Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Short Stories

Capítulo 4: El Encuentro Milagroso Y La Aventura Fantasmagórica

Parte 7

Hajime se despertó con el sonido de las olas golpeando su submarino. Abrió los ojos y vio que estaba tendido en la cubierta.

“¿Eh? ¿Cuándo me he dormido?”

Mientras murmuraba eso, se dio cuenta de que había algo pesado encima de él. Mirando hacia abajo, vio a Myu y Remia descansando sobre su pecho, sus manos sujetaban las suyas. Se giró a ambos lados y vio que el resto de su grupo también estaba a su lado, durmiendo pacíficamente.

“¿Qué demonios está pasando…?”

Sus recuerdos eran borrosos. ¿Cuándo se durmió aquí… y por qué? Recordó que habían salido a buscar el Océano Brillante, entonces…

“Mmm…”

Yue abrió lentamente los ojos a su lado. Un segundo después, también lo hicieron Myu y las demás personas.

“¿Nos hemos dormido todos o algo así?” Hajime murmuró para sí mismo.

Pero eso no parecía correcto. Mirando su reloj, se dio cuenta de que casi no había pasado tiempo desde lo último que recordaba. Hajime se sentó lentamente, con cuidado de no empujar a Remia o Myu.

“¿Están bien? ¿Alguien más siente que algo está mal?”

“¿Tú también lo sientes, Hajime?” Yue respondió en voz baja.

“Mrrr… Yo también me siento rara. Como si hubiéramos olvidado algo importante.”

Myu abrazó a Hajime, pareciendo extrañamente solitaria. Parecía que nadie tenía recuerdos de lo que había pasado después de que se durmieran.

“Por cierto, Hajime-kun… ¿Por qué estás abrazando a Remia-san?”

“¿¡Eh!?

Remia miró hacia abajo en estado de shock. Al darse cuenta de que estaba descansando en los brazos de Hajime, se alejó rápidamente. Esta vez no hubo una sonrisa amable o un “Oh Dios”. De hecho, se estaba sonrojando.

¿A qué se debe esa reacción…? Kaori y las demás pensaron de forma sospechosa. “No tengo ni idea. Los estaba abrazando cuando me desperté”.

Incluso Hajime estaba confundido, lo cual era bastante raro. El cambio repentino de Remia, combinado con el hecho de que los recuerdos de todos eran confusos, significaba que algo debía haber pasado, sólo que no sabían qué. Yue y las demás lamentaron su confusión.

“¡Ah! ¡Maestro, mire!”

Tío de repente señaló el océano por sorpresa. Mirando hacia arriba, todos vieron que el mar estaba brillante. Hasta donde podían ver, el brillo se extendía sin cesar. Como mínimo, llegaba hasta el horizonte.

“¿Qué demonios está pasando?”

Primero sus recuerdos, ahora esto. En circunstancias normales, Hajime habría sido extremadamente cauteloso en este momento. Pero por alguna razón, Hajime y las demás no estaban preocupados en absoluto. Era como si supieran que no había ningún peligro.

Montones de luz se elevaron del brillante mar, ascendiendo a los cielos. Era como si Hajime y los demás hubieran sido transportados a un mar de estrellas doradas.

“¡Mira, papá! ¡Es un pez!”

Myu señalaba un punto donde las motas de luz se habían reunido para crear la forma brillante de un pequeño pez. Nadaba libremente a través del mar y el cielo, separando la luz dorada de su estela.

Más criaturas marinas comenzaron a formarse y en segundos el mar estaba lleno de vida brillante, flotando a través del aire y el agua. Cada vez que uno de ellos tocaba a Hajime u a las demás, estallaba en partículas de luz y luego se reformaba a corta distancia. Era un espectáculo tan maravilloso que todos sólo podían mirar en un silencio aturdidor.

Finalmente, una ballena gigante emergió de las profundidades del brillante mar.

“¡Vwoooooooooooooooooooooooooon!”

Su cálida luz recordaba al terreno soleado de un bosque a principios de la primavera. Todos sabían instintivamente que estarían a salvo en su suave abrazo. Aunque no decía nada, todos podían decir que la ballena de luz les estaba inmensamente agradecida.

“El brillante océano…” Hajime murmuró en voz baja.

Nadie contradijo su afirmación. Mientras Hajime miraba fijamente a la enorme ballena de cien metros de largo y su séquito de criaturas marinas, Hajime se dio cuenta de repente de algo.

“¿Soy sólo yo, o de repente tenemos más maná que antes?”

“¿Mmm? Ah, tienes razón…” Yue murmuró.

Shea, Tio y Kaori también asintieron. De repente Myu los miró y dijo, “Esa es su forma de dar las gracias”.

Un segundo después, Myu parpadeó confundida, sin saber por qué había dicho eso.

“Umm, creo que también conozco una nueva forma de usar mi Visión Futura ahora”, dijo Shea tímidamente.

“Mmm… Ahora que lo pienso, entiendo cómo controlar mejor el maná.” Hajime cerró los ojos por un segundo, analizando su estado actual.

“Maldita sea… Siento que acabo de nivelar mis habilidades de Sinergista, también. Apuesto a que ahora puedo terminar mi dirigible y mi láser.”

¿¡Qué demonios pasó mientras dormíamos!? Hajime no entendió nada de eso. Pero, aunque nada de esto tenía sentido…

“¡Pero se siente como si algo realmente bueno hubiera sucedido! ¡Como si hubiéramos conocido a un montón de personas realmente geniales!” Myu gritó felizmente. Hajime y las demás intercambiaron miradas y luego sonrieron de acuerdo entre ellos.

***

“¡O-kun! ¡Nacchan! ¡Meru-nee! ¡No sé lo que pasó, pero me siento muy feliz de repente!”

“Sí, sé lo que quieres decir. Siento que tengo un discípulo muy descarado”.

“En efecto, me siento bien”.

“Siento como si hubiera conocido a un nuevo ángel”.

En un pasado lejano, un grupo de cuatro personas estaban en el mismo lugar, viendo exactamente la misma escena. Por supuesto, Hajime y las demás no tenían forma de saberlo. Pero no era necesario, así que estaba bien.

***

Aunque Hajime encontraba curiosa su total falta de curiosidad sobre sus recuerdos perdidos, su atención se centraba actualmente en el resplandeciente mar. La ballena gigante lanzó otro grito de agradecimiento y luego les dio la espalda. Se zambulló en el océano, como lo haría una ballena real. El agua resplandeciente se elevó en un pilar gigante cuando la ballena la desplazó y las resplandecientes criaturas marinas bailaron alrededor del lugar donde la ballena se había sumergido.

“¡Oh sí, papá! ¡Tenemos que pedir un deseo!” Myu gritó cuando de repente recordó lo que la leyenda había dicho.

“Aquellos que se encuentren con el Océano Brillante tendrán su deseo concedido.” Hajime y los demás asintieron con la cabeza y todos en silencio hicieron sus deseos. “¡Deseo estar junto a papá para siempre!” Sólo Myu expresó su deseo en voz alta, y cuando Hajime lo oyó, de repente sintió ganas de pedir otro deseo aparte de pedir encontrar un camino a casa.

Por favor, enséñame lo que debo decirle a Myu cuando tenga que irme.

 Al final, el codicioso segundo deseo de Hajime fue concedido después de muchas noches de insomnio pasadas desgarrándose los sesos y el deseo de Myu fue concedido en forma de promesa por parte de Hajime.