Tate no Yuusha no Nariagari (NL)

Volumen 4

Capítulo 5: Filo vs. Fitoria

Qué calor…

―¡Gaaah!

Podía escuchar un montón de filolials gritando al unísono, y mi cuerpo se sintió caliente y oprimido. Cuando abrí los ojos, me di cuenta de que estaba completamente rodeado de filolials compitiendo por acercarse a mí.

―¡¿Q-Qué está pasando?!

―¡Hey! ¡Maestro es MÍO!

Filo estaba apartando avariciosamente a los demás filolials en un intento de tenerme para ella sola.

―Oh, vamos…

Cuando finalmente recuperé los sentidos, noté que era mediodía.

Si empezaba a cocinar y a relajarme, ¿terminaría el día igual que la noche pasada?

―Hey, ¿es cierto que luchaste contra el legendario Rey Grifo?

―Síp, lo hice. Para ser exactos, en realidad era un monstruo creado por un humano modificando grifos normales. Hizo tantos que todos los filolials voladores desaparecieron. El cielo estaba lleno de bandadas de grifos volando.

―Vale, pero ¿derrotaste al Rey Dragón?

―Así es. Le despedacé, pero él seguía regenerándose. Eso complicó la batalla.

―¡Guau! Eh, ¿es verdad que la Espada Sagrada legendaria descansa en el santuario filolial?

―Hay una espada sagrada, pero no sé de ninguna espada legendaria. No creo que haya nada como eso. Aunque algunas de las armas de los antiguos Héroes todavía se encuentran aquí.

Los ojos de Melty estaban brillando otra vez, y no hacía otra cosa que disparar preguntas a Fitoria como una ametralladora. Al mismo tiempo, Filo se encontraba a un lado observando. Estaba claramente celosa.

Es una escena divertida. Espero que su amistad pueda sobrevivir a ella.

―Bien, ya hemos descansado. ¿Qué deberíamos hacer ahora?

Comí un almuerzo ligero y me giré hacia Fitoria. Realmente no podíamos perder el tiempo oliendo flores… o comiéndonoslas.

Supuse que Fitoria era probablemente lo bastante fuerte como para teletransportarnos a todos a dónde estuviese la reina. Aunque tenía que encontrar una forma de convencerla para que nos ayudara.

―Vale… veamos pues.

Fitoria se puso de pie y comenzó a lanzar un hechizo sobre Melty. El viento se levantó y formó una especie de jaula a su alrededor.

―¡¿Q-Qué es esto?!

Melty agarró los barrotes e intentó escapar, pero estaban afilados y le hicieron un corte en la mano. Un poco de sangre goteó desde su dedo.

―¡¿Qué estás haciendo?!

Filo estaba mirando con furia a Fitoria.

―Mel-tan, tendrás que ser mi rehén por ahora.

―¿Por qué?

―…

Fitoria no respondió, pero siguió mirándonos fijamente. El aire estaba crepitando por la tensión.

Esto es… ¿es la continuación de lo que estuvo diciendo la noche anterior? ¿Va a matarnos… y después ir a asesinar también a los otros héroes? Probablemente deberíamos asumir eso.

―¡Melty!

Raphtalia llamó a Melty.

Maldición… ¿tenemos que pelear contra este filolial gigante aquí?

No podía imaginarme ninguna forma de ganar. El área estaba rodeada de una atmósfera amenazante, pero no venía de mí. ¿Qué otra opción tenía además de usar el Escudo de la Ira?

―No debes usar el poder maldito.

Se encendió una luz alrededor de mi escudo.

Debido a una interferencia, no es posible cambiar de escudo.

…Ese mensaje apareció en mi campo visual. Era lo mismo que había sucedido el día anterior.

―Te ruego que me escuches.

―¿Por qué debería escuchar a alguien que se comporta de esa forma?

―Si te niegas a hacerlo, no tendré más opción que matar al resto de los Héroes.

―Qu…

Probablemente podía hacerlo. Era considerablemente más fuerte que nosotros, pero sobre todo debido al hecho de que no habíamos sido capaces de causar ningún daño real al Dragón Tiranosaurio Rex. Pese a lo poderosa que era esa bestia, Fitoria la había derrotado sin ningún esfuerzo. ¿Y ahora nosotros teníamos que luchar contra ella?
Perderíamos.

―Sabes que no hay forma de que nos llevemos bien.

―¿De qué estáis hablando?

―Anoche, esta chica dijo que nos mataría a todos si los Héroes no empezábamos a trabajar juntos.

