Date A Live (NL)

Volumen 22

Capítulo 6: Hoshimiya Mukuro

Parte 1

Hace no mucho, Nushi-sama cortó este cabello.

Bueno, estrictamente hablando, sería más preciso decir que le dio los toques finales.

Cada vez que las tijeras controladas por Nushi-sama hacían un sonido ligero; mechones de cabello caían gentilmente por mis pies.

Era una sensación muy extraña.

No se me había hecho un corte de cabello en años.

La historia de Muku estaba grabada en las capas de este cabello. Los momentos divertidos, los momentos dolorosos, un montón de cosas yacen en este cabello.

Por supuesto, solo cortar este cabello no significa tirar todo… hasta hace no mucho, ni siquiera bromearía con esto. Pero había una dependencia con este cabello, una obsesión, un terror abrumador de perder este cabello.

Es por eso que se decidió que nadie, más que Nushi-sama, cortará este cabello.

No es gran cosa. Ciertamente se sentía como si no se fuera a perder nada, tras cortar este cabello.

Sin importar qué, esta familia recibiría a Muku. Tenía amigos con los que reía y lloraba.

Al tenerlos, Muku seguramente tendrá un nuevo comienzo.

El poder de ir hacia adelante sin depender de este cabello fue obtenido. Con el corte de cabello terminado, Muku se paró frente al espejo.

Nushi-sama alabó a Muku como la mejor belleza del mundo.

Mufu, claras adulaciones, pero no se siente mal aceptarlas. Pero entonces, en ese momento, Muku de repente pensó.

Por solo un momento, un sentimiento que debió de haber sido desechado fue abrazado.

… La nueva apariencia que Nushi-sama alababa, añoraba que Ane-sama la mirara también.

***

Los muros no son siempre necesarios para detener los pies de una persona.

Las cadenas no son siempre necesarias para atar el cuerpo de una persona.

… De hecho, esta chica, al solo estar ahí, detuvo sus pies y restringió sus cuerpos.

—… Aaa… aaaaaaaaaa… Como un trueno distante.

Un ruidoso aullido causó que el aire circundante temblara.

Luego, como para encajar con el ritmo, su cabello, cuyo color se desvaneció hace mucho, se ondeó ligeramente.

Era como si denotara su propia existencia. Comparativamente, era como un árbol muerto. Las ramas secas sonaban y se estremecían, moviendo ligeramente las hojas restantes.

Al ver esos ojos, no había nada semejante a la vitalidad que se pudiera sentir. Lo que se reflejaba en esos ojos no era felicidad, placer, hostilidad o intención asesina, sino un matiz vacío.

Luego, diez espadas rodeando su espalda ejercían una extraña presión, pero debido a las circunstancias, estaban lejos de ser adornos. En su lugar, esta triste bestia se veía adolorida por estar intentando mantenerse de pie forzosamente.

… Nombre en clave “Beast”

Un Espíritu que no debería de existir en un mundo en el que los Espíritus están extintos.

Un nombre temporal, para ella que no tiene nombre.

—Qué… qué…

Desde todos lados, voces llenas de confusión fueron oídas. Pero no era irrazonable.

Después de todo, ella apareció repentinamente en la sala de conferencias localizada dentro de “Fraxinus”, una aeronave ubicada 15,000 metros sobre el suelo.

La aeronave de guerra, el robusto castillo mecánico protegido por un exterior sólido y un camuflaje invisible. El campeón del cielo yacía sobre el trono de la supremacía. Era un espacio absoluto fuera de alcance e imposible de ser invadido por quien sea.

Pero, esta chica, entró fácilmente en este santuario.

Atravesar el exterior significaría penetrar el Territorio Voluntario. Pero en un método lejos del sentido común, pasó a través de un agujero abierto en el vacío.

En la sala de conferencias con Shido, las chicas ex-Espíritus y la IA de Fraxinus, Maria, había un total de 12 figuras. Hasta ahora, habían estado en esta reunión para discutir sobre este Espíritu, “Beast”.

Sus expresiones se entumecieron uniformemente mientras todas las miradas recaían sobre “Beast”.

Ciertamente, justo frente a sus ojos, un depredador con un poder absoluto emergió. Horror instintivo, no era irrazonable para el cuerpo quedarse paralizado al ser visto así.

Pero…

—Hey, me equivoque. Hacer que vengas a recogerme así.

De esta manera bromista, Shido habló y dio un paso adelante.

—Qué… Shido…

—Sshh.

Alguien alzó una voz de consternación por las acciones de Shido, pero fue inmediatamente retenida por otra voz aguda.

De un vistazo, se volvió reconocible que vino de una chica portando un uniforme militar color carmesí y su cabello atado en dos coletas con lazos blancos y negros.

