Date A Live (NL)

Volumen 15

Capítulo 6: La Batalla del Cosmos

Parte 2

Desde los altavoces instalados en el interior del puente de mando del remodelado <Fraxinus>, la voz totalmente determinada de Shidou resonó por toda la habitación. Sentada en la silla del comandante, Kotori asintió con la cabeza, balanceando ligeramente su pelo, que estaba cuidadosamente atado en dos colas con sus cintas de color negro.

—Entonces dejare que te hagas cargo de eso, Shidou.

Después de decirlo concisamente con voluntad firme, Kotori cerró firmemente los ojos.

Para Shidou, Hoshimiya Mukuro era un Espíritu cuyo nivel de peligro podía ser comparado con Tokisaki Kurumi y los Espíritus inversos. Aunque el Territorio sí sirvió para protegerlo, enviar a Shidou por su cuenta para tratar con ella fue una decisión difícil, incluso para que Kotori aceptara.

Sin embargo, el enemigo que actualmente persigue a Fraxinus era el mago más fuerte de la humanidad, Ellen Mira Mathers, y el buque de guerra de alta velocidad que ella comandaba <Goetia>, el barco que una vez había derribado en el pasado a <Fraxinus>.

—¡Que todo el personal se prepare para las estaciones de batalla! ¡Nos enfrentamos al enemigo más problemático del mundo! ¡Cambien su estado de ánimo!

—¡Entendido!

El personal que estaba en el puente de mando respondió a Kotori con nerviosismo. Kotori hizo un gesto de confirmación y volteo su cabeza. Detrás de ella, había ocho chicas que no parecían adaptarse al puente de mando adecuadamente. Todas ellas eran espíritus cuyos poderes habían sido sellados por Shidou hasta ahora. Cada uno de ellas observó ansiosamente la imagen de Shidou en el monitor principal.

—¡Kotori!

—Kotori.

Entre las dos que simultáneamente vociferaron -una era una jovencita que poseía un oscuro cabello característico que era del color de la noche y tenía claras pupilas cristalinas, mientras que la otra seguía siendo el único Espíritu que permanecía tranquila en esas terribles circunstancias- eran Tohka y Origami respectivamente.

Incluso Kotori podía fácilmente adivinar lo que estaban a punto de decir. Después de un momento de indecisión, suspiró seriamente desde lo más profundo de su garganta.

—……Supongo que ustedes dos ya se han decidido. Bueno, nunca planeé que ninguna de ustedes se involucrara en esta pelea al principio, pero ahora…..

Kotori se dio vuelta y exhaló una vez más. La organización bajo su mando <Ratatoskr>, era una que estaba a cargo de la protección de cada Espíritu como su propósito y prioridad máxima. El acto de enviar espíritus cuyos poderes habían sido minuciosamente sellados en el campo de batalla, estaba en conflicto con las intenciones de la corporación.

Sin embargo, todos sabían dentro de sus mentes que no era el momento de enfatizar en morales secundarias. Por otra parte, una llama inquebrantable se encendía incesantemente en sus ojos, inextinguible por cualquier cosa que pudiera decir Kotori.

—Bueno. ¿Podría pedirles ayuda?

Tohka y Origami asintieron en sincronía antes de que Kotori pudiera pronunciar la duración de un punto final.

No, había más de eso. Todas las demás Espíritus expresaron sus fortalezas y expresaron su aprobación también.

—¡Quiero ayudar!

—Heh, heh, con el poder de nosotras las ‘Yamai’, incluso un huracán puede soplar a través del vacío del espacio.

—Acuerdo. No podemos quedarnos sin hacer nada en esta situación.

—¡Exactamente! Mi querido amor está peleando, ¡no puedo quedarme aquí!

—… Si Yoshino va, yo también voy.

—¡Un! ¡Eso es correcto, una batalla final donde cada uno une fuerzas! Ah, pero el poder de mi Espíritu está ahora desactivado, así que supongo que estaré apoyándolos desde el barco. ¡Lo siento!

Mientras Yoshino, Kaguya, Yuzuru, Miku, Natsumi y Nia respectivamente lo dijeron, Kotori puso una expresión indefensa.

—Lo entiendo. Entonces tomare prestado el poder de todas.

Los Espíritus levantaron los puños y gritaron un grito de guerra. Sus voces llenas de vitalidad resonaron vigorosamente en todo el puente de mando, enviando temblores por todo el cuerpo de Kotori como si se le estuviera gritando en voz alta.

Como si estuviera influenciada por el impulso moral de los Espíritus, el estrés que antes pintaba las caras de la tripulación se desvaneció en un instante y fue reemplazada por un alivio alentador. Con renovada determinación y entusiasmo, volvieron a recuperarse. Las voces de los espíritus parecían relajar las mentalidades de la tripulación que estaban a punto de enfrentarse al enemigo más formidable de la historia.

Sin embargo, el entorno animado no duró mucho tiempo.

La razón se hizo evidente en el monitor de pantalla principal mientras innumerables hordas de máquinas en miniatura fueron vistas ser desplegadas desde la armada de DEM, dirigiéndose hacia Shidou y Mukuro. Aquellas figuras humanoides de un gris oscuro demoniaco eran el armamento no tripulado de las Industrias DEM, las unidades de Bandersnatch.

—¡Che…! Esos bastardos

—¡C-Comandante! ¡Estoy detectando señales de algo distinto de las unidades de Bandersnatch!

<Deep Love> Minowa de repente interrumpió la maldición de Kotori.

Por supuesto, eso no se podía evitar. Después de todo, en la pantalla principal algo, totalmente diferente de las unidades Bandersnatch, se movía dentro de las vagas sombras creadas por las innumerables máquinas.

Para ser exactos, era alguien.

Esa persona era una chica joven que tenía el pelo rubio y llevaba una unidad de Realizer de Combate de color azul claro y blanco.

—¡Esa es…!

—Artemisia Bell Ashcroft.

Origami pronunció el nombre de la muchacha mientras sus ojos miraban fijamente la pantalla. A pesar de que su tono era bastante tranquilo y monótono, una expresión nerviosa se formó gradualmente en su rostro mientras sus manos se sujetaban fuertemente.

Para Origami, esta fue una respuesta raramente vista, aunque bien justificada. Por último, Artemisia era un mago con un poder inferior solamente a Ellen Mathers. Debe evitarse que intercepte a Shidou a toda costa. Kotori empezó a hablar con una voz llena de angustia.

—Kuh. Continúen con el descenso según su ubicación. Tohka y Origami, ustedes dos irán primero. Suban al teletransportador rápidamente.

—¡Un!

—Entendido.

Después de responder, Tohka y Origami se movieron apresuradamente hacia la unidad teletransportadora instalada dentro del puente de mando. Mientras Kotori miraba a las dos con una mirada a medias, emitió una orden a la IA de Fraxinus, María.

—También, María, prepara el AW-111.

—[Entendido, pero todavía está en mantenimiento. ¿No importa?]

—Sí, Origami hará buen uso de ella.

—¿……?

Origami inclinó su cabeza intensamente porque ignoraba las implicaciones de Kotori. Posteriormente, se extrajo un compartimiento de debajo de la consola de automatización central, en la que un objeto de plata marcado se reveló lentamente.

Kotori tomó el objeto en sus manos y lo colocó ante Origami. La chica sólo pudo fijar sus ojos deslumbrados en el misterioso objeto cuando lo recibió.

—Esto es un…….¿equipo de emergencia?

—Correcto. Es una unidad CR fabricada por Asgard Electronics, llamada <Brynhildr>. Es nuestro modelo más nuevo, así que sería genial si pudieras sacar el mejor provecho del equipo.

Kotori lo explicó mientras ponía un pulgar hacia arriba. Como si hubiera reunido de inmediato las piezas del rompecabezas, Origami sujetó con fuerza el aparato que sostenía y asintió ligeramente con la cabeza.

—Entiendo.

—Está bien, y entonces continuemos. ¡Confirmen las coordenadas y comiencen la teletransportacion!

—[Entendido, empezando el teletransportador.]

La respuesta de María a Kotori se transmitió a través de los altavoces. Poco después, los cuerpos de Tohka y las demás, que estaban de pie en la instalación del teletransportador, comenzaron a emitir una luz delgada y pálida.

Justo en el momento en que desaparecieron.

—¿¡Yaaa……!?

El puente de mando Fraxinus de repente tembló por una fuerza severa y desconocida, provocando un grito de Kotori. La comandante se tambaleó por el ataque inesperado, casi cayendo sobre su propio asiento, ya que apenas logró estabilizarse.

Sea como sea, Kotori y los miembros de la tripulación, que de algún modo lograron mantenerse sentados, podrían considerarse bastante afortunados ya que los Espíritus habían perdido su equilibrio y cayeron sin gracia en el suelo.

—¡Kyaa….!

—O-o-ouch…..qué pasó…..

Nia se frotó suavemente la frente, que había sido golpeada contra el suelo sólido, mientras hacia un puchero con su boca molesta por el accidente. Para su disgusto, el que respondió fue uno de los tripulantes situado en la parte inferior del puente.

—Goetia lanzó un explosivo incendiario!

—¡Nuestro Territorio ha neutralizado con éxito el bombardeo, no se ha sufrido ningún daño!

El informe hizo que la enfurecida Kotori frunciera las cejas con rabia.

—…Che.

Si hubiese utilizado cohetes de artillería de magia ordinaria, su poder habría sido anulado sin esfuerzo por el Territorio, y el efecto de la explosión no habría llegado al puente de mando. Ellen sabía que el territorio de Fraxinus era casi impenetrable; Así, ella tomó prestado otro Territorio para el propósito de ese ataque.

Se parecía al golpeo de una puerta.

—¿Nos estás menospreciando, Ellen Mathers……?

Kotori mordía ferozmente el chupete en su boca con los dientes.

Como si en respuesta a la declaración retórica de Kotori, los altavoces dentro del puente comenzaron a sonar una sirena de advertencia que señalaba una transmisión entrante desde fuera de la nave. Sin siquiera tener que adivinar quién era el remitente, Kotori ordenó de una manera dolorosa.

—…Transmítanla.

—¡Entendido!

Acompañando la afirmación de la tripulación, después de que algunos ruidos eléctricos diversos sonaran a través de la pantalla, la imagen de una mujer joven fue mostrada en el monitor.

Era una hermosa mujer rubia de origen europeo del norte con la piel tan pálida como la de un enfermo. Estaba magníficamente equipada en un circuito de platino que claramente confirmaba su estado como un Mago. Si uno fuera a juzgar por su apariencia exterior, su cuello y muñecas parecían lo suficientemente delgados como para ser arrancados por una pequeña cantidad de fuerza.

A primera vista, parecía una chica extranjera normal, más bien frágil, desde la perspectiva de cualquiera. Sin embargo, sus ojos azules estaban impregnados de absoluta confianza en su fuerza.

—… Ellen Mathers.

-En efecto. Realmente ha sido un largo tiempo desde nuestra última conversación, Itsuka Kotori.

Ellen respondió con una sonrisa burlona. Su indiferencia indiferente indujo un estremecimiento o dos sobre las puntas de las cejas de Kotori.

Este espectáculo no fue el primero de su tipo. Cuando Shidou tomo prestado anteriormente las habilidades de Zafkiel para reescribir la historia, Kotori y Fraxinus se habían encontrado cara a cara con Ellen de una manera similar, simplemente para ser derrotados al final.

—Parece que no has aprendido la lección y has surgido una vez más. Pero las cosas no seguirán tu camino.

—Hmph, ¿es ese buque de guerra el origen de tu exceso de confianza? Una variedad nueva, supongo, sin embargo … es inútil. Lo derribaré de nuevo, no importa cuántas veces se necesite.

—Cómo te atreves…..

En ese momento, Kotori contuvo el aliento.

Fue entonces cuando se le ocurrió – la importancia de Ellen diciéndolo otra vez.

Fraxinus había sufrido una pérdida contra Goetia durante el intento de Shidou en el mundo anterior. La Ellen de este mundo no debía saber ni siquiera una pequeña parte de la prueba.

—…….Ya veo, así que fue obra de Beelzebub. Kotori susurró débilmente.

El omnisciente Rey Demonio que Isaac Westcott había arrebatado. No era ningún misterio que pudieran adquirir información del mundo que no se podía obtener por medios normales antes de que se hubiera alterado.

—Hmm … Tu jefe es realmente quisquilloso, como un niño que acaba de conseguir un juguete nuevo.

—Un niño, eh……Lo que dijiste no necesariamente puede ser falso.

—¿Ho? Incluso un manga no tendría algo así. Si ese tipo tuviera tanto juicio como mínimo, no habría venido personalmente a la base del enemigo, más aún como jefe.

—… ¿Eh?

En el instante en que esas palabras llegaron a los oídos de Ellen, por primera vez, su cara se agitó haciendo una caricatura de mueca.

—¿Qué has dicho, Itsuka Kotori? ¡¿Ike fue a la base de Ratatoskr en persona sin mí?!

Junto con un sorprendente asombro o mejor dicho, una ira indignada, tales pronunciaciones vociferaron de su garganta.