―¿Reconciliarse con los otros Héroes? No estoy segura de que eso sea posible.

Raphtalia frunció el ceño y pensó durante un momento. ¿Había entendido Fitoria siquiera lo que estábamos diciendo? ¿No sería peor mentir y decir que todos éramos amigos?

―Muy bien. Entonces…

Fitoria levantó el dedo índice y señaló a Filo.

―Solicito un duelo con el filolial que has criado. Si es lo bastante fuerte, liberaré a Melty y le ofreceré un aplazamiento.

―¿Qué se supone que significa eso?

―Ya lo descubrirás.

¿Qué quiere de mí?

―Lucharé en mi forma actual. Filo, te pido que tú también pelees en esta forma.

¿Tienen que combatir en forma humana? Filo podría tener una posibilidad, después de todo…

Si peleasen en su verdadera forma, Filo no tendría ninguna opción de ganar, pero si ambas eran humanas, tal vez podría conseguirlo. Afortunadamente, contábamos con un arma que Filo podía usar cuando estaba en forma humana.

―¡Vale!

Filo se llevó las manos a la parte de detrás de sus alas, en su espalda, y sacó los guantes de poder.

El viejo que dirigía la tienda de armas los había hecho originalmente para mí, para que pudiese arrastrar el carruaje si era necesario. Pero la magia de Filo los había transformado en algo más parecido a garras. También nos fueron de utilidad la última vez que nos enfrentamos a Motoyasu. Y, aun así…

―¡Eh! No empieces sin más por tu cuenta.

―Sí, Filo. Deberías hacer caso a lo que dice Naofumi-sama.

―¡Pero Mel…!

―Si no peleas, moriremos todos. En realidad no tenemos otra opción.

―Maldición…

Parecía que Fitoria planeaba hacer el primer movimiento. Me ponía nervioso pensar que lo único que podía hacer era quedarme a un lado y mirar. Podría estar planeando derrotar a Filo y después matarnos a nosotros igualmente, y no creo que yo fuese capaz de detenerla. No teníamos ninguna otra opción.

―…Está bien.

―Entonces, permítenos empezar.

Fitoria levantó la mano y apareció un muro formado de aire entre ellas y el resto de nosotros. Separadas por su cuenta, Fitoria y Filo estaban en algo así como un ring.

―Debes permanecer en tu forma humana mientras estés dentro de este perímetro. Las reglas no pueden ser infringidas.

―¡Salvaré a Mel! ¡No perderé contra Fitoria!

Estaba muy inquieto por tener que quedarme atrás observando la batalla. Si veía que Filo se encontraba mínimamente en problemas, rompería las normas e interferiría.

―¡Allá voy!

Filo levantó los guantes y cerró los ojos, concentrándose. Los guantes se transformaron en garras y Filo se los puso antes de precipitarse hacia Fitoria.

―¡Ya!

Nuestra filolial fue la primera en atacar. Saltó en el aire y giró para asestar una patada en el estómago de Fitoria.

―Qué aburrido.

Fitoria levantó la mano y detuvo la patada fácilmente.

―¡Guah!

El retroceso de la patada bloqueada hizo que Filo se diese la vuelta, quedando de espaldas a Fitoria, la cual comenzó a lanzar puñetazos uno detrás de otro. Filo se las estaba arreglando para esquivarlos, pero entonces el suelo tembló. Fitoria había golpeado el suelo con la planta de los pies y formado un cráter a su alrededor.

¿Cómo de poderosa es esta chica?

―¡Puedes hacerlo, Filo!

Gritó Melty desde el interior de su jaula.

―¡No voy a perder!

Filo se giró hacia Fitoria y lanzó un golpe con las garras. En ese mismo momento, Filo pareció volverse borrosa.

―¡Demasiado lenta!

¡Clang!

Se produjo un sonido metálico muy fuerte, pero Filo había logrado esquivar el ataque doblando con destreza la espalda hacia atrás.

―¡¿Q-Qué?!

―Demasiado lenta.

―Ugh…

Filo gimió con una voz que raramente se le podía escuchar.

―Es muy rápida. Pero no voy a perder.

Filo enderezó la espalda de nuevo y cruzó los brazos antes de correr hacia delante. ¿Ya estaba utilizando su mejor ataque?

―¡Haikuikku!

De repente, Filo se convirtió en una imagen borrosa y el aire se llenó de los ecos de los ataques al golpear.