… Itsuka Kotori. Ella era la hermana menor de Shido y la capitana de “Fraxinus”. Su expresión mostraba un claro nivel de confianza hacia Shido.

Expresó su gratitud hacia su hermana menor por entender sus intenciones. Reduciendo lentamente la distancia, miró directamente a los ojos vacíos de “Beast”.

Sería una mentira decir que “Beast” no era aterradora. Como sea, la persona frente a sus ojos podía decapitarlo de un parpadeo. Además, Shido actualmente carece de la protección divina de los Espíritus. Incluso si eso no estaba en sus intenciones, había una buena probabilidad de que su vida sea aplastada juguetonamente.

Pero Shido no se detuvo.

Sabía al 100% que sus poderes eran horrorosos. Pero Shido, encima de todo quería hablar con ella.

¿Quién era?

¿Cuál era su meta? Aunque tenía tanto poder.

—¿Por qué gritaba tan desgarradoramente? Quería saber el porqué.

Y si había algo que pudiera hacer, quería intentarlo. Sin importar si poseía el poder de los Espíritus o no. Solo…

—Quería salvarla.

—Aun así, por favor, entiende. Tener tus espadas desenfundadas sería…

—T, tu… eres…

Como para bloquear las palabras de Shido, “Beast” soltó un rugido.

—¡…!

Débil, era una voz tan pequeña que era posible ignorarla.

Pero era indudablemente prueba de que el ego de esta chica aún estaba ahí.

—… ¿Quién eres?… ¿Por qué… estoy aquí?

Se sentía más como una pregunta dirigida a sí misma que una dirigida hacia Shido. Confusión, era como si dudara del significado tras sus propias acciones. Una sensación como si esta chica estuviera envuelta en una atmósfera similar a una espada, tal sentimiento se pudo percibir.

—Digo, ¿persiguiendo tu esencia…? ¿Por qué…? Yo… tu… eres… qué… yo… yo…

—¡…! ¿En verdad viniste a verme?

—¡A, a, aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! En el momento siguiente.

“Beast” gritó, blandiendo su mano derecha hacia Shido.

—¡…!

Cinco espadas estaban flotando alrededor de su mano como si acompañaran cada dedo. Así era la garra de la bestia. Incapaz de reaccionar a tiempo ante este ataque repentino, Shido solo pudo aceptar el ataque…

—¡Nushi-sama!

—¿¡Noah!?

Sin embargo, en ese momento, Shido fue jalado por el dobladillo de su ropa y cayó de espalda.

Casi al mismo tiempo, los cinco cortes rasgaron el vacío, cortando profundamente los muros de la sala de conferencias.

El sonido de una explosión rugió. Los muros internos de la nave, la cual poseía varios instrumentos precisos, fueron todos destruidos. Flamas y humo surgieron. Esa onda de choque causó que la nave entera empezara a temblar.

—¡Ha…!

—¿¡Noa!?

En respuesta a este temblor, todas las chicas perdieron su equilibrio y cayeron de lado.

Pero al mismo tiempo, los movimientos previamente detenidos por la presencia de “Beast” empezaron a moverse otra vez. Todos permanecieron agazapados mientras mantenían su distancia de “Beast”.

Después de esa pausa, con sudor brotando de su espalda, Shido volteó a ver a la chica que tiró de su ropa.

—M-Me salvaste, Mukuro.

—Mun… demasiado cerca para estar cómodo.

La pequeña chica con su cabello atado en un moño, dijo eso mientras soltaba un suspiro de alivio.

Hoshimiya Mukuro. Ella también estaba entre las chicas ex-Espíritus. Si no hubiese predicho los movimientos de “Beast” anteriormente, toda la parte superior del cuerpo de Shido habría sido cortada en pedazos.

Sin embargo, este no era momento para estar aliviados. Humo surgió de los muros interiores de la nave dañados por el golpe de “Beast”. Una ruidosa alarma de emergencia estaba resonando por las bocinas. Y, más importantemente, “Beast” seguía a bordo. Esto era sin duda una situación de crisis.

Y, en medio de todo esto, una voz clara resonó.

—Explosión confirmada dentro de la nave. Procedimientos de extinción de llamas comenzados. La tripulación debería de evacuar inmediatamente.

Con eso dicho, bajo la voz del maestro, una mano fue alzada exageradamente. En conjunto con eso, manos robóticas se extendieron por toda la habitación y empezaron a usar extintores sobre los muros ardientes.

Era como si estuviera manipulando el equipamiento de la nave a su voluntad. Pero no era sorpresa. Su nombre es Maria. La IA de “Fraxinus”, la cual estaba usando un cuerpo humano como interfaz.

