Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 9

Capítulo 2: A La Capital, Galtuuk

Parte 3

Después de la fiesta del té con Liselotte, Rio y Miharu tuvieron algo de tiempo libre hasta que llegaron a la capital de Galtuuk. En lugar de dirigirse a la habitación de invitados que les dieron, Rio y Miharu decidieron aprender sobre el barco encantado en el que se encontraban. Primero, Aria les mostró todas las instalaciones dentro de la nave, luego se dirigió a la cubierta.

“Esto concluye el recorrido del barco. Desde aquí, puedes disfrutar de la vista del cielo tanto como quieras. Si necesita algo, pregúntele a uno de los asistentes cercanos. Me disculparé por ahora. Aria se inclinó respetuosamente y partió, dejando a Rio y Miharu solos en la cubierta. No había nadie más alrededor, por lo que era obvio que estaban solos juntos. Miharu también se había quedado en silencio.

“¿Vamos a dar una vuelta alrededor de la cubierta por ahora?” Rio sugirió.

“…Okay.” La voz de Miharu era ligeramente rígida por los nervios, pero asintió con resolución. Cuando Rio comenzó a caminar, Miharu mantuvo una posición algo diagonal detrás de él.

Era tarde — aunque era un poco temprano para que el sol comenzara a ponerse, era demasiado tarde para llamarlo a la hora del almuerzo. El clima era agradable y la luz del sol que brillaba en el barco encantado dispersaba sus rayos sobre la cubierta. Mientras la nave volaba a una velocidad bastante rápida, el cuerpo de la embarcación estaba cubierto por una brujería especial de barrera contra el viento, haciendo que la brisa en la cubierta fuera bastante suave.

Mientras caminaban, Rio llamó a Aishia por telepatía. Aishia, ¿estás despierta ahora?

Sí, estoy despierta. ¿Qué pasa? ella respondió al instante. Su voz también debe haber llegado a Miharu, ya que su cuerpo se estremeció tan pronto como Rio llamó a Aishia. Para el registro, Rio y Miharu también podrían comunicarse telepáticamente a través de Aishia.

Nada en particular, pero no podemos hablar mucho cuando hay otras personas cerca. Quería aprovechar esta oportunidad para hablar, explicó Rio. Parte de la razón fue también porque se sintió un poco incómodo con solo Miharu, sin saber qué decir.

Gracias por todo, Aishia. Siempre soy un problema para ti, agregó Miharu, su tono preocupado.

Has estado en tu forma espiritual dentro de mí todo este tiempo. Espero que no haya sido demasiado aburrido… ¿verdad? Rio preguntó, preguntándose si ella estaría bien manteniéndose en su forma espiritual.

Sí, estoy bien. En todo caso, me siento más cómoda dentro de Haruto, respondió Aishia con su voz plana.

Me alegra escuchar eso, pero no dudes en hablar cuando quieras salir, dijo Rio con una sonrisa.

Entendido. Pero estoy bien por ahora. Ustedes dos deberían disfrutar de su paseo por el barco encantado, el paisaje es hermoso. Aishia parecía estar más interesada en ser considerada con los dos. Acababan de llegar a la proa del barco que daba al paisaje que tenían delante.

Rio de repente dejó de caminar. “… La vista desde este lugar es probablemente la mejor”, le dijo a Miharu mientras contemplaba la vasta tierra que se extendía bajo el cielo sin fin. Los valles se abrieron paso entre las altas montañas, los lagos salpicaban las áreas que no estaban cubiertas de campos y los ríos fluían a través de la superficie para pintar el suelo como un lienzo colorido. Tal era la belleza de la naturaleza.

“Sí es hermoso.” Miharu se paró al lado de Río y contempló el mismo paisaje, murmurando en voz baja.

“Se ve un poco diferente de cuando estoy volando por el aire con artes espirituales”, dijo Rio para llenar el silencio también.

