Date A Live (NL)

Volumen 15

Capítulo 8: Los Recuerdos Sellados

Parte 5

—Hmhmhm, verdaderamente dichoso. Ne, ¿no es así, Nushi-sama?

—……Ahh, es dichoso Mukuro.

—Fufu, ve a, ve a.

A la respuesta de Shidou, Mukuro expuso una sonrisa sincera desde el fondo de su corazón, balanceándose hacia atrás y hacia adelante con la mano que estaba pegada a la de Shidou.

—Ne, Nushi-sama. ¿Amas a Muku?

—Por supuesto, mucho amor.

—Con Muku. Fufu…… Es pura felicidad.

Con las mejillas ligeramente enrojecidas, la sonrisa en el rostro de Mukuro se intensificó.

—…………

Viendo su expresión prístina de alegría, Shidou sólo podía apretar los dientes.

Él estaba tomado de las manos con Mukuro, caminando por una de las principales carreteras de la ciudad de Tenguu a un ritmo pausado. Parecía que su anterior cita le había dado un considerable goce. Por lo tanto, propuso que ambos tomaran otro paseo juntos.

—Ne, ¿qué es eso?

Cada objeto a la vista golpeó a Mukuro como nuevo y extraño, sus ojos brillaban con un brillo curioso cada pocos pasos que ella tomaba mientras entraba en una conversación con Shidou. En cada ocasión, el chico tenía la amabilidad de responder.

A pesar de eso, Shidou estaba lejos de marcar con ella.

Hace algún tiempo, después de que <Haniel> se hubiera vuelto ineficaz, Shidou hizo todo lo posible para convencer a Mukuro.

Aunque la amaba de verdad, también consideraba a todos igual de importantes. Shidou trató de persuadirla de que devolviera a todos a sus antiguos estados.

Sin embargo, Mukuro no hizo ningún esfuerzo para responder. Además, no abrigaba malicia alguna. Precisamente debido al amor de Shidou por Mukuro, se suponía que otras mujeres eran innecesarias. Además, Shidou no podía airear sus quejas sin minar sus palabras precisamente debido a la presencia de otras mujeres. No es en lo más mínimo escéptica, conservó tal sistema de valores.

Es cierto. Mukuro era pura de corazón. Sin embargo, esta voluntad de ella era contraria a las aspiraciones de Shidou.

—…………

Pero Shidou no podía abandonar toda esperanza simplemente por eso.

En verdad, la situación no era ni mucho menos optimista. De hecho, Shidou no tenía siquiera un solo camarada, y la herramienta capaz de romper el status quo, <Haniel>, había sido sellada por Mukuro.

Sin embargo, sólo poseía un método para encontrar una salida a este estancamiento. Shidou se tocó silenciosamente los labios.

———A través de un beso podía sellar el poder de un Espíritu.

Utilizando esta habilidad misteriosamente extraordinaria que sólo Shidou podía manejar aseguró los medios para un fin.

A través de abrir su corazón, haciéndola enamorarse y besarla; hacerlo sellaría el poder de Mukuro y posteriormente devolvería los recuerdos sellados por <Miguel> a su estado original.

Aun así, esta estrategia no estaba exenta de defectos.

En primer lugar, el nivel de felicidad de Mukuro desempeñaba un papel importante. Parecía que le gustaba mucho a Shidou; sin embargo, para alguien que ha sido privado de cualquier apoyo de Ratatoskr, Shidou no tenía manera de determinar si su nivel de felicidad había cruzado el umbral de ser sellable. Si es así, sería incapaz de actuar descuidadamente a voluntad. Mukuro poseía a <Miguel>. Suponiendo que ella descubriera las intenciones de Shidou, incluso su habilidad para sellar el poder espiritual podría muy bien ser, a su vez, sellado como <Haniel>.

El ángel capaz de sellar todas las existencias de la creación frente a la capacidad capaz de sellar el poder de un Espíritu. Shidou no tenía idea de qué lado triunfaría sobre el otro. Si le ocurriera lo peor, Shidou estaría fuera de posibles movimientos. No podía tomar medidas precipitadas.

Además——

—……Mukuro. Por qué, debes……

El impulso detrás de la monopolización irregular de Mukuro de Shidou, así como por qué había cerrado su propio corazón en primer lugar, junto con la determinación de permanecer en el vacío sin vida del espacio.

Shidou creía que, en las circunstancias en que esas razones se mantuvieran indefinidas, incluso si sus poderes fueran sellados con éxito, la fuente del dilema no se resolvería.

—¿Hn?

Las palabras a punto de salir de la boca de Shidou hicieron que Mukuro inclinara un poco la cabeza.

—¿Por qué, debes hacer algo así? ……Dime, yo soy, para ti, ‘íntimo’,  ¿verdad? ¿Qué crees que significa eso?

—Muku dijo anteriormente. Tales vocablos se clavan sin velos. ……Bueno, si es obligado.

Mukuro se puso de pie, presionando su mandíbula contra con sus dedos.

—Después del descenso de Muku al terreno en el seno de Nushi-sama, Muku vino por una aberración de una visión. Dentro de esa débil visión se refiere a Muku Nushi-sama.

—¿Un sueño?

—Mn. ……Sin embargo, Nushi-sama no tomó parte en dicha visión. Fue doloroso en eso. De un incipiente joven abandonado en la soledad por el aferramiento, comprometiéndose con una familia.

—Eh——

La confusa elaboración de Mukuro hizo que Shidou arrugara las cejas. Era de anticiparse. Después de todo, ese sueño era…

—¡Itsuka-kun!

En ese breve instante, como para detener el pensamiento de Shidou en un abrir y cerrar de ojos, una voz que llamaba su nombre resonaba por detrás.

