Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 11: La Hermana de la Gran Maga

Capítulo 4: ¡Eliminando a este Monstruo Obsceno!

Parte 2

―…¿Qué está pasando aquí? Oye, ¿qué ha sido eso que acaban de decir?

Cuando llegamos a la puerta de la sede del gremio de aventureros nos encontramos con una legión de miembros del personal. Darkness lanzó esa pregunta al aire, y uno de ellos que se encontraba cerca le dijo simplemente que entrara sin darle ninguna explicación.

Parece que están esperando a que lleguen todos los aventureros antes de empezar a contar lo que pasa.

―Si fuera posible, me gustaría evitar cualquier cosa que pudiera resultar peligrosa; lo único que quiero es vivir en paz… Pero como han dicho que se trata de una emergencia, me temo que seguramente será otro enemigo malvado…

―¿Y para qué quieren que todos los magos carmesíes participemos en esta misión de emergencia? Komekko también es una de los nuestros. Aunque todavía no puede usar magia, he tenido que traerla de todas formas, y eso no me gusta…
Megumin no hacía más que mirar a su alrededor visiblemente nerviosa.

―¡Por fin ha llegado!

De pronto, un miembro del personal saludó a Megumin de forma respetuosa.

―…¿Eh? ¿Por qué, a qué viene eso de repente? ¿Pudiera ser que el gremio me ha dado un rango superior después de darse cuenta de la verdadera utilidad y poder de mi magia de explosión? Aunque es un poco tarde en mi opinión…

Entonces, otro hombre del gremio se dirigió al que había saludado a Megumin.

―No, no es ella. En realidad su asistencia es opcional. La persona importante que estábamos buscando es esa otra chica más joven de ahí.

―¡Oye, ¿qué quieres decir con “opcional”?! ¿Me estás desafiando?

Los hombres del personal, sin embargo, no prestaron atención a la furia de Megumin y en cambio hicieron una reverencia mirando hacia Komekko.

―Bienvenida. Hemos preparado algunos postres, ¡por aquí, por favor!

Komekko les hizo caso y comenzó a seguirlos despreocupadamente. Entonces su hermana mayor se adelantó para detenerlos.

―¡Eh, no se lleven a mi hermana por ahí sin mi permiso! ¿Se puede saber qué está pasando? ¿Desde cuándo el gremio de aventureros se ha convertido en un club de pedófilos? ¡Dependiendo de la respuesta, puede que llame a la policía ahora mismo!

―¡E-Eso no es verdad! ¡Tenemos nuestros motivos! ¡Ah, Luna-san, has llegado justo en el mejor momento!

Los tipos del personal buscaron ayuda desesperadamente en la encargada, a lo que ella les respondió con una sonrisa tranquilizadora.

―Pedir específicamente la presencia de magos carmesíes así de repente sólo para atraer a mi hermana con comida y secuestrarla nada más llegar… ¿Qué se supone que significa esto?

Frente a la pregunta de Megumin, la recepcionista hinchó el pecho con orgullo.

―El gremio de aventureros está siempre en busca de candidatos excelentes para que se unan. Entenderás que hayamos puesto nuestras miras en alguien del Clan de la Magia Carmesí, ya que ellos han nacido con el potencial para convertirse en grandes hechiceros. Dicho esto, ¿no te parece totalmente lógico que obsequiemos a Komekko-san un poco de hospitalidad?

―Disculpa, pero dejando a todos los demás aparte, yo soy una miembro del Clan de la Magia Carmesí.

Todos los trabajadores del gremio apartaron la mirada en ese instante.

―¡E-Es igual, por aquí, Komekko-san! ¡Te hemos preparado un increíble montón de dulces!

―¡No! He dicho que yo también soy una maga carmesí…

La chica ignoró las sucesivas protestas de Megumin y llevó a Komekko hasta el centro del salón de la taberna. Entonces, después de esperar a que hubieran llegado la mayoría de los aventureros de la ciudad, empezó a hablar en voz alta.

―¡Gracias a todos por venir, y disculpen por lo del aviso de emergencia!