“…Si. Es un poco extraño volar por el aire con los pies en el suelo. Normalmente soy transportado por alguien”. Miharu mostró un indicio de su sonrisa natural al recordar las veces en que fue cargada por Rio, Aishia y el espíritu contractual de Orphia, Ariel.

“Incluso la gente de este mundo rara vez tiene la oportunidad de montar barcos encantados, por lo que esta ha sido una experiencia valiosa”.

Miharu asintió con la cabeza. “Si. Muchas gracias, Haruto “, dijo con una sonrisa suave.

“… ¿Por qué me estas agradeciendo?” Rio preguntó, mirándola con curiosidad.

“Porque todo es gracias a ti… Esa es la razón por la que puedo estar aquí”.

“Eso es porque esto era lo que querías y decidías”, dijo Rio, un poco incómodo.

“Me concediste mi deseo, Haruto. No hubiera podido hacer nada sola. Ni siquiera hubiera podido pedir mi deseo en absoluto”, dijo Miharu con una sonrisa triste.

“Sin embargo, no fue solo a través de mis esfuerzos. Fue solo por tu propia popularidad”, se rio Rio.

Una mirada preocupada apareció en la cara de Miharu. “Hmm… Entonces déjame cambiar un poco mi fraseo. Gracias por ayudarme siempre, Haruto “, dijo con una sonrisa amable.

“De ningún modo. Te ayudaré tanto como pueda, así que no dudes en pedir lo que necesites”, dijo Rio con un gesto de vergüenza.

“¿Harás todo lo que te pida?” Miharu preguntó nerviosamente.

Rio esbozó una sonrisa llena de culpa. “…Si. Si es para ayudar a enviarte a ti y a los demás a la Tierra, haré cualquier cosa que esté a mi alcance”. Tuvo que sonreír porque… Que yo sepa, pasaron cuatro años sin que Miharu volviera a la Tierra.

De hecho, cuando Amakawa Haruto falleció, Miharu aún no había regresado a la Tierra. Después de cumplir veinte años y convertirse en adulto, Haruto se había encontrado con su madre solo una vez. Él le preguntó si ella todavía tenía o no alguna conexión con la familia de Miharu, y descubrió que todavía los conocía, pero Miharu aún estaba desaparecida.

Por cierto, cuando Haruto le preguntó cómo había estado su hermana pequeña Aki, su madre no le informó que Aki también estaba desaparecida. Ella solo le dijo que Aki estaba bien. No sabía lo que estaba pensando cuando ella no le informó de la desaparición de Aki, pero como resultado, Haruto no sabía que Aki había desaparecido hasta que se reunieron en este mundo.

En cualquier caso, Miharu había venido a este mundo después de la muerte de Haruto, y Haruto había renacido en este mundo con los recuerdos de su vida anterior antes de la llegada de Miharu. Rio aún no le había dicho esto. Si lo hiciera, inevitablemente tendría que contarle sobre su vida pasada.

Y, sin embargo, no podía permanecer en silencio sobre eso para siempre.

¿Miharu y los demás realmente podrían regresar a la Tierra? Incluso si pudieran encontrar un camino de regreso, ¿qué período de tiempo sería cuando llegaran? Teniendo en cuenta todas esas incertidumbres, era necesario que Miharu estuviera bien informado de la situación…

Por lo menos, después de reunirse con Satsuki y Takahisa y discutir sus planes para el futuro, necesitaría saberlo para entonces, pensó Rio.

Escuchar a Rio hablar de regresar a la Tierra causó que una expresión conflictiva apareciera en su rostro por unos momentos, pero fue clara con lo que estaba pensando poco después. “… No es que no quiera volver a la Tierra. Es solo que… también me gusta mi vida actual donde puedo estar con todos”.

“Ya veo. Eso es bueno, entonces.” Rio miraba a Miharu con ligera sorpresa.

“Ambos son muy importantes para mí. No quiero olvidarme de ninguno de ellos y fingir que nunca sucedieron… Es por eso que todavía quiero estar con todos. Yo también quiero estar contigo. Independientemente de regresar a la Tierra, etc., eso es lo que quiero en este momento”, declaró Miharu claramente.

Rio seguía mirando a Miharu con sorpresa, sintiendo como si estuviera actuando de manera más asertiva y audaz de lo habitual. “…Entiendo. Respetaré tus intenciones tanto como sea posible”, dijo nervioso.

“¿Promesa?” Miharu miró fijamente a la cara de Rio en confirmación. “Si.” Rio dio una sonrisa un poco ansiosa mientras respondía.

Miharu suspiro de alivio. “Muchas gracias. … Oh, podría haber dicho algo realmente vergonzoso en este momento”, dijo con una punzada de comprensión y se puso roja.

“No, en absoluto”, respondió Rio, luego dirigió su mirada a la persona que se acercaba.

“Umm, señor Haruto. ¿Tienes un momento?” La que apareció fue la asistente de aprendiz de Liselotte, Chloe.

“Está bien. ¿Lady Liselotte me ha convocado?” Rio preguntó, sacudiendo su cabeza de  una manera amigable. Estaba a punto de concluir  su conversación con Miharu.

“No. Esperaba que me permitieras un poco de tu tiempo para hablar, por mis propios motivos personales,” dijo Chloe respetuosamente.

“Tus motivos personales… ¿Sobre qué querías hablar?” Rio ladeó la cabeza y le preguntó a Chloe.

“Cuando Amande estaba siendo atacada por monstruos, no solo me salvaste a mí, sino también a mi madre y a mi hermana pequeña. Quería agradecerte adecuadamente por eso, así como disculparte por lo que sucedió cuando viniste a quedarte en la posada de mi familia hace varios años…” Chloe parecía estar nerviosa, mientras su voz sonaba bastante rígida.

“Dejando a un lado el ataque monstruoso sobre Amande por ahora, ¿qué quieres decir con lo que sucedió cuando me quedé en tu posada?” Rio preguntó con curiosidad.

“Umm, hablo de cuando ese grupo de aventureros ebrios le molestaron y tomaron una pelea con usted mientras comía,” explicó Chloe.

“Oh, ¿ese incidente? No tienes nada que ver con eso, ¿no?” Rio se rio a la ligera.

“Eso no es cierto. Tenía tanto miedo que no podía hacer nada. Incluso terminé teniendo miedo de ti, a pesar de que eras la víctima en ese momento, lo cual fue muy grosero de mi parte. Partiste a primera hora de la mañana siguiente, y siempre he querido disculparme desde entonces…

¡Lo siento mucho!” Cuanto más hablaba, más claramente Chloe parecía recordar sus emociones en ese momento. Ella inclinó la cabeza profundamente hacia Rio.

“Está bien, ya me había olvidado, así que no dejes que te moleste”, razonó Rio con una sonrisa amable.

“Pero todavía me siento tan mal por eso…” Chloe continuó inclinando la cabeza avergonzada.

Rio tuvo la impresión de que era muy sincera y decidió alentarla. “…Entiendo. Entonces aceptaré tus disculpas en serio. Ahora, por favor levante la cabeza”, dijo, con las cejas fruncidas.

“Si muchas gracias.” Chloe levantó lentamente la cabeza.

“Umm, ¿debería irme por un rato? Si tienen algo más que discutir…” Miharu, que los había estado observando en silencio hasta ahora, se ofreció a dejarlos solos por consideración. Tenía curiosidad sobre qué clase de pasado tenía Rio, pero pensó que sería incómodo para ella quedarse si tenían algo más que discutir.

“No, tengo que volver a trabajar ahora, ¡así que me disculpo aquí! ¡Por favor, ustedes dos deben continuar disfrutando de su tiempo en paz! Como invitada, Miharu no debería ser el inconveniente, concluyó Chloe. Ella sacudió la cabeza nerviosa y agradeció a Rio una vez más por su madre y su hermana antes de partir.