―Ya te lo he dicho. Demasiado lenta.

Fitoria levantó y bajó lentamente los brazos. Después giró uno de ellos suavemente siguiendo una trayectoria circular. No hizo nada más, pero…

―¡AAAAAAH!

Filo estaba dando vueltas a través del aire. Se retorció, y las alas de su espalda se abrieron. Se opusieron al avance del aire y aterrizó de pie con suavidad.

―¡Has bloqueado mi mejor ataque!

―Mel es tu amiga, ¿no? Si no peleas con todas tus fuerzas…

Fitoria estaba de pie con ambas manos en las caderas, provocando a Filo. Parecía estar decepcionada por el desempeño de su contrincante. De repente, la jaula de Melty se contrajo; su tamaño se estaba reduciendo.

―¡Guah!

Melty se retorció y encogió los hombros para evitar que los barrotes la cortasen. Filo lo vio horrorizada, y algo se rompió dentro de ella.

―¡Mel! Uh…

Las alas de Filo se abrieron y apuntó con las garras hacia Fitoria. Entonces atacó. Fitoria no se movió, tampoco esquivó el ataque ni trató de defenderse. Saltaron chispas cuando el ataque la golpeó, pero ella permaneció ilesa.

Impresionante. ¿Realmente era lo suficiente fuerte como para ignorar los ataques de Filo? ¿Qué podía decir? Filo era la que mayor poder de ataque tenía en nuestro grupo, y por mucho. Si Fitoria podía jugar con ella de esta forma… debía tener una gran cantidad de experiencia.

Me pregunto a qué nivel está.

―¡Entonces toma ESTO!

Fitoria cerró los dedos formando un puño y lanzó un contraataque contra Filo. No la golpeó, ni siquiera la rozó, pero aparentemente la ropa de Filo fue desgarrada por el ataque.

―No creo que unas ropas mágicas como ésas puedan protegerte.

Continuó golpeando, y esta vez los ataques parecían estar conectando.

Maldita sea…

Odiaba no poder interferir.

¿A qué se refiere con ropa mágica? Es cierto. La ropa de Filo fue fabricada en una tienda mágica. Convirtieron la propia magia de Filo en hilos y después los usaron como material para fabricarla. Eso debe ser a lo que se refiere. La ropa mágica es ropa hecha de magia.

Fitoria levantó las manos, y de repente tenía en ellas unas brillantes garras. Empezó a golpear a Filo con ellas. Dejaban rastros de luz mientras se movían a través del aire. Filo se agachó por debajo de una de aquellas brillantes parábolas, aunque no pudo evitar que le rozaran la parte superior de su cabeza.

―Eso te habría golpeado si estuvieses en tu forma filolial.

Explicó calmadamente Fitoria.

El ataque había sido tan rápido que no habría tenido esperanzas de esquivarlo. Y además era un ataque mágico.

―¡No voy a perder!

Una vez más, Filo comenzó a mover los brazos de arriba abajo.

―Yo soy la fuente de todo poder. Escucha mis palabras y haz lo que DIGO. ¡Crea un tornado de viento y arrástrala! ¡Tornado Zweite!

Un tornado aullador surgió de las manos de Filo y voló hacia Fitoria. Pero…

―YO soy la fuente de todo poder. Escucha mis palabras y haz lo que DIGO. ¡Haz que su tornado sea inefectivo! ¡Anti-Tornado Zweite!

Se produjo un fuerte estruendo y algo pareció encerrar a Filo. El tornado mágico que había creado se desvaneció como si nunca hubiese estado ahí.

―Interrupción mágica…

Veamos… Sí, creo que el libro de magia para principiantes que tengo mencionaba algo así.

Interrupción mágica. Sí, creo que decía que en teoría es posible, pero que depende de tu habilidad para entender la naturaleza de tu oponente, lo cual requiere grandes cantidades de fuerza.

Al parecer funcionaba analizando y entendiendo el patrón inherente del sistema de moldeado mágico. Una vez que el patrón era percibido, tenías que emitir el patrón opuesto muy rápidamente. Los hechizos de alto nivel requerían tiempos más largos para ser lanzados, y por lo tanto eran más fáciles de bloquear. Pero usar la interrupción mágica en magia de nivel medio supuestamente era muy complicado.

―¡No voy a perder!

Determinada a vencer, Filo corrió hacia Fitoria. ¿Pero cómo podía esperar que este ataque tuviese un resultado distinto al de sus anteriores intentos?

