Assassins Pride (NL)

Volumen 2

Lección 05: ¿Veneno? ¿Medicina? ¿O Una Trampa Suya?

Parte 4

El que Kufa ocultara su figura, naturalmente era para investigar los movimientos de esa chica de cabello negro.

Desde que comenzó la batalla de selección, Kufa estaba intranquilo ante el comportamiento lleno de misterios de esa chica. ¿Por qué se había acercado a Melida? ¿Cuáles eran sus intenciones al hacer contacto solo en lugares donde no había nadie más? Aunque intentó investigar su identidad cuando vió la oportunidad, aparentemente esa chica tenía una personalidad que hacia parecer que estaba evitando por si misma tomar acciones conjuntas con sus compañeras de D’Autriche.

Si acaso para las estudiantes de D’Autriche ella fuese una persona para la que no fuese antinatural mantener esa posición solitaria, ¿No sería un recurso humano muy adecuado?

Para que un tercero no relacionado, acabara convirtiéndose—

Exhibiendo completamente sus habilidades como Clase <Samurái>, Kufa corrió por sobre los arboles mientras borraba su presencia. Cuando se movía de rama en rama sin emitir sonido, afortunadamente pudo encontrar inmediatamente la espalda de la chica en cuestión.

Su cabello como el cuarzo negro se agitaba en su espalda como si danzara.

Con una forma de caminar que la hacía parecer que estaba escapando, se dirigía en dirección de la torre escolar.

Como siempre, no había señales de que fuese a actuar en conjunto con sus compañeras de D’Autriche. Por el contrario, pasando directamente por el jardín frontal de la torre escolar, se dirigía sin vacilación hacia un lugar en donde no había presencia de personas. Kufa, rastreaba las hebras de ese cabello como cuarzo negro mientras prestaba atención meticulosamente para no ser encontrado por otras estudiantes y no ser notado siguiéndola.

Finalmente, llegó frente a la alta y robusta pared donde no había ninguna otra persona.

Ese era el lugar que era llamado <Edificio Sellado> por las estudiantes de la academia. Sin embargo, fuera de los días en que las pruebas de la batalla de selección se realizaban, ese lugar se mantenía tranquilo sin ninguna clase de evento. Había escuchado que las estudiantes que llegaban de paseo para mirar lo esplendoroso de su fachada no eran pocas, pero la chica de cabello negro seguramente no había venido por eso.

Kufa se ocultó en la pared del edificio desierto y la chica de cabello negro se acercó caminado hacia la entrada principal del <Palacio Mundo de Cristal>. Ya que no había nada que sirviera para ocultarse, no podía acercarse más que eso. Cuando Kufa concentró sus nervios en sus ojos y oídos, los porteros de la puerta emitieron un sonido fresco.

Las dos <Mascotas de Cristal> que servían de guardias del <Palacio Mundo de Cristal>, las <Valquirias>, sellaron su avance cruzando sus espadas de cristal, pero cuando la chica de cabello negro liberó su <Mana> rápidamente deshicieron su sello y regresaron a su posición erguida.

Si fuera una estudiante normal, daría un ligero agradecimiento, cruzaría la puerta y terminaría.

Sin embargo, la chica de cabello negro, a continuación, realizó una acción extraña. Agachándose a los pies de las muñecas de cristal de 5 metros que se mantenían erguidas, sacó alguna clase de herramienta desde su zapato. Kufa quien estaba viéndola desde la distancia no podía discernir que uso tenia.

Sin embargo, había visto algo con una forma similar en el cuartel general del Gremio Jack Raven.

Era algo parecido a lo que un grupo de científicos o investigadores usaría, una herramienta de experimentación

Ingresando un código en el dispositivo similar a una máquina de escribir, la chica de cabello negro pareció conectarlo a la armadura de la Valquiria de enfrente. Estando más y más intranquilo, Kufa inclinó su cuerpo hacia adelante lo más posible.

¿Debería cerrar la distancia ahora que la chica de cabello negro estaba concentrada en su trabajo?

En el momento en que intentó dar un paso desde la pared del edificio desierto, con la peor sincronización posible, se topó con otra persona que venía desde el frente.

Esa mujer con su cabello blanco atado en un moño, pestañeó por un tiempo ante el súbito encuentro. Sin embargo, en el instante en que reconoció quien era el que estaba frente a sus ojos, torció sus labios.