—¡Maria! ¿¡Reporte de daños!?

Kotori alzó su voz mientras bajaba su cuerpo para evitar inhalar el humo. Luego, Maria volvió a agacharse al igual que todos los demás. Por supuesto, su cuerpo no tenía problema con inhalar humo, pero parecía comprometida en seguirlos en todo esto.

—Menor… es difícil de decir, no hay problemas con la navegación. Solo…

—… ¿Solo?

—Espero que pueda permanecer en silencio.

Cuando Maria dijo eso en voz baja, una explosión resonó otra vez en la sala cubierta de humo.

—¡Kyaa…!

—¡… Aaaaaaaaaa…!

Un rugido atravesó los oídos de todos en la sala de conferencias. Parecía que Beast estaba blandiendo sus garras de manera devastadora, intentando apartar tanto el humo negro de las llamas como el humo blanco liberado por los extintores.

Desde detrás del denso humo, el desgarrador sonido del metal rasgado se intercalaba con el sonido de las explosiones. Cada vez, la enorme carcasa de Fraxinus temblaba de gran manera.

—¿¡Kiyaaaaaaaah!? ¿¡Vamos a chocar!? ¡Haz algo Mariamon! ¿¡No es este tu cuerpo!?

Una mujer con lentes estaba tirada en el suelo, gritando con lágrimas en los ojos. Honjou Nia, ella también era un ex-Espíritu.

Viendo ese penoso desastre, Maria miró a Nia sin piedad.

—Eres muy ruidosa, Nia. Actúa como una adulta un poco.

—¿¡Es eso lo que vas a decir!?

En respuesta al grito de Nia, “Beast” blandió sus “garras” otra vez. Un corte pasó justo por encima de la cabeza de Nia. La cara de Nia se tornó azul mientras silenciaba su boca con ambas manos.

Pero las cosas no habían mejorado en lo más mínimo. “Beast” seguía rugiendo intermitentemente mientras continuaba destruyendo la nave. De esta manera, incluso una nave con una carcasa protegida por el Territorio Voluntario se estrellaría inevitablemente.

—Ku…

Shido frunció el ceño ante la idea que pasó por su mente. “Fraxinus” estrellándose, eso significaría la muerte de todos los miembros de la nave.

Sin mencionar a la tripulación, las ex-Espíritus que habían perdido su Reiryoku no serían excepción. Si “Beast” no era removida de este lugar tan pronto como sea posible, una muerte segura les esperaría a todos.

Y ese no era el único problema. Tenía una espada que podía abrir un ‘agujero’ en el espacio. No tendría sentido lanzar a “Beast” de la nave si podía fácilmente regresar.

—¡…!

En ese momento, los múltiples ataques de “Beast” destruyeron parte del suelo de la sala de conferencias. Desde ese enorme agujero abierto, afuera estaba el cielo nocturno frente a sus ojos.

“Fraxinus” es una aeronave cubierta por un Territorio Voluntario. Gracias a eso, no fueron lanzados por la diferencia de presión. Pero si esta destrucción continuaba, solo sería cuestión de tiempo antes de que Shido y las demás sean lanzadas de la nave. Tenía que hacerlo tan pronto como fuese posible…

—…

Y entonces, Shido tomó un profundo aliento.

La razón era simple. Una idea surgió en su mente.

—… Mukuro.

Tras vacilar por un momento, Shido llamó a la chica más cercana a él mientras continuaba viendo a “Beast”.

Y, Shido apartó gentilmente la mano puesta en él como para protegerlo.

—¿Mun…? ¿Qué sucede, Nushi-sama?

Mientras el sonido de la alarma continuaba, Mukuro se sintió un poco inquieta. Mientras seguía con su postura baja, Shido continuó mientras dirigía todo su esfuerzo a sus pies.

—… ¡Encargate… del resto!

—¿¡Qué…!?

Mientras Mukuro fue dejada en pánico, Shido pateó el suelo de la sala de conferencias.

Y luego, tacleando el cuerpo de Beast, saltó por el agujero en el suelo junto a Beast.

Si Beast hubiese estado seriamente preparada, hubiera sido imposible inmovilizarla con una tacleada. Pero, tal vez debido a que su campo de visión estaba siendo inhibido por el humo, se relajó como si aceptara el abrazo de Shido.

—Lo siento, pero no puedo dejar que sigas destruyendo la nave por un rato,

¡te acompañaré en una caminata por el cielo…!

—Aa… aa…

—… ¡Nushi…!

Sintió una voz llamándolo desde arriba, pero el sonido fue ahogado por la terrible presión del viento y no pudo oír el final de esas palabras.

