Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 5

Capítulo 2: El Hogar De Los Enanos

Parte 5

La mañana siguiente, cuatro de las jóvenes chicas descubrieron el sufrimiento de una resaca.

“Ugh… mi cabeza…este dolor es tan malo…”

“Nyoo…”

“Duele…nano desu…”

“Satou. Medicina.”

Nana estaba bien gracias a la poción que le di el día anterior, y Liza y Lulú parecen estar bastante bien.

Lulú se ocupó a si misma llevando agua para todas. Cuando nuestros ojos se encontraban, ella se enrojecía y rápidamente miraba hacia abajo.

Ella probablemente estaba avergonzada por su comportamiento en la fiesta de bebedores. Yo no creo que eso sea un gran problema, pero ella era muy linda, así que no dije nada.

La resaca de las niñas probablemente sea curada si les doy más de la medicina que le di a Nana, pero decidí dejarlas así por un tiempo.

“Voy a salir un momento. Iré a recoger ingredientes para una cura, así que sean buenas y siéntense, ¿Muy bien?”

“B…bien. No te tardes…”

“Estaremos bieeen.”

“Pochi será buena también, nano desu.”

“Alcohol…terrible.”

Me despedí con la mano hacia las niñas con ojos llorosos y dejé la habitación.

***

Jojorie me llevó a la tienda de magia de la que me enteré la noche anterior.

Con su sugerencia, usé en mi cintura la espada de las hadas que había recibido ayer.

El cinturón y funda eran nuevos; precipitadamente los hice por mi cuenta después de la fiesta. Estaban hechos de fruta ironshell, el mismo material que las armaduras de Liza y Nana, así que aunque lucían simples, realmente eran suficientemente duros para bloquear una espada de metal.

Supongo que podría decorar la funda y reforzarla con metal y algo más en otra ocasión.

De todas formas, haciendo eso a un lado, la tienda de magia que estaba buscando era llamada “Don & Khan”, y estaba localizada un poco mas allá de un gigante salón con un horno de Mithril.

“Hula, Jojorie, ¿Enamorada de un humano? Romperás corazón de  Zajuul, sabes.”

“Hey, Jojorie, tu anciano tener que ocultarte por traer aquí humano, sabes.”

Dentro de la tienda de magia, un par de diminutos hombres mayores gemelos nos saludaron.

Su acento era similar al de los guardias enanos que conocimos en la puerta de la ciudad, pero estos dos eran realmente gnomos.

Había escuchado en la fragua que hubo un gran incidente en la tierra natal de los gnomos, Boleheim. ¿Por qué ellos dos habían regresado?

Por curiosidad, recolecté la información detallada en la pantalla AR, donde aprendí que estos hermanos eran de un clan llamado Braiheim. Solo los gnomos del clan Boleheim estaban teniendo problemas.

“Buenos días, Mr. Don, Mr. Khan. Este humano tiene el permiso de Padre para estar aquí. Les aseguro.”

Mientras hablaba, Jojorie señaló la empuñadura de mi espada de las hadas. Los gnomos exigieron verla de cerca, así que saqué la espada del cinturón y la sostuve para ellos.

“Bueno, voy a ser condenado. Es el sello del anciano.”

“Bueno, seré maldecido. ¿Qué tan ebrio tuvo que estar para llegar a esto?”

Al final, el diseño era el sello de aprobación de Anciano Dohal, y no estaba atribuido a ningún trabajo ordinario.

Si muestro esto a cualquier gnomo o enano viviendo en el dominio Bolehart, ellos explicaron, yo sería tratado calurosamente como un viejo amigo.

Así que básicamente, esta era la versión enano de mi Campana Silenciosa de Bolenan.

Anciano Dohal… ¿fue realmente prudente darme esto cuando nos hemos conocido hace solo dos días?

En cualquier caso, gracias al sello, podía comprar lo que quisiera en la tienda, así que les pedí que me mostraran sus libros de magia y pergaminos.

La tienda resultó ser también una tienda de alquimia, pero ellos solo vendían productos terminados, no herramientas o ingredientes.

“Déjame ver. Tenemos libros de hechizos menores para todos los elementos básicos— tierra, agua, fuego, viento, hielo, llama, y libros intermedios para tierra, fuego, y llama. En cuanto a artículos raros, también tenemos libros de magia para herrería y trabajo en las montañas.”

Mr. Don sacó una pila de libros de hechizos.

El tomo sobre herrería era una colección de hechizos que podrían ser útiles para un herrero, principalmente usando la habilidad “Magia de Fuego”.

Así mismo, la magia de montaña era para cosas como excavación y búsqueda de minerales en las minas, haciendo uso de la Magia de Tierra.

También fui advertido de que un puñado de los hechizos requieren de otras habilidades mágicas elementales.

