Uchi no Musume no Tame naraba, Ore wa Moshikashitara Maou mo Taoseru kamo Shirenai

Volumen 2

Capítulo 5: El Joven Hombre Llega a su Aldea Natal

Parte 3

 

 

A la siguiente mañana, la madre de Dale estaba congelada, completamente perdida.

Poco después del desayuno, declaró a su hijo, 「Sé que todos tienen sus peculiaridades, pero aun así, creo que Latina sigue siendo muy joven.」

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「Ni siquiera voy a preguntarte qué estás pensando de mí, Mamá, ¡pero es absolutamente algo erróneo!」

「Escuché que las gentes de la ciudad se casan más tarde, así que pensé que eso era por qué no habías encontrado una novia aún. Pero pensar que mi hijo le gustaran las—」

「¿Podrías parar? Latina puede escucharte.」

Cuando Magda fue a informar que el desayuno estaba listo, ella encontró a la pequeña niña en la misma cama que su hijo. Primero, ella encontró el cuarto de huéspedes vacío, lo cual la dejó pensando que era raro, y cuando abrió la puerta del otro cuarto, esa fue la vista que la esperaba. Su hijo, un adulto ya, durmiendo con una pequeña niña en sus brazos, y eso era ciertamente algo de qué preocuparse. Ella sabía que él mimaba a Latina, pero no sabía que había llegado hasta esto. Como su madre, era su deber ser la voz de la razón.

Luego de que soltara tremenda bomba, Magda miró a su hijo sentado a los ojos. Randolph, que sólo veía la conversación mientras comía, dio un sorbo a su té y asintió firmemente.

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「Ya veo… Así que tienes esa clase de gustos, ¿eh?」

「No digas eso tan serio, Papá.」

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Uchi no Musume no Tame Volumen 2 Capítulo 5 Parte 3

 

Fue entonces que la abatida Latina habló. 「Dale… Todo fue porque Latina fue egoísta. Lo siento…」

「¿Ven? ¡Latina los tomó en serio!」

「Ya, ya. Ella es tan buena niña」

「Claro」

「Mis padres sólo me están molestando, Latina. No te preocupes」

Habiendo dicho esto, Dale habló a sus padres otra vez. “He tenido que dejar a Latina en casa antes, así que no es como si no pudiera dormir sola. Pero ahora ella estaba en un lugar desconocido, así que claro, se puso nerviosa. Sólo lo hice para ayudarla a calmarse y sentirse segura.”

「Bueno, sigues siendo joven, Latina. Y está completamente oscuro en el país durante la noche, así que claro da miedo」 dijo Magda con una sonrisa, viendo a Latina con una expresión completamente diferente a aquella que mostró a su hijo.

「Claro」 agregó Randolph asintiendo.

「Te despertaste en un lugar con el que no estabas familiarizada, así que no es sorpresa que te hayas sentido abrumada. Ese hijo nuestro en verdad es malo」

「Sí」

「Ustedes…」*

「¿Ahora te refieres a tus padres como ‘ustedes’?」 Randolph replicó. (*N.T.: Puede que no suene la gran cosa, decir “Ustedes”, pero piensen en que dice “Ustedes” como en “Omaera”, en japonés, que es una manera ruda de referirse a alguien.)

「Haciendo esto en plena mañana… estoy exhausto…」

「Dale, ¿estás bien? Latina siente ser egoísta」

「¡Tú realmente eres la única que me hace sentir mejor, Latina!」 exclamó Dale, con un flujo de emociones saliendo desde el fondo de su corazón.

Luego del almuerzo, Dale dejó la casa sosteniendo manos con Latina, ella aun se veía un poco abatida.

Había un crispido aire esta mañana en Tislow, pero era más refrescante que helado. Ya era primavera en todos los lugares que visitaron en su viaje, pero en Tislow, la temporada apenas comenzaba. Las ramas tenían hojas verde-amarillo, y sólo había capullos junto a ellas. Las flores silvestres al lado del camino tenían colores suaves y gentiles. Era como si todas hubieran estado esperando florecer juntas para señalar la temporada.

Estas tierras estaban bendecidas por el poder de la tierra misma, así que claro que abundaba con paisajes como estos. En lugar de la capa que ella vistió durante el viaje, Latina ahora llevaba una estola sobre sus hombros. Era de un color rosado suave y estaba hecho de una gruesa y felpuda tela, así que era bastante abrigadora. También tenía un broche en forma de flor junto a ella, que la Abuela Wen había sacado de algún lugar en la mansión.

「Ella se está moviendo muy rápido…」 murmuró Dale, ignorando completamente sus acciones pasadas.

「Ese color te queda, Latina」

「¿Dale?」

「Es el color de la primavera, y es lindo. La Abuela hizo una gran elección」

Entendiendo lo que él estaba diciendo, soltó una tímida sonrisa. 「Es cálida」

「Eso es bueno」 Dale dijo con una sonrisa, y la de Latina se agrandó hasta ser la más brillante de las dos. Él apretó su mano un poco más, y así hizo ella.

Luego de dejar la mansión, fueron alrededor de la aldea en sentido de las agujas del reloj. No tan lejos del centro, Dale se detuvo en frente de una fila de edificios de aspecto similar y apuntó a uno de ellos.

「Ese es el taller público de la aldea. Hay muchas cosas peligrosas allí, así que no vayas ahí sola a jugar」

「Entiendo」

Era un edificio que los aldeanos usaban para manufacturar los dispositivos mágicos. Ya que había un gran número de secretos del clan involucrados en el proceso, incluso una joven niña como Latina no tendría permitido entrar ahí tan fácilmente.

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「Por allá está la oficina, es para cuando tengas asuntos que necesitan ser atendidos de inmediato. Al lado están los repartidores. Puedes mandar una carta desde ahí」

El edificio que Dale apuntó tenía una bandera verde-musgo con el emblema de una carta con alas que Latina reconoció. La jovencita estaba sorprendida.

「¿Hay un repartidores de cartas aquí?」

「Es porque nuestra aldea recibe pedidos de dispositivos mágicos de todos lados, y también lo usamos para informarnos de Laband」

Mientras Dale decía esto, llevó a Latina a la oficina. Era parte de la cabeza de la familia , y como el hijo mayor del siguiente líder del clan, Randolph, tenía que saludar a todas las personas de la aldea. Sin querer que las cosas sean incómodas para Latina, pensó que sería importante presentarla a ella también.

Terminando los saludos en el taller, pasaron entre los estrechos pasajes de entre las casas en la aldea. Pasando tan cerca les dio oportunidad de echar un buen vistazo a cada casa, las cuales todas tenía un jardín, algunas teniendo incluso pequeños huertos con vegetales y camas de flores.

「Hay muchas flores en Tislow」

「¿En serio? Bueno, todos las siembran y dejan crecer aquí, ya que las necesitas cambiar todos los días…」

「¿En serio?」

「Para la ofrenda a Quirmizi en el entrada」

「Huh…」

Viendo hacia arriba mientras hablaba de esto, latina vio campos gradualmente apareciendo a su vista en la distancia. Había un gran número de ellos en las inclinadas tierras alrededor de la villa. La vista del escenario, cortada por las paredes de piedra mientras el suelo se levantaba, era completamente nueva para Latina.

「¿Esos son campos? Parecen escaleras… ¡Increíble!」

「¿Eso piensas?」

Además de las campos estructurados como gradas, lo que más atraía la atención era el canal que corría por toda la aldea. La pura, fría agua fluía suavemente, sin estancamientos ni parches secos, pasando por el lado de cada casa hasta llegar a los campos. El agua fluía desde las fuentes en las montañas hasta el centro de la aldea. Que tuvieran acceso a esa agua para su vida diaria era también gracias a la bendición de la tierra. La aldea no sólo pedía prestado el poder de la tierra, pero también del agua, que era esencial para la vida.

Cada tanto, cuando los dos pasaban al lado de un aldeano, este miraba a Dale con sorpresa, solo para llamarlo de manera afectuosa al darse cuenta quién era. Dale se detendría entonces y respondía al saludo. Todo mientras Latina se ocultaba detrás de la espalda de Dale, nerviosa por el extraño en cuestión. Ella aferrándose a sus ropas y ojeando desde atrás debe haber sido un acto muy adorable, e hizo a Dale maldecir no tener ojos en su espalda para poder ver. Después de todo, detrás de él estaba su más grande punto débil. Latina prácticamente lo estaba matando, actuando tan adorable y estando tan cerca, aun así, él no era capaz de verla. Bueno, ella era linda, así que bien podía perdonarla por lo que sea.

Luego de pasar entre las casas, llegaron a la entrada de la villa, por la que habían entrado ayer.

「Este túnel es la única entrada y salida de la aldea, al menos, oficialmente」

Había una ruta a través del duro camino de la montaña rodeando la aldea. Estaba a cargo de la cabeza de la familia  y se supone era usada para emergencias. Aún incluso dentro del clan, solo pocos sabían de su existencia.

La calle principal de la aldea era un ancho camino que continuaba hasta la entrada y más allá. Tomaron este camino alrededor de la aldea y se dirigieron a las montañas.

「La casa del Maestro Cornelio es por aquí, presta atención」

「¿La escuela Asfariana?」

「Él abrió parte de su propia casa al público, así que podrías llamarla así」

A medias de ahí, el inclinado camino se convirtió en escaleras, al final de las cuales se levantaba una sola casa. Era un poco más grande que las otras en la aldea, quizás porque también servía como escuela. Pero a aparte de eso, no era diferente a las otras casas; incluso tenía la misma flor decorando la entrada.

「¿Esta es una escuela?」

「Técnicamente, sí」

Latina inclinó su cabeza, confundida; era una residencia privada común, no importa como la viera. Pero Dale, sin importarle un comino a lo que el edificio pareciera, se acercó a la puerta y la abrió de golpe sin tocar ni una vez, sorprendiendo a Latina aún más.

「¿Está el maestro?」

「¡¿D-Dale?! ¿Está bien entrar a la casa de alguien sin permiso así?」

Viendo a Latina algo avergonzada, Dale finalmente se dio cuenta de lo que le preocupaba.

「Ah. La gente no toca la puerta en nuestra aldea, y ninguna de las casas tiene seguro, así que usualmente solo entras y llamas」

「Hmm… eso es muy diferente que en Kreuz」

「Bueno, yo nací aquí, así que yo de veras me sorprendí al ver cómo las cosas funcionaban en Kreuz」

「Latina también se sorprendió al llegar a Kreuz también. ¡Había mucha gente!」

Mientras discutían esto, una mujer de cabello castaño-claro amarrado en una cola de caballo apareció desde el interior de la casa. Mientras ella calmadamente se aproximaba a la puerta, vio de quien se trataba y dijo, 「Oh, ¿eres tú, Dale?」

「Sí. Tiempo sin verte, Clarissa」

「Entonces volviste, ¿uh?」

「Llegué ayer. ¿Está el maestro?」

「Lo está. Por favor pase, y la linda jovencita también」

「Ah, es un gusto. Con permiso」

Esta joven mujer, Clarissa, hacía las cosas a su propio paso y parecía ser varios años mayor que Dale. Sus ojos cafés oscuros tenían una gentil luz en ellos, como reflejando su personalidad.

「¿Tienes alguna asunto con mi padre?」

「No vamos a quedar aquí por un tiempo, así que pensé en preguntarle al maestro si podía enseñar a esta niña, Latina」

「¿Ah? ¿Entonces prefieres a mi padre que a mí?」

Mientras Dale se quitaba los zapatos en la entrada, Latina se sentó apropiadamente, a removerse los suyos, y dejarlos en el suelo ordenadamente. Mientras él esperaba a que ella terminara, Dale seguía conversando con su vieja amiga de la infancia.

「No hay muchos sacerdotes como el Maestro en la aldea」

“Es cierto. No voy a negar eso.” Clarissa vistió una sonrisa mientras recibía a Latina adentro. 「¿Te importa si sólo te llamo Latina?」

「¡Está bien!」

Latina estaba nerviosa respondiendo a Clarissa, pero trató de mantener su compuesta expresión.

「¿Entonces viniste con Dale?」

「Así es. Latina vive con Dale en Kreuz」

「Oh vaya. ¿Cuándo encontraste a una niña tan linda, Dale?」

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「No voy a negar que Latina es linda,」 respondió Dale, tan serio como un hombre puede estar, y Clarissa solo sonrió en respuesta.

「Ella en verdad es linda」

No había nadie que pudiera interceder y detener esta tonta conversación.

Clarissa dirigió al par a un cuarto que parecía una biblioteca, con numerosas repisas que contenían vastas colecciones de libros: hacía una vista hasta abrumadora. Sorprendida, Latina miró por todo el cuarto y entró a la habitación. Era difícil imaginar que todo esto pertenecía a una sola persona. La escuela Asfariana en Kreuz ciertamente tenía una colección más grande, pero eso era en una de las principales ciudades de Laband, así que no tenía mucho sentido compararlas en primer lugar.

Pasando a través de las librerías, Latina vio una gran ventana, y enfrente de esta, un escritorio de igual largo. Mientras que los libros estaban metódicamente ordenados en sus repisas, encima del escritorio había una montaña de documentos. Y aun así, todo parecía tener su lugar y se sentía extrañamente ordenado. Enterrado entre todo esto, un hombre viejo trabajaba.

「Maestro Cornelio」 llamó Dale, y el hombre al fin lo notó, levantando su cabeza. Su cabello estaba blanco, y sus ojos detrás de esas grandes gafas redondas recordaban a los de Clarissa. Su cara arrugada por el tiempo cambió para mostrar su sorpresa.

「Ese soy yo. ¿Eres tú, Dale?」

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「Ha pasado un tiempo」Dale dijo, haciendo una reverencia con su cabeza. El hombre era Cornelio Cacace, el único sacerdote de Asfar viviendo en Tislow. Llevaba una gentil sonrisa, así como la de su hija. Era obvio que estaban relacionados.

「Parece que te has hecho un tanto famoso en el pueblo」

Invitado por Cornelio, Dale se sentó en un sofá frente a una mesa baja, y latina se acomodó al lado suyo. Esta clase de mueblería era rara en la aldea, y no podía ser vista desde la entrada del cuarto.

「Me sorprende que sepas de eso, Maestro, estando tan lejos en esta aldea」

「Tengo mis fuentes」

Mientras los dos chismorreaban acerca del pueblo y la capital, Latina permanecía un poco nerviosa. Eso terminó cuando Clarissa trajo un juego de té y pasteles.

「¡Guau!」Latina exclamó en admiración, antes de darse cuenta que había olvidado sus modales. Ella se sorprendió cuando encontró que todos la estaban viendo con miradas encantadas, lo cual la hizo sentir extremadamente avergonzada. Eso solo hizo a los adultos a su alrededor sonreír incluso más.

「Qué linda, sin dudas. Desearía que los niños en la aldea fueran así de bien portados…」 dijo Clarissa mientras preparaba el té. Viendo a Latina cautivada inmediatamente por el dulce platillo, ella lo colocó frente a la pequeña, donde pudiera echarle un mejor vistazo. Encima de los cubos de azúcar había varias flores decorativas.

「Uaa… hay flores en la azúcar… Qué lindo…」

Tú eres la linda, Latina. Parecía que incluso Dale era capaz de contenerse lo suficiente como para no decir eso en voz alta enfrente de su viejo maestro.

「¿Cómo hacen estos?」

「Oh, ¿quieres que te enseñe? Tienes tiempo, ¿verdad?」 Clarissa dijo, dejando caer un cubo de azúcar en el té. La flor decorativa flotó en la superficie. Eso sólo cautivó a Latina incluso más. Sus mejillas se enrojecieron un poco mientras veía la taza de té y, viéndose deleitada mientras la tomaba con ambas manos, ella murmuró, 「Guau. Es increíble… tan lindo…」

「Tú eres la linda, Latina…」 dijo Dale, llegando al límite de su autocontrol.

Luego de llevar la taza de té a su boca y humedecer sus labios, Cornelio comenzó una nueva conversación. 「Por cierto, escuché que causaste cierto escándalo en el pueblo.」

「¿Eh?」 Respondió Dale al repentino cambio de su maestro, pero la expresión de Cornelio no cambió.

「¿Está relacionado con esta niña? Escuché que involucraba a un joven demonio…」

Dándose cuenta de lo que estaba hablando, Dale no pudo sino ofrecer una rígida sonrisa.

「Tienes oídos agudos, Maestro. ¿De dónde escuchaste eso?」

「Los templos son como una pequeña comunidad. Lo suficiente como para que un escándalo se esparza a lo largo y ancho, no es algo que se pueda ocultar」

Cornelio siguió hablando, tranquilamente disfrutando su té. 「Por supuesto, las características de aquellos involucrados se esparcieron también. Me imaginé que fuiste tú de inmediato」

“Perdón por los problemas…」

“No, no estoy criticando tus acciones. Es bueno que los ignorantes, cerrados de mente presten atención al mundo de los rodea de vez en cuando.”

Dale estuvo agradecido de escuchar a Cornelio decir eso como si fuera nada. Él no tenía ni una pizca de arrepentimiento por lo que hizo, pero aun así, se avergonzaba un poco de saber que su viejo maestro se dio cuenta de ello. Dale no se sentiría tímido alrededor de cualquier otro sacerdote del templo de Kreuz, pero eso no era el caso cuando se trataba de Cornelio. Pueda que sirva a un dios diferente, pero seguía siendo un sacerdote de respeto.


「Hay muy poco sacerdotes Asfarianos que exploran el mundo como tú lo haces, ¿no es así, Maestro?」

「Eso no es cierto. Aquellos que sirven a Asfar simplemente caen en dos grupos: aquellos que se encierran en un templo y se devotan a sí mismos a sus estudios, y aquellos que se aventuran a buscar conocimiento nuevo y fresco」dijo Cornelio, dando un sorbo de té. 「Bueno, aquellos de vida estrecha y conservada que no saben otra cosa más que estudiar no saben ni qué hacer una vez son entregados al mundo exterior. Incluso aunque no lo hiciste con sus propias manos, ese fue un veredicto ciertamente cruel」

A pesar de sus palabras, Cornelio parecía algo asombrado. Él era normalmente una persona amable y gentil, pero al mismo tiempo, podía ser muy estricto hacia otros. Se indignaba especialmente cuando se trataba de escándalos causado con sus compañeros sacerdotes de Asfar.

Aquellos que servían a Asfar tendían a ser separados en aquellos que buscan conocimiento para ellos mismo y aquellos que pasan sus vidas estudiando en templos. Los últimos sólo conocían el estrecho mundo dentro de las paredes del templo, y ya que muchos devotos comienzan sus estudios desde muy temprana edad, no sabían nada de la sociedad. Podían seguir viviendo tranquilamente y sin problemas, siempre y cuando fuera dentro del templo. Por esa razón, además de perder su don desde nacimiento de la protección divina, era también una gran pregunta para aquellos que vivían fuera del templo sí podrían sobrevivir en el mundo exterior. Vivían sus vidas sin dificultades, después de todo. E incluso si han trabajado como profesores, aún tenían dificultades, siendo nadie estaría interesado en contratar a alguien que había causado suficiente escándalo como para ser exiliado de un templo. Considerando esas condiciones, la retribución de Dale de ‘ese incidente’ era mucho más cruel que cualquier otro castigo corpóreo.

「¿Dale?」

「Maestro Cornelio… No vine hoy sólo a saludar. Quería preguntarle si podía ayudar a esta niña mientras estamos aquí」 dijo, viéndose serio mientras se lo pedía a su maestro con una reverencia, sin querer que una preocupada Latina lo viera y notara. No sólo no quería que Latina recordara “ese incidente,” él tampoco quería que ella supiera que usó su propia autoridad para tomar venganza contra la perpetradora. Latina era una niña muy amable, así que incluso si es alguien quien la haya lastimado, ella se sentiría profundamente triste de saber que ella fue la razón por la que esa persona terminó lastimada al final. Dale no quería que eso pasara.


Mantener la mente de Latina en paz era una prioridad para Dale.

Siendo una niña lista, Latina sintió que Dale no tenía intención de contarle sobre el asunto. Ella no estaba feliz con ese hecho, pero dócilmente enrolló su lengua y miró hacia abajo.

「Clarissa es una de las mejores cuando se trata de hacer pasteles para el té, podrías pedirle que te enseñe. Aunque su cocina no es la mejor」

「Oye, qué malo」

「Si has mejorado, entonces me disculpo」

「¡Hm…!」

「Latina es probablemente mejor que tú en cuanto a cocina, Clarissa」

「¿Uh?」

Oírlo de repente presumir de ella seguro la sorprendió. 「Pero Dale, Latina aún tiene mucho que aprender, ¿no?」

「¡Ven, miren!, ¡Ella sabe cómo ser modesta, aun siendo tan joven! No sólo es linda, también es una gran niña, ¡¿verdad?! ¡No me avergüenza presumir de ella frente al maestro! Y es muy aguda, estoy segura aprender bajo la tutela del maestro será de gran beneficio para ella. Sé que estoy imponiendo, pero, ¿podrías ayudarla, Maestro?」

Sus palabras en sí pueden haber sido cuestionables, pero su expresión y actitud eran aquellas de un propio padre. A lo largo de estos pocos años, él había crecido acostumbrado a ser su padre.

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Viendo a Dale así, Cornelio sonrió. Como su maestro, él estaba alegre de ver cómo su estudiante había crecido. Mientras él estuviera feliz, entonces no podía pedir nada más.

***

 

 

Luego de dejar el hogar Cacace, Dale y Latina fueron alrededor de la aldea para finalizar las presentaciones. Por alguna razón, Latina terminó con un puñado de bienes en sus brazos para el momento en que terminaron.

「¿Por qué todos le dieron cosas a Latina…?」

「Porque eres muy linda」

「¿Hmm?」

Latina ladeó su cabeza, quizás sin notar su propio encanto. Ella era lo suficientemente linda como para sobresalir en un pueblo tan grande como Kreuz. En una aldea de campo así, su belleza era algo que nunca antes se había visto. Ella era tan educada y amable, así que era fácil de agradar.

En adición, ella siempre se veía feliz cuando comía. Por supuesto que la gente trataría de comprar su favor al darle comida. Más de una o dos personas había tenido esa idea, así que donde sea que esos dos fuera, alguien le daría a Latina algún dulce o fruta como presente.

「Bueno, no parece que nos vayamos a tener que preocupar por bocadillos por un rato…」

「¿Está bien aceptar todo esto…?」

「Está bien.」

Mientras hablaban, el par terminó su vuelta alrededor de la aldea y volvieron hasta la casa de Dale.

El paso que se extendía hasta las montañas podía haber sido corto, pero estaba muy bien cuidado. Caminaban a un paso relajado, con la luz del sol brillante a través de los árboles, creando complejos patrones de sombras en el suelo. Alrededor, también se escuchaba en sonido del agua.

Cuando llegaron al final del camino, Latina entendió por qué podía escuchar el sonido del agua desde tan lejos: era una cascada. Todo se abrió en un espacio semicircular, y alrededor, delgadas corrientes de agua de manantial caían por la gran roca. Cada una no llevaba mucha agua consigo, pero ya que eran numerosas terminaban formando un gran volumen en conjunto, creando una misteriosa vista.

「Guau…」 dijo Latina en admiración, y Dale sonrió satisfecho.

Dale llevó a Latina de la mano al pie de la cascada, ya que la superficie rocosa y mojada era fácilmente resbaladiza.

「¡Increíble!, ¡Es muy bonito!」

Acercándose, Latina felizmente puso su mano en el agua, y saltó porque se sorprendió de lo helada que estaba. Era agua de manantial después de todo, no se calentaba, sin importar la estación.

「¡Está fría!」 Aun así, Latina parecía muy contenta, y una vez más, metió ambas manos al agua cristalina. 「¡Es tan bello!, ¡Es como un templo!」

Dale estaba un poco sorprendido de escuchar a Latina decir eso. Había un santuario pequeño para Quirmizi al lado de la cascada, pero tenía una simple y modesta apariencia. Y aun así, Latina fácilmente reconoció que este lugar tenía una fuerte sensación al poder de los dioses.

「Pregunta, tú no tienes una protección divina, ¿verdad?」

「No, Latina no tiene. Ella sólo pensó que parecía un templo. Ella siente que parece más un templo que los que hay en Kreuz.」

「Los templos en las ciudades son lugares hechos para personas, para que adoren a los dioses. El poder de los dioses no es tan fuerte en esos lugares, contrario aquí」

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「Huh…」

「Es increíble que puedas sentirlo, Latina…」 Dale dijo con una sonrisa. 「Puede que en verdad seas amada por los dioses…」

Y luego añadió, 「¡Eres tan linda!」

Arruinó completamente el ambiente.

Sus palabras eran cuestionables como siempre.

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