Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Volumen 7

Bonus 5: Aunque Sea La Princesa

La mañana después de que los Haulia derrotaran al imperio, Liliana se sentó en su habitación y suspiró para sí misma.

“¿Cuál parece ser el problema, princesa?” preguntó Helina. Como Liliana ni siquiera se había dado cuenta de su suspiro, la pregunta de su criada la sorprendió un poco.

“Parecía que te preocupabas por algo, por los suspiros y todo eso”, agregó Helina.

“¿Eh? ¿Suspiré? Estaba pensando en los eventos de anoche, realmente…”

Al escuchar su vaga respuesta, Helina asintió comprensivamente.

“Ya veo. Entonces, su cabeza estaba llena de pensamientos sobre Nagumo-sama”.

“¿De qué estás hablando?” Aunque Liliana se las arregló para mantener su expresión neutral, no pudo evitar difuminar sus palabras, ni tampoco pudo detener el rubor que se arrastraba por su cara.

“Sé que es un poco presuntuoso de mi parte dar consejos, pero creo que deberías hacerlo, princesa.”

“¡No tengo ni idea de a qué te refieres!”

“Que yo sepa, él es tu primer amor. Puedo entender por qué estás tan nerviosa. Sin embargo, lo diré de nuevo. ¡Sólo tienes que ir a por él! Tus rivales son demasiado fuertes para que las sutilezas funcionen. A menos que actúes agresivamente, ¡no tendrás ninguna oportunidad contra ellas! ¡Muéstrale el temple de una princesa, Liliana-sama! ¡Apúrate y ve a buscarlo ya!”

“¡Cálmate, Helina!”

Ambas chicas estaban respirando con dificultad en este momento.

“Mis disculpas. Es sólo que siempre has puesto tus deberes como princesa en primer lugar desde que tengo memoria, Liliana-sama, así que me alegré mucho de verte finalmente actuando como una chica normal por una vez…”

“No quería que nadie se enterara, Helina…” Liliana no había estado planeando decirle a nadie que había caído en el caos de lo irracional que era Hajime.

“Pshaw, todos los que te vieron en el baile ya lo saben, Princesa. Llevabas tus sentimientos en la manga”.

“¿Fue realmente tan obvio?”

Helina asintió con la cabeza, una enorme sonrisa en su rostro, lo que sólo hizo que Liliana se sonrojara aún más.

“Independientemente de cómo vayan las cosas, a menos que intentes cortejarlo un poco más, es probable que se olvide de que existes. Dime, ¿estás realmente bien con eso?”

Yo… realmente no quiero que eso pase. Liliana agitó la cabeza.

“Pero, ¿cómo se supone que voy a cortejar a alguien en primer lugar? Err, no es que planee cortejar a Nagumo-san, ya que soy una princesa y todo eso, pero sólo por referencia.”

“Entendido, Princesa. Permíteme enseñarte todo lo que sé”.

Liliana vio a su sirvienta inclinarse ante ella con una mezcla de temor y esperanza en su corazón.

Treinta minutos después, Liliana encontró a Hajime trabajando en transmutar algo.

“Umm, ¿Nagumo-san? ¿En qué estás trabajando?”

“¿Hm? ¿Princesa? ¿Qué es lo que…?” Hajime detuvo lo que estaba haciendo y se dio la vuelta. Lo que vio le dejó sin habla. Junto a él, Yue y las demás también se quedaron sin palabras.

“¿¡Lily!? ¿Por qué llevas nuestro uniforme escolar?”

Liliana llevaba una réplica perfecta de Kaori y del uniforme de la escuela de los demás. Una chaqueta y falda corta, calcetines negros y mocasines. Incluso tenía una réplica de la insignia de la escuela.

“Lo encontré por casualidad en mi equipaje, así que pensé en probármelo”.

¿Qué clase de coincidencia lleva a eso? Hajime pensó para sí mismo. En realidad, Helina había sospechado durante mucho tiempo que Liliana podría necesitar un uniforme como este y había cosido una réplica por si acaso. Liliana sacó un cuaderno falso de estudiante de su bolsillo y comenzó a leerlo. Después de confirmar el contenido, se reafirmó e hizo un rápido giro delante de Hajime.

“¿Cómo fue eso?”

Yue y las demás se dieron cuenta instantáneamente de lo que estaba pasando. ¡Esta chica quiere unirse a la lucha! La pelea sobre quién se queda con Hajime, por supuesto.

“Realmente no sé qué decir…” Dándose cuenta del ligero cambio en la atmósfera alrededor de Yue y las demás, Hajime decidió jugar a lo seguro. Decepcionada, Liliana una vez más revisó su cuaderno de notas.

“¿De verdad tengo que hacer esto?” Liliana parecía nerviosa y miró por encima de su hombro mientras decía eso. Desde detrás de la puerta, Helina le dio un pulgar. Ruborizada, Liliana le dio una palmada en las mejillas, desató resueltamente la cinta y desabrochó los primeros botones de su blusa.

“Oh no, tropecé,” dijo ella con voz claramente ensayada, y tropezó hacia Hajime. Con un suspiro, esquivó el camino y la agarró por la parte de atrás de su cuello. Entonces, la levantó como si fuera un gato, y agitó la cabeza. Como siempre, Hajime no tenía respeto por el corazón de una doncella.

“¡Por favor, espera, Nagumo-san! Helinaaaaaaaa, qué se supone que debo hacer…” Desafortunadamente, Helina no estaba en ninguna parte.

“Mira, princesa. Estoy ocupado ahora mismo, ¿entiendes?” Un portal se abrió a su lado mientras decía eso, y Liliana miró incrédula a Hajime. Seguramente no lo haría.

“Ve a jugar un rato con tu criada”, dijo, y luego lanzó sin piedad a la princesa a través del portal. Aterrizó justo encima de Helina después de que se cayó.

“Sniffle… Aunque soy una princesa… él todavía me trata así… Oh, y Helina, ¡no creas que te saldrás con la tuya!”

Los arrepentidos y resentidos lamentos de Liliana resonaron por las salas del castillo imperial durante bastante tiempo.