Dungeon Defense (NL)

Volumen 2

Capítulo 3: Himno Inhumano

Parte 3

 

 

El Guardián del Norte. Margrave de Rosenberg, Georg von Rosenberg.

Calendario Imperial: Año 1505, Mes 9, Día 16.





Cercanías del Castillo del Lord Demonio Dantalian.

 

— Milord, la unidad de reconocimiento ha regresado.

— La batalla empezará pronto. Llámame general, no lord.

Corregí severamente el error de mi asistente.

Publicidad M-M5

Convertirme en un noble excelente fue difícil. En una ocasión normal, tenías que sumergirte en las obligaciones sociales mientras también te preocupabas por asuntos domésticos. Estando en situaciones de emergencia, tenías que hacerte cargo de ello como el comandante supremo en la guerra.

La magnanimidad y la clemencia tenían que coexistir con crueldad.

Por eso, el título que uno tenía era imperativo. Había una energía espiritual en las palabras. La gente podía cambiar libremente dependiendo del nombre que les fuere colocado.

Actualmente, yo no era el soberano del ducado de Rosenberg, sino el comandante de un ejército de mil soldados. No su margrave, sino un simple general. Estaba bien llamar esto la obstinación de un anciano. Era mi credo el que si el nombre de uno no se establecía de inmediato, entonces todo colapsaría.

— Si. Mil disculpas, general. Debo corregir mis errores desde ahora.

— Bien. Dame el reporte del equipo de reconocimiento.

— Ellos reportaron que una unidad de lo que se asume sea el enemigo, está bloqueando el camino adelante.

— ¿Eso qué es? –abrí mis ojos de par en par–. ¿Me estás diciendo que el Lord Demonio Dantalian tiene tropas bajo sus órdenes?

— Si. Sin embargo, no es seguro.

¿No era seguro? Esa no era una frase muy linda. La imprecisión era un oponente de los militares. Uno debía hablar con confianza.

— Había estandartes colocados en el campo del enemigo, pero los exploradores reportaron que su afiliación era desconocida. Parece ser una unidad compuesta principalmente de enanos.

— ¿Una unidad de enanos de una afiliación desconocida, dices…? ¿Cantidad?

— No es una cantidad impresionante, general. De acuerdo al reporte, como mucho, han de ser unos 100 o 200 soldados.

— Eso lo confirmaré con mis propios ojos.

Con las tropas montadas en el remolque, me abrí paso hacia el frente del ejército. Poco después, pude ver el área del enemigo ubicada en lo alto de una zona con colinas. Entrecerré mis ojos y examiné su campamento.

— Hmm, veo que el equipo de reconocimiento está haciendo su trabajo como es debido. Los números enemigos no alcanzan los 200 soldados.

— Eso es justo lo que yo pensaba también. ¿Debería enviar un mensajero para ver a que afiliación pertenecen?

Sacudí mi cabeza.

— No es necesario. Excluyendo a Dantalian, no hay otros Lores Demonio que residan en esta región.





— Pero, dada la casualidad de que se trate de una unidad que no tenga ninguna relación…

— Agradezco el consejo, pero tengo que rechazarlo. Esta unidad parece que bloquea nuestro camino justo el día en que nuestras fuerzas están avanzando. No existen las coincidencias aquí.

Una vez que le respondí con severidad, mi asistente asintió al comprenderlo, y luego retrocedió.

De todas formas, mi mente se sentía incomoda.

Que dicha oposición estuviese ubicada allí significaba que conocían nuestra invasión de antemano. ¿En qué parte se habrá filtrado la información…?

No, ya era demasiado tarde como para investigar eso. El descuido debe ser evitado. Debemos encargarnos primero de las fuerzas enemigas ante nosotros.

— ¡Asistente, transmite mi orden! Moviliza la caballería y asalta a las fuerzas enemigas por ambos lados. Los de infantería que permanezcan en espera.

— ¡Entendido! ¡Compañeros de caballería, flaquéenlos!

Mi asistente repitió mi orden en voz alta. Tan pronto como esta llegó a los demás compañeros, los clavadistas soplaron sus cuernos. Un gran y valiente sonido. Este era el cuerno único en la región norte de Habsburgo. Amaba ese eco en los campos de batalla.

Mi asistente murmuró.

— Las fuerzas enemigas también deben estar desesperadas. Esto podría convertirse en una batalla difícil.

¿Acaso mostraba simpatía por el enemigo? Eso sería problemático. Los sentimientos personales no eran más que objetos lujosos sin significado alguno en el campo de batalla. Lo amonesté.

— Pero nosotros también tenemos nuestras circunstancias. Aunque siento pena por Dantalian, no hay otra oportunidad para nosotros forzarlo a ser nuestro chivo expiatorio.

— Claro.

Hm. ¿Era una preocupación innecesaria?

10 minutos pasaron desde el soplido del cuerno.

Mi asistente habló con una expresión de preocupación.

—…General. ¿Lo enemigos no están tomando represalias?