—¿¡……Eh!?

Shidou abrió los ojos sorprendido, mirando hacia atrás con asombro.

Había un par de razones para su temor. La primera era simple: desde el día anterior, Shidou no había sido dirigido con su propio nombre por nadie más que Mukuro. Todos y cada uno de sus conocidos y amigos habían sido privados de sus respectivas memorias, con el perpetrador no siendo otro que Mukuro. Por lo tanto, ya no era poco ortodoxo para él no ser reconocido por todos.

La razón alternativa era que——la calidad de la voz había sonado excepcionalmente familiar.

—¿¡O-Origami!?

Volviendo la cabeza hacia atrás para echar un vistazo a la chica de pie allí, Shidou no podía dejar de vociferar. Eso es correcto. La persona que había llamado el nombre de Shidou de la nada era su compañera de clase, el Espíritu Tobiichi Origami.

Sin embargo, Origami se había conformado con el comportamiento de todos los demás durante su reunión de ayer. ¿Qué había hecho exactamente para huir de las garras de la habilidad de Miguel?

——Uh, ah…

En medio de su grave reflexión, Shidou notó al final.

Origami se había dirigido a él no como “Shidou”, sino como “Itsuka-kun”.

Para empezar, el aura que la niña ante sus ojos había estado emitiendo era inconmensurablemente más suave que la del habitual Tobiichi Origami.

—N-No me digas… ¿tú eres la Origami de ‘este mundo’?

Los ojos de Shidou se redondearon como lunas llenas cuando él lo decía.

—Ah, un… Mucho tiempo sin vernos——decir eso sería un poco extraño. Después de todo, frecuentemente me he encontrado cara a cara con Itsuka- kun.

Origami forzó una risa ‘ahaha’.

A su vista, la sonrisa totalmente inusual de Origami firmemente convenció a Shidou. –—La chica ahora situada ante sus ojos era al mismo tiempo Origami, pero tampoco Origami.

Shidou había tomado prestado el poder del ángel del tiempo y viajado en el tiempo, reescribiendo así la historia.

Dentro del cuerpo de Origami, existía tanto la Origami del mundo anterior como la Origami del nuevo mundo al mismo tiempo.

A pesar de eso, en lugar de afirmar que las dos personalidades divididas estaban muy bien divididas, sería mejor decir que ambas individualidades se habían mezclado en una nueva Origami……

Sin embargo, estaba muy claro que esta persona era la Origami del mundo después de haber sido alterada.

Sin embargo, otro asunto entró en su mente en la actualidad. Shidou interrogó, refrenando su delirio urgente.

—Origami…… Tú, ¿¡todavía me recuerdas!?

—Por supuesto. -Aunque el yo en la superficie parece tener sus recuerdos encerrados. No, para ser exactos, esos recuerdos fueron extraídos de su conducto, ¿verdad?

—¡……!

Las palabras de Origami suprimieron un aliento de Shidou.

Pero esto fue pura suerte. Cuando Shidou había estado aislado y sin ayuda, un amigo apareció a la vista. Este hecho se había convertido en algo parecido a un estimulante cardíaco hacia el Shidou envuelto en la aprehensión.

Por supuesto——el estado actual de los asuntos no cambiaría tan fácilmente.

—¿……Hueh?

A su lado, Mukuro miró la cara de Origami con una mirada de incredulidad.

—Tú eres…… un lémano de Shidou. Una rama en verdad, tus memorias debieron haber sido hechas rápidamente.

Mukuro suspiró con disgusto, estirando la mano derecha hacia delante.

—…..Bueno, no importa. Mientras que el pestillo abierto de <Miguel> permanezca desconocido, sin embargo, una cerradura de repuesto servirá.

Luego, en el aire, una brillante persona clave se manifestó.

—¡……! ¡Mukuro!

Shidou no pudo evitar gritar en la parte superior de su voz. Sus acciones eran de esperar. Su compañero recién aparecido, siendo sellado nuevamente sería totalmente inaceptable.

Sin embargo———

—¡Eso no va a servir!

Por alguna razón, Origami había gritado primero, fuera de las expectativas de Shidou.

—Si un ángel se manifiesta aquí y ahora—— ¡será detectado! ¡Por esa persona……!

—¿Quién?

—¿Esa persona……?

Las declaraciones de Origami hicieron que las cabezas de Mukuro y Shidou fueran torcidas. Luego, en el siguiente instante dividido.

—….Huh.

Los tímpanos de Shidou percibían un sonido metálico que se transmitía desde arriba.

Como si estuviera atraído e hipnotizado por ese ruido, Shidou alzó la cabeza hacia arriba.

Después, vio que lo que estaba de pie en una lámpara de la calle era una chica con las manos cruzadas.

Su pelo largo, encantador y azotado por el viento era del color de la noche Délfica. Su cristalino y diamantino par de ojos centelleantes, que poseían un resplandor onírico, miraba tranquilamente a Shidou. Un vestido astral de color negro que se asemejaba casi a la oscuridad misma condensada en materia, se retorcía alrededor de su cuerpo. Si ahora fuera la noche, su apariencia se uniría sin fisuras en el cielo.

—¿Qué——?

Mirando hacia atrás a la chica que parecía exudar magníficos rayos como el del Sol, Shidou fue incapaz de evitar ampliar los ojos aún más.

——Esta chica, tenía una impresión de ella.

—Te encontré, moza. ……¿Un? Junto con otras personas extrañas. Hacia los espíritus——Hmph, el hombre de ese tiempo. Perfecto, sólo quémense en cenizas juntos.

Exponiendo una expresión solemne y severa tan fría como el hielo, Tohka lo declaró con un tono malhumorado que hizo eco de una sentencia de muerte.