Con una gran sonrisa, se dispuso a anunciar lo siguiente mientras Komekko se encontraba delante de ella rodeada por una auténtica montaña de dulces…

―Pues bien, sé que todo el mundo estuvo trabajando duro ayer. El porcentaje de misiones realizadas con éxito está siendo muy alto en los últimos tiempos, algo que casi no se ha visto nunca desde que se fundó el gremio de aventureros de Axel. ¡Incluso Aqua-san consiguió eliminar a Lucy la Espectro! ¡No podía esperar menos de los aventureros de Axel, son todos excelentes!

Nos está adulando como si no existiera el mañana; ¿qué estará tramando esta chica?

Los aventureros se mostraron contentos. Algunos se habían tapado la boca por la timidez, y otros se rascaban la cabeza fingiendo estar distraídos.

―Pero…

El tono de la encargada dio un giro solemne.

No estoy seguro de por qué, pero tengo un mal presentimiento por lo que viene a continuación.

―¡Hemos preparado un trabajo nuevo para aventureros excepcionales como son ustedes!

Umm, lo estoy sintiendo. Es el instinto que me suele avisar cuando se avecinan problemas.

―Comparado con el de ayer, el trabajo de hoy será ligeramente más arduo y complicado, lo digo de verdad. ¡Pero estoy segura de que no representa ningún problema para los aventureros que se encuentran aquí!

Entonces, un hombre con la cara rígida de tensión interrumpió las palabras temerarias de la chica.

―Espera un momento, Luna-san, no seas tan desconsiderada.

Al ver que no tenía intención de detenerse, el resto de aventureros también alzó la voz.

―¡Un segundo, ¿a qué te refieres con “más ardua y complicada” que la misión de ayer?! ¡¿Es por eso que nos han hecho venir aquí diciendo que era una emergencia?!

Otro tipo se aprovechó de esto para continuar con la protesta.

―¡Olvídalo, queremos un descanso!

―¡Ayer lo dimos todo, así que no nos quedan fuerzas!

―Y yo que pensaba ir a relajarme hoy en la taberna…

La encargada prosiguió ignorando a los aventureros; aún seguía sonriendo ligeramente.

―¡No habrá ningún problema, porque como todos saben, los aventureros de Axel son lo mejor de la nación!

Incluso se atrevió a decir algo tan falso y deshonesto.

―¿Verdad, Komekko-san?

Miró a Komekko y le pidió ayuda, pero en ese momento, la niña estaba ocupada llenándose de postres tan rápido como le era posible.

Ahora lo entiendo, está jugando con táctica.

―Los aventureros de Axel son tremendamente fuertes. Onee-san lo dijo, son del tipo de héroes que jamás se echaría atrás frente a ningún oponente por muy poderoso que sea.

Con todos los beneficios que cosechó ayer, ahora debe de estar intentando utilizar la ventaja que aporta tener a Komekko para quitarse de en medio todas las misiones que nadie quiere mientras esté por aquí.

Llegados a ese punto, parecía que yo no era el único que había adivinado las intenciones secretas del personal del gremio. Las caras de todos los aventureros presentes habían perdido por completo su color, y entonces, uno de ellos empezó a llorar dramáticamente llevado por la resignación.

―…¡Maldita sea! ¡A-Aceptaré la misión, ¿vale?! ¡Vamos, hay que motivarse! ¡La más complicada, que me la den!

Ya que se habían metido de lleno en la trampa, algunos por lo menos empezaron a aceptar su destino.

―¡Y-Ya verán, ahora presenciaran lo poderosos que somos los magos de Axel!

Para ser sincero, ese día no parecían estar tan cansados como aseguraron.

Al ver la reacción de la mayoría, Megumin se quedó lívida y levantó un brazo para intentar detenerlos.

―Gente, escuchen, no tienen por qué hacer algo tan absurdo…

Sin embargo el tono débil de su voz no podía estimular sus oídos. Su brazo también se estaba moviendo en vano.

―Umm… Umm… Aunque no estoy del todo de acuerdo con esa táctica, es verdad que los aventureros siempre han sido demasiado vagos y no han intentado hacerse más fuertes. Dejando a un lado esas misiones “envenenadas”, incluso llegó un momento en que ni siquiera aceptaban las de dificultad normal… Si tenemos en cuenta todo esto…

Darkness me expuso su opinión de lo ocurrido.

