Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Short Stories

Capítulo 2: Recopilación De La Academia De Magia De Arifureta

Parte 4: Elecciones De Tristeza

“No puedo soportarlo más. Renuncio. Alguien más puede ser la presidenta del consejo estudiantil”.

A pesar de lo suave que lo dijo, las palabras se transmitieron a través de la sala del consejo estudiantil.

Los otros miembros del consejo estudiantil y su consejero se endurecieron. Un silencio antinatural siguió a esa proclamación. Urgido por las penetrantes miradas de sus compañeros del consejo, el vicepresidente Kouki Amanogawa vaciló en llamar a la presidenta.

“¿Shizuku? ¿Qué es lo que pasa? ¿Ha pasado algo?”

El rostro de Shizuku estaba oculto por su flequillo, y su expresión era ilegible.

“¿Quieres saber si algo ha pasado?”

Kouki se acobardó ante el tono estruendoso de su voz. La secretaria, Eri Nakamura, la contadora, Suzu Taniguchi y la asesora, Aiko Hatayama, también se estremecieron. Shizuku se limitó a indicar la pila de documentos en su escritorio.

“¿Por qué no me dices lo que no pasó? Este montón de papeles son todas las quejas que la gente ha presentado contra la academia. Ningún otro presidente del consejo estudiantil en la historia de esta academia ha tenido que lidiar con tantas. Esta pila de papeles son todas las órdenes para reparar, reemplazar y fortalecer las instalaciones de la escuela que han sido destruidas. Ese montón de papeles de ahí son los formularios de pedido de todos los bienes que fueron tomados sin permiso durante los eventos de la academia y necesitan ser reemplazados. Finalmente, esa pila de papeles de ahí son los recibos de todos los eventos que hemos celebrado. Peor aún, los clubes de fans de ciertos profesores y estudiantes han crecido tanto que su presupuesto es mayor que el de los clubes deportivos. Oh, y casi lo olvido. ¿Ves esto? Esta es una carta que un estudiante envió. Pregunta cómo puede robar a Yue-sensei de Nagumo. Aparentemente si no respondemos, va a bombardear la escuela. Hay cientos más como esa, docenas para todas las chicas que rodean Nagumo. Ufufu, debo decir que nuestros estudiantes son ciertamente maravillosos jóvenes adultos, ¿no estás de acuerdo? Fufufufufufufufufufu.”

Suzu y Eri se encogieron y se abrazaron mientras Shizuku hablaba de sus problemas uno tras otro. Aiko cayó al suelo cuando escuchó la risa trastornada de Shizuku.

“C-Cálmate, Shizuku. Estoy seguro que… ¡Estoy seguro de que todo estará bien! Estamos aquí por ti. Saldremos de esto de alguna manera…”

“¿De alguna manera? ¿Quieres decir que me harás trabajar más, verdad? Ufufu, Kouki, realmente necesitas mejorar en contar chistes… Dilo otra vez y te mataré.”

“Hiii”.

Kouki se desmoronó. Nadie podría culparlo. Shizuku parecía estar lista para matar a cualquiera que mirara en su dirección. El estrés acumulado por la gestión del consejo estudiantil finalmente la había alcanzado. Sin embargo, Shizuku era, sobre todo, razonable. Cuando vio a sus amigos desviar su mirada se dio cuenta de que no había sido razonable. Aclaró su garganta y trató de calmarse…

Antes de que pudiera decir algo, la puerta se abrió. El jefe del comité de moralidad pública, Ryutarou Sakagami entró, con un montón de papeles en sus manos.

“Hey, Shizuku. Yue-sensei y los otros han volado la escuela otra vez. Aquí están todas las quejas y…”

“Los mataré”.

Con esa ominosa proclamación, Shizuku tomó su katana y se dirigió a la puerta. Todos los presentes sabían que ella lo haría de verdad.

“¡Detente, Shizuku!”

“Cálmate, Shizushizu.”

“¡Alguien llame a una sanadora! ¡Necesitamos a alguien que pueda curar los corazones rotos!”

“¡Sakagami-kun! ¡Defiende esa puerta como si tu vida dependiera de ello! No podemos dejar que Yaegashi-san salga mientras se encuentra así.”

Kouki trató de sujetar los brazos de Shizuku detrás de su espalda mientras Suzu y Eri la sostenían. Aiko se aferró al brazo de Shizuku que sujetaba la espada para salvar su vida. Sudando profusamente, Ryutarou estaba listo para dar su vida con tal de detener a la presidenta del consejo estudiantil.

“Hmph, déjame ir. Déjenme ir, dije. ¡No estaré satisfecha hasta que los haya matado al menos una vez! ¡Necesitan probar mi dolor!”

“¡No puedes matar a alguien más de una vez! ¡Además, estarán muertos, así que no podrán saborear tu dolor!”