–¡Vaya, vaya, sensei! ¡Me pregunto qué es lo que está haciendo escondido como una rata!

Un aullido desagradable. Naturalmente, la chica de cabello negro también notó su existencia y se dió la vuelta. Como si fuese absorbida por su línea de visión, sus ojos se encontraron con los de Kufa.

–… ¡…!

Rápidamente sacó la herramienta desde la Valquiria y la encerró en el zapato. Y así, se marchó con pasos rápidos hacia el interior del palacio.

Sin importar cuán optimista fuese, ella ya había descubierto que Kufa estaba siguiendo su rastro. Mientras estaba harto de su excesiva mala fortuna, Kufa encaró a la mujer de cabello blanco.

–Dama Osello, nuestra afinidad es desastrosamente mala. Creo que, por el bien de ambos, no deberíamos encontrarlos en lo posible, pero, ¿Qué te parece eso?

Pensó que sentiría lo mismo, pero, distorsionando su arrugado rostro grotescamente, Osello se acercó más.

–… Eso es imposible. ¡El que alguien como tú, un noble sin nombre que nadie conoce, este sirviendo a la Casa del Duque, en sí mismo me es difícil de aceptar!

–Mi cliente no eres tú y tampoco lo es tu Amo. Así que no hay razón para que te entrometas en mis asuntos.

Osello mordió las uñas de sus dedos nerviosamente y escupió palabras que sonaban como una maldición.

–¡Maldición, ya sea Felgus-sama de la casa principal, tú y Melida-sama! ¡Solo hacen estupideces que socaban la autoridad de la Casa Angel! ¡Con esto, la carga de Elise Ojou-sama quien tendrá que cargar el nombre de Angel en el futuro solo aumentará!

–¿Qué es lo que se está volviendo la carga de Elise-sama? Ese es un punto en el que nuestras opiniones divergen. ¿Alguna vez haz intentado prestarle oído a su corazón? Cuál es la razón de que estés tratándola como una muñeca—

–¿¡¡Un jovenzuelo como tú piensa darme sermones a mí!!?

Gritando furiosa con tal vehemencia que parecía que sus venas iban a romperse, Osello se dió la vuelta. Sin dejarla escapar, Kufa habló hacia su espalda que intentaba marcharse hacia la torre escolar.

–Dama Osello, no olvides nuestra promesa. En el caso de que Melida Ojou-sama obtenga más logros que Elise- sama en la batalla de selección, por favor acepta que ambas formen una Unidad.

El cuervo anciano se dió la vuelta con una mirada aguda y mostró una sonrisa viscosa.

–No seamos evasivos con representaciones aburridas como “Cuál de las dos obtiene más logros”. Existe un método mucho más directo para comprobar la superioridad o inferioridad entre ambas.

–¿Cuál sería ese?

–¡Hohoho! Deberías saberlo de inmediato. ¡En la tercera prueba dentro de dos semanas, en la Batalla Campal en la que todas las Unidades competirán por la hegemonía! En el momento en que termine la batalla, todas en esta academia podrán presenciarlo con sus propios ojos. ¡¡Elise Ojou-sama o Melida-sama, cuál de las dos es la más adecuada como una verdadera Angel!!

–Por lo que ambas compiten, no es por el nombre “Angel”.

Tal vez porque las calmadas palabras del joven lastimaron su orgullo, los labios de Osello se fruncieron en la forma へ.

–… Si gana, reconoceré que ambas formen una Unidad. ¡Por el contrario, si Melida-sama pierde, por nada en el mundo podrá presentarse como amiga de Elise Ojou-sama!

Resoplando por su nariz, Osello esta vez realmente se marchó.

Mirándola irse, a continuación, Kufa se volteó hacia el <Palacio Mundo de Cristal> a su espalda.

El ataque de Black Madia y el vitral que fué cambiado. La enigmática estudiante de D’Autriche y las artimañas de alguien intentando sabotear la batalla de selección. y primordialmente, añadiéndole a la discordia de Melida y Elise, lo que les esperaba en dos semanas, era el enfrentamiento directo entre ambas—

¿Qué demonios es lo que está ocurriendo en esta Academia para Chicas Saint Frideswide?

Mientras abrazaba ese rompecabezas sin solución, Kufa giró sus talones. Reunirse con Melida lo más rápido posible y esforzarse en su protección y enseñanza era lo que debía hacer.

El día del inicio de la segunda prueba estaba acercándose—