Con el permiso de Mr. Don, comencé a hojear a través de los libros de hechizos menores.

Estos eran similares a los que había comprado en ciudades humanas, pero ciertos aspectos de los cantos eran diferentes de las versiones humanas. Terminé comprando todos. Pagar y guardar los libros era algo despreocupado gracias a mi Bolsa Garaje.

Lo siguiente era por lo que realmente estaba aquí: comprar pergaminos mágicos. Mr. Khan estaba a cargo de los pergaminos y herramientas mágicas.

“¿Oh-ho? ¿Pergaminos, no es así? Solo son hechizos débiles a un precio alto, ¿Lo sabes?”

Mr. Khan me advierte mientras baja los pergaminos del estante.

Solo había seis tipos.

“Los ingenieros de minas llevan estos con ellos cuando hacen estudio solitario para estar seguros. Tenemos Aplasta-Rocas, que aplasta las rocas hasta volverlas polvo… Congelar Agua y Arcilla Dura, que se usan si hay una fuga de agua… y el hechizo Muro de la Magia de Tierra, el cual puede reforzar roca quebradiza. Además de esos, solo están Filtro de Aire y Cortina de Aire, los cuales se usan en caso de gases extraños.”

Por supuesto, pedí uno de cada uno, pero Mr. Khan tenía una objeción.

“Perdon, chico. A menos que absolutamente debas tenerlo, ¿Puedo pedirte que desistas con Filtro de Aire? Es mi último. No quiero agotarlo antes de reabastecernos el próximo mes.”

“En ese caso, solo uno de cada uno de los otros cinco está bien.”

Estaba desilusionado, pero no quería dañar lo suficiente para causar problemas a los enanos.

Así que los pergaminos que obtuve fueron los siguientes:

　　＞Pergamino, Magia de Tierra: Muro.

　　＞Pergamino, Magia de Tierra: Aplasta-Rocas.

　　＞Pergamino, Magia de Tierra: Arcilla Dura.

　　＞Pergamino, Magia de Viento: Cortina de Aire.

　　＞Pergamino, Magia de Hielo: Congelar Agua.

Probarlos tendrá que esperar hasta que pueda hacerlo en un lugar remoto.

***

Terminé mis asuntos en media hora y regresé con el resto de mi grupo.

“Bienvenido a casaaa…”

Arisa me saludó débilmente desde el suelo, donde ella estaba estirada mirando al borde de la muerte.

Tama, Pochi y Mia no dijeron ni una palabra. Debo haberlas dejado colgadas demasiado tiempo.

Alcancé la Bolsa Garaje, sacando algunas medicinas contra la resaca, y las entregué a cuatro de ellas.

“¡Estoy vivaaa!”

“¿Todos mejooor?”

“Maestro, gracias, nano desu.”

“Gracias.”

La poción mágica fue directamente a trabajar, y en un instante estaban bien. Nunca supondrías que ellas habían estado gimiendo solo unos momentos antes.

Cuando ellas inmediatamente comenzaron a quejarse del hambre, Lulú se dirigió a la cocina para conseguir algo de sopa ligera.

Arisa, en particular, parecía incluso más enérgica de lo usual. Ella estaba probablemente tratando de olvidar las cosas que dijo debido a su embriaguez la noche anterior, así que decidí alejarme del tema tanto como fuera posible.

***

No tuve la oportunidad ayer, así que decidí pasar el día recorriendo Ciudad Bolehart con todas.

Jojorie incluso se ofreció voluntariamente para mostrarnos los lugares de interés. Estábamos recibiendo el tratamiento VIP.

Primero, con su recomendación, visitamos un lugar llamado la plaza central.

“¿Sujetar manoos?”

“Quiero sujetar manos también, nano desu.”

“Claro.”

Sostuve las manos de Tama y Pochi mientras caminábamos.

“Mrrr.”

“¡Cambien lugares con nosotras después!”

“¡Aaaye!”

“Si, nano desu.”

Así que ahora íbamos a estar tomados de las manos por turnos.

“¿…Oh?”

Poco después de que empezamos a caminar, me di cuenta de que estábamos siendo seguidos.

De acuerdo al mapa, descubrí que las personas detrás de nosotros eran enanos, específicamente personal de seguridad de Ciudad Bolehart. Cuando lo comprobé con Jojorie, ella confirmó que el alcalde Dorial había arreglado una escolta para nosotros.

Vaya, realmente recibíamos el trato VIP.

Todo tipo de personas se habían reunido alrededor de la fuente de la plaza central; bailarines de espada, afiladores de cuchillas, personas vendiendo armas y armaduras, y muchos más.