— Hmm…

Mi rostro no era muy distinto al de mi asistente. Honestamente, yo estaba confundido.

Actualmente, nuestros caballeros ligeros estaban disparando desde la cima de la colina. Con ballestas, disparaban pernos a las tropas enemigas.

El sangrado de las fuerzas enemigas debería haberse agravado, y aun así no se movían. ¿Qué estaba pasando?

— Quizá tienen algún plan en mente, ¿no cree…?

— Sus intenciones son desconocidas –fruncí el ceño–. Si siguen así, entonces sus bajas se incrementarán.

Publicidad M-M3

— No hay movimientos, en lo absoluto, general. Quizá están recibiendo menos heridas de las que creemos, ¿ah?

— No. Las posibilidades de que eso suceda son bastante bajas.

Claro, el rango y el poder de las ballestas usadas por la caballería eran más débiles que las usadas por la infantería. Pero seguían siendo ballestas. El concepto de absorber la energía mágica de los alrededores para disparar pernos poderosos era lo mismo. No podías tratarlo a la ligera. Ciertamente así es que debería ser, pero…

— General, hay probabilidades de una emboscada.

— ¿En esta colina tan amplia? No hay bosques cercas. Si fuesen a ocultar sus tropas, entonces ¿dónde se supone que lo harían?

—……

Publicidad G-M2



Mi asistente cerró su boca. La preocupación en su rostro era aparente.

No sentí la necesidad de reprocharlo. Mi asistente probablemente sabía muy bien que no había algo como una emboscada. Era solo que no podía comprender el comportamiento de las tropas enemigas y simplemente vociferaba sus ‘¿quizá?’.


— Eh, bueno, parecen ser unidades de élite. Han estado bajo fuego durante los últimos 10 minutos, pero aún siguen sin moverse. General, no son un grupo de soldados cualquiera.

—…eso solo trae más preguntas.

—…es cierto.

Las fuerzas enemigas estaban recibiendo un baño de flechas unilateral y seguían inflexibles.

Sus tropas eran menos de 200. Sin importar cuantas ballestas tuvieran, era bastante probable que no superasen las 100.

Por otro lado, nosotros teníamos 400 centinelas. 400 soldados que dispararían por turnos, permitiendo que se disparase un ciclo interminable de pernos. Ellos ni siquiera eran valiosos como oponentes. Una lucha entre un niño y un adulto probablemente sería más vigoroso que esto.

A pesar de eso, su infantería seguía manteniendo sus posiciones. Seguían con sus mentones en algo, como si sus camaradas cayendo por las flechas a sus lados fuese un asunto trivial. Su coraje era anormal.

— Normalmente, los habríamos elogiado por su impresionante disciplina militar…

— ¿No te da cosa…? ¿Qué hace que esos sean diferentes a un escudo de carne?

— Si. Eso es realmente lamentable.

Mi asistente levantó su voz al estar de acuerdo.

Observamos el campo de batalla durante un rato, en silencio.

Finalmente, luego de 20 minutos en batalla, mi asistente no pudo seguir conteniendo su ira.

— ¡Ya no lo entiendo!

Su rostro estaba enrojecido.

Publicidad M-M1

Probablemente estaba más enojado ante la incompetencia del desconocido comandante enemigo.

— ¡¿Qué es lo que está haciendo exactamente su comandante?! Sus soldados mueren. Reacciona, dale vuelta a la batalla, ¡haz algo! ¡Al menos deberían rendirse…!

Al final. Cerca del marcado de los 30 minutos del comienzo de la batalla, las fuerzas enemigas finalmente fueron derrotadas.

Incapaz de soportar más las heridas, sus posiciones cedieron. El muro resistente había colapsado.

—…da la orden de cargar.

Publicidad M-M4

— Si, general…

Tanto el general dando la orden y el asistente recibiéndola estaban cansados. Pero, los únicos tragados por este humor tan sombrío solo éramos nosotros.

Publicidad G-M3



Nuestras tropas estaban notablemente entusiasmadas por esa victoria tan sencilla.

Buuuu.

El sonido de los cuernos resonó.

Recibiendo la señal, nuestras tropas desenvainaron sus espadas y audazmente corrieron hacia adelante, en dirección a las posiciones rotas del enemigo.

Terminó con eso.

Incapaces de soportar nuestra carga, los soldados enemigos colapsaron rápidamente. Los enanos huyeron a ambos extremos. Debido a la secuencia tan obvia y el resultado tan obvio, la fuerza en mis hombros desapareció…

— General. ¿Deberíamos dar la orden de persecución?


— Hazlo… No puedo comprender realmente nada de esto.

Los soldados enemigos, incapaces de huir tan lejos, fueron acabados por nuestras fuerzas. Gritos perturbadores comenzaron a resonar por las colinas. Mi asistente entrecerró sus ojos. Era una escena horrenda…

— ¿Qué acaba de ser esa batalla?

— Me gustaría preguntar tanto como lo haces tú.

Aún quedaban muchos misterios en el mundo.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios