Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 9

Capítulo 7: Banquete, Agitación Del Día 2

Parte 4

“¡Todos los de abajo! Les ayudaré, así que siéntanse libres de dejar pasar a cualquier oponente que no puedas manejar. ¡Augendae Corporis!” Rio tomó posición a la mitad de las escaleras y llamó a los caballeros de abajo. Luego cantó el hechizo para activar el brazalete que contiene hechicería de fortalecimiento físico. Sin embargo, eso fue simplemente camuflaje que canceló tan pronto como se activó, ya que en cambio fortaleció su cuerpo con artes espirituales.

“Ah, el héroe rumoreado. Eso es algo de confianza, ¡pero tomaremos tu palabra! ¡Ustedes, no mueran empujándose! ¡Solo toma tantos como puedas manejar!” El caballero mejor clasificado por las escaleras ordenó a los otros caballeros.

Si murieran por nada, simplemente pasarían la carga a otra persona. El hecho de que no les dijo que intentaran morir era prueba de que tenía una cabeza racional sobre sus hombros.

“¡Sí señor!” Los otros caballeros prepararon sus armas y se enfrentaron con los atacantes al pie de la escalera.

“Seis de ustedes, ¡deténganlos!” Seis de los asaltantes se movieron hacia los caballeros al pie de la escalera, mientras que los otros ocho corrieron escaleras arriba. Rio se interpuso en su camino.

“Permíteme ayudarte en lo poco que pueda. Esto debería reducir un poco los números. ¡No te muevas!” Shigekura Rui tomó su arco divino en la mano y se paró en las escaleras detrás de Río. Preparó su arco, apuntó y disparó una flecha relámpago.

La flecha del rayo atravesó a uno de los atacantes en la espalda. “¡¿Guah?!” Lo enviaron volando, una tremenda corriente eléctrica atraviesa su cuerpo, lo que lo vuelve incapaz de pelear al instante.

Rui procedió a disparar una flecha más y atravesó a otro asaltante. Pero, en ese punto, los atacantes ya se habían acercado a Río, y la batalla en la escalera se estaba volviendo desordenada. Determinando que el disparo sería imprudente, bajó el arco.

“… ¡Te dejo el resto!” Rui gritó, retrocediendo.

“Entendido”, respondió Rio, luego cargó por las escaleras. Él  usó el impulso hacia abajo para acercarse al atacante en la delantera.

“Hah, ah… ¡¿Guh?!” El atacante reaccionó a los movimientos de Río y sacó su daga. Sin embargo, Rio evitó hábilmente la mano que empuñaba un cuchillo y arrojó la daga a la distancia. Luego, aterrizó su puño desnudo en el plexo solar del enemigo, dejándolo inconsciente.

Ese es uno. Rio miró a los atacantes con cautela. Luego, por un breve instante, los movimientos de los atacantes vacilaron. Rio apuntó para ese momento y se acercó a ellos desde un enfoque diagonal.

“¡¿Ah?!” Uno de los atacantes sintió el avance de Rio y reflejó su daga en su torso. Sin embargo, Rio había leído el camino de la trayectoria y rápidamente agarró su mano, sujetándola con una poderosa rodilla al estómago. El grito del atacante sonó más como un jadeo por aire.

Dos abajo Rio se acercó a un atacante que había estado tratando de pasar junto a él mientras estaba ocupado. Él envió un fuerte golpe de su palma a su costado.

“¿Gah?” El cuerpo del atacante se dobló como una hoja, enviándolo al suelo antes de que otro asaltante intentara correr.

Tres.

“¡Tch!” De improviso, el asaltante saltó sobre el cuerpo de su aliado. Pero en ese momento, Rio ya había saltado corriendo, envuelto por delante del atacante, y le dio una patada en la cara cuando estaba a punto de aterrizar, empujándolo hacia abajo por las escaleras. “…” La máscara del atacante se desmoronó mientras bajaba las escaleras, aterrizando en completo silencio.

Y cuatro. Dos más para ir, contó con calma mientras aterrizaba en la escalera.

