Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 4

Capítulo 4: La Defensa de Ciudad Muno

Parte 1

 

 

>>Satou aquí. Cuando era un niño y todos estaban interesados en ESP [15], lo que más quería de todo era la teletransportación. Sería conveniente si pudiera usarlo por mi cuenta, pero no hay nada más molesto que un enemigo que pueda usarlo<<

 

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―Adelante, por favor, dríada.

Esta mañana después de notar los extraños sucesos alrededor de Ciudad Muno, hice que todas se cambiaran a su nuevo equipamiento y se prepararan para partir, ofreciendo una despedida apresurada a los gigantes del bosque y pobladores. Ahora, estábamos parados en el interior del anillo de hadas de la dríada.

No quería que todas me tuvieran que ver besando a una niña pequeña, así que me aseguré de hacer la transferencia de magia con anticipación.

―Muy bien, aquí vamos.

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Con una respuesta perezosa, la dríada nos transportó del anillo de hadas dentro del Árbol-Montaña a un bosque no muy lejos de Ciudad Muno.

Un viaje de diez días tomó solo un instante. Esta magia supuestamente tenía sus propios límites, pero la teletransportación de la dríada todavía era demasiado conveniente.

Como una peligrosa droga, sería demasiado fácil volverse adicto a conveniencia. Todo lo que costaba era el acto tabú de besar a una niña pequeña.

La repentina transportación sorprendió a los caballos, así que los calmé mientras revisaba el mapa.

Los muros de Ciudad Muno estaban a solo casi cinco kilómetros desde aquí en línea recta, con campos cosechados en el medio.

Ciudad Muno era casi dos veces del tamaño de Ciudad Seiryuu, el primer lugar que visité en este mundo paralelo, pero su población era solo la mitad de esta última.

Había una pequeña colina en el sureste de la ciudad, y el Castillo Muno se elevaba en la cima. Tres capas de muros protegían el castillo, rodeando casi un tercio de la ciudad.

Mientras confirmaba la distribución de la ciudad, decidí revisar la posición del demonio también.

El verdadero cuerpo del demonio había ido hasta el nivel 26. Ya que los nuevos Doppelgänger no se marcan automáticamente ni nada, tuve que mantener un ojo en el nivel del demonio.

Había once nuevos Doppelgänger en total, sin incluir al juez o los que poseían a los caballeros.

Uno de ellos se estaba moviendo hacia el extremo suroeste del territorio.

El parecía estar dirigiéndose hacia la manada de hidras, quizá luchando como una matanza en masa estilo MPK

Bueno, siempre puedo conseguir más ingredientes para cocinar. La carne de hidra es deliciosa, después de todo.

No estaba seguro que es lo que los otros diez Doppelgänger estaban planeando, pero ellos estaban en posición, rodeando al ejército desde el exterior.

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La batalla entre el ejército y la gran banda de ladrones había empezado también; sus números eran inferiores a lo que habían sido esta mañana.

Terminé todo esto en cuestión de segundos y cerré el mapa.

―¿Do-dónde estamos?

―En un bosque cerca de Ciudad Muno. Mira, puedes ver los muros de la ciudad al otro lado de los arbustos.

Con mis palabras, Miss Karina y las otras niñas giraron sus caballos para ver a donde estaba apuntando.

―Es-es verdad… ¿Quién eres exactamente?

―Solo soy un comerciante ambulante. La amable dríada simplemente nos trajo hasta aquí.

Encogí los hombros ante la sorpresa de Miss Karina.

―Más importante, ya que la dríada tuvo la amabilidad de darnos un atajo, vamos directo a Ciudad Muno.

―Mu-muy bien. Es justo como dices. Vamos entonces, todos.

Aferrándose al cuello de su caballo, Miss Karina trotó de manera entusiasta fuera del bosque.

―Karina, espera.

―¡No deberías actuar por tu cuenta, ma’am, nano desu!

Aparentemente tentadas, Pochi y Tama me miraron curiosas.

―Sí, vamos todos también.

A mi señal, todas galoparon detrás de ella.

Para ser honesto, no quería tener a mis niñas en un área donde un demonio estaba causando estragos, pero ya que el pueblo del Árbol-Montaña podía fácilmente ser invadido por hidras o caídas de grandes frutos, no me sentía seguro dejándolas ahí. Y ya que el demonio podría estar involucrado en la invasión de hidras, estaba particularmente preocupado sobre permitirles permanecer en el pueblo.

Si estarán en peligro sin importar donde estén, preferiría tenerlas cerca para que así pueda mantenerlas seguras.

