Date A Live (NL)

Volumen 14

Capítulo 2: El Espíritu del Espacio

Parte 1

Lunes, 9 de enero.

Hasta el día de ayer, la preparatoria Raizen era un edificio tranquilo, solo para la gran aglomeración de estudiantes que se reportaban a la escuela con éxito al siguiente día. Mientras pasaban por la entrada con respiraciones preocupantes, cada uno se dirigía hacia sus respectivas aulas e intercambiaban saludos con sus compañeros de clase. Aunque sus diálogos eran esencialmente tonterías, la mayoría compuestas de “Feliz año nuevo” y “Hace mucho tiempo que no nos vemos” y así, eran esas tradiciones. (NT: Aglomeración: reunión o amontonamiento grande y desordenado)

Las vacaciones de invierno habían terminado y hoy fue la ceremonia de apertura de la escuela.

A partir de hoy, la preparatoria Raizen comenzaría con su tercer semestre.

En Japón, los años escolares se dividen en tres periodos, abril a julio (primero), de septiembre a diciembre (segundo), y de enero a febrero (tercero).

Shidou, que llegó con Tohka, se encogió de hombros al ajustar su uniforme escolar. La prenda se sintió un poco anticuada, aunque sólo habían pasado un par de semanas desde la última vez que lo usó.

Pero no había nada que pudiera hacer al respecto. Con el comienzo de cada año, una gran lista de actividades iniciaba, por no hablar de los diversos eventos que se produjeron durante las vacaciones de invierno.

La voz de un cierto chico se pudo escuchar desde la parte derecha mientras Shidou, se estiraba al contemplar estos dilemas.
— Hey, mucho tiempo sin verte, Itsuka —en la dirección de dicha voz, Shidou vio a un muchacho con el pelo de punta estilo usando una pomada, su compañero de clase Tonomachi Hiroto. Por alguna razón, Shidou sentía que no lo había visto en mucho tiempo. Shidou suspiró emocionalmente y le ofreció su mano.

— Ah, Tonomachi. Feliz año nuevo.

— A ti también, ¿qué has estado haciendo?

— ¿Hmm?

La pregunta cogió desprevenido a Shidou. Tonomachi señaló con su dedo detrás de él, a lo que Shidou volteó a ver, estaban tres chicas susurrando algo en voz baja, mientras todas lo miraban.

Una chica con un uniforme desarreglado, una chica haciendo una expresión en blanco y una niña pequeña que llevaba lentes, los nombres del trío de derecha a izquierda son Ai, Mai y Mii. Eran un grupo muy famoso de la clase 2-D.

No era difícil ver que estaban hablando de Shidou. De hecho, fue obviamente con respecto a un tema negativo.

— Ah…

Shidou estaba perdido sobre qué debía de hacer. Él simplemente no podía entenderlas.

De acuerdo a los rumores, cuando el camino espiritual se había desestabilizado el mes pasado, Shidou había pronunciado inconscientemente un montón de palabras sensibles e innecesarias a las tres. Por supuesto, Shidou no tenía el más mínimo recuerdo de ese momento. Pero si recordaba o no, nada de eso les importaba.

— Uh… no lo sé.

A pesar de cómo, no era necesario propagar acusaciones a sí mismo. Shidou dijo una oración superficial intentando olvidar lo ocurrido.

— Hmhm~ bien no importa. De todas formas, acabo de ver Tama-chan en la sala de profesores.

A mitad de la frase de Tonomachi, la campana sonó y marcó el inicio de las clases.

— Entonces me marcho.

Dicho esto, Tonomachi también regresó a su asiento.

— Hey ¿dónde está Tama-sensei?

— Um, debería estar aquí… ahí está.

—…

Shidou agitó la mano mientras observaba a Tonomachi sentarse, con la mente llena de premoniciones desfavorables. A pesar de que también no tenía ningún recuerdo del incidente alguno, Shidou se le propuso animadamente a Tama-chan cuando su camino espiritual fluctuó.

Básicamente, el seguimiento de todo lo relacionado con ese incidente debería haber sido manejado por la analista de Ratatoskr, Murasame Reine, que también es profesora de la clase de Shidou. Mientras se sumergía en pensamientos desagradables, la puerta del aula se abrió de repente, revelando su tutor, Okamine Tamae, también conocida como Tama-chan. Y alrededor de su delicado cuerpo, se encontraba una nube sombría sin precedentes.

— Uoohh…

Se filtró de la voz de Shidou, al ver su estado, al igual que sus compañeros de clase. Todos los estudiantes comenzaron a discutir confusamente.

— Muuu… Shidou, ¿qué está pasando con Tama-chan-sensei? Ella se ve tan triste hoy —le preguntó Tohka, junto a él.

— Aah, uhh… No tengo ni idea —murmuró Shidou.

Como si fuera sorda, Tama-chan recorrió lentamente la habitación y se subió a la plataforma con el libro de asistencia en la mano.

— Todo el mundo… feliz año nuevo. ¿Cómo estuvieron sus vacaciones? La Navidad, más la víspera de Año Nuevo, más el día de Año Nuevo… Debieron de ser muy felices —a pesar de que no dijo nada raro, ella no prohibía que toda la clase suspirara. Tama-chan sonrió hipócritamente, sin reflejar ninguna emoción.

