C³ – Cube x Cursed x Curious

Volumen 7

Capítulo 1: Hola Guillotine

Parte 2

Durante la cena en el comedor…

—U-Umm, Haruaki, ¿Puedo comer en mi habitación hoy?

—¿Qué? Definitivamente no. Es un asunto diferente si vivieras en una pensión, pero esta es como tu casa después de todo. Siempre y cuando no estés enferma, es regla de la familia que coman todos juntos.

—Muu… ¿No hay excepciones?

—¿Por qué insistes en comer en tu habitación?

—N-¡Nada, está bien! No es como que… particularmente… quiera… comer en… mi habitación. Además, sólo pregunté porque la idea de repente se me ocurrió. En realidad, ¡No es nada especial! ¡Wahaha!

Fear habló de una forma claramente antinatural. Luego extendió sus palillos hacia los platos en la mesa.

(Hmm… Su comportamiento es demasiado sospechoso.)

Haruaki no supo cuándo exactamente había regresado de su paseo. Después de llegar a casa, se había quedado en su habitación haciendo algo en secreto. Incluso cuando le preguntó acerca de si fue divertido su paseo, ella simplemente respondió «N-No mucho, ¡No fue especialmente bueno o malo!». Después de haber salido con tanto entusiasmo, Haruaki de verdad esperaba que viniera hablando sobre muchos acontecimientos diversos.

—Muu, bien.

Recogiendo los platos como si estuviera distraída en sus pensamientos, Fear de repente levantó la mirada. Sus ojos brillantes parecían estar diciendo «¡Eureka!» Entonces dijo:

—Un bocadillo de medianoche. Sí, quiero un bocadillo de medianoche. Haruaki, ¡Prepara algunas bolas de arroz!

—¿Hmm? Oh, no podemos hacerlo hoy. No tenemos mucho arroz almacenado y la cantidad restante es apenas suficiente para el desayuno de mañana… Debes comer hasta saciarte durante la cena, así que no necesitas un bocadillo de medianoche.

—Además, ¿Por qué no te duermes en vez de quedarte despierta hasta tan tarde?

—M-Muuuuuu…

Los gemidos de Fear solo sirvieron para aumentar las sospechas de Haruaki y Konoha.

Después de que la cena terminó, llegó la hora del té…

Como un abogado haciéndole una objeción a un Juez, Fear golpeó la mesa del comedor y dijo:

—¡Exijo el doble de la cantidad habitual de galletas de arroz para la merienda de hoy! ¡Cuatro galletas! ¡Quiero cuatro!

—¿Qué? ¿No tienes tus propias galletas personales en tu habitación?

—¡Ya las termine hace mucho tiempo! ¡Así que necesito compensarlas con el doble de porciones!

—¿No te di un paquete ayer? Te dije que no te las comieras muy rápido.

—Es que, umm, hubo un imprevisto… ¡No! En cualquier caso, ¡Exijo más galletas!

Konoha bebió su té con calma, mientras lanzaba una mirada de desacuerdo hacia la súplica de Fear.

—Haruaki-kun, no debes ceder a sus demandas sin importar que. Si lo haces, solo continuara pidiéndote cada vez más.

—Bien dicho. Así que vas a tener que conformarte con dos. Aquí tienes.

—¡¿Qué?!

Recibiendo las dos galletas, Fear tembló con su cabeza inclinada, mientras su cabello plateado se movía ligeramente…

—¡Maldita sea! ¡Como sea! ¡Tú idiota!

Ella salió corriendo de la sala con una rabieta. Mientras sus gritos inexplicables de «El mocoso desvergonzado debe tener alguna enfermedad desvergonzada! ¡Las tetas de Tetas de Vaca son una monstruosidad que debe desinflarse…!» se hacían menos audibles, se escuchó el ruido de una puerta siendo cerrada con fuerza.

—… ¿Qué pasa con ella? A pesar de que es completamente normal que este pidiendo galletas de arroz, su comportamiento de hoy es un poco raro.

—Muy cierto ~ Pero que esa chica actué raro ya es algo común. Sinceramente hablando, no tengo ningún problema.

Konoha parecía exasperada mientras servía más té en su taza. En ese momento, movió su mirada hacia sus propios pechos.

—… Esa chica siempre dice que… ¿Podría realmente ser eso cierto…?

—¿Qué pasa?

—¿Eh? Umm, uh… ¡Hmm! Esta es una buena oportunidad, así que voy a reunir mi coraje para intentar preguntártelo.

—Bien

—Umm… ¿Mis pechos son… realmente… una monstruosidad…?

—¡*Pffft*!

«¿Qué clase de pregunta sin sentido es esa?» Haruaki trató desesperadamente de detener el té de saliendo a borbotones de su boca, pero no pudo evitar que su mirada fuera atraída hasta «Ese lugar», mientras el cuerpo de Konoha se hacía pequeño de la vergüenza. La forma en que sostenía sus pechos con su brazos, hacían que esa parte de ella se viera aún mas magnifica…

—¡No! En realidad… no es… una monstruosidad. Creo… que son bastante agradables. No es una monstruosidad en lo absoluto.

El rostro de Konoha de repente se puso todo rojo, antes de que comenzara a mover con torpeza sus trenzas.

—¿Es así…? Jeje, parece que pregunte algo extraño. Por favor, borra eso de tu memoria y finge que nunca te lo pregunté.

—O-Ok. Tambien creo que respondí algo raro, así que… Olvídate de ello también…

Como si tratara de ocultar su vergüenza, Konoha bebió de su té mientras suspiraba. Pero entonces, de repente, frunció el ceño, por lo que Haruaki preguntó: «¿Ha pasado algo?»

—No… me parece que escuche algo extraño. Tal vez sea sólo mi imaginación.

Konoha respondió con una sonrisa amable como de costumbre. Entonces mientras decía «Bueno, tengo que trabajar aún más duro», se colocó de pie. Después de que Haruaki preguntara «¿En qué es lo que necesitas trabajar aún más?», Konoha respondió:

—Gracias a que la maestra dejó demasiadas tareas para entregar el lunes, me resultara bastante difícil terminarlas a menos que las divida para hacerlos entre hoy y mañana… Haruaki-kun, ¿No te dejaron a ti también muchas tareas?