“Ugh…” Quedaban dos atacantes. Tener a cuatro de sus camaradas terminados en diez segundos los hizo detenerse. Podían sentir que sería imposible forzar su camino.

“Whoa…” Satsuki, que estaba viendo a Rio pelear desde lo alto de las escaleras, se sintió cautivada por su tremenda capacidad de lucha. Lo mismo ocurrió con Miharu, Flora y Christina.

“Los otros caballeros tienen las manos llenas peleando uno contra uno, y sin embargo…” Charlotte observó la pelea de Río debajo con los ojos muy abiertos.

“¡Arquero!” Los dos asaltantes a los que se enfrentaba Río se movieron. Uno de ellos gritó en voz alta, cargando hacia Río en un movimiento de sacrificio.

…¿Arquero? Al instante, Rio se sintió sospechoso. Ninguno de los dos tenía un arco equipado.

¿Fue un farol?  ¿Un arma escondida? No… ¿Se referían a Rui? Rio enumeró una variedad de posibilidades mientras se preparaba, observando a los atacantes cada movimiento mientras se colocaban en una línea.

“¡Ngh!” El asaltante en el frente acusó de desesperación, empujando su mano derecha empuñando una daga hacia adelante. No se estaba enfocando en apuntar a ninguna parte, era simplemente un impulso centrado en la velocidad. Rio paró tranquilamente la mano del asaltante que sostenía la daga. O eso pensó, cuando…

“¡Haaah!” Puñalada, puñalada, puñalada. El atacante intentó un ataque rápido de empujes, en lo que realmente fue un ataque desesperado. Sin embargo, Rio pudo ver a través de todo, manejando con precisión cada ataque.

El de atrás no se mueve… Si es así, me ocuparé de esto primero, determinó Rio en un instante y movió su cuerpo ligeramente hacia un lado. El fuerte empuje del atacante cortó el aire a un pelo del torso de Río.

Rio procedió a rodear el flanco del atacante y usó su mano izquierda para arrebatar la daga. Después de derribar limpiamente a su oponente pateando sus pies debajo de él, el atacante flotó en el aire por un momento.

Luego, Rio conectó un fuerte golpe con la espalda al abdomen del atacante.

“¡Gah…!” El cuerpo del asaltante golpeó el suelo con gran fuerza, dejándolo inconsciente con un gemido.

“¡Photon Projectilis!” El otro asaltante que esperaba detrás del primero leyó los movimientos de Rio y apuntó con su dedo antes de cantar un hechizo.

Arquero… así que significaron un ataque de largo alcance. Rio sostuvo la daga que le robó al atacante en la lista. En el momento siguiente, varias balas de luz mágica llegaron disparando hacia Río.

“¡Hah!” Rio cerró todas las balas de luz a su vista y vertió esencia mágica en la daga en su mano. Elevó su fuerza con artes espirituales, luego la giró más rápido de lo que el ojo podía ver, cortando las balas del asaltante una tras otra, dispersándolas.

“¡¿Qué…?!” Tanto el atacante que disparó las balas de luz como los que presenciaron la escena quedaron sin palabras. Mientras tanto, Rio simplemente ajustó su agarre de la daga a una contraatacada y cargó contra el atacante congelado.

“Guh…” Usando el pomo de la daga, golpeó al atacante en el plexo solar. El atacante se agarró el estómago mientras se derrumbaba.

Como resultado, el único que permaneció consciente en las escaleras fue Río.

Los refuerzos llegaron corriendo escaleras abajo y capturaron a todos los atacantes. En cuanto a lo de arriba… Rio miró hacia abajo y confirmó que los seis atacantes al pie de las escaleras estaban siendo detenidos. Luego, se movió para subir las escaleras.

Los refuerzos entraron por la puerta. La pelea de arriba terminó, la voz de Aishia resonó en la cabeza de Río. Una vez que confirmó que la batalla había terminado por completo, Rio decidió cumplir con las reglas del banquete y desechó la daga en su mano, efectivamente dejando las armas. Cayó al suelo con estrépito.