―Puede que la razón detrás de su inactividad sea que derrotaron a unos cuantos monstruos especiales gracias a ti, y como la gran mayoría de ellos se hicieron ricos con las recompensas tan generosas que les dieron, ahora tienen tanto dinero que no saben qué hacer con él. En consecuencia, la pereza ha aumentado de forma generalizada, especialmente entre los que participaron contigo en las misiones de caza; se han ninificado por tu culpa en cierta manera. Siendo franca, me parece que esta medida que han tomado era necesaria por el bien de Axel.

Esta mujer y sus discursos, juro que… Aunque para ser justos, ignorar a los monstruos de las inmediaciones de la ciudad podría convertirse en un grave problema.

―Qué más da, vamos a aceptar algunas misiones al azar y ya está. Por lo menos así Komekko podrá ver nuestro poder. ¿Verdad, Megumin?

Le sonreí, pero no estaba lo suficientemente emocionado como para hacerlo con ganas.

―Es verdad, Aqua fue la única que tuvo ocasión de demostrar sus habilidades ayer. Si quiero mantener mi dignidad, será mejor que le enseñe lo que soy capaz de hacer.

Justo cuando habíamos decidido aceptar una misión cualquiera y rezar para que no fuera demasiado difícil…

―No tienen que molestarse en escoger una, ya que a modo de comisión para Satou Kazuma y compañía, hemos preparado un trabajo específico para ustedes pensado sólo para grupos de alto nivel.

La recepcionista se metió en nuestra conversación con una sonrisa de oreja a oreja. Eso sólo me hizo sentirme aún más preocupado. Ya habíamos cumplido la misión de conseguir que Lucy ascendiera al cielo que previamente habían rechazado todos, y no teníamos intención alguna de volver a aceptar otra con un nivel de dificultad similar.

Cogí del brazo a la chica con la que habíamos estado hablando tanto últimamente y la llevé a un rincón lejos de Komekko para que no pudiera oírnos.

―Vamos a ver, señorita, ¿acaso tienes idea de cuál es nuestro verdadero nivel? Por favor, ten un poco de piedad con nosotros. No dejas de hablar bien de nuestro grupo, ¿qué esperas que hagamos? Aunque eres una belleza con un cuerpo por el que renunciaría a todos mis ideales, de ninguna manera pienso dejarme llevar como si fuera un perro atado con una correa.

Al parecer la chica ya estaba acostumbrada a que la llamaran belleza, por lo que me respondió sonriendo y sin variar su actitud positiva…

―Ah, jaja, así que soy una belleza, ¿eh…? Qué adulador eres, Satou-san. Qué te parece esto: si terminas con éxito esta misión especial… podemos tener hoy una cita cuando salga del trabajo.

―Ah, me temo que debo rechazarla. Muchos aventureros me han contado rumores sobre la desesperación que tienes por ser un “pastel de Navidad”; lo sabe prácticamente todo el gremio.

Cuando le puse esa excusa, su sonrisa desapareció bruscamente.

―Perdona, pero ¿quién ha estado divulgando por ahí esa información?

―Además, hoy no vamos a poder vernos. Mi grupo ha decidido ir a cazar sapos que anden por ahí perdidos.

Me agarró del brazo fuertemente antes de que pudiera darme la vuelta para marcharme.

―No tan rápido, Satou-san. Vas a dejar el resto de misiones a un lado por ahora, ya que ésta que te he ofrecido requiere exclusivamente tu participación. Puedo decir sin miedo a equivocarme que en todo Axel no hay nadie aparte de ti, Satou-san, que pueda cumplir la misión que te he propuesto.

No pude evitar pararme en el sitio al ver su expresión de total seriedad que hasta ahora había sido inédita, aunque admito que el hecho de que mi codo hubiera tocado cierta parte de su cuerpo cuando me agarró tiene bastante parte de culpa.

De algún modo, sus palabras habían conseguido atraer mi atención. En concreto la parte donde dijo “vas a dejar el resto de misiones, ya que ésta sólo te requiere a ti”.

―Sin duda tienes muy buena imagen de mí como aventurero. Puede que suene un poco extraño viniendo de mí, pero siendo sincero, soy todo un lío en el combate cuerpo a cuerpo.

―Eso ya lo sabía, no te preocupes.

¿Eh, no lo ha negado?

Mientras los aventureros corrían de lado a lado por el salón de la taberna…

La chica comenzó a hablar mirándome fijamente.

―La misión que sólo Satou-san puede cumplir con éxito es…