 

La guardia de Ciudad Muno debe haber notado el brote de goblins, o quizá estaban a la defensiva debido a la ausencia de su ejército, porque las puertas de Ciudad Muno estaban cerradas.

―¡Abran la puerta! ¡La hija del Barón Muno, Lady Karina, ha llegado! ¡Abran la puerta de una vez!

En lugar de Miss Karina, Raka llamó a los soldados en las murallas para abrir las puertas.

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Miss Karina podía ser bastante tímida, especialmente hacia los hombres, así que probablemente sea difícil para ella tener que llamar a soldados de buena complexión.

Después de aproximadamente diez minutos, finalmente hubo algo de movimiento.

La puerta lateral de acero junto a la puerta principal se abrió, y unos cuantos soldados emergieron. Podía ver soldados armados al otro lado. Ellos estaban en alerta máxima.

―¿La hija de barón, dice? Veamos algo para probarlo entonces.

El barbudo, soldado de mediana edad miró a Miss Karina con sospechas sin disimular.

―¿Prueba, dices?

―Es correcto. Somos soldados subalternos que no conocen los rostros de la familia del Barón. Muéstrame un anillo o daga o algo con el escudo familiar en ella.

―Que grosero ── Miss Karina bufó, retirándose detrás de mí para esconderse de los viejos soldados.

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―Lady Karina, ¿Tiene algo de eso?


―Bueno, quizá el broche de mi abrigo, entonces.

Miss Karina removió el sujetador y me lo entregó. Sin él, su abrigo cayó abierto, revelando un vistazo de su vestido y los encantadores pechos debajo.

Esto causó una conmoción entre los soldados. Naturalmente, sus ojos estaban centrados en la misma zona.

Ella realmente tiene un mágico par de pechos. Llevaban increíble influencia, eso parece.

―Señor Guardia. ¿Esto lo hará?

―…Esto-esto es….

El soldado de mediana edad se quedó mudo cuando vio el escudo de armas en el broche, entonces se arrodilló para pedir perdón.

―Por-por favor, perdone mi terrible grosería….

―Eres perdonado ── Miss Karina murmuró, tomando de vuelta el broche.

Los cautivadores pechos eran una vez más escondidos en las sombras de la capa, elevando un suspiro de decepción de los soldados.

 

Siguiendo al soldado de mediana edad, dirigimos nuestros caballos a través de la entrada lateral.

La plaza principal de Ciudad Muno era muy grande. Era casi tan grande como el patio de una escuela normal. En el centro de la plaza había una fuente seca con la estatua de un caballero armado sosteniendo un bastón y espada y montando un dragón.

Había un grupo de personas de apariencia empobrecida reunidas en el borde oeste de la plaza, escuchando un discurso.

―¡…El renacimiento del Señor Demonio está cerca! Si deseas sobrevivir a la destrucción y regocijarte en el nuevo mundo, únete a nosotros en el llamado a la puerta de la libertad. Esta es la única manera para sobrevivir a la Temporada del Señor Demonio….

Mi habilidad “Audición Aumentada” captó algunas inquietantes reclamaciones.

Si este fuera mi viejo mundo, hubiera asumido que era un artista callejero o un actor practicando líneas, pero aquí era indudablemente un verdadero discurso que podría fácilmente ser percibido como un fomento a la traición.

Cuando me di cuenta de uno de los soldados frunciendo el ceño de manera rencorosa a la multitud, le pregunté sobre eso.

―Ese grupo de ahí….

―Sí, es un grupo de adoradores del señor demonio que se llaman a si mismos ‘Alas de Libertad’.

Vaya, ¿personas que realmente adoran al señor demonio? Escuché que la creencia en el apocalipsis inminente había sido popular alrededor del cambio de siglo pasado, así que supongo que algunas cosas nunca cambian sin importar en que mundo te encuentres.

―¿Ellos son alborotadores, entonces?

―Realmente no hacen nada malo, así que son bastante inofensivos, pero…. Tímidamente se desvaneció.

Otro soldado detrás explicó concisamente, ―El juez nos ha ordenado no interferir si los vemos.

―… ¿El juez?

Bueno, si el juez era un demonio, tendría sentido que el estuviera bien con adoradores del demonio.

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―Si, bueno, el rey ancestral estableció libertad de religión cuando este reino fue fundado.

Mis sospechas sobre que el rey ancestral Yamato había sido japonés solo eran más intensificadas.

―Bueno, esa es la postura oficial, pero la verdadera razón es probablemente que el chico dando esos discursos es el hijo bueno para nada de un líder comerciante del ducado.

Eso tenía sentido. Probablemente hay pocos comerciantes dispuestos a viajar a Ciudad Muno cuando la baronía estaba en tal lamentable estado.