Kouki tenía toda la razón. Sin embargo, Shizuku realmente había alcanzado sus límites. Cuidando de Yue y las peleas de los demás y luego cuidando de los disturbios que cada club de fans de las chicas causó después de que esas peleas la dejaran completamente exhausta. Los sonidos de las peleas llenaron la sala del consejo estudiantil por un tiempo. Finalmente, el polvo se asentó y Shizuku permaneció de pie en medio de un mar de cadáveres. Con sus enemigos derrotados, Shizuku declaró, “Las elecciones para presidente del consejo estudiantil están abiertas”.

Traducción: “¡Estoy harta de lidiar con esto! ¡Alguien más puede manejar estos problemas ahora!”

Kouki trató de convencerla, pero Shizuku se negó a escuchar. En el lapso de unos días,

ya había organizado las elecciones especiales para decidir el próximo presidente. Fue en momentos como este cuando sus habilidades organizativas sin precedentes brillaron. Los candidatos para el próximo presidente del consejo estudiantil eran los siguientes:

Candita 1 – Yue ‘Si soy elegida presidenta, prometo hacer una habitación que todos los estudiantes puedan usar para tener sexo.’

No hace falta decir que las expresiones de los estudiantes se endurecieron cuando se enteraron de que una profesora de todas las personas se presentaba a la presidencia del consejo estudiantil.

Candidato 2 – Shea Haulia ‘¡Quiero hacer un gobierno de orejas de conejo, por orejas de conejo, para orejas de conejo! En otras palabras, ¡convertir el gobierno en el nido de amor de Hajime-san y yo!”

No hace falta decir que todos los estudiantes replicaron que nadie votaría por alguien que claramente planeaba usar el consejo estudiantil para su propio beneficio.

Candidata 3 – Kaori Shirasaki ‘¡Ha-haré lo mejor que pueda en lugar de Shizuku-chan! Prometo abrir un buzón de sugerencias donde todos puedan traerme sus opiniones y peticiones. ¡Sé que con la ayuda de Hajime-kun los dos seremos capaces de hacer de la academia un lugar mejor!”

Parecía que Kaori planeaba tener sólo a Hajime en su consejo estudiantil. No hace falta decir que todos los estudiantes suspiraban porque podían ver fácilmente lo que ella buscaba.

Candidata 4 – Presidenta dragona pervertida ‘Si soy elegida, haré al Maes- Ejem, ¡quiero decir a Hajime Nagumo el presidente del consejo estudiantil! ¡Después de eso, utilizaré mis poderes como presidenta para convertir la sala del consejo estudiantil en mi oficina! Nadie está autorizado a… ¡Ah, hey! ¡Deja de tirarme cosas! ¿Qu-Quién hizo eso? ¿Y quién me está disparando magia de nivel avanzado?’

No hace falta decir que todos los estudiantes le lanzaron insultos. “¡Vuelve a tu cueva, dragona pervertida!”

Y no hace falta decir que Tio encontró dichos insultos muy excitantes.

Al final, la elección resultó en que Shizuku Yaegashi fuera elegida para servir por otro período. Debido a las reglas especiales de la elección que ella misma había establecido, no tenía derecho a rechazar el nombramiento. Cuando Shizuku vio los resultados, hizo una rabieta.

“Nooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo. Es suficiente, ¡abandono todo estooooo!”

Después de su arrebato infantil, trató de huir de la escuela.

“¡La presidenta está tratando de huir! ¡Todos, persíganla!”

“¡Sin ella, esta escuela está condenada! ¡Capturen a la presidenta, por el bien de nuestro futuro!”

“¡Chicos, rodeenla! ¡Tenemos que asegurarnos de que no pueda escapar!”

“¡Este es un anuncio para todas las hermanas pequeñas de esta escuela! ¡Lancen el escuadrón disciplinario de Oneee-Sama! ¡Habrá un premio esperando a la que pueda consolarla! Además, se le permite aprovechar el caos y tocarla.”

No hace falta decir que todo el cuerpo estudiantil persiguió a Shizuku. Su fervor era seguramente una señal de lo mucho que los estudiantes la querían.

Sin embargo, a pesar de sus berrinches infantiles, Shizuku seguía siendo una mujer astuta. Continuó evadiendo a sus perseguidores durante tres días y tres noches. Finalmente, después de un esfuerzo concentrado combinando todos los talentos del cuerpo estudiantil, la capturaron. Su gran escape fue tan impresionante que los líderes de otros países aplaudieron sus habilidades. Desafortunadamente, eso también significó que su estatus como presidenta del consejo estudiantil fue grabado en piedra.

“Juro que algún día los mataré a todos”, murmuró para sí misma Shizuku Yaegashi mientras cuidaba de un dolor de cabeza y empezaba a trabajar en el montón de papeleo de hoy. Ella era realmente la trabajadora más dura de esta academia.