Fitoria había dicho que la ropa de Filo era mágica, y con esto se refería a su nivel de defensa. Se suponía que la defensa era mi especialidad. La ropa de Filo estaba hecha originalmente de magia, por lo que quizás concentrar magia podría restaurarlas.

Si ése es el caso, significa que…

―¡Espera, Filo!

―¿Qué pasa, Maestro? ¡Estoy ocupada ahora mismo!

―¡Usa tu magia para reparar tu ropa! Concentra tu magia en ella. ¡Es el único modo!

―¡Vale!

Filo saltó hacia atrás para ganar algo de distancia antes de extender las manos y concentrarse en su ropa. Entonces empezó a remendarse sola y después a brillar débilmente. Tenía la sensación de que eso elevaría su defensa mientras estuviera en su forma humana.

Fitoria corrió hacia Filo y empezó a lanzar puñetazos.

―¡Ah!

El puño de Fitoria era lo bastante fuerte para sacudir la tierra, pero Filo lo había bloqueado con las manos.

―Ugh… Es muy… fuerte… pero…

Me pregunté si habría sido capaz de soportar el impacto del ataque si no hubiese concentrado su magia en su ropa. Filo recibió el impacto del ataque y después rechazó el brazo de su enemiga antes de precipitarse hacia delante. Fitoria estaba desprotegida, y entonces Filo arremetió con las garras. El aire pareció vibrar. Debió haber estado aumentando su velocidad.

―¡Iyah!

Utilizó todo el peso de su cuerpo en el ataque y dio en el blanco. O eso creía. Pero…

―Qué débil.

Se produjo una pequeña lluvia de chispas, pero aparte de eso, Fitoria permanecía imperturbable.

Lo sabía. No hay forma de superar su defensa. Esto no es bueno. ¿Qué pasará si Filo pierde? ¿Qué debería hacer?

Filo se quedó mirándome, aunque ya no tenía más consejos para darle. De todas formas, eso es lo que yo creía, pero en realidad estaba mirando a Melty, después a mí y luego otra vez a Melty.

…Así que ése era su plan…

Me acerqué sigilosamente a la jaula de Melty y estiré el brazo para tocarla. Se produjeron unos ruidos cuando las cuchillas de viento trataron de cortarme, pero mi defensa era suficientemente alta para resistirlo.

Filo debía querer que rompiese la jaula y terminara el combate. Y tenía razón: si había tanta diferencia de fuerza entre ella y Fitoria, no había posibilidad de ganar.

―Melty.

―¿N-Naofumi?

―No te muevas.

Metí la mano en el interior de la jaula e intenté romperla, pero entonces… Un viento increíblemente fuerte sopló desde debajo y salí volando.

―No me gustan los tramposos.

De repente apareció un tornado y se estrelló contra mi torso. Se sintió como si me hubiesen dado un puñetazo en el estómago, y volé hacia atrás.

―Ugh…

¿Acaba de superar mis defensas?

―¡Naofumi-sama!

―¡Ugh!

Caí al suelo adolorido, y mi visión se deformó.

Maldición…

Miré hacia abajo y vi que mi armadura había resultado abollada. Además estaba sangrando. Si no me centraba y lanzaba algún hechizo de magia curativa, me vería en serios problemas. La armadura se podía reparar… pero yo… maldita sea…

―¡Maestro!

―No te distraigas.

―Muh…

―¿Puedes luchar después de haber usado tu magia?

―¡Claro que puedo!

―Qué imprudente.

Las alas de Fitoria se abrieron y apuntaron hacia el cielo.

―Suuuuuuu…

Se detuvo y tomó aire. Algo estaba volando a nuestro alrededor. Se veía como si estuviese reuniendo los elementos mágicos hacia ella.

¿Hay algo que no pueda hacer? Desearía hacer lo mismo… pero apenas puedo arreglármelas para lanzar un simple hechizo curativo.

Aun así, supuse que la mejor forma de progresar sería copiar a alguien que sí pudiera. Era algo así como robar los contenidos del cerebro de otra persona. Aunque si realmente querías llevarlo a otros aspectos de la vida, ¿qué hacían las escuelas si no copiar constantemente a la gente del pasado? Básicamente, todos nuestros logros no eran más que eso: copiar los éxitos de otras personas.

Sí. Algún día yo seré lo bastante fuerte para copiar lo que está haciendo Fitoria. Cuando pueda, fijaré mi meta en aprenderlo.

―¡Yo puedo hacer eso!

