Seirei Gensouki: Konna Sekai de Deaeta Kimi ni

Volumen 7

Capítulo 7: Otro Ataque

Parte 7

Mientras tanto, Roanna usó magia ofensiva para hacer retroceder a los revenantes en la habitación.

“Photon Projectilis”.

Un círculo mágico apareció en sus manos, disparando balas de alta velocidad de energía mágica desde su centro. El objetivo de Roanna fue preciso y aterrizó directamente sobre los revenantes que se le acercaron desde lo más profundo de la habitación.

“¡¿Guh?!” Los revenantes que fueron alcanzados en el cuerpo por las balas se tambalearon.

“¡Aún hay más de dónde vino eso!” Roanna disparó sus balas a los reventantes que enfrentaban a los otros caballeros. Un disparo, dos disparos, tres: las balas los golpearon sin piedad.

“Ah. ¿Fui yo golpeado?” Mientras Alphonse sentía el impacto, lo sacudió con una inclinación de cabeza.

” ?! “ Pero Roanna no vaciló; ella continuó golpeando a los revenants con sus balas de fotones.

“¡Argh!” Una voz molesta mezclada con furia furiosa resonó por la habitación. Roanna se encogió y canceló sin pensar la magia que había activado.

“¿Ah?” La atención de los reverentes se dirigió hacia la voz enojada. El duque Huguenot se derrumbó en el suelo y los caballeros estaban exhaustos. Lo que dejaba –

“Sí, estoy enojado. Estoy realmente enojado ahora. Ser golpeado por esas sucias manos tuyas… repugnante.” De pie allí estaba Sakata Hiroaki.

“… Eres. Sorprendentemente duro. Te golpee. Con todo mí. Poder.” Alphonse entrecerró los ojos, impresionado.

“¡Muere, cucaracha!” Gritó Hiroaki, atacando al reverente desocupado cercano. El renacido rápidamente asumió una postura de guardia con ambos brazos en alto, pero…

“¡¿Guh?!” Su cuerpo estaba dividido limpiamente en dos con un bam.

“Esto es una mierda total. Solo muere ya”, dijo Hiroaki, moviéndose para cortar al siguiente revenant cercano en sucesión. Su velocidad superó la del pálido revenant de piel negra, permitiéndole exterminar al segundo con la misma facilidad.

“¡Uf, ahora estoy enojado!” La ira de Hiroaki no mostró signos de menguar. Miró a los reverentes con los ojos llenos de odio.

“¡¿S-Sir Hiroaki?!” Los ojos de Roanna se abrieron ante el repentino cambio en el joven.

“¡Muévete, Roanna! ¡Los mataré a todos!” Gritó Hiroaki, cargando hacia Alphonse. Roanna no pudo soportarlo y escapó a un lado de la habitación.

“¡Grarh!” Los restantes revenantes atacaron a Hiroaki desde ambos lados.

“¡Cállate!” Hiroaki balanceó su espada con una postura ridícula, cortando a los revenantes en un solo golpe. Su espada era excepcionalmente afilada.

“¡¿Qué?!” Los ojos de Alphonse se abrieron con asombro.

“¡Eres el próximo, bastardo! ¡Muere!” Hiroaki cargó contra Alphonse, el último que quedaba, y lanzó un gran golpe de su espada desde lejos. Entonces, una cantidad anormal de agua salió de la cuchilla.

“¡¿Guh?!” Alphonse dio un paso atrás reflexivamente, girando su cuerpo para evadir el ataque mientras se retiraba al corredor. Inmediatamente, un torrente de agua se disparó por el aire. La explosión de agua atravesó la pared de la mansión, volando hacia afuera.

“¡T-Tú!” A pesar de la furia enfurecida de Alphonse, continuó retirándose al corredor.

“¡Espera!” Hiroaki lo persiguió rápidamente por el pasillo, dejando a Roanna y los otros hombres heridos en la habitación. Una vez que Hiroaki saltó al corredor, sus ojos se clavaron en Alphonse en el espacio más estrecho. Se movió para lanzar otro ataque directo, pero…

“Dios”, dijo una voz plana.

“¡¿Ah?!” Hiroaki se volvió hacia la voz e instantáneamente recibió un fuerte golpe en el cuello. Su cabeza fue sacudida violentamente, haciéndolo desmayar en muy poco tiempo. Cayó al suelo pesadamente.

“T-Tu…” Los ojos de Alphonse se abrieron en estado de shock. De pie delante de él estaba Reiss. Los ojos agudos miraron a Hiroaki por debajo de su túnica.

“… Tú, afuera. Tu papel aquí ha terminado. Ve con los otros revenantes y gana tiempo para que Lucius huya de aquí” —ordenó Reiss fríamente a Alphonse.

“¿Qué? Pero…” Alphonse hizo que respondiera.

“Vete ya”, dijo Reiss con voz hueca, interrumpiendo cualquier refutación.

“M-Muy bien”.

“Bueno. También debe haber una presa interesante para ti afuera. Ahora, debo darme prisa”, dijo Reiss, saliendo de la escena rápidamente. Mientras tanto, Alphonse se dirigió fuera de las paredes a través del agujero que Hiroaki había abierto. Luego, un latido más tarde, Roanna asomó nerviosamente la cabeza fuera de la habitación.

“… ¡S-Sir Hiroaki!” Al darse cuenta de que Hiroaki se derrumbó en el piso del corredor, corrió rápidamente hacia él. Sin embargo, una vez que vio que estaba respirando, se dio cuenta de que estaba simplemente noqueado y suspiro de alivio.

Mientras tanto, Reiss estaba al acecho en la esquina del pasillo.

Quizás fue un error llamar a Lucius después de todo. Si bien sus habilidades son excepcionales, su hedonismo efímero se muestra en su rostro tan pronto como se emociona. Él es más bestia que hombre, de verdad. Parece que el plan funcionará, pero a costa de algunos dolores de cabeza innecesarios, pensó Reiss mientras observaba en silencio la cara de Roanna.

Ese Alphonse también… La forma en que corrió inmediatamente para jugar en su entusiasmo muestra cuán lejos está del espécimen perfecto. Bueno, la base humana era una criatura imperfecta para empezar, se lamentó Reiss.

“Bueno, él será eliminado aquí. Al menos podré medir la fuerza del espíritu humanoide y el contratista antes de irme “, murmuró antes de partir.

***

Mientras tanto, un poco antes, la mano de Flora estaba siendo arrastrada por un hombre desconocido.

“Umm, por favor, ¡déjame ir! ¡¿A dónde vas?! ¡Tenemos… tenemos que pedir ayuda!” Flora protestó ante el hombre que la empujaba con fuerza mientras miraba la habitación detrás de ella con Roanna y los demás. El hombre llevaba una capucha, ocultando incluso su perfil.

“No, esa señorita ya ha terminado. Ella será despiadadamente hecha pedazos en cualquier momento. Si no estuvieran jugando, habría terminado en diez segundos más o menos.” El hombre que caminaba delante de ella se rió de alegría.

“T-Tú… ¿Quién eres?”, Preguntó Flora con miedo. De un vistazo, parecía un aventurero enviado para proteger la mansión, pero algo estaba claramente mal. Se preguntó si él se estaba aprovechando de la conmoción.

El hombre se detuvo de repente. “No, no soy alguien que valga la pena nombrarme a mí mismo. Pero supongo que sería grosero no decirlo en esta posición, así que… Bueno, soy basura humana.” Se enfrentó a Flora y se quitó temporalmente la capucha para responder con una sonrisa, y Flora finalmente vio claramente la cara del hombre. .

Fue Lucius.

“U-Umm…” Flora tropezó con palabras.

“Ah, fue muy divertido antes, no pude evitar mirar un poco. La buena y antigua relación de sirviente-amo de la realeza y la nobleza es tan hermosa de ver. Qué escena tan maravillosa fue esa. Casi quería arruinarlo.” Lucius habló en un estado algo nervioso.

Flora fue superada por un miedo indescriptible y gritó en pánico. “¡A- Alguien! ¡¿Hay alguien ahí?!”

“Jajaja, ¿entonces quieres pedir ayuda? Bueno, sé mi invitada.” Lucius sonrió amablemente, hablando con Flora.

“T-Tú… ¿Qué estás…?”, Preguntó Flora, sin saber cuál era el objetivo de Lucius. Lucius había tomado una actitud completamente desafiante, haciéndolo parecer tan desconcertante.

“Bueno, estoy aquí para secuestrarte, en realidad. Aunque si soy honesto, no importa cómo lo logre, así que creo que me divertiré un poco “, dijo Lucius con indiferencia.

“… ¿Soy tu objetivo? ¿Y estás usando esta situación caótica para secuestrarme?”, Preguntó Flora con voz temblorosa.

“Bueno, para decirlo simplemente… sí. Pero traerte de vuelta tan fácilmente como esto es un poco aburrido. Ya estoy pasando por todos estos problemas, así que estoy pensando en dejar mi marca en ti “, respondió Lucius suavemente, con una sonrisa en su rostro. Flora guardó silencio en cuestión.

“Por ejemplo, la señorita que te confió a mí. ¿Qué tipo de cara crees que tendrá cuando descubra que hizo el juicio equivocado? Solo imaginarlo me emociona”, dijo Lucius en un tono extremadamente impertinente.

“…..” Por primera vez en su vida, Flora sintió una indescriptible sensación de repulsión ante la excesiva maldad en sus palabras.

“Jajaja. Por ahora, solo ver esa expresión tuya es suficiente. ¿Y no te lo dije antes? La señorita ya ha terminado.” La boca de Lucius se torció en una sonrisa mientras la realidad se hundía en Flora con desesperación.

“Ah – ¡D-Déjame ir, déjame ir por favor!” Flora se sobresaltó alarmada, intentando una vez más liberarse del agarre de Lucius.

“Una vez más, tú…” Reiss apareció, dirigiéndose a Lucius desde atrás.

“Hey”, respondió Lucius casualmente.

“Deja de perder el tiempo aquí y muévete ya. El espíritu humanoide ya ha llegado a la mansión. Sería malo enfrentar eso cabeza a cabeza”, dijo Reiss, suspirando con cansancio.

“¿Oh…?” Los ojos de Lucius se abrieron con interés.

“Para que lo sepas…” Reiss comenzó a decir.

“Ya sé, ya sé. Me dirigiré al punto de encuentro después de esto, así que no te preocupes. Solo déjame elegir mi propia ruta, ¿sí?” Lucius dijo vagamente.

“Ve, entonces,” Reiss suspiró una vez más, alentando a Lucius a irse.

“Escuchaste al hombre, princesa. Ven ahora No pelees a menos que quieras que esas hermosas piernas se corten.” Lucius se puso la capucha una vez más, luego levantó a Flora y la arrojó sobre su hombro sin dejar una palabra de protesta.

“¡Eek – ¿Kya?!” Flora gritó, pero fue ignorada sin rodeos.

“Arriba vamos”.

Lucius procedió a correr por el pasillo, desapareciendo en algún lugar. Momentos después, la ira de Hiroaki hizo que un cañón de agua hiciera un agujero en la pared.