Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e

Volumen 7.5

Historia Corta (SS) de Ryuuen: Una Señal de Batalla

En la noche, la Campana de Nochevieja declarando la venida del Año Nuevo sonó por 108va vez en la televisión.

Aparentemente, es para limpiar los deseos mundanos y para recibir el nuevo año con un cuerpo purificado. Es una historia tonta. Las personas no perderán sus deseos mundanos por una farsa como esta. Entre más lo suprimes, la avaricia desde el interior es algo que solo se hincha.

Hubo una llamada entrante para mi de un número poco familiar y sin registrar.

Sintiendo como matando el aburrimiento, sin pensar nada, silenciosamente presioné el botón de llamada del teléfono.

—Feliz Año Nuevo. ¿Estabas despierto?

Una voz de mujer. Naturalmente, una voz con la que estoy familiarizado.

—Pensar que me llamarías así de temprano en año nuevo, Sakayanagi.

—Si no te molesta, ¿podría tener un poco de tu tiempo de ahora? Me gustaría encontrarte en persona.

—¿Me estás pidiendo que tengamos una cita en un momento como este? Kuku, aunque no es como que si no fuera a responderte. Ven directamente a mi habitación entonces.

—Entonces, en 30 minutos, estaré esperando por la máquina expendedora fuera del dormitorio.

Después de ignorar mi invitación, ella de seguro continuará la charla unilateral.

—Bien, estaba libre de todos modos.

Habiendo terminado nuestra breve conversación, lancé mi teléfono en la cama.

No hay necesidad de responder honestamente a ella, pero esta vez, hay algunas circunstancias. De cualquier manera, ya entiendo lo que ella quiere decir, así que luego de confirmar que la hora prometido ha pasado, dejé mi habitación.

Luego, lentamente, dejé el lobby del dormitorio e inmediatamente me dirigí por la máquina expendedora.

Mientras despreocupadamente llegué al lugar prometido, esa mujer se llamó. Como siempre, ella estaba cargando su bastón mientras me saludaba.

—Llegas 10 minutos tarde. Creo que te di 30 minutos para que te prepararas.

Ella dijo ese hecho calmadamente, sin ninguna felicidad o ira.

—Kuku. Aunque pude haberte ignorado.

—Bueno, esto está bien.

10 minutos fueron demasiado indulgentes. Debí haberla hecho esperar más tiempo en esto clima frío.

—Pero para una cita de noche, hay muchos curiosos.

Además de Sakayanagi, las figuras de Kitpu, Hishimoto y un Kamuro que se ve algo dormido estaban ahí.

—Usualmente esto es algo que se hace como par.

—Fufu. No tengo el coraje para encontrarme contigo tan de noche cuando solo estemos nosotros dos.

Habiendo recibido tales palabras de algo por las que estoy agradecido, me acerqué a Sakayanagi.

Sin embargo, con solo acercarme a cierta extensión, Kitou avanza un paso Fue una presión silenciosa que me estaba diciendo que no me acercara más. ¿Está él jugando al caballero protegiendo a la princesa? La cara de Kitou no corresponde a la de un caballero.

—Parece que has sufrido bastante la herida. Incluso ahora, parece que quedaron algunas cicatrices.

—¿Te preocupas por mí?

—Así que no vas a negar tus heridas entonces?

—¿Negar? Solo sería extraño incluso si las niego con esta cara.

Ha pasado una semana desde que peleé con Ayanokouji en esa azotea.

La hinchazón y los hematomas se han ido un poco, pero incluso así, no me he recuperado por completo aún. Es obvio que estas heridas no las obtuve por haberme caído en un tramo de escaleras.

Y no sé de dónde ella se enteró de esto, pero no es nada particularmente sorpresivo. Mirándome a mi o a Ishizaki, que ambos salimos con nuestras caras hinchadas, cualquiera sería saberlo de inmediato.

—Para alguien que sostiene orgullo en pelear, has perdido cara, Ryuuem.

Hashimoto dijo eso mientras reía. Mientras cortésmente señalaba donde mi unidad estaba.

—¿Está bien para ti salir en tal estado?

—Estoy agradecido por tu preocupación, pero no quiero que me digan eso por alguien como tú, cuyas piernas están lisiadas.

—Fufu. Ese puede ser el caso.

Tal vez mis provocaciones fueron infructuosas.

En cuanto a Sakayanaki. Ella probablemente tiene algo más que quiere oír.

—Si lo deseas, puedo decirte acerca del alcance de mis heridas aquí y ahora.

Los dos preciados guardaespaldas de Sakayanagi, Kitou y Hashimoto, cada uno tornaron sus ojos hacia mí.

—A pesar de que tus subordinados no están presentes, eres bastante optimista.

Por subordinado, ella probablemente se refiere a Ishizaki o Albert y los demás.

—Ya sea que ellos estén acá o no, no importa. Si los miras como parte de mis fuerzas, después de todo ellos no están aqu.

Avancé un paso adelante.

Kitou también avanzó un paso adelante.

Dejando de lado a Hishimoto, parece que Kitou tomó una postura de combate. Lo que sea pase, para ser capaz de moverse inmediatamente, él se está preparándose para eso.

—Paremos con las cosas peligrosas. Nadie va a ganar nada peleando en un lugar como este.

Hashimto, como si se uniera, dijo eso.

—¿Deberíamos comenzar con el asunto entonces? La razón por la que te llamé en una hora como esta es porque hay algo que me gustaría preguntarte directamente. Es algo que es difícil de preguntar cuando hay personas alrededor.

Tarde de noche entre el fin de un año y el comienzo del siguiente, las reglas en el campus de la escuela son algo diferentes a las reglas de las del mundo exterior.

Las tiendas de conveniencia que normalmente abren las 24 horas también están cerradas, y no hay tiendas abiertas actualmente.

No hay nadie que vaya afuera en momentos como este. Ya sea que ellos se van a la cama temprano o están viendo la bienvenida del año nuevo en la televisión. Esta es una situación en la que podemos hablar de lo que sea que queramos, en otras palabras.

—Has dejado tu asiento como líder de la Clase C. He escuchado palabras de eso.

—Sabía que intentabas confirmar eso.

—¿Es eso cierto?

—Si lo es, ¿qué vas a hacer?

—Esa fue una admisión rápida. A diferencia de tus heridas, no es como si estuviéramos ahí en la escena observando.

Sakayanagi me miró con ojos que estaban buscando la verdad.

Hasta que conocí a Sakayanagi, había alcanzado unilateralmente una conclusión sencilla.

De ninguna manera ella pueda saber acerca de Ayanokouji. Con quien yo luché, por quien fui derrotado. Había pensado que ella no mostraría mucho interés hacia eso.

—¿Pensaste que me había puesto al corriente?

—Me pregunto. Puede que en efecto ese sea el caso.

Sin embargo, sigue siendo sospechoso.

Los ojos de Sakayanagi son los de alguien que sabe algo. Ella tenía tal mirada en sus ojos. Ayanokouji no habló en profundidad al respecto, pero, ¿él ya atrajo la atención de Sakayanagi?

De ser así, ¿entonces cuándo? Casi no hay duda de que fue antes del incidente conmigo en la azotea. No, si ese es el caso, entonces Sakayanagi debía tener un fuerte interés en Ayanokouji desde mucho antes.

Pero hasta este momento, Sakayanagi no mostró señales de eso y de hecho, ella está tratando de investigar de esta manera.

De esa contradicción bizarra, llegué a una respuesta simple.

Significa que hay una posibilidad de que Ayanokouji y ella fueran conocidos desde mucho antes. Si ese es en efecto el caso, entonces lo que Sakayanagi quiere saber ahora mismo no es si yo perdí o no.

“Es si perdí o no contra Ayanokouji.”

Sería que ella quiere saber la verdad respecto a eso. Es una interesante línea de razonamiento si lo digo yo mismo, o eso pensé, pero dejaré ser ese problema por ahora. Si tal tema interesante fuera a ser colgado ante mí, causaría que mis instintos latieran.

—Incluso si pierdes con alguien, ¿ocultarías ese hecho, Sakayanagi?

—No lo sé, porque para mí perder contra alguien, no es posible que suceda.

Esa es una respuesta jodida a lo Sakayanagi.

—Sin embargo, si sucediera que pierdo, en tal momento, ¿honestamente lo reconocería o no, es lo que preguntas?

—Kukuku, Porque después de todo, eres orgullosa más que otra cosa.

—El orgullo es importante, lo sabes. Una vida sin orgullo sería aburrida, ¿no es así?

—Oye, ¿no podrías haber confirmado algo como esto por el teléfono?

Kamuro, que había estado en silencio hasta ahora y escuchando la conversación, se unió.

—La cierto es que, no lo sabrás hasta que encontrarse cara a cara. Especialmente dado que él es hábil diciendo mentiras. Por el teléfono, habría sido difícil averiguarlo.

—Ahh, ya veo. Entonces al menos termine con eso rápido.

Los insignificantes que Sakayanagi usa también la están teniendo difícil. Bajo el cielo congelado, el cuerpo de Kamuro se estremeció un poco.

—Después de jugar al tirano, al final terminaste perdiendo contra tu subordinado y caíste de tu asiento como líder.

Sakayanagi pretende reflexionar al respecto.

—Es una historia que es difícil de creer, ¿no es así?

—Si es así, ¿qué más podrías ser?

—Eso es algo que no sé. Ese es el por qué te llamé de esta manera.

—Si te encuentras cara a cara conmigo, comenzarías a ver la verdad, ¿eh?

—Me pregunto.

Ella está siempre tratando de sondearme.

Bueno, si me preguntas, no tengo intención de maniobrar con ella cada vez sobre Ayanokouji.

—No tengo más intenciones de hacer nada más en esta escuela.

—Oi, oi. Eso es una broma, ¿cierto? ¿Realmente estás diciendo eso?

El que reaccionó antes que Sakayanagi fue Hashimoto.

—No hay necesidad de dudar de esa manera. Debido a su contrato con Katsuragi-kun, cada mes, él está garantizado con puntos privados, Ultimadamente, vincularse con la Clase A es una vía segura para él, incluso si el se retira ahora, no sería un inconveniente.

—Precisamente. Estaré observando tus pequeñas peleas desde arriba.

—Sin embargo, no hay garantía de que continuará yendo bien. SI un evento donde perdieras una larga cantidad de puntos privados ocurriera, tu asenso a la Clase A será dudoso.

Ella da un prólogo cortés, no, una explicación. El punto es, que es una provocación de Sakayanagi diciendo que ella puede aplastarme en cualquier momento.

—Pero por favor, quédate tranquilo. Primero que todo, he decidido que atormentaré exhaustivamente a la Clase B. Tenerte a ti y a la Clase C como mis oponentes de tiempo de juego tendrá que ser en una ocasión diferente.

—Has como quieras.

Justo como la información de Ayanokouji decía, parece que lo más fuerte del ataque de Sakayanagi desde ahora estará enfocado hacia la Clase B.

No tengo interés en lo que será de la Clase A o la Clase B, pero como espectador, los tendré entreteniéndome.

—Si no tienes intención de empezar una pelea aquí mismo, entonces creo que me marcharé.

—Fue solo por un breve tiempo, pero me divertí un poco. Te agradezco por tu discurso de perdedor.

Di la espalda.

Sin embargo, sintiendo como si tuviera que decirle algo, dejé de caminar.

—Sakayanagi, también deberías recordar de que no eres una ganadora que tiene la victoria asegurada.

—Si vas a enseñarme la derrota entonces te daré la bienvenida en cualquier momento.

No tengo más intenciones de involucrarme en las disputas entre clases.

Sin embargo, si ella me retara como individuo, entonces la aplastaré.

Si no tuviera la necesidad de proteger a mis colegas en la Clase C, no tendría que atormentarme la cabeza cada vez sobre las estrategias de Sakayanagi.