— ¿Qué edad tienen todos este año? Puesto que cada uno fue promovido de su segundo o tercer año en la escuela secundaria, ustedes deben de estar alrededor de los 18 años de edad. Aquellos que nacieron más tarde deberían tener 17. Mi cumpleaños será en marzo, adivinen qué edad tendrá su sensei…

La maestra más famosa de La Preparatoria Raizen, Tama-chan tenía 29 años. Todo el mundo sabía a ciencia cierta, pero nadie se atreve a decirle eso. Mirando a su alrededor, dejó escapar una sonrisa cansada como si alcanzara la iluminación.

— Yo… finalmente me graduaré a mis treinta años… huhuhu, es grandioso ¿verdad?

Tal vez fue debido a la miserable lástima que todo el mundo se quedó en silencio. Ai suavemente dijo el nombre de Tama-chan. La luz fluorescente se reflejaba en sus lentes, deslumbrantes, Ai notó su resplandor.

— Cállate. ¡A partir de ahora, cualquier persona que quiera hablar conmigo, debe añadir ‘Sir’ antes y después de las oraciones!

— ¡S-sí… sí Señor!

Ai se sintió abrumada por el impulso de Tama-chan y respetuosamente, siguió su orden.

— ¡¿Señor, Tama-chan que fue lo que pasó, señor?!

Ai repetía, lo que Tama-chan implacablemente dijo.

— Nada, no pasó nada. Todo está bien, excepto por algunas noticias dignas de celebración. Mi amiga de la escuela primaria, Airi-chan, se va a casar el próximo mes. Huhuhu, muy buenas noticias. Debido a que Airi-chan ya es grande, su marido debe ser grande también. Estuvimos juntas en cada cumpleaños y Navidad de cada año, e incluso cambiábamos cada chocolate en el Día de San Valentín.

‘Incluso bebíamos hasta quedar borrachas, ella solía dejarse llevar y decir: “~ Ugaahh si todavía estoy sola cuando llegue a los treinta años, ¡cásate conmigo Tama-chan!”, Y así sucesivamente. Parece que su prometido es un joven médico que es un par de años menor ella. Durante el año pasado ‘Los hombres han sido todos unos bastardos’ para nosotras las mujeres, Airi-chan se hizo un esguince en la pierna mientras estaba borracha y se enamoró a primera vista del médico que la trató, su relación se desarrolló con fuerza. A pesar de que yo estaba en la escena ese momento, me emborraché y me quedé dormida en la clínica, convirtiéndome en una tercera parte.
¿Quién hubiera pensado que, en ese corto periodo de tiempo, mi mejor amiga durante todos esos años cayó en el río del amor justo en la habitación de al lado? La vida es tan impredecible, cómo me gustaría que todo fuera un sueño. En realidad, yo también estaba pensando que si incluso Airi-chan, que es una chica tan maravillosa, no recibió ninguna atención, seguramente los hombres son ciegos. Airi-chan es realmente una mujer extraordinaria, hermosa, elegante, que era prácticamente una modelo. Porque todavía estaba sola, sentí que todavía no era importante. Pero Airi-chan fue cautivada por un hombre por detrás de la espalda. En realidad, empecé a notar que ella empezó a faltar a nuestras reuniones con mayor frecuencia el año pasado. Airi-chan es tan mala. ¿Cómo fue a traicionarme a mí de esta manera al casarse? Todas esas mentiras ‘Es tan embarazoso ‘y tal… que eran una estrategia para despertar lo lascivo de los hombres. Necesito aprender cuidadosamente esa habilidad también.

Tama-chan empezó a temblar monótonamente mientras inclinaba el torso en el atril  (NT: Soporte de madera para sostener libros o textos.)

— Hu… huhu… y otra de mis compañeras de clase se casa…¡Vil! ¡Mal! Los cónyuges son todos compañeros en circulación…

Tama-chan comenzó a susurrar *he.he.he* burlonamente como si estuviera poseída por alguna entidad.

— Todo el mundo… todo el mundo me abandonó… dime… ¿Cuántas más celebraciones de boda necesito asistir para…?

— S-Sir, que uhh… ¡Sir!

— Esperen por mí todo el mundo… Me reuniré pronto… ha… haha… Soy tan incapaz… ¿Por qué Dios me ha abandonado…?

—como si algo se hubiera roto finalmente dentro de ella, Tama- chan miró a los estudiantes sin habla.

Después de un considerable período de silencio, ella abrió el libro de asistencia dejado a un lado.

—… Muy bien, comenzaré a tomar lista.

Tama-chan se acercó a Ai, Mai y Mii con indiferencia, a la que el trío sacudió la cabeza imponente.

— ¡N-n-n-no!

— ¡Señor, se ve problemática, señor!

— ¡Señor, descanse un poco, señor!

— ¿Qué? Estoy perfectamente bien —sonrió Tama-chan con un perfecto alivio—. Pero si un demonio apareciera ante mí en este momento y me ofreciera un deseo a cambio de mi vida, probablemente desearía que cayera un meteoro sobre Japón el próximo mes.

— ¡Es por eso que tal cosa es…!

— ¿No es así como un alumno de primaria podría pensar antes de que comience la escuela?

— Huhuhu… ¿no dije que era una broma? Ji, ji… meteorito… libérate…

Con una tiza en la mano, Tama-chan se hizo pasar por una chica mágica agitando su varita mágica y arrojó el trozo de carbonato de calcio por la ventana con un * ¡haa! * Como si fuera un hechizo mágico.