“¡Oooh!” La realeza y la nobleza en el pasillo que habían estado mirando a Río vitorearon. Esos vítores pronto llegaron a cada extremo del pasillo.

Dios mío, qué espectáculo para la vista, como siempre. No esperaba que todas estas tropas tuvieran una oportunidad real, pero él realmente fue el centro de atención. Reiss observó a Río con admiración de la multitud de invitados que se refugiaron en la parte trasera del espacio del primer piso.

“… Oye, Reiss”. Dijo Sylvie.

“¿Oh? Mi nombre es Jean Bernard, princesa Sylvie.” Reiss se encogió de hombros, sonriendo.

“El ataque justo ahora… no me digas…” Sylvie miró a Reiss con sospecha. “¿Le dirá qué?” Reiss ladeó la cabeza con indiferencia.

“…Tengo algo que discutir contigo más tarde. No intentes sacar nada extraño, ¿entendido?” Sylvie parecía darse cuenta de las personas que la rodeaban, mientras amenazaba a Reiss en voz baja.

“No estoy seguro de lo que has entendido mal aquí, pero ¿sospechas que estoy haciendo algo?” Reiss respondió distante.

“Silencio. Si hiciste lo que sospecho que haces, puedes arrastrar nuestro reino a una disputa internacional. Me contarás todo más tarde”, presionó Sylvie en un tono exigente.

“Bueno, supongo que, después de todo, tomé prestada a tu hermanita como señal de nuestra amistad. Podría entretenerte en alguna discusión como un retorno para eso,” Reiss se rio entre dientes con una sonrisa.

“Ngh…”

“Oh, qué miedo”. Cuando el resplandor en los ojos de Sylvie se intensificó, Reiss se encogió de hombros.

Mientras tanto, Francois estaba apresurando a los caballeros a transportar a los asaltantes inconscientes. No quería que estuvieran a la vista de los invitados durante demasiado tiempo. “Date prisa. Descubre quiénes son sin importar qué. Comienza la investigación dentro del edificio también.

Los caballeros rápidamente corrieron por el pasillo, llevando a los atacantes detenidos e inconscientes afuera.

Después de que Francois había dado órdenes, se volvió hacia Rio y Rui para agradecerles. “Haruto, has hecho una gran obra. Tu habilidad para repeler a los atacantes que subían por las escaleras fue realmente espléndida. Sir Rui, gracias por hacer retroceder al enemigo también.”

“Simplemente disparé dos flechas. No importa lo que pienses, Haruto contribuyó más. De hecho, estoy seguro de que se las hubiera arreglado perfectamente sin mí”, dijo Rui, pasando el logro a Río.

“Los invitados estarán en espera dentro del pasillo hasta que podamos confirmar que el área está asegurada. Pero me gustaría anunciar oficialmente sus acciones meritorias para elevar la moral. ¿Cooperarás con esto?” Francois preguntó, queriendo hábilmente aprovechar sus hazañas militares.

“Con alegría.”

“Por supuesto.” Rui y Rio acordaron fácilmente. Los esfuerzos de Rio por la escalera habían sido presenciados por todos los nobles en el pasillo, y muchos de ellos también habían visto a Rui usar sus brazos divinos por un breve momento. Fue el refuerzo moral perfecto.

Como resultado, además del hecho de que nadie más que los asaltantes habían muerto en el ataque, Rio y Rui recibieron muchos elogios de los invitados.

Exactamente según lo planeado. Ahora, para eliminar la evidencia. Reiss miró a Rio y Rui en el piso superior y casualmente buscó en el bolsillo de su pecho, aplastando las pequeñas gemas allí. Al mismo tiempo, los asaltantes que habían sido llevados afuera comenzaron a retorcerse de dolor, sus cuerpos se convulsionaron al morir. Sin embargo, en ese punto, nadie dentro del lugar estaba al tanto.

Posteriormente, se confirmó la seguridad del área alrededor del lugar y se cerraron las cortinas en la segunda noche del banquete, sin aviso oficial de la muerte de los asaltantes.