—…………

Esta reacción imprevista hizo que Kotori se quedara estupefacta y sin palabras mientras tragaba su saliva con un cloqueo. No podía haber oído mal a pesar de la torpeza del discurso de Ellen, que no tenía ni idea de que Isaac Westcott atacara la base de Ratatoskr.

—¿… Hm? A juzgar por tu respuesta, pareces que no estas al tanto de este asunto. No te informa sobre una pelea tan importante, a pesar de que los dos están en condiciones íntimas. No tiene mucha confianza en ti, ¿verdad? Qué imprevisto……

—………….

Ellen se volvió poco comunicativa y se quedó callada durante un rato, respirando y mirando fijamente a Kotori con una expresión nunca antes vista.

Después de mover ligeramente los labios como si estuviera pensando en voz alta, Ellen regresó a su antigua disposición relajada y ordenó su largo flequillo.

—Qué burla tan descarada. ¿Yo por qué, de toda la gente, creería en las palabras del enemigo?

—Puedes confirmarlo tú mismo si no estás convencida. O ¿tal vez estas asustada?

—De todos modos, lo que has dicho son mentiras absurdas. Muy bien, si insistes, yo mismo iré a verificar el asunto.

Mientras decía eso, Ellen puso un comportamiento incisivo y agudo y continuo.

—Cinco minutos serán suficientes.

La conexión se cortó simultáneamente. Los buques de guerra de DEM, que aparecieron nuevamente en la pantalla principal, mostraron una variedad de cambios.

Como estaban enfocados enfáticamente en Goetia, siendo el centro de atención, los otros tres barcos secretamente habían rodeado a Fraxinus antes de que tuvieran la oportunidad de darse cuenta. Las llamas de la guerra estaban a punto de estallar. Después de un gemido agudo, Kotori gritó sus órdenes a los miembros de la tripulación.

—Establezcan el atributo del Territorio a la defensa y retrocedan! Al estar rodeado es difícil hacer algo, sin embargo, aparte de Goetia, todos son pequeños insectos. Antes de que eso suceda……

—¡Kotori-san!

Las palabras de Kotori fueron abruptamente interrumpidas por una voz la cual pertenecía a Miku.

—¡Por favor, teletransportanos fuera de la nave! ¡Deja que nos encarguemos de esos pequeños insectos!

Siguiendo su ejemplo, los otros Espíritus expresaron sus opiniones también.

—¡Kotori-san puede hacerse cargo de Goetia…..!

—Kaka, Tohka y Origami se dirigieron hacia la ubicación de Shidou. Deberíamos seguir su ejemplo.

—Ustedes…
Aunque dudaba al principio, Kotori asintió con la cabeza.

—Bueno, dejare que se hagan cargo y permanezcan aquí obedientemente.

—¿Cómo llegamos a eso? ¡Podemos ayudar también con nuestros poderes!

—Tranquilas. Es precisamente por sus poderes que estoy contando con ustedes para que permanezcas en el barco como último recurso.

—¿Eh …?

—Duda. ¿Qué significa eso?

La declaración de Kotori hizo que los Espíritus se rompieran la cabeza en una expresión estupefacta.

—En realidad, incluso estoy harta de no hacer nada. Pero ya que se trata de Goetia a la cual nos estamos enfrentando aquí, tal vez…..

Mientras cambiaba su campo de visión hacia los Espíritus, Kotori de repente dejó de hablar. La razón era muy simple: faltaba un Espíritu.

—¿Eh …? ¿Dónde está……?

—¡¡Goetia se está aproximando!!

Sin embargo, en ese momento, la voz de un miembro de la tripulación se transmitió desde la sección del puente de mando inferior, alejando de inmediato la conciencia de Kotori. No había tiempo para una cuidadosa consideración. Incluso si se hubiera escondido por temor a la batalla, Kotori no podía culparla con ese propósito. Más importante aún, ella no planeó pedirle ayuda. Con un saludo, Kotori dio instrucciones a la tripulación.

—¡Todo el mundo espera la oportunidad perfecta para el ataque! ¡Todo el personal haga los preparativos ¡Empezaremos pronto!

—¡Entendido!

Las firmes afirmaciones de los miembros de la tripulación resonaron en todo el puente de mando. Kotori se lamió los labios y fijó su mirada en el buque de guerra de platino que se mostraba en el monitor principal.

—Aquí voy, destinado archienemigo. Te dejaré enriquecer tu inteligencia con respecto a la nueva fuerza de Fraxinus.

Después, Kotori señaló la pantalla y dijo las siguientes palabras.

—Muy bien, que nuestra batalla comience.