En vez de carros como los que había visto en Ciudad Seiryuu, los vendedores extendían su mercancía sobre telas en el suelo. Muchos de ellos eran utensilios de hierro, probablemente uno de los productos principales de la ciudad.

Mientras miraba alrededor, escuché una discusión entre un enano y un joven hombre.

“¡¿De verdad?! ¡¿Cómo puede una ciudad de enanos no tener ninguna espada de Mithril a la venta?!”

“Por favor sea razonable, Señor Noble. Los únicos herreros que pueden trabajar con un material precioso como el Mithril son el Anciano Dohal y sus aprendices.”

“¿Así que puedo conseguir una si hablo con este tipo Dohal, entonces?”

A diferencia del indiferente enano, la voz del joven hombre estaba rápidamente elevándose en la desesperación.

“Quizá. Pero a diferencia de las espadas aquí, una espada de Mithril podría costarle al menos cien monedas de oro”

“¿Disculpe? ¡Esta espada de hierro fue de solo una moneda de oro!  ¡¿Cómo puede ser mucho mas costosa?!”

“Una espada que vale simplemente una moneda de oro debe ser una pieza de trabajo barato…”

El enano respondió al agitado hombre en una voz irritada.

Eso olía como problemas para mí, así que ajusté nuestro recorrido hacia un área donde una animada multitud parecía estar disfrutando algo.

Y así ocurrió, encuentros de exhibición se llevaban a cabo en una esquina de la plaza.

“¿No tenemos ningún valiente retador? ¡Si alguien puede golpearme, le daré esta Espada Mantis, hecha de uno de los brazos cuchilla de una mantis soldado! ¡¿No hay nadie suficientemente valiente para apostar su propia arma y retarme en un encuentro uno a uno?!”

Un gran hombre pariente de tigre estaba blandiendo alrededor una espada hecha de una parte de monstruo y retando a la gente cerca de el.

“El torneo de artes marciales de la vieja capital se aproxima, así que hay muchos guerreros reunidos aquí actualmente.”

“¿Un torneo de artes marciales?”

“Así es. Se celebra públicamente cada tres años. Aristócratas suelen aceptar participantes quienes lo hagan bien como vasallos, así que las personas viajan de muy lejos con la esperanza de encontrar el éxito.”

Jojorie me dijo acerca de la competencia mientras caminábamos alrededor de la plaza hasta que sentí un tirón en mi manga.

“¿Salchichaaas?”

Miré a donde Tama estaba apuntando para ver a un carro de comida vendiendo unas cosas enlazadas. Parecen estar servidas con salsa hecha con vegetales hervidos y grasa.

“Maestro, la salsa se vuelve marrón, no desu. Es muy picante cuando es marrón, así que no debe usar la salsa, nano desu. ¡Pochi sabe todo acerca de eso, nano desu!”

El rostro de Pochi era muy serio mientras ella hablaba, y Tama rápidamente asintió estando de acuerdo.

…No hay manera. Tratando de mantener mis esperanzas crecientes bajo control, caminé hacia el puesto.

“¡Lo sabía— es mostaza!”

“¿La especia semilla, te refieres? Si prefiere el suyo con sabor extra, las salchichas rellenas con chiles son tres de cobre cada una, las regulares son dos de cobre.”

“Una salchicha regular con esa especia semilla, por favor.”

“Ciertamente.”

No perdí tiempo en la degustación de una salchicha cubierta con mostaza.

De inmediato, un vívido calor iluminó mi gusto con ese familiar picor. Delicioso.

Saboreando el contraste entre la picante mostaza y la fuerte salchicha, rápidamente tomé otro bocado.

Yum. Era tan bueno que no podía detenerme. Antes de que me diera cuenta, la había devorado completa.

“Nunca lo había visto comprar y comer algo tan rápido, maestro.”

Los ojos de Lulú se ampliaron mientras ella me pasaba un pañuelo.

Debe haber mostaza en mi rostro.

Le agradecí y limpié mi boca, provocando un alarido de Arisa, quien estaba saltando arriba y abajo junto a mí.

“¡Argh! ¡Ahí van mis sueños! Quería limpiar la mejilla de un chico con mi dedo y decir ‘Hee-hee, pequeño glotón…’”

¿Realmente era tan triste que ella necesita golpear el suelo con sus puños?

Ignorando el excéntrico comportamiento de Arisa como de costumbre, les recomendé las salchichas a todas las demás.

De acuerdo a Lulú, ellas ya habían comprado una gran cantidad de salchichas con mostaza el día anterior. Cuando acaricié su cabeza y alabé su buen gusto, ella se volvió adorablemente roja.

Pochi, por otro lado, parecía un poco abandonada ya que no seguí su consejo.

La próxima vez, prometí silenciosamente, comeré lo que ella recomiende.