Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 6

Capítulo 8: Invocación del Héroe

>>No importa que tan oscura sea la hora, nunca nos rendiremos ante la desesperación. Hayato el Héroe siempre será el último faro de esperanza. Mientras lo tengamos, podremos superar cualquier cosa. (Ringrande, seguidora del héroe). <<

Todos nosotros los “Seguidores del héroe” llevamos un talismán protector otorgado por la diosa Parion.

Este tesoro sagrado extrae el poder de las oraciones de las personas y las vidas de los seguidores para realizar milagros.

Nunca me había encontrado en una situación tan sombría en la que tuviera que usar el talismán.

Y esa mañana nunca imaginé que tendría que hacerlo en mi propia ciudad natal…

Ese día, desperté con un humor melancólico.

Era el día que había programado para tener una batalla falsa con el Príncipe Sharorik para entretener a Su Majestad el rey y el resto de la audiencia en las finales del torneo.

Debí haber esperado y venir con Hayato y los demás en lugar de seguir adelante. ¿Ya habrán dejado el Emirato de las Ratas Grises en el Jules Verne? Me pregunto.

“Lady Ringrande, es hora. Por favor proceda a la arena.”

Regresé a la realidad, gracias al joven oficial que me había llamado, y me puse de pie.

Saludando a la audiencia mientras vitoreaban mi nombre, me dirigí hacia el campo de batalla.

“En verdad, que farsa es esta…”

Nunca supe que tan pesado se sentiría mi corazón por una batalla que tenía prohibida ganar.

El peso de la armadura mágica— llamada Chaftal, la cual recibí cuando me uní al grupo del héroe— se sentía especialmente genial, y mis pasos se arrastraron.

Desearía poder estar haciendo algo mas, como  entrenamiento de espada con Satou. El chico era joven, pero absorbía técnicas a una velocidad sorprendente. Sus habilidades habían mejorado enormemente en el corto tiempo desde nuestra primera reunión en el barco hasta nuestro encuentro de ayer. Quizá algún día incluso se unirá al grupo de Hayato y me acompañará al lado del héroe.

Mientras fantaseaba sobre tal agradable futuro, entré al círculo que designaba mi posición inicial.

Al verme llegar, un mozo llamó a Su Alteza, quien apareció desde una sala de espera.

Las jóvenes chicas gritando y llenando el estadio no tenían idea de su verdadera naturaleza.

Con un suave y metálico shing, el príncipe sacó la Espada Sagrada Claíomh Solais de su funda azul.

…Era hermosa.

Nunca había visto una espada tan fina.

La luz azul de otro mundo irradiando de la hoja la hacía incluso más cautivadora.

Encantada por la magnificencia de Claíomh Solais, recordé a mi querido héroe Hayato y su Espada Sagrada Arondight.

En mi memoria, brillaba un intenso azul que recordaba la confiabilidad en vez de la belleza.

“El encuentro de exhibición entre la Bruja de la Destrucción Celestial Lady Ringrande y el Portador de la Espada Sagrada el Príncipe Sharorik, comenzará ahora.”

El árbitro estaba vestido como un bufón mientras anunciaba nuestros nombres.

El príncipe frunció el ceño, probablemente disgustado con el orden en que nuestros nombres fueron leídos. Malhumorado como siempre.

A la señal de inicio, suministré a mi armadura Chaftal con poder mágico.

Sus circuitos encantados me otorgaron Fortalecimiento de Cuerpo y crearon varias capas de magia de defensa física sobre la armadura.

No era terriblemente eficiente con el MP, pero podría enfrentar graves heridas si no lo usaba contra una Espada Sagrada.

A continuación, infundí mi espada de relámpago con poder para invocar ‘Lightningblade’.

Obtuve esta poderosa arma al derrotar a un maestro de piso en un laberinto. No era tan fuerte como una Espada Sagrada, pero aún presumía de un rendimiento más alto que cualquier Espada Mágica ordinaria.

“■■■— ¡Ah!”

Sintiendo el peligro, corté mi breve canto de fortalecimiento mágico y salté a un lado.

Bolas de fuego ardían en todo el lugar donde había estado parada, llamas explotaban tras mi espalda.