Mientras su conciencia empezaba a titubear, colocó toda su fuerza en sus manos para liberar a Beast.

… Esta era la simple y clara idea de Shido. Un método para mantener a Beast alejada de la nave.

Sin embargo, Shido no estaba planeando morir. Es por eso que antes de lanzarse, Shido dejó esas palabras.

Así es… “encárgate del resto”.

—… ¡Imōtogo! ¡Maria! ¡Nushi-sama ha descendido junto con Beast! Mukuro, mientras evitaba que los gritos se salieran de su garganta,

rápidamente le comunicó la situación a Kotori y Maria.

Su cabeza aún seguía consternada. El impacto de Shido desapareciendo justo enfrente de ella tuvo un gran peso en el corazón de Mukuro.

Pero no se podía desperdiciar un solo segundo. El rugido, alarma y el denso humo habían inmovilizado a todas. Solo Mukuro, quien estaba justo al lado de Shido, podía entender precisamente la situación actual. Era su misión, como la persona a quien Shido le confió esas palabras, de comunicar la situación a todas lo más rápido posible.

—¿¡Qué fue eso!?

—Entendido. Expansión del Territorio Voluntario. Moviéndose para proteger al objetivo.

Las voces de Kotori y Maria resonaron en respuesta a las palabras de Mukuro.

Luego, después de un segundo, Maria volvió a hablar en voz baja.

—… La captura fue rota por la resistencia de Beast, pero la protección temporal de Shido vía el Territorio Voluntario fue exitosa. La duración del efecto es de alrededor de 360 segundos. Será capaz de soportar el impacto de la caída. Pero no puedo garantizar nada después de eso.

—No, está bien. Buen trabajo, Maria… Y, gracias, Mukuro, si no fuese por ti, eso pudo haber tenido retraso.

—No… no hice mucho.

En lugar de humildad, los verdaderos sentimientos de Mukuro estaban marcados por arrepentimiento. Mientras apretaba sus dientes y fruncía el ceño sin nada que pudiera hacer.

Así es, eso era lo más que podía hacer Mukuro.

Si se tuviera el poder de los Espíritus, hubiera podido ayudar directamente a Shido… no, antes de eso, no hubiera dejado que Shido usara tales medidas peligrosas.

—…

Con ese pensamiento, una pregunta se alzó en su cabeza.

El Espíritu misterioso, Beast no debería de existir. Entró en Fraxinus al abrir un ‘agujero’ en el espacio.

Si, a pesar de la forma, era el mismo poder que el Ángel de la llave, Michael que Mukuro portó una vez.

¿Tiene algo que ver con Mukuro ese Espíritu? Si algo relacionado a Mukuro arrinconó a Shido… Considerando eso, Mukuro sintió que su respiración se volvía más agitada.

Y…

—¡…!

Por segunda vez, Mukuro sintió su respiración atorándose.

Como para bloquear los pensamientos de Mukuro, una nueva alarma sonó.

—¿¡Qué!?

La garganta de Kotori tembló mientras alzaba su rostro. Luego, Maria respondió mientras alzaba sus cejas.

—… Malas noticias. Con Beast alborotándose en el aire, la localización de su caída predicha será significativamente alejada de Ciudad Tenguu. En este caso, Beast caerá en una zona no evacuada.

—Qué…

Los ojos de Kotori se ampliaron al oír lo que Maria dijo. Pero luego, sacudió inmediatamente su cabeza para acomodar sus pensamientos y dar instrucciones.

—… Eyecten todos los “Yggdrafolium”. Antes de que se acabe la protección, ¡cubran a Shido con otro Territorio Voluntario! Después de eso, ¡formen una barrera alrededor de Shido y Beast! ¡Eso nos dará tiempo para que la evacuación de los ciudadanos termine!

—Entendido… es lo que quisiera decir, pero es imposible.

—¿A qué te refieres?

Kotori alzó sus cejas ante la inesperada respuesta de Maria.

Luego, tendió su mano para proyectar una imagen una silueta simplificada de Fraxinus, había marcas rojas en todos lados.

—Los sensores y controles fueron dañados severamente por los ataques de Beast. Controlar el Yggdrafolium de manera remota será actualmente difícil.

—¡…!

—¿¡Qué…!?

En el momento que Kotori se ahogó, Mukuro involuntariamente mostró una mirada sombría.

Así es. La inhabilidad de usar el Yggdrafolium indicaba que, en menos de seis minutos a partir de ahora, no habría barreras para proteger a Shido de la rampante Beast.

Y lo que eso provocaría…

Mukuro enredó su recortado cabello con sus dedos, apretándolo fuertemente para suprimir la imaginación del peor caso posible llegando a su pecho.