Date A Live (NL)

Volumen 19

Capítulo 5: Y Su Elección Es…

Parte 4

En el centro del remolino de maná: El Espíritu ・ Mio y el Wizard ・ Isaac Westcott se enfrentaron.

Cuando Westcott notó la silueta de Mio, no le importó limpiarse la sangre alrededor de la boca y en su lugar solo sonrió.

—… <Deus>, eh. Qué sustituto de lujo absoluto eres. Aunque ahora mismo solo quiero eliminar a Itsuka Shidou.

Mio cerró los ojos mientras escuchaba esas palabras, y ella respondió como si murmurara para sí misma.

—… Seguramente, ambos ya no existiremos en el mundo futuro a partir de ahora. Ni tú, ni yo. ¿…No es un momento perfecto? Puedo lidiar con todas las molestias a la vez.

—Hah, hah, hah…

Cuando el hombro de Westcott se estremeció, se puso la mano en la frente y levantó la cara hacia el cielo.

— ¿…Dónde? ¿Qué hice mal? Incluso cuando he excavado los secretos de la magia y he puesto mis manos en la fórmula espiritual. Incluso cuando he creado el Realizer. Incluso ahora, tengo el poder del Espíritu del Origen en mis manos.

Mio entornó los ojos con suavidad ante las palabras de Westcott.

—… Desde el principio, yo (Espíritu) no debería haber nacido. Lo mismo ocurre con el Realizer. Este poder está demasiado lejos de la capacidad humana. Pero, bueno, aparte de eso, si esta es también la causa de tu desdicha… —Mio suspiró, poniendo su mano en su barbilla y dijo—:… Tú nunca fuiste el tipo de persona que elegiría.

—…

Cuando las palabras llegaron a sus oídos, Westcott abrió sus ojos por un momento, como si estuviera sorprendido.

—… Ha, haha, hahahahahahahahahahahahah…

Poco después, con una mirada que demostraba que no podía soportarlo más, se echó a reír.

—Ya veo, ya veo…, entonces no hay otra manera.

Westcott se tambaleó como si estuviera cansado de reírse. Luego, levantó lentamente su mano derecha hacia el frente.

—… <Qemetiel>.

Como respondiendo a esas palabras, la semilla negra apareció frente a él y comenzó a filtrarse en la oscuridad.

Mio también levantó la mano de la misma manera y llamó el nombre del último ángel.

—… <Ain>.

Un momento después, las fuerzas de <Vacío> y <Vacío> chocaron unas contra otras.

… Su cuerpo comenzó a fundirse en el mundo. Una extraña sensación se envolvía alrededor de Mio.

No había dolor, ni miedo. Se sentía como si su conciencia se estuviera consumiendo gradualmente.

El último y más poderoso Ángel colisionó con el Rey Demonio que poseía un poder equivalente. Los usuarios definitivamente no estarían a salvo.

Pero… no se arrepintió.

Si Mio no activaba <Ain> en ese momento, Shidou y los Espíritus a su alrededor que fueron arrastrados al poder incontrolable de Westcott seguramente morirían.

No…, pero aún, no sería sorprendente que una explosión más grande que la catástrofe euroasiática golpeara al mundo.

Cuando pensó en ello, inesperadamente sonrió.

Para alimentar sus propios deseos, sacrificó a las chicas, sacrificó al mundo, pero no esperaba estar esperando sus últimos momentos con tal razón.

Sin embargo, ella no podía soportarlo.

… Una vez más, ver a Shin morir ante sus propios ojos. Además…

… Shidou…

Las palabras que intercambiaron mientras estaban en <Ain Soph>. Las palabras que habló volvieron a su mente. En ese momento, Mio se dio cuenta. Todavía tenía otro deseo.

No importaba lo que había hecho, no podía devolverle a Shin por completo.

Si es así, al menos el último deseo de Mio era ir con Shin hasta el final del camino.

—… Lo siento, todo el mundo… — susurró Mio mientras su conciencia se desvanecía lentamente. Ella había matado a tanta gente. Ella había hecho a mucha gente miserable.

Ella no esperaba que ella fuera perdonada, ni pensaba que sería perdonada.

Maldad absoluta, la peor catástrofe de la historia humana. Era ella misma. Es extraño que ese solo sentimiento no fuera una mentira.

Cuando la última parte restante de su conciencia comenzó a desaparecer…

—… Mio.

¡…!

En ese momento…

Cuando una voz vino de algún lugar, los ojos cerrados de Mio se abrieron. No solo porque ella fue llamada de repente. Porque era la… voz que siempre había estado deseando volver a escuchar durante más de 30 años.

Shin…

—… Ah, lo siento, Mio. Te he dejado esperar tanto tiempo.

Mio pronunció ese nombre, y de la luz apareció una figura oscura.

A, ah…

Mio sintió que le salían las lágrimas.

Tal vez esto fue solo la alucinación que Mio vio cuando su conciencia se iba disipando gradualmente. Quizás esta era solo la ilusión que podía escuchar en su estado crítico.

Aun así, esa era ciertamente la silueta del amante que había anhelado durante tanto tiempo.

¡Shin…, Shin…!

Mio se esforzó por alcanzarlo, abrazando el cuerpo de Shin con fuerza.

Un sentimiento cálido envolvió su cuerpo. Mio enterró la cara en su pecho, y gritó inaudiblemente.

… Treinta años.

Siempre, siempre, anduve deambulando, buscándote. He confiado tanto en tus recuerdos para seguir adelante.

¡A pesar de que siempre estuviste tan cerca de mí así…!

—… Mio. Siempre he querido verte, siempre.

Shin también abrazó a Mio de vuelta.

Yo también… siempre quise verte…

Mio no se rendiría, poniendo más fuerza en los brazos que abrazaban a Shin.

Nunca nos separaremos de nuevo.

Nunca… te dejaré ir.

A partir de ahora, estemos siempre juntos.

¡Um…!

Mio sonrió con lágrimas en sus ojos…, y desapareció de este mundo.