…¿Una Vara de Fuego? No, con esa velocidad, debe ser una Vara de Llamas.

¿No es esa un arma militar? ¿Qué está pensando ese estúpido príncipe?

“¿Trae recuerdos, no es así? Tu misma lo hiciste en la academia.”

La Espada Sagrada del príncipe dejó restos azules en el aire mientras se deslizaba hacia mí.

¡Tan rápido! Quizá la leyenda de que Claíomh Solais podía volar era realmente cierta.

Bloqueé la Espada Sagrada con mi espada.

¡Que golpe tan pesado! Me iba a lastimar las muñecas a este ritmo.

En lugar de transferirse a la Espada Sagrada, el relámpago en mi espada se dispersó en el aire. Si fuera una espada ordinaria, fácilmente habría paralizado o incluso golpeado a mi oponente hasta la inconsciencia.

Regresando el favor, blandí mi espada hacia las piernas del príncipe, pero la barrera generada por la armadura blanca del príncipe la detuvo.

Por supuesto. Su armadura era un artículo legendario hecho en la era del rey ancestral Yamato, después de todo. No era sorpresa que tuviera defensas similares a la Armadura Sagrada de Hayato.

Añadí mas poder mágico a Chaftal para mejorar su defensa.

Por el momento, dejé que mi armadura me protegiera de la espada del príncipe y me concentré en atacar.

Usar habilidad: “Atacar.”

Mi precisión será menor, pero mis ataques serán más poderosos.

Usar habilidad: “Spellblade.”

Mi espada brilla con luz roja.

En general no me gusta desperdiciar magia de esta manera, pero este no era el momento de ser conservadora.

Usar habilidad: “Sharpblade.”

No tengo intención de matarlo, por supuesto, pero tenía que atacarlo con todas mis fuerzas si quería romper sus defensas.

“¡Hoja Giratoria del Torbellino!”

No estaba segura de por qué, pero grité el nombre del ataque sin pensar. Los tontos hábitos de Hayato se me deben haber contagiado.

Asumí que el príncipe bloquearía el ataque, pero en vez de eso le di un golpe directo, perforando a través de la barrera de su armadura.

Maldita sea. Si no me detengo ahora, podría ganar el encuentro.

Me las arreglé para matar el impulso de mi espada y me detuve justo antes de darle al príncipe un golpe mortal.

Pero por supuesto, él no pasaría por alto una apertura como esa.

Claíomh Solais me golpeó justo en el costado, y salí volando cruzando la arena como una pelota.

Ovaciones, gritos y burlas me sacudieron y despertaron. Debo haberme desmayado por un segundo.

A través de mi nebulosa visión, vi bolas de fuego volando hacia mí en rápida sucesión.

Detener mi ataque debe haber herido el inflado orgullo del príncipe. La furia en sus ojos era alarmante.

Usé el corto hechizo Ráfaga Rápida de la Magia de Explosión para destruir las bolas de fuego.

Pero nuestra batalla terminó aquí.

Fue interrumpida por los aullidos de extrañas figuras que brotaban del suelo bajo los asientos de la audiencia… y el círculo de invocación que crearon en el cielo.

TODOS ESTAMOS EN PELIGRO.

Mis instintos provocaron una advertencia tan fuerte que sentí como si mi cráneo se rompiera.

Rápidamente comencé un canto de Explosión Mágica.

“■■■■■■■■—”

“Renuncias a la espada y recurres a la magia, ¡¿Verdad, Ringraaande?!”

El príncipe cargó hacia mí con su Espada Sagrada.

Esto no era bueno. Él no había notado el círculo de invocación sobre nosotros; yo fui la única que lo vio.

Tuve que detener mi canto para esquivar su ataque.

Debí haberlo terminado con mi espada antes. Ahora me había impedido que detuviera la invocación.

Pies amarillos con garras descendieron del círculo de invocación, seguidos por el resto del enorme cuerpo.

Era un demonio— un demonio mayor.

Repentinamente, recordé algo que Hayato me había dicho antes.

Una vez se vio forzado a huir de un oponente: un demonio mayor de color amarillo.