Revisé solo para estar seguro, pero el hijo del comerciante y sus compañeros no tenían ninguna condición de estado anormal.

Sentí que debía poner un marcador en ellos por si acaso, pero decidí no hacerlo, ya que podría entorpecer mi monitoreo del demonio. Añadí a ‘Alas de Libertad’ a mi lista de palabras clave de búsqueda para así ser capaz de mantener un ojo en ellos en cualquier momento.

 

Nos dirigimos al castillo con un grupo de seis soldados protegiendo la parte delantera y trasera.





La calle principal de la ciudad tenía un impresionante ancho de nueve metros, pero ya que muchos de los escaparates a ambos lados estaban cerrados o vacíos, se sentía más como una ciudad fantasma que una metrópolis próspera.

―¿Todo está en la cima de esa parte de la colina del castillo?

―Es correcto, Arisa. En términos de tamaño, nuestro castillo Muno está en segundo lugar después del palacio real y el castillo de la vieja capital.

Mientras Miss Karina y Arisa conversaban, el gran baluarte aparecía en lo alto de la colina. Ya sabía todo esto por mi mapa, pero levantar la mirada desde el fondo de la colina solo enfatizaba su enormidad.

Cuando pasamos a través de las puertas del castillo, nos dirigimos a una rampa zigzagueante. Había muros bajos alrededor con aperturas estrechas, probablemente para que los arqueros rechazaran a los invasores en caso de emergencia.

Cuando pasamos el segundo muro del castillo, entramos a un área que estaba dividida en salas de varias decenas de metros por paredes de tres metros de altura.

No podía ver a dónde íbamos, así que la forma idéntica de las salas parecía como un laberinto. Esto podría ayudar a que los invasores perdieran su sentido de dirección.


El castillo en si no era aún visible, así que los soldados trabajando en el castillo probablemente se sientan perdidos, hasta que ellos se acostumbren.

Cuando salimos de una serie de salas conectadas, llegamos a un área amplia que podría acomodar a miles de soldados. Había varias construcciones cercanas, probablemente los cuarteles de los soldados.

Luego, después de cruzar un foso seco y pasar a través del tercer muro, fuimos capaces de tener una vista completa del castillo.

La cosa real era mucho más intimidante que números en un mapa y nos dio a conocer un verdadero sentido de su enormidad.

Sin embargo, también estaba un poco deteriorado.

Creo que debe haber sido un bello castillo blanco cuando fue construido, pero las paredes cubiertas de hiedras estaban desmoronándose en un lugar, y grietas corrían por todas ellas. Encima de eso, había varios lugares con lo que parecían marcas de quemaduras.

Ese era probablemente el resultado de la batalla con las tropas del Rey No Muerto Zen.

―Maestro, eche un vistazo a esto, si gusta.

Liza estaba apuntando al Cañón Mágico instalado en una de las torres en las esquinas del castillo.

Los ancianos en el rio dijeron que Zen había destruido el cañón, pero el juez demonio debe haberlo reparado o algo, por lo que puedo ver desde abajo, estaba en perfecto estado de funcionamiento.

Era idéntico al Cañón Mágico que Liza y yo habíamos encontrado en el tesoro subterráneo del Wraith de la fortaleza.

―¿Ah, estás familiarizada con los Cañones Mágicos, Liza? Mi padre lo removió cuando se volvió el Lord de este territorio, pero el juez reinstaló uno ficticio para mantener el orden público.

―¿Uno ficticio…? ¿Está roto, entonces?

―Ciertamente. Dimos un vistazo a ese para ver si podía ser usado para derrotar al demonio, pero el dispositivo de control había sido completamente arrancado. Probablemente fue destruido por Magia Oscura o Magia Espacial.

Raka respondió a mi pregunta en vez de Miss Karina.

Si el Rey No Muerto Zen fue quien lo destruyo, el probablemente usó Magia de Sombras.

En ese caso, él debe haber ido fácil sobre nosotros cuando peleamos en Ciudad Seiryuu. Aunque parecía seguro que iba a ir con todo con ese látigo de sombras.

―¿Quizá podrías arreglarlo?

―Me temo que es imposible.

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Miss Karina me miró esperanzada, pero fui rápido para decir que no.

Yo tenía las habilidades y materiales, pero no la maquinaria o equipo. Además, si eligiera reparar un arma de destrucción masiva que podría fácilmente volverse contra las personas, y que después fuera realmente usado en batalla, no sería capaz de dormir en la noche.

 

 


[15] Extra Sensorial Percepción = Percepción Extra Sensorial

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