Filo copió a Fitoria y empezó a concentrar la magia en ella.

―…Demasiado lenta.

El problema era que Fitoria ya había reunido toda la magia. Se precipitó hacia Filo y comenzó a golpearla con los puños.

— U… mu… ku…

Pero los brazos de Filo estaban cruzados y la reina filolial todavía no había roto su defensa. Fitoria saltó hacia atrás y giró en el aire, asestando una patada voladora.

―¿Puedes detener esto?

―¡Mkiaaaaaaaah!

Fue incapaz de bloquear la patada y salió despedida dando vueltas en el aire hasta chocar contra un muro de viento.

―No… no voy a perder…

Se levantó sobre sus temblorosas piernas antes de reunir magia una vez más.

―Mu…

Parecía haber recuperado suficiente poder mágico. Rompió su concentración y pasó a su siguiente ataque.

―¡Iyah!

Filo movió las alas hacia arriba y hacia abajo. Se agachó, extendió las alas y puso las garras delante de ella. Empezó a dirigirse hacia delante, llevada por una fuerte corriente de aire. Para cualquier espectador era fácil deducir que su magia estaba considerablemente concentrada. Debía ser el ataque más fuerte de Filo. El problema es que necesitaba demasiadas preparaciones, por lo que no pensé que pudiera utilizarlo en combate.

―¡Kuikku!

Filo estaba volando hacia Fitoria como una bala. Sus garras se encontraban por delante de ella. Volaba a tan sólo unos milímetros del suelo, girando en el aire. Nunca la había visto moverse tan rápido. ¿Cómo describirlo? Era como el ataque final de un robot volador en un juego de estrategia.

―Jeh…

Los ojos de Fitoria se abrieron por la sorpresa. Su ropa resultó levemente cortada, pero muy ligeramente. Estaba cubierta de finos cortes. Entonces, las garras de Filo le golpearon en la cara. No podía creerlo, pero había un arañazo en la mejilla de la reina filolial. Una gota de sangre cayó por su mejilla. Fitoria miró la sangre que Filo le había hecho brotar de su cara, luego a donde cayó y sonrió. Fue entonces cuando lo noté. Miré hacia Raphtalia, y ella asintió.

Fitoria sólo estaba jugando con nosotros. Quería ver cómo reaccionaría Filo cuando se enfrentase a un oponente mucho más fuerte que ella. Es por eso que sonrió cuando fue golpeada por un ataque tan inesperado.

El filolial legendario. Esa descripción parecía encajar con ella. Filo puso mala cara porque sabía que no había posibilidades de ganar. Teníamos la certeza de que la batalla no iba a ser fácil, pero ni siquiera se había decidido aún el ganador.

―Mu…

Filo gruñó. Al principio creí que estaba insatisfecha, pero ahora parecía irritada.

―¿Ahora es mi turno?

Fitoria dio un paso adelante y lanzó una serie de ataques en el aire hacia Filo.

¡Era demasiado rápida! En cualquier caso, hasta el momento había sido más rápida que Filo, pero ahora se estaba moviendo incluso más. No se movía con la velocidad suficiente como para ser invisible a igual que cuando usaba Haikuikku, pero su imagen era borrosa; nunca estaba donde la buscabas.

―Uh… ¡Aaah!

Filo no pudo bloquear sus ataques y salió despedida por el aire. Pero antes de que aterrizase, Fitoria ya estaba ahí. Miró a Filo desde abajo, que estaba cayendo…

―¡Ah!

Y la pateó con fuerza, enviándola de vuelta al lugar del que había venido.

―Ugh…

Entonces se detuvo. Miró a Filo, esperando su próximo movimiento. Ella puso la mano donde le dolía, donde había comenzado a aparecer una luz mágica. Debió de usar magia curativa, ya que sus heridas se estaban curando ante nuestros ojos. Pero ya no le quedaba mucho poder. No fue capaz de curarse por completo, sólo hasta que dejó de estar en peligro.

―Ugh…

Filo se encontraba muy débil. Una vez más, empezó a reunir magia.

―Ahora mírame a mí.

Ya había terminado de curarse. Después se levantó y corrió hacia Fitoria.

Tal vez me lo estaba imaginando. No, ése no era el caso. Realmente Filo se estaba moviendo mucho más rápido que antes. Acumuló poder en sus garras y copió el ataque que acababa de usar Fitoria.

―¡Ah!

Después de tres ataques, el muro de viento que Fitoria había creado pareció debilitarse. Estaba tambaleándose.

―¿Eso es todo lo que tienes?

Llevaba un rato pensándolo, pero Filo parecía estar aprendiendo de su contrincante, y copiaba exactamente sus ataques. No… Fitoria la estaba ENSEÑANDO. No se había estado conteniendo en absoluto, por lo que me llevó un tiempo notarlo.

Sí… Todo esto era un entrenamiento. Daba la impresión de que Fitoria quería entrenar a Filo… Tenía tantas ganas de entrenarla que no le importaba si su alumna moría en el proceso.

―Será mejor darse prisa. Mel-tan está en peligro.

Fitoria movió una mano en dirección a Melty. Una vez más, la jaula se hizo más pequeña, y los barrotes ya estaban cortando las puntas de su pelo.

―¡Kiah!

―¡Mel! ¡Ugh!

Filo abrió las alas y utilizó el ataque bala otra vez. Voló hacia Fitoria, pero ahora era incluso más rápida.

―¡IYAAAAAAAAAH!

―Um… Muy bien, éste es el final del examen. Haz todo lo que puedas para mejorar.

Fitoria usó ambas manos para bloquear el ataque de Filo. Cuando ésta retrocedió para recuperarse, Fitoria le asestó una patada en el costado.

―¡Aaah!

Salió volando hacia la jaula hecha de viento, contra la que chocó, pero no cambió su trayectoria. Rodando por el suelo, finalmente se detuvo, como una muñeca de trapo golpeada.

Corrí hacia ella, pero Filo alzó la mano para detenerme y se levantó sobre sus piernas temblorosas.

―No voy… no voy a perder.

No quería que la ayudase, como si recibir ayuda fuera a descalificarla del duelo. Estaba temblando mucho, pero dio un paso adelante. Se veía muy débil, era como si se fuera a caer en cualquier momento. Tenía tantas ganas de vencer que se negaba a aceptar la derrota.

―¡Filo! ¡Si pierdes no podremos recuperar a Melty!

―Filo…

―¡Filo! ¡Ya vale! Ya vale.

―No… yo… ¡voy a protegerte, Melty!

Filo se tambaleó en dirección a su enemiga. Los guantes de poder habían perdido las garras, pero de todos modos formó un puño y golpeó a Fitoria.

―¡Yaaaaah!

El ataque fue muy débil, pero no así su fuerza de voluntad. El puño golpeó a Fitoria en el estómago.

―…

Pero no fue suficiente para herirla.

―Sí. Está bien. Ya es suficiente.

Filo cayó, pero Fitoria corrió hacia delante y la abrazó. La jaula de viento que había estado reteniendo a Melty se desvaneció.

―¡Filo!

―Mel…

―No te preocupes. Estará bien.

Fitoria empezó a lanzar un hechizo sobre Filo. Ante nuestros ojos, las heridas de nuestra compañera comenzaron a curarse, y los jirones de su ropa se repararon.

―¿Eh?

Rápidamente, Filo apartó la mano de Fitoria y volvió a tomar una postura de batalla.

―Ha terminado.

―¡No ha acabado! ¡Tengo que proteger a Mel!

―Lo sé. Pero Mel-tan está bien. Mira.

Fitoria animó a Melty a acercarse. La princesa miró con mucho recelo a Fitoria antes de ir junto a su amiga.

―¿Entiendes? El examen ha concluido.

―¿Examen?

―Sólo uno pequeño. Yo también tengo mis propios asuntos con los que lidiar.

―¿De verdad?

Filo no confió en ella de inmediato, pero inclinó la cabeza hacia un lado mientras la escuchaba. Acababan de estar enzarzadas en una batalla, pero toda la tensión parecía haberse evaporado.

―Filo, sólo estaba probándote.

Raphtalia y yo nos acercamos a ella e intentamos explicárselo.

―Sí… Era una prueba. Pero realmente pretendía hacer lo que dije si no la superaba.

Explicó Fitoria. No sé por qué motivo tuvo que hacer esto, pero al menos a causa de su lucha con ella, Filo había aprendido algunas habilidades magníficas para combatir en forma humana.

―Filo, tienes que pensar en tu oponente. Si peleas contra humanos estando en tu forma filolial, es como si lucharas con una diana gigante en tu espalda.

―¿En serio?

Era cierto que Filo era muy grande en su forma filolial. Incluso si podía moverse muy rápido, resultaba ser un objetivo demasiado grande cuando se enfrentaba a un enemigo poderoso. Además, cuando luchaba en su forma filolial, básicamente todos sus ataques tenían que ser patadas. No era que no pudiese usar magia o embestir, pero sería mejor tener en cuenta a qué tipo de oponente se estaba enfrentando. Fitoria estaba intentando que ella se diera cuenta de que había otras formas de luchar.

En todo caso, sería útil cambiar de táctica en mitad de una batalla. Eso podría confundir al enemigo. Así que, básicamente, Fitoria le estaba diciendo a Filo que debía tener más flexibilidad en cuanto a sus opciones, y además le enseñó algunos movimientos nuevos.

―Ésta es la prueba de que has pasado mi examen.

Dijo Fitoria, y sacó una tiara.

―¿Qué? ¿Qué es esto?

―Es tu recompensa por haber superado mi prueba. Ahora, inclina la cabeza.

―Filo, se supone que tienes que hacerle caso.

Melty agarró el brazo de Filo y la obligó a agacharse para que hiciera una reverencia.

¿Has visto eso? Melty está actuando como una auténtica princesa por una vez.

―¿Así?

―Sí, eso es.

Filo se inclinó ante Fitoria, que a continuación puso la tiara sobre su cabeza.

―Filo, tú serás mi sucesora.

―¿Qué es eso?

―Significa que serás la siguiente gran Reina de los Filolials.

―Oh…

―¡Filo! ¡Me alegro por ti!

Melty estaba muy emocionada, incuso daba saltos. Aunque Filo no parecía tan entusiasmada. De repente, la tiara sobre la cabeza de Filo empezó a brillar. Emitió luz en todas las direcciones, y entonces…

¡Ping! Un remolino apareció sobre su cabeza, lo que hizo que un mechón de pelo se le levantara.

―…

Tanto Raphtalia como yo nos quedamos en silencio.

¿Eso es alguna clase de premio?

―¿Eh?

―¡Filo! ¡Estás muy linda!

Melty estaba muy excitada, prácticamente bailando… pero Filo no parecía entender lo que estaba ocurriendo.

Melty no debe haberlo comprendido del todo. Espera un momento, yo me considero un otaku. ¿Significa eso que supuestamente debería animarme también por este remolino? Nop… no me siento así.

―¿Qué pasa?

―Bueno…

Señalé a la cabeza de Filo y ella siguió mi mirada. Estiró un brazo y…

―¿Qué es esto? ¡Hay algo raro en mi cabeza!

Gritó Filo, casi saltando. Agarró el mechón de pelo y…

¡Rip!

―¡¿Qu…?!

Se lo arrancó.

Filo realmente era increíble. Tenía pinta de ser algo muy doloroso.

―¡Auch!

Debió haberle dolido, pero Filo parecía orgullosa de sí misma por haberse deshecho de él.

¡Boing!

Pero después de que lo hubiese arrancado, otro mechón de pelo apareció para ocupar su lugar.

―¡¿Otro?!

―¡¿Qué?!

Los ojos de Filo se llenaron de lágrimas mientras una y otra vez se arrancaba los remolinos de la cabeza. Aunque siempre aparecía uno nuevo para tomar su lugar, por lo que después de un rato se rindió y se tapó la cabeza con las manos.

Era un pequeño remolino extraño.

―Va a seguir apareciendo, así que será mejor que te des por vencida. Cuanto más crezcas, más remolinos tendrás.

―¿Qué? Pero yo no quiero…

Filo estaba mirando los remolinos sobre la cabeza de Fitoria.

¿Qué tendría en mente el filolial legendario cuando le dio algo así a Filo? Decidí echar un vistazo a la pantalla de estado de Filo. Sus estadísticas habían mejorado. Parecía que la tiara le había conferido algunas habilidades y mejoras de estadísticas. Teniendo en cuenta eso, al menos por ahora, Filo había alcanzado el potencial máximo para su nivel. Fue una buena recompensa.

―Y para el Héroe del Escudo…

―¿Eh? ¿También vas a darme algo a mí?

Fitoria señaló en mi dirección y empezó a mover el dedo, indicándome que me acercara.

Espera un segundo. Si me acerco a ella, ¿me dará remolinos también?

―No necesito un nuevo peinado.

―¿Peinado?

No expliqué nada más. Sólo causaría un alboroto si lo hiciera.

―Es algo mejor que eso. Y además curará tus heridas.

―Bueno, entonces…

No sabía qué iba a entregarme, pero esperaba que no fuese algo demasiado extraño. De todas formas, probablemente no podría negarme, así que caminé hacia ella. Fitoria estiró el brazo y tocó mi pecho, mediante lo cual curó mis heridas. Yo no había sido capaz de sanarlas por completo, por lo que aún sentía un dolor intenso en la zona. Ella lo eliminó.

―Muéstrame tu escudo.

Señaló a mi escudo y me instó a levantarlo.

―¿Así?

Mantuve el escudo en alto. Fitoria se arrancó un remolino y lo puso contra el centro del escudo. Éste reaccionó de inmediato y absorbió el mechón de cabello.

¡Serie Filolial Desbloqueada a la Fuerza!

―¿Desbloqueada a la fuerza?

Comprobé el árbol y ahí estaba, un “Escudo de Filolial” brillando. Tenía un montón de bonos de equipo que parecían beneficiar a los filolials, como ajuste de poder y crecimiento (grande, medio, pequeño), ajuste detallado de desarrollo de estadísticas (grande, medio, pequeño) y otros.

Uno que me inmediatamente me llamó la atención se llamaba Habilidad Durante Equitación (grande, medio, pequeño). Debía significar que Filo podría pelear mejor con alguien montado sobre su espalda.

Aun así, mi nivel no era suficientemente alto para usar la mayoría de las habilidades del escudo. Afortunadamente el escudo en sí estaba desbloqueado, por lo que con sólo cumplir las condiciones de nivel sería capaz de usar sus poderes. Además, parecía que se habían cumplido los requisitos para desbloquear cualquier otro escudo relacionado con los filolials.

―Gracias.

―No ha sido nada. Sin embargo, todavía hay algo que me gustaría discutir contigo.

―¿De qué se trata?

―Preferiría hablar en privado.

Esto se estaba volviendo una recompensa bastante extraña.

Eh, ¿esto significa que todos los poderes de los filolials están concentrados en esos remolinos? Filo no puede subir más niveles, al menos por ahora, así que supongo que es algo bueno.

―Um… uh…

Melty estaba indecisa y también un poco avergonzada por hablar con Fitoria.

―¿Qué?

―Eso ha sido sólo para probar a Filo, ¿verdad? ¿No estabas… utilizándome?

―Claro que no. ¿Hay algo que quieras, Mel-tan?

―Um… ¿Puedes convertirte en un filolial realmente grande y dejarme montar sobre tu cabeza?

Con una actitud extrañamente dedicada y apasionada, Melty hizo su petición.

―…Muy bien.

Fitoria parecía un poco apagada, pero mientras daba palmaditas en la cabeza de Melty, comenzó a crecer. Entonces sonrió ampliamente.

―Guau…

Después, tal y como había prometido, puso a Melty sobre su cabeza.

―¡Está muy alto!

Melty se encontraba muy emocionada.

―Héroe del escudo, retrocede un poco, por favor.

―Vale.

Di un paso atrás como me había pedido. Y… pronto, Fitoria había crecido hasta medir unos dieciocho metros de altura.

¿Pero cómo de alta puede hacerse? Es como un edificio.

―¡Guau! ¡Guau!

La voz de Melty vino con el viento.

¿Está bien alejarla tanto del suelo? Pero en serio, ¿cuánto puede crecer? ¿O quizás ése es su verdadero tamaño y solamente se transformó para coincidir con el nuestro?

―Vaya…

Melty parecía muy relajada.

―Es como un sueño…

―Lo lamento, pero no lo es.

Fitoria era lo bastante fuerte para derrotar a un dragón, y esta chica la estaba usando como un juguete… eso no era una buena señal.

―Estupendo. El día acaba de empezar. Me gustaría que descansarais un poco más.

―Claro… si más tarde nos llevas al lugar que queremos ir.

―Hablaremos después sobre eso. Por el momento, simplemente intentad relajaros. Mis amigos también os felicitan.

―¡GAAAH!

―¿Qué? ¿Celebrar el nacimiento de una nueva reina? ¿Os referís a mí?

―¡Felicidades, Filo! ¡Ah, ja, ja! ¡Mira lo felices que están los filolials!

Los demás filolials se reunieron alrededor de Filo y la levantaron.

―¿Y-Yo?

También habían alzado a Raphtalia.

¿Qué está pasando? De repente somos muy populares.

Pasamos el resto del día con los filolials. El ambiente era como el de un festival.

Así que ahí estábamos, recluidos. Pero, una vez nos marchásemos, ¿cuánto tiempo llevaría que el resto del mundo también creyera en nosotros?