Con amargura, dijo que la mitad de su grupo se había sacrificado para que él escapara. En ese entonces, no podía creer que algo pudiera derrotar a Hayato y su increíble poder, pero ahora lo entendía.

Esta criatura estaba en un nivel completamente diferente.

¿Los señores demonios en verdad eran más fuertes que este?

Una vez que emergió completamente, el demonio cayó al suelo. Era tres veces más grande que cualquier humano, y los temblores de cuando aterrizó eran casi suficientes para derribarme.

Tan solo la diferencia física hizo que mi corazón temblara.

Imposible.

Nunca podría derrotarlo. No podía siquiera envolver mi cabeza alrededor de su existencia.

Mi alma gritaba para que huyera.

Pero justo cuando mi corazón amenazaba con romperse, una inesperada voz me detuvo.

“¡Demonio! No— ¡Señor demonio! ¡Prepárate para encontrarte con tu destino!”

El príncipe le gritó al demonio amarillo sin una sola pizca de miedo.

Él no estaba aparentando. Si él era suficientemente valiente como para aparentar en una situación como esta, podría no haber terminado nuestro compromiso.

…No se da cuenta de que tan fuerte es nuestro oponente.

El demonio amarillo inclinó sus dos cabezas, luego miró la espada del príncipe.

“ESA ESPADA ES CLAÍOMH SOLAIS, ¿NO ES ASÍ? ENTONCES DEBES SER UN DESCENDIENTE DE YAMATO.”

Por debajo de su áspera voz, podía escuchar algo como un aullido.

¡Ah! Su otra cabeza está cantando mientras habla.

En un esfuerzo por interrumpir su canto, disparé veloces Ráfagas Rápidas a sus cabezas.

Pero fue capaz de defenderse de la débil magia menor con su mano. La velocidad por si sola no sería suficiente.

Activo “Reducción de Canto”, luego comencé a invocar Explosión.

Probablemente no podría lograrlo a tiempo. Pero no iba a dejarlo lanzar un hechizo tan fácilmente. Podría al menos robarle su cabeza cantante a cambio.

El canto del demonio amarillo terminó, y un círculo de invocación apareció en el suelo para producir grandes monstruos. Había escorpiones, mantis y escarabajos de dos cuernos, todos ellos eran poderosos enemigos.

Poco después de que los monstruos surgieran, mi hechizo Explosión golpeó al demonio en la cabeza.

Desafortunadamente, cuando el fuerte boom se desvaneció y el polvo se asentó, el demonio estaba ileso al menos por las apariencias.

Claramente, no había hecho mucho daño. El demonio debe tener una alta resistencia a la magia.

“HMHP, ESO ME  ARAÑÓ UN POCO.”

Ignorando la burla de la criatura amarilla, miré alrededor de los asientos.

Los monstruos todavía se desbordaban del círculo de invocación y avanzaban hacia los espectadores, al príncipe y a mí. Quería rescatarlos, pero el demonio amarillo nunca me dejaría apartar mis ojos de él.

Justo entonces, la inspiración golpeó.

Había guerreros del torneo entre la multitud; ellos podrían encargarse de los monstruos.

Usé la habilidad “Amplificación” para dirigirme a los peleadores.

“¡Valientes guerreros! ¡Deben proteger a sus vecinos! ¡Ahora es el momento de demostrar su valor en batalla!”

Escuchándome, la mayoría de los guerreros comenzaron a pelear para proteger a los otros ciudadanos. Sin embargo, algunos de ellos estaban demasiado abrumados por el caos para pensar claramente y comenzaron a lanzar hechizos de ataque a pesar de todas las personas cercanas.

“Usuarios de magia, céntrense en fortalecer a los guerreros, no en la magia de ataque. ¡Trabajen juntos para derrotar a los monstruos!”

Mis palabras parecieron alcanzarlos, y comenzaron a cooperar para cambiar el rumbo de la batalla.

Esos hombres y mujeres eran fuertes. Mientras mantengan su ingenio con ellos, no deberían tener problemas con monstruos como esos.

Blandí mi espada de relámpago para encargarme de un monstruo ciempiés con tentáculos.

Un escarabajo lanza trató de atacar mientras me encontraba distraída, pero voló justo a través de la ilusión creada por mi armadura mágica Chaftal.

Viendo el número de monstruos de los que me estaba defendiendo, algunos de los guerreros escalaron la barrera de la audiencia para ayudarme.

Ellos podrían encargarse de la horda. ¡Yo tenía que hacer algo con el círculo de invocación!

Con los preciosos segundos que me compraron, canté Romper Magia para destruir el círculo de invocación.

“HMPH, NO HAY UN HÉROE A LA VISTA, ¿CIERTO? ¿QUE VOY A HACER CON EL REGALO QUE TRAJE?”

El demonio amarillo cantó hechizos de apoyo sobre los monstruos invocados mientras murmuraba para si mismo. No parecía preocupado en lo mas mínimo de que yo rompiera su círculo.

“QUE EXTRAÑO ES ESTO. PENSÉ QUE EL AZUL O EL ROJO SE MOSTRARÍAN DE INMEDIATO SI YO HACÍA UN ESCANDALO.”

Un ciempiés devoró a uno de los guerreros conteniendo a los monstruos por mí. Me apresuré para ayudar, pero parecía que no podríamos recuperar las líneas del frente. Mientras empujaba hacia adelante, los guerreros gravemente heridos se retiraron.

Si tan solo Hayato y nuestras amigas estuvieran aquí para ayudar…

“¡Ah-ha-ha! ¿Tiene problemas ahí, señorita?”

“No te distraigas, muchacho.  Debemos ir a ayudar a Su Alteza.”

El joven caballero y Sir Reilus de los Ocho Espadachines pasaron en su camino para ayudar al príncipe. Sin reducir la velocidad, el chico caballero cortó unas cuantas de las piernas del ciempiés.

Mientras el monstruo estaba distraído, robé un par de segundos para un canto y usé tres hechizos de Explosión para derrotarlo.

Cada uno tomaba mucho tiempo para invocarlo, pero gracias a los efectos de aturdimiento y noqueo del hechizo, logré encontrar el éxito.

“El legendario general demonio… ¡Verdaderamente un digno oponente!”

El grito de Sir Reilus atrajo la atención del demonio hacia él y su Escudo Sagrado. Probablemente usó la habilidad “Provocación” en su voz.

El demonio disparó un torrente rojo al viejo caballero.

Increíble.

Reilus no titubeó ni por un momento, protegiendo al príncipe y al otro caballero del hechizo Infierno.

El debe haber sido ayudado por la magia, pero aun no había imaginado a nadie además de Hayato que pudiera bloquear un ataque como ese.

“¿OH? ESE ESCUDO TRAE RECUERDOS. ¿QUE TAL ESTO, ENTONCES?”

Una bola de llamas blancas voló había Sir Reilus

La superficie del Escudo Sagrado rechazó la mayoría de las llamas, pero unas cuantas rayas anguladas lamian alrededor del escudo y al caballero detrás de él.

No podía dejar que lo mataran. Sin Reilus, no quedaría nadie para mantener las líneas frontales.

Si Hayato estuviera conmigo, yo…

Como inspirada por mis pensamientos, luz azul brotó de mi pecho a través de los huecos en mi armadura.

…Quizá ahora era el momento.

Me quité los broches de mi placa de pecho y saqué el brillante talismán azul.

Cuando los deseos por un héroe se unen a las oraciones a la diosa Parion, el talismán puede crear un milagro.

Y ese milagro es llamado “Invocación del Héroe.”

Si los deseos y oraciones no son suficientes, el milagro consumirá la vida del usuario a cambio.

No quería morir, por supuesto.

Pero si quería proteger mi ciudad natal, solo podía orar por un milagro.

“¡Oh Gran Parion! ¡Por favor, usa mis deseos y mi vida para promulgar una Invocación del Héroe!”

Este no fue un canto mágico…

“¡Soy una seguidora! ¡Soy Ringrande, seguidora de Hayato el Héroe!”

Fue una oración a la joven diosa Parion.

En respuesta a mi deseo, el talismán en mi pecho brilló.

Ahora, Jules Verne, ven rápido.

¡Trae al héroe al campo de batalla!