendo, al pavoneándose de tal forma? No era más que el hijo de una prostituta. Pero nunca fui parte del mundo de los nobles, así que nunca lo vi con mis propios ojos. Finalmente, también me olvidé de eso.

Ahora que había perdido todo, nunca pensé que llegaría el día en que lo vería en persona. Mi hermano menor, Keith Claes. Ni siquiera teníamos la misma madre. Por supuesto que no. Su madre era una sucia puta. Asqueroso.

Pero nada de eso le importo. Él incluso me atacó con su magia. Él dejó caer un montón de rocas duras sobre mi cabeza. Fui gravemente herido e incluso me rompí algunos huesos. Fue tan aterrador que incluso tuve pesadillas sobre él.

Era aterrador, pero al mismo tiempo lo odiaba. Keith realmente fue lo peor. Basura inútil.

¿Cómo podría un tipo como él usar ropa tan bonita? ¿Por qué había una mujer junto a él?

¿Qué pasa con esa sonrisa feliz de él? ¿Todo eso mientras se me obligó usar ropa sucia, a vivir con lo justo… mientras él aprovecha la fortuna de un duque, viviendo exorbitantemente con mujeres esperándolo? Imperdonable. Todo eso solo porque tenía poder mágico. Solo eso, y un duque lo acogió.

Keith no es nada… nada más que un hijo de puta. ¿¡Entonces por qué!? ¿¡Por qué solo él…!?

Imperdonable. Imperdonable. Imperdonable.

Quiero llevarlo a donde estoy. No… que quede peor. Peor que eso. Un tipo así… debería ser un esclavo en algún lugar del extranjero.

Cuanto más miraba cómo estaba Keith ahora, más pensaba de esa manera. Esos pensamientos se apoderaron de mi mente. Pero no tenía ningún estatus ni dinero. Estaba enojado, pero no podía hacer una mierda.

Y los días pasaron… y pasaron. Hasta que un día, esa mujer apareció ante mí.

“Wah, ese corazón negro abismalmente oscuro tuyo… ¿Podrías contarme un poco sobre ti, hmm?”

“¿?”

Una voz, la de esa mujer de cabello negro, me llamó cuando estaba deambulando por la ciudad. Al principio, no sabía de qué estaba hablando. Me sorprendió. Pero luego recordé… ella era alguien que conocía, que a menudo me daba alcohol. Entonces le conté todo.

Sobre cómo no pude alcanzar mi verdadero potencial debido a mis tutores inútiles. Sobre mi estúpido padre mujeriego. Acerca de cómo fui expulsado de mi propia casa debido a mi estúpido y tonto hermano. Y cómo vi a mi otro hermano, nacido de una madre diferente, después de todos estos años…

“¿Por qué? ¿Por qué un monstruo así, con esa sangre sucia, puede disfrutar de todo lo bueno de la vida? ¿Por qué tiene una buena posición social? ¿Por qué soy el único desafortunado, hundido en desgracias, mientras él lo consigue todo? Nunca lo perdonaré.”

La mujer llamada Sarah, a diferencia de los demás, no me miró con lástima cuando pronuncié mis maldiciones. “Realmente es como tú dices. Qué hombre tan desafortunado eres.” Dijo.

Hasta ahora, nadie había escuchado lo que tenía que decir. Supongo que todos fueron estúpidos. Todos inútiles y matones sin talento. Ella era diferente. Por primera vez en mi vida, finalmente conocí a alguien que me entendió.

Después de eso seguí contándole a Sarah todo sobre mí. Y luego dije: “Quiero que Keith caiga hasta el fondo, como yo. Quiero verlo convertirse en nada más que un patético e indefenso esclavo… retorciéndose en el suelo.”

“Así es… Si haces eso, el dolor en tu corazón sanará, tal vez…” Ella sonrió débilmente. Sarah, por lo que podía ver, tenía más o menos mi edad. Pero su sonrisa era como la de un niño. Fue… adorable. Antes de darme cuenta, le había entregado a Sarah todo. Mi corazón incluido.

Sarah no dijo mucho. No sabía quién era realmente, pero parecía que tenía mucho dinero y una buena posición en la sociedad. Me mudé de esa pésima casa, que me dieron como una especie de compensación cuando me echaron de la familia, a una gran mansión en una ciudad de la que nunca había oído hablar. El lugar estaba amueblado, y Sarah incluso me preparó ropa adecuada.

“Estos accesorios y ropa son mucho más adecuados para el verdadero tú, ¿no crees?” Dijo. Incluso los sirvientes. No eran inútiles, como los de mi familia. Estos muchachos eran muy capaces. Todos me escucharon. Recuperé todo lo que había perdido… todo gracias a conocer a Sarah.

Y eso no fue todo. Sarah continuaría y concedería cada uno de mis deseos.

“Hey, busque y conseguí a Keith Claes. Puedes hacer con él lo que quieras.”

Sarah me llevó a una habitación… y allí estaba él. Sus extremidades restringidas a un marco de cama. Parecía sucio, su cabello desordenado. No se parecía en nada a la persona que vi en la ciudad en ese entonces.

Eso es bueno. Eso es lo que obtienes, tonto. Ahora date aires, ¿quieres? Convertirte en un heredero de un duque no te conviene… pero esto sí.

Después de un tiempo, Sarah me dijo que había venido. Una vez más me dirigí a la habitación. Cuando entré, Keith ya se había despertado.

Me paré frente a él.

“Ha pasado un tiempo.”

Ante mi voz, sus ojos azules se volvieron hacia mí. Recuerdo que me sentí irritado. ¿Estaba en esta situación y todavía me miraba así? Durante un tiempo después de eso, no reaccionó. Él solo seguía mirándome con esos ojos.

Cuando solíamos vivir bajo el mismo techo, él nunca se atrevía a quedarse callado cuando le hablaba. Y aquí estaba él. Mirándome en silencio. Eso me hizo enojar aún más.

Este tipo… ¡es porque se convirtió en el heredero de un duque! ¡Ahora debe pensar que es un pez gordo!

“Sí, entonces no digas nada. ¡Supongo que no quieres decirle nada a los nobles de clase baja, ¿eh?!” Le grité, casi escupiendo las palabras.

Sus ojos parecieron ensancharse.

“… ¿Thomas?” Y dijo mi nombre.

Incluso si él fuera mi medio hermano… es un hijo de puta. Fue enviado a vivir con nosotros porque de esa manera sería menos problemático. Es por eso que siempre tuvo que dirigirse a nosotros de la manera correcta, con los títulos apropiados. Éramos sus superiores.

Se suponía que debía hacer eso… y ahora míralo. Solo han pasado unos años desde que lo vi, y se ha olvidado por completo.

Es como si me estuviera menospreciando. Como si fuera inferior a él. Podía sentir algo dentro de mí rompiéndose.

Bajé el puño sobre el hombre retenido en la desvencijada cama.

“N-No te atrevas… alguien como tú… ¡diciendo mi nombre tan libremente! ¡ALGUIEN COMO TÚ!”

¿¡Cómo te atreves!? ¿Acaso debido a tus gustos me desprecias?

 Se supone que debes estar debajo de mí… simplemente eres inferior. Pero ahora… has llegado a la cima.

¿Por qué caí tan bajo? ¿Por qué soy el único desafortunado?

 Seguí balanceando mis puños. Seguí golpeándolo. Sus extremidades estaban restringidas… y Sarah le hizo algo para sellar su magia. No pudo defenderse.

Pero entonces… no importa cuánto lo golpee, Keith nunca gritó de dolor. No pidió piedad ni perdón. Todo lo que hizo fue permanecer en silencio. Sus ojos eran inquebrantables… tan silenciosos y quietos como él.

Era como si ni siquiera me reflejara en esos ojos. Como si ni siquiera le importara. Eso me molestó más. Una y otra vez lo golpeé con los puños. No pude parar.

Finalmente, mis puños comenzaron a doler, así que me detuve. Pero la expresión de Keith no cambió. Le odiaba. Pero no importo cuánto lo golpeé, no me sentí mejor. De hecho, solo me sentí más patético. Incluso mientras pensaba en cómo iba a ser vendido como esclavo en algún lugar del extranjero, no me hizo sentir mejor. Ni un poco.

Ahora que lo pienso… últimamente sentí que mi cuerpo se volvía más pesado. Por alguna razón, me costaba despertarme. Noté que estaba durmiendo mucho más. Sarah fue considerada. Incluso me dio un masaje en los hombros, pero no ayudó mucho. En todo caso, parecía estar empeorando.

Fue un sentimiento extraño. Como si alguien más me estuviera quitando algo. Algo importante. Aun así… cuando me sentía con ganas, iba a donde Keith estaba encerrado. Quería hacerle sentir dolor, escuchar sus súplicas y aullidos… pero nunca hizo nada de eso. Él guardó silencio, tal como había estado al principio.

No importo cuánto lo golpee, no importo cuánto le grite, sus ojos azules nunca perdieron su brillo. Con el paso del tiempo solo me sentí más patético.

“No me voy a molestar en esperar que se hunda y sea un esclavo más. No lo necesito. Alguien así… ya no me interesa lo que le pase.” Dije.

En respuesta, Sarah preguntó: “Bueno, ¿debería hacer con él lo que quiera?” Ella estaba sonriendo como de costumbre.

“Sí. Haz lo que quieras.” Respondí. Sarah salió de la habitación felizmente.

Mientras tanto, sentí que mi cuerpo se volvía aún más pesado. Como si lentamente